Partida Rol por web

Kaoru esta fascinado al llegar al lugar, tantas armas y tanta historia, sentía casi la necesidad de saber sobre todas esas armas que había ahí, no fue el primero en intentar tomar un arma, espero a ver a los demás y asombrado de los que ya conseguían armas como Yuu que al parecer había tomado un arma muy peligrosa, ¡que increíble!. Entonces decide al final ir por una espada ¿o era una daga? No tenía idea pero se veía brillosa y bonita, al tocarla la espada lo rechazo o al menos eso sintió por la pesadez que emanaba. La regreso rápidamente y se puso a investigar lo demás del lugar buscando un arma para él, de pronto vio un par de pistolas tipo magnum, se veían bien incluso se sentía muy atraído hacia ellas, difícilmente separando su mirada, fue y sin pensarlo las tomo y disparo, ¡éstas son mis compañeras!.

Tomas un par de pistolas gemelas que estaban juntas, las miras un poco, te sientes cómodo con ellas, es como si el mango, se adaptase a tu mano, de echo, sientes una extraña y cálida sensación, como si esas pistolas, te resultasen familiar... aunque, no sabrías decir exactamente de que

Erika coge las kris y no siente nada, mira al profesor y dice:

- Se...señor..no siento nada al cogerla...esto...creo que se que arma es...

Se queda unos segundos esperando con el arma en las manos y dice:

- Creo que esta podria ser un buen arma para mi....creo que si no me equivoco es la que...pactos con...criaturas...creo que...seria lo mejor...para mi

Decia timidamente

-¿Quién ha dicho eso? -preguntó en general al escuchar el comentario sobre la forma en que bateaba, pero no tardó en darse cuenta de que el profesor estaba hablando por teléfono con alguien y luego dijo que Yuu tendría que acompañarlo- uhhhhh, parece que alguien se ha metido en problemas -dijo sin pensar en el motivo por el que se lo llevarían a parte.

Entonces, la chica de gafas con pinta de empollona empezó a hablar con el profesor, y Alexandros no pudo evitar apartarse de la zona mientras daba vueltas con el bate, que se movía tan ligero en su mano que se sentía muy a gusto con él- ¿No es un poco grande ese arma para ti? -preguntó a Lorelei que empuñaba una lanza de esas con un sable en la punta que usaban los chinos y japoneses de la antigüedad.

Lorelei había esperado, sin éxito alguno, que la naginata supereducada le contestase a la pregunta así que, cuando Alexandros se acercó, no lamentó redirigir la conversación hacia alguien humano y que diese más conversación.

-¿Pequeña? ¿Necesitas que te atice con ella?-sonrió despectiva aunque desapareció con rapidez en un intento de ser "social". Después de todo para eso se supone que he venido-El tamaño no lo es todo, ¿hm?- dijo con voz suave enarcando una ceja que desapareció bajo el flequillo de la muchacha.

Flipando como un niño pequeño en navidad yo sigo con mi actividad de dar mamporros al aire, Es el mejor regalo que me hicieron nunca, bueno es el único regalo pero esta de puta madre con fuerza lanzo el mejor derechazo que puedo. Hasta que paro algo agotado y observo a mi al rededor, cada uno con su juguete sonrío ¿Dos pistolas? ¿no tenias suficiente con una colega? pregunto a Karou.

Jajaja volteando a Phill, nunca son suficientes, además estas dos se sienten muy bien en mis manos. Las empieza a mover y jugar con ellas aunque para por que no es tan seguro estar haciendo eso. ¿Y tu? Unos guantes, ¿no tenías suficiente con uno? claramente Kaoru estaba muy emocionado en ese entorno al recibir esas armas.

Disculpe por la demora, Lady Lorelei, mi nombre es Koriko

Dice la voz que proviene de tu arma

La voz de su arma deja al pobre chico desconcertado! Preguntando-se de donde viene!

Resuena la voz que sale del bate

Miro a Erika y el arma que porta en sus manos

Ummm no es mal arma pero.... sus capacidades no se centran en eso de los pactos que dices, eso fue uno de sus antiguos dueños

Las capacidades de ese arma, tienen que ver sobretodo con la sangre

Erika mira el arma y sorprendida ya no solo por el arma, sino por poder hablar con el profesor mejor de lo que esperaba dice:

- Entonces...depende de mi sangre? y eso como es?

Se quedo abstante extrañada y miro al profesor.

- A lo mejor porque tiene el pelo largo y me da la sensacion de que es como una mujer no se... al menos puedo hablarle mas o menos

Algo timida dice.

- Entonces...yo...seria buena...para mi?

Si no has sentido nada al tomarla.... no se puede saber con seguridad

Todas las armas de esta sala, eligen quien es digno de llevarlas, y algunas, como puedes ver allí

Señalo el bate de Alexandros

Tienen vida propia

A las armas que tienen vida propia, cuando no se tiene afinidad con ella, con esfuerzo se puede lograr, depende también de la personalidad de dicha arma, Si no has sentido nada al tomarla, es que, no te acepta, ni te rechaza, es decir, Si quieres, puedes intentarlo con ella, o buscar otra que se adapte mejor a tus capacidades y a tus gustos

Lo de depender de tu sangre, bueno, el kris, casi todos los kris reales, que existen si que están vivos, y para despertar, requieren de algo de sangre de su portador, normalmente, suelen hacerle un ligero corte en la mano con la cual no vayan a usarlo, superficial, pero suficiente para que haya algo de sangre, es entonces, cuando el arma despierta

Cuando iba a contestar a Lorelei, Alexandros escuchó la voz que hablaba de nuevo, miró su bate y negó con la cabeza- Mi bate no puede hablarme, ¿no? -preguntó a nadie en particular mientras negaba con la cabeza otra vez y volvió a hablar con la chica borde.

-¿Ya quieres pegar a alguien con ese trasto? -señaló la Naginata- solo digo que a tu lado parece desproporcionado, pero nada más, si puedes con ella es mejor para tí, ¿no? -esbozó una sonrisa avergonzada, tenía la sensación de que en lugar de arreglar las cosas las ponía peor.

La vocecilla de la naginata se filtró pese al murmullo general de cada cual con sus propios problemas y sorpresas con su arma.

Demasiado educada.

-¿Has oído eso? Te está retransmitiendo un partido que no existe,  eh... hm... Innombrable.-se encogió de hombros ligeramente- es más cosa de habilidad que de fuerza el manejarla, no como don superbowl- hio un gesto indicando el bate que de vez en cuando dejaba caer algunas frases más propias de un comentarista deportivo que de algo con vida.

Aunque si era justa, nada de lo que ahí sucedía era normal y corriente.

-Habilidad, como todo -dijo asintiendo con una sonrisa- te pido perdón si te he molestado, es solo que me ha sorprendido, nada más -miró el bate para ver entender lo que decía la chica- ¿quién es innombrable? Y si te refieres al bate, bueno, más de la Liga de Beisbol, la superbowl es la final del campeonato de futbol, no tiene nada que ver con el beisbol.

-Y yo no tengo nada que ver con los deportes ni interés en tenerlo-replicó ella ahuecándose el pelo haciendo que se balancease a su espalda como una densa cortina de seda oscura-pero al menos has entendido lo que quería decir, Innombrable, en esta edición de Los Juegos del Hambre a lo mejor no palmas el primero.

Arqueó las cejas esperando así suavizar sus palabras haciendo referencia a la bromilla interna de los becados de nivel 1.

Erika se mantenia algo atras con el arma que habia escogido, era pequeña como ella y en realidad no sabia para que servia muy bien, era con la primera con la que no se sentia mal y por lo que entendio supuso que eso era lo que tenia que buscar.

Erika se queda mirando a los demas como hablan e interrelacionan mientras ella se queda algo atras observando el arma, realmente no creia que fuera a usarla, pero nunca se sabia, tendria que investigar un poco sobre el uso de ese arma y como era realmente

Veo que ya la mayoria de mis compañeros tienen armas...algunas muy admirables y otras algo corrientes ¿En serio un bat de baseball es considerado como un arma mortal? Lo dudo demasiado...

Me acerque a Erika observando con curiosidad el tipo de arma que estaba portando ¿como se llamaría? -Vaya...nunca había visto esta clase de arma, se ve peligrosa y más por la forma de la hoja...¿podrías hablarme de ella, Erika?