Partida Rol por web

Mustakrakish dió un paso convencido, vigilando el techo para no volver a quedarse clavado con los cuernos...

-Pues si mi Señora, encontramos al tipo verde y efectivamente vimos que tenía su preciado libro. Tras un largo y ajetreado viaje, mis compañeros no pudieron aguantarse las ganas de ir corriendo a por él para derrumbarlo y quitarle el valioso objeto. Pero antes de dar un paso, pensé que no podía ser tan fácil, que algo tenía que pasar...

Y efectivamente, no se sabe de donde pero de repente apareció una especie de Calabaza voladora con escudo y con lanza, más aturdida que persigue-ratas cuando los mininos le pegaron un afectuoso zarpazo. Digo que estaba aturdida porque mientras "cabalgaba" imaginariamente a toda leche hacia nosotros no paraba de mencionar algo así como que no íbamos a quitarle a su amor, ya que él era el caballero más poderoso de la Mancha... (Parece ser que no recordaba que nos encontrábamos bastante lejos de España.)

En fin, resultó ser que su amor era el Tipo feo y verde, a quien confundía con una tal Dulcinea, y también se sacó de la manga que nosotros eramos unos gigantes que queríamos matarla (bueno, en cierta medida si) así que estaba dispuesto a hacer pinchito de esbirros con su lanza.

Como ya sabe, eramos cinco contra uno, de manera que teníamos bastante ventaja pero aun así él podía volar y era bastante molesto tener que aguantar a una calabaza loca y enamorada pinchándonos con un palo y pidiendole a su "amor" que huyera que tarde o temprano se encontrarían mientras nosotros intentábamos cazarlo como a una mosca cojonera para quitárnoslo de encima  e ir por faena(ya que tenía intención de seguirnos todo el camino). Al ser yo el más grande de los cinco, pude estamparla contra el suelo en un momento de despiste, pero lógicamente para entonces el listillo del tipo verde ya había huido.-

El troll retrocedió inclinandose para hacer uan gran reverencia ante su queridisisisisima señora y volvió junto a sus avergonzados compañeros esperando la respuesta de su ama.

 Osama vuelve a adelantarse de rodillas, ya debe tener cayo. Cuando habla su voz es ahora susurrante debido a que ahora gasta 3 tallas menos de cuello

-excelsa señora oscura, ama de los terrores y las sombras, joya de la noche. De nuevo el miserable troll rosa olvida un detallito sin importancia como es su supina estupidez. Cuando vencimos a la calabaza de la mancha el tipo verde ese aún no estaba demasiado lejos, al menos no para alguien con unas piernas tan largas. Musta es el mas rápido corriendo, aunque se mueva como un elefante enfermo, y podría haber alcanzado fácilmente al tipo verde, pero a medio camino se encontró una boveja que buscaba peluquero y se olvido totalmente de la persecución, creo que le gusta especialmente comer carne peluda, cuando los demás le alcanzamos estaba tan contento comiéndose la boveja y el tipo verde ya había escapado con vuestro libro-

Dicho esto vuelve atrás aun de rodillas, aunque antes de llegar aun sisea algo mas -y no nos dejo nada-

Las palabras de Osama hicieron que la Señora, quien estaba bastante satisfecha de las palabras del bicho rosa ( que por suerte no se parecía a un teletubbie ), volviera a poner mala cara ( cosa que la salía casi sin querer ) y volvió a centrar de nuevo su atención en el esbirro que tenía la palaba.

- ¿ Cómo que dejaste mi libro por una oveja?

No es que la mujer pudiera entender muchas cosas de las que hacíais, pero esa sin duda, la de pasar de lo que os había ordenado encontrar, escapaba aún más de su comprensión.

 Mustakrakish volvió a dar un paso prudencial y a inclinarse, esta vez tocando con los cuernos al suelo para exagerar aun más la reverencia ante su ama.

-¡Pues claro que me comí la boveja! Y no solo una, sino que tuve que zamparme a cientos!- dijo enfadado al ver que el maldito muñeco no se enteraba de nada. - Bueno, quiza no fueron cientos, sino una treintena...Verá mi señora, después de acabar con la calabaza de la Mancha, salí corriendo tras el tipo feo y verde para conseguir lo antes posible el libro. Pero a medio camino me encontré con todo un ejercito de bovejas que me impedía el paso.

Puesto que el inculto de Osama pasó su infancia estudiando el coran para que luego lo convirtieran en muñeco-bomba y no tiene ni idea de nada más... no conoce la historia de la Calabaza de la Mancha. Pues bien, como usted ya sabe, mi Excelentísima sabiduria - dijo refiriendose a la Señora Oscura - la obra tambien relata el momento en que un ejercito de bovejas atacan al protagonista, de manera que si en nuestro camino coincidimos con la Calabaza de la Mancha y Dulcineo (El tipo verde y feo, rimaaaa) era de esperar que tambien nos encontraramos con el ejercito de bovejas. Que por cierto, tenían una lana de muy buena calidad, así que en vez de chafarlas de un manotazo, preferí chuparlas por la cabeza para dejar intacta la lana, puesto que quería hacerle un precioso abrigo a mi queridisisisisisisisima señora para que pudiera lucirlo ahora que se acerca el frio - El troll se quedó mirando a su ama con una sonrisa risueña y los ojos grandes como platos (a lo gato con botas de shreck xD). Acto seguido se desembobó y siguó la historia - No quería comentarselo, mi perversidad, para no darle un disgusto, pero al desquiciado de Osama le entró un ataque de celos y quemó toda la lana. - dijo casi en un susurro.

Mi sorpresa fue darme cuenta de que mientras yo me había entretenido a matar todas las ovejas para dejar paso al resto de mis compañeros y que fueran tras el tipo feo y verde lo antes posible, me pareció ver la minúscula figura de lego con bombas atadas al torax subido a una escalera (de lego, porsupuesto) cogiendo a la única boveja superviviente (una de estas con flequillo a lo emo, muy presumida por cierto) y clavandole algo tieso entre las piernas traseras y haciendo movimientos muy raros con su cadera....¡¡Se estaba montando a la boveja!! El muy caradura no pudo esperar a las virgenes que le habían prometido en el cielo, sinó que se pasó medio día con ese saco de lana. Así que regrese junto al resto de compañeros que aún siente respeto por usted, mi señora, y no volvimos a saber nada más de Osama por un buen rato.-

El bicho rosa volvió a su sitio esperando que su ama no se enfureciera por haber delatado a su compañero.

La Oscura se quedó escuchando a Musta, quien la hizo sentir complacida por eso del abrigo, pues le encantaban los abrigos calentitos cuando nevaba, aunque ni siquiera sabía por qué, ya que ni el hielo estaba tan frío como fría era ella.

- Pues mira ahora que lo dices pensaba comprarme un abrigo de piel para este invierno, aunque me lo iba a hacer con piel humana, pero claro, no sería demasiado calentito así que la lana..

Se colocó la mano en la barbilla meditándolo mientras Musta seguía hablando, pero en cuando dijo aquello del lego y la oveja esa, puso una cara de asco increíble.

- No puedo creerme que aún siga habiendo gente que ponga en práctica lo de las katiuskas.

Negó con la cabeza..

- Vamos, y un lego encima es como más rídiculo ¿ no?

Ya le preguntaba directamente a Osama.

Osama vuelve a sisear de rodillas  -Excelentisima y omnisciente señora oscura, perla del mar de la noche, caliz de maldad. No voy a opinar sobre la estupidez del inmundo troll al dejar escapar a la calabaza, pero si dire que su miopia es algo muy grave. Lo que yo estaba haciendo con esa Boveja era interrogarla, ya que el estúpido troll había perdido el rastro de la calabaza, para saber donde se habían llevado vuestro libro. Desde luego que le clave algo tieso, el cañón de mi ametralladora, y es que a los legos aun no nos hacen en versión para adultos-

Carraspea un poco antes de seguir -el caso es que conseguí mi objetivo y descubri a donde se había llevado esa calabaza voladora vuestro libro, e hice que la boveja nos guiase hasta la entrada de la ciudad de Halloween-

Persigue-ratones, visiblemente afectado por las represalias de su Malignidad, se acerca medio paso cojeando de una de las patas de atrás.

- Su Malignidad, al margen del hecho de que no era a la calabaza de la Mancha a la que perseguíamos, sino a Dulcieno (el hombre verde y feo), algo que aquí el lego parece haber olvidado, y si bien es cierto que la boveja (después de los escarceos con Osama, fueran de la índole que fueran) nos dijo que sabía dónde encontrarle, no fue a la entrada de la Ciudad de Halloween a dónde nos condujo, sino a un misterioso cruce con un cartel que ponía "Subiendo al castillo de pallí arriba". Me atrevería a decir que nuestro plasticoso compañero, como desde el principio de esta misión, estaba pensando con el cerebro de abajo y no con el de arriba.

Intentando hacer una reverencia sin desplomarse, el cuadrúpedo se retiró nuevamente junto a sus compañeros.

 De nuevo el Troll da un paso firmemente para decir lo siguiente:

-Permítame comentar, perversa malignidad de la noche, que Osama parece no recordar lo que pasó, ya que primero interrumpe para decir que:

Cita:

Y luego vuelve a interrumpir para decir:

Cita:

Desde luego, el muñeco no presta mucha atención al tema que estamos tratando ya que primero afirma que vencimos a la Calabaza y luego se inventa que ésta se ha escapado ¡¡y ademas con vuestro libro!! Cuando bien se sabe que quien tenía el libro era El tipo feo y verde (tambien conocido como Dulcineo).

Quizá el estúpido muñeco no puede concentrarse porque echa mucho de menos a aquella boveja con la que se casó, sisi, aquella que buscaba peluquero. Le contaré lo que pasó.- El troll carraspea un poco la garganta para que se le oiga bien... - Despues de que la boveja nos contara donde podríamos encontrar el Castillo de Pallí parriba, Osama y ella se desviaron hacia la entrada a la ciudad de Halloween para unir el maldito matrimonio en un rincón tan romántico como aquel, y no volvimos a saber nada más de él en muuuuuuucho tiempo. Parece ser que se lo pasaron en grande durante la fiesta y la luna de miel. Nos invitaron, para que no nos chivaramos a nuestra Señora, pero como buenos esbirros nos negamos rotundamente a asistir a tan asqueroso festín y nos dirigimos como bien dice persigue-ratones hacia el castillo.-

Mustakrakish se inclina ante su ama en muestra de devoción y gratitud por el cumplido sobre el abrigo que con tanto esmero quería tejerle. Retrocede unos pasos contento con cara de troll embobado. Al darse cuenta de jeto atontado, menea la cabeza para desembobarse (aunque era dificil pues la Señora Oscura era perfecta tanto en sus rasgos faciales como físicos!).

Aquello comenzaba a parecer una telenovela venezolana por lo menos, eso o un capítulo de una serie de adolescentes de esas en las que los protagonistas son chicos de instituto y animadoras macizorras, sin duda, sólo que en este caso habían cambiado a los chicos guapos por una oveja de largas lanas y un muñequito de lego con ideas suicidas.

- Creo que me he perdido algo. ¿ Cómo coño han llamado a alguien Dulcineo? - Negó con la cabeza. - Y eso siendo verde y feo, que más que a algo dulce puede recordar a cualquier cosa..

Suspiró, aunque sólo fue por no fundir al lego para hacerse un llavero.

- Osama.. ¿ Por qué te casaste con una oveja? ¿ Se te olvidó a qué te había mandado?

 Esta vez Osama no mira con rabia los demás sino que sonríe y mira a sus compañeros con una mezcla de ironía y desprecio, casi parece que esperaba esa acusación

-Oh Señora Oscura, lucero del anochecer, fanal de oscuridad, portadora de tormentos, escuchadme pues aunque las palabras del maloliente chucho y de obtuso troll son ciertas están oscurecidas por un impenetrable velo de estulticia, tan estúpidos son que ni se me ocurre intentar explicar al engendro rosa la diferencia entre vencer y capturar-

Carraspea y traga saliva preparando su discurso, su cuello sigue dañado, pero pese a flojearle la voz en varias ocasiones mientras lo que dice lo dice muy claramente

-Escuchad mi señora, porque a esas alturas de la misión ya me había dado cuenta que me habíais mandado a liderar un grupo de esbirros de una incompetencia sobrenatural, fue un gran acierto de su oscura señora ponerlos a cargo de alguien tan competente como yo, pero ni siquiera así, me temo, valían para nada aparte de retrasarme y entorpecer la misión una y otra vez. Por eso decidí librarme de ellos. Como bien os dije la boveja me dijo que el bicho verde de estúpido nombre y el caballero calabaza se escondían con vuestro libro en la ciudad de Halloween, sin embargo envié a esta panda de anormales al castillo de "palli arriba" donde no había nada-

Se gira un momento hacia persigue-ratones -si pulgoso, por eso pasaste el resto de la noche dando vueltas por un castillo vacio-

Volviendo a la señora oscura -luego me fui a la ciudad de Halloween y para despistarlos les conté la escusa mas ridícula e inverosímil que se me ocurrió, que me casaba con la boveja, por supuesto su estupidez no me fallo y se lo creyeron enseguida, pese a que me llevaba a la boveja encañonada-

-así, sin el lastre de estos cenutrios llegue a Halloween donde me libre de la boveja y encontré a Dulcineo y el caballero calabaza con vuestro libro, no os aburriré con la batalla que siguió, bien conocéis mi insuperable potencial de destrucción, baste decir dos cosas, la ciudad de Halloween se ha declarado en quiebra tras pagar las reparaciones de la batalla. Y conseguí vuestro preciado libro-

Dice esto último con tono triunfante y se levanta -Si mi señora, conseguí el libro que deseabais, y con gran alegría me dirigí aqui dispuesto a entregároslo y conseguir vuestro sueño de aniquilar a los vivos, pero...- su tono de voz se hace mas grave y lanza una siniestra mirada a sus espaldas

-cuando ya casi estaba llegando a este castillo, cruzando el abismo sin fondo, el puente se derrumbo bajo mis pies. El enorme y estúpido Mustakrakish, lleno de rabia, celos y estupidez me ataco y solté el libro, le dije que era el libro de mi señora pero no me escucho y tuve que defenderme, con lo que el libro cayo al abismo sin fondo-

Dicho esto se arrodilla de nuevo, baja la cabeza hasta que su frente toca el suelo, y retrocede ha su posición junto a los demas

La mujer asintió ante las palabras de Osama, pues sin duda, estaba totalmente de acuerdo con eso de que su grupo de esbirros no valía ni para pelar pipas, aunque lo que Osama no sabía es que ella lo pensaba de los cinco, y no de cuatro como él debía de creer, y más después de haber tenido que convocaros a esa " reunión " por ser tan sumamente incompetentes y quizás un poco " amebas ", o mucho.

Lo del engaño a sus compañeros, pues tampoco le parecía excesivamente raro que le hubieran creído, a fin de cuentas eran demasiado torpes mentalmente, pero cuando escuchó aquello del puente y de su libro cayendo.. Sus ojos se pusieron del color rojo que reflejaba el fuego del infierno, dónde arderíais esternamente, sobretodo Musta, a quien miraba sin ni siquiera pestañear.

- Mi libro.. ERA MI LIBRO!! Más te vale que te tiraras de cabeza tras él o no dejaré de ti ni las cenizas..

-¡Pues claro que me tiré tras el libro! ¡Faltaría más!- dijo el troll ofendido. - Y para amortiguar el golpe tiré al intútil de Osama antes por dejar caer el libro, a ver si así se despertaba de su hechizo.

Lo que ha dicho Osama no son más que falsos recuerdos implantados en su cerebro cutre de plástico (facilmente moldeable) por un vampiro. Éste controlaba a Osama (y a todos aquellos que pretendían cruzar sus tierras, osea, el puente) para que le llevara el libro que tanto ansiais tener. ¡Suerte que yo estube allí para impedir que se lo diera!

Al final caímos al vacío pero conseguimos coger el libro! ¿Cual fue el problema entonces? Que teníamos que salir de allí sin que el vampiro volviera a controlar a ninguno de nosotros. ¿Como podiamos hacerlo? Despues de dar vueltas y vueltas, nos dimos cuenta de que lo único que podiamos usar eran unos ajos o un crucifijo. Pero como supondrá nuestra señora, no ibamos a rebajarnos a tal nivel cristiano!(a parte de que no había manera de encontrar un objeto similar por aquella zona). Así que le lanzamos lo más parecido a un ajo que teníamos a mano...Si, a la pobre cebolla! que fue a parar de lleno en su boca y no paraba de chillar histérica como una nena, pero asi al menos conseguimos desconcertar por un momento al vampiro. 

Finalmente conseguimos huir de su poder controlador de mentes, pero seguiamos con el problema de que el vampiro tenía a uno de los nuestros, así que fuimos en busca de algo que tuviera efecto con los vampiros. Aunque en ese momento me di cuenta de que mis piernas no respondían, supongo que el vampiro tambien habia intentado controlarme, intenté arrastrarme con los brazos, pero era inutil, así que no tube más remedio que esperar a que el resto de los compañeros volvieran con algún antídoto, mientras me iba inmovilizando por momentos, y un arma para rescatar a cebolla y poder volver todos ante su majestad.-

El troll retrocede avergonzado por el mal rato que tubo que pasar.

Vuestra ama tuvo que contenerse para no reirse a carcajadas cuando escuchó aquello sobre Cebolla, pero le hubiera gustado verlo, eso seguro, aunque claro, si se reía pensaríais que no os degollaría en serio y se contuvo a duras penas.

- ¿ Encontrastes el material que buscabais? A mí tampoco es que me hagan demasiada gracia los crucifijos, pero qué le vamos a hacer, aunque claro, para los vampiros es lo mejor si a eso le sumas una estaca detrás..

Asentía tras sus palabras y esperaba la respuesta de Musta mientras tanto.

 -Querida señora, al final mis compañeros lograron volver con una especie de palo asegurando que tenía poderes mágicos...Pero por desgracia, entre esos poderes no estaba el de "movilizar trolls" así que no tube más remedio que contemplar como se enfrentaban al vampiro desdel mismo sitio en que me había quedado.

Mustakrakish se incorpora disimulando su verguenza - Persigue ratones, que gracias a su gran olfato fue el descubridor del palo (quizá simplemente se lo tiró alguien y fue tras él...) quiso enfrentarse al vampiro el solo, pues decía que ese objeto le transmitía mucha confianza y un gran poder. Los demás aceptaron puesto que estaban bastante cagados. En ese momento, no se sabe como, el palo invocó a una especie de bichillo de fuego tan adorable que incluso el vampiro se quedó enchochado. - A Mustakrakish se le escapa una risita por lo cutre que era el vampiro en ese aspecto. Luego recuerda que ni el mismo pudo controlar su movilidad y se quita la sonrisita inmediatamente! - Pero de repente el bichillo atacó con furia al vampiro y logró eliminarlo de un solo golpe!! Fue espectacular! No hicieron falta ni ajos, ni crucifijos, ni estacas... eso si, dejó un desagradable olor a vampiro frito con cebollas. - Dice poniendo cara de asco al recordarlo.

En ese momento, nuestro compañero cebolla salió de entre los restos del ser, contento por haber vuelto a por él y yo pude recuperar mi movilidad así que ambos fuimos a reunirnos con el resto pero... - El troll mira fijamente a Persigue-ratones- el chucho seguía cogiendo ansiosamente el palo y nos miraba con cara de "¡¡¡¡¡No volvereis a llamarme persigueratas nunca más!!!!!". Y no solo eso, sinó que empezó a soltar frases como: 

Cita:

Tenía los ojos desorbitados, parecía que hablaba en serio. Así que se acerco a Osama y le arrancó el libro de las manos (quien se lo dió de inmediato ¬¬) y luego nos dirigió una mirada de odio pero...quizá recordó los maravillosos días en los que le tirabamos restos de comida podrida...ya que tubo compasión de nosotros y desapareció con el bichillo y el libro. -