Partida Rol por web

¿No habeis vuelto a encontraros en este tiempo? - pregunto saliendo de mi mutismo - Habeis dicho que todos murieron menos el mago, la mujer y vos, aunque se que será doloroso, ¿podiais explicarnos como fue? Comentasteis algo de una boca negra que devoró vuestro brazo. Suspiro - creo que esto puede llevarnos mucho tiempo, podiamos hacer que fuera más llevadero con unas jarras entre nuestras manos, al menos estaremos sentados y más tranquilos ¿por que no continuamos nuestra conversación en una posada?

Por fin alguien tenía una buena idea... - Una idea excelente Jezabell... - comenté alegremente. Seguro que con unas cervezas aquél bárbaro estaría más colaborativo...

- Yo invito a la primera ronda. - eché un vistazo un instante a Amon... - Menos a ti guapa... a ti sólo te invito a una cerveza. - dije guiñándole un ojo. Sabía que bajo esa apariencia de mujer se escondía un ser capaz de devorar toneladas de carne... y no quería arruinarme.

Grunther mira a la mujer que habla. La idea de la cerveza le parecía bien, pero no conocía ni a ese grupo ni sus intenciones. A decir verdad, tampoco le era grato hablar de Falon a unos desconocidos. Niega con la cabeza:

Ya he explicado todo- dice- mis amigos murieron por culpa de la calavera, y mi brazo lo perdí por culpa de una boca negra, no hay mucho mas que decir.

¿Cuales son vuestras intenciones?- pregunta de pronto- ¿vais a ir a por esa calavera?- por lo que le habían dicho, estaban investigando unas muertes en un poblado que podía estar relacionado con el mago. A lo mejor esto tenía también algo que ver en el asunto.

No se que es esa calavera, pero estoy casi convencida de que puede tener algo que ver con unas muertes ocurridas en esta villa y eso es algo que no estoy dispuesta a consentir, si la culpable es ella, será nuestro objetivo, pero no sabemos donde encontrarla y esperabamos que el llamado Falon - señalo hacia su tumba - nos pusiera en camino, pero por lo visto eso está fuera de nuestras posibilidades actualmente, por lo que nuestra única posibilidad es la mujer guapa que nombras, y no sabemos donde encontrarla, o tu, que tambien estuviste con ellos, planteatelo como una posibilidad de vengar tu brazo, ahora conoces más que aquella vez hace años en las que seguisteis al mago

Si, iremos a acabar con la calavera - tal vez el hombre que teniamos delante nuestro no era muy despierto y tantas palabras tal vez ni se enterara asique preferí resumirlo con tan solo esa frase.

Vengaremos la muerte de un marinero llamado Caspan y tambien la muerte de Falon y el resto de vuestro grupo, y de todas aquellas personas que sucumbieron por la calavera.

¿Puedes darnos al menos el nombre de la chica guapa? - pregunto antes de hacer un ademán de irme - La tendremos que buscar para que nos ponga en camino al lodo maloliente ese que nombraste antes

El silencioso,por ahora, planar sale de su ensimismamiento y dice: Nuestro objetivo es evitar que ese antiguo mal resurja. La criatura de la que hablas es un semiliche,¿recuerdas si tenía todos sus dientes?, La calavera, es posible que tus amigo no hayan muerto y tan solo estén confinadas en una plano fuera de nuestro espacio tiempo contenido en cada uno de sus dientes.

 O tal vez la memoria me falle, y vuelve a su estado de ensimismamiento.

Otro de los componentes de ese grupo habla, pero esta vez para describir a la calavera. 

Semi-liche, ¿que será eso?- piensa el bárbaro- no me acuerdo lo de los dientes- farfulla, sin saber si tomarlo en serio o no sus palabras. No entendía mucho de almas, planos y demás, pero no le gustaba la idea de que el alma de su compañero pudiera haberse quedado en un diente.

Si estáis buscando a la calavera para ponerle fin aquí tenéis a un aliado- dice- iré con vosotros. A pesar de mi brazo, aún puedo combatir y os ayudaré a encontrar a la mujer... su nombre era Sather, sino recuerdo mal. Y puedo guiaros a ella- el hecho de no acordarse del nombre de la ciudad no significaba que desconociera totalmente su paradero.

Aunque la idea de enfrentarme a un bárbaro experimentado me resultaba muy entretenida, sabia que lo necesitabamos. Por lo que cayo mi interés en lo segundo atractivo del momento... Marcus!
Me le acerque al pícaro e hinchando el pecho le inqueri... -Una?-
Y con una sonrisa picara le apuesto -Anda, si sacian mi apetito haré el favor de llevarlos volando, a todos...-

Sonreí ante la sonrísa pícara de Amon... si no fuera porque sabía que tras esa apariencia acechaba un monstruo hambriento...

- Venga, a algo de comer también... ya me pensaré si llego a los límites de saciar tu apetito... ¡que comes mucho! - y guiñándole un ojo le di un par de palmaditas amistosas en la espalda.

Me giré hacia el bárbaro: - Gracias por ayudarnos. Busquemos a la mujer y vayamos luego todos a tomar algo para organizarnos... -

El pueblo donde se encuentra está a bastantes días de viaje- dice- creo que habrá que prepararse para un buen recorrido. Supongo que os gustará prepararos para ello.

-Prepararnos? Yo quiero comer y salir... o salir y comer, el viaje no sera problema...-

- Comemos, compramos provisiones y salimos... No quiero que nos quedemos sin comida a medio viaje. ¿Os parece bien a todos? -

No hay problema ni en el viaje ni en la comida. - aseguro

Sabeis que puedo proveeros de comida que haria rebentar a Amon y entre los dos podriamos ocuparnos del viaje

Hasta el momento el constructo había estado sumido en cuchicheos con aquel artefacto con el que hablaba tan a menudo, manteniéndose a cierta distancia de sus compañeros. En un momento dado se acerco a escuchar el último trozo de la conversación que mantenían con aquel bárbaro. 

-Podría hacer uso de un poco de tiempo para dar la última pincelada al Beutanic y recoger algunas de mis pertenencias-

La comida también la puedo proporcionar yo. digo sonriendo. Y en cuanto a su brazo veremos si esta noche la dama de la fortuna me bendice con sus dones y podemos hacer algo.

mmmm comida del chef alma predilecta y transporte del alma predilecta y una de las chicas guapas del grupo , todas nuestras necesidades parecen cubiertas

¿tienes pertenencias que recoger o podemos partir ya mismo? - me dirijo al barbaro con una sonrisa - Tengo ganas de conocer a esa chica guapa... Seria la tercera chica guapa contando con las dos que nos acompañan - termino con un guiño hacia Jilokasina

Parece que mi humor vuelve a ser el de antaño y tengo energia para todo

-Tolmir, si no sirvieras esos banquetes que sirves no se que haría con ustedes...- Creo que comerlos...

El bárbaro miraba sin comprender del todo a sus nuevos compañeros. ¿Estaban discutiendo realmente ir volando? bueno, cosas mas raras podría haber visto, y quizás podrían ahorrarse muchos peligros que habría por las montañas. Sin mas dilación el bárbaro va a por sus pertenencias, quedando con ellos a las afueras de la ciudad. Y allí se encaminan.

La espera no se hace larga, y se aprovecha para que Amon cambie a su estado natural. El bárbaro regresa y queda sorprendido (y algo confuso) con la presencia del semidragon, y la ausencia de la joven muchacha. Tras explicarles brevemente que ambos eran lo mismo -y aumentando aún mas la confusión del bárbaro- se ponen en camino. Con los hechizos preparados, comienzan en viaje volando hacia su destino.

Se tardan aproximadamente diez días en llegar a Pitchfield. Grunther os guía como puede, poco acostumbrado a los viajes de ese cariz. Sin embargo, no tenéis muchos problemas y no os desviáis nunca de vuestro camino. Un viaje que por otro lado es bastante seguro, y las veces que paráis lo hacéis principalmente en las pequeñas aldeas que hay por la zona.

Ya quedaba poco para acabar cuando Marcus se percata de algo. Desde su posición ve algo extraño: uno de los pequeños asentamientos le parece sospechoso. No ve nada que incite de peligro y ningún movimiento sospechoso, pero eso es lo que le preocupe: no ve movimiento en absoluto.

Hice señas a mis compañeros y preparé mi arco por si teníamos problemas. No sabía si lo más sensato sería bajar e inspeccionar o no.

- Si queréis bajo a echar un ojo... me ocultaré, no me verá nadie. Y regreso a informar. Si veis que tengo problemas podéis llegar desde el aire y echarme una mano. - comenté.

De todas formas esperé a ver qué opinaban mis amigos.