Partida Rol por web

La negrura e inmensidad del espacio es invadida por dos gigantes de titanio y acero que atraviesan un Stargate espacial. La primera es una nave extraña, de una arquitectura soberbia y una tecnología no menos avanzada que la segunda nave que se materializa: un crucero Asgard. El Apolo. La otra joya de la corona terrestre junto al Daedalus y el Odyssey.

La primera nave era de aquella extraña raza que hace pocos meses apareció de la nada en Atlantis. Su primera aparición se hizo en una batalla naval entre el Apolo y dos cruceros Wraith. Aquella nave se deshizo de un crucero enemigo que se mostró hostil con facilidad.

Tras eso, se presentaron como los Grax. Provenian de una galaxia a varios años luz de Pegaso, en una misión de exploración y colonización.

La dirección y el portal utilizado no lo revelaron aun para evitar problemas.

Poco despues, los Grax pidieron ayuda a Atlantis. Necesitaban escoltas para resolver un conflicto ¿comercial? en un planeta perdido en el exterior de Pegaso, allá a donde nunca habían llegado antes los humanos, sin embargo, los Grax mostraron una dirección y un portal desconocidos hasta el momento que los llevaron ahí. Todo hacía pensar que esa alianza era muy interesante para ambos.

En el interior del Apollo, la voz del coronel Abe Ellis, resonó a traves del microfono, hizo que el doctor Brown abriera los ojos y parara de pensar en el pasado.

-Comando SGA-7, aqui el Coronel Abe Ellis. Estamos acercándonos a las coordenadas que nos han dado los Grax. Tiempo estimado de la llegada dos horas.

El doctor se incorporó en la cama, se frotó los ojos y miró a su alrededor.

B.K, como siempre silencioso, estaba sentado en el suelo, como siempre, afilando su espada con una roca antigua, haciéndola más mortifera.

Kyra estaba colgada de una de las rampillas metálicas superiores que conducian al segundo piso de la sala, gustaba de colgarse y entrenar sus habilidades de robo. La chica se detuvo y miró hacia un punto de la pared. Por su cabeza apareció todos aquellos recuerdos que a veces la atormentaban, el recuerdo de la gente que murió en aquel atentado, del cual sabía que tenía algo de culpa. Maldijo y volvió a realizar peligrosas acrobacias para quitarse esos recuerdos de la mente.

Kelly estaba tumbada en un sofá, leyendo un libro demasiado complicado para el resto de la sala (o tal vez no). Levantó la vista y miró instintivamente hacia los altavoces que había colocados en una esquina en la pared, por la cual se transmitió la voz. Durante esos pocos segundos, la chica pensó en la suerte que tenía de estar allí, que ella sería una de las pocas mortales que ha visto el espacio, que existen los Aliens y todas esas maravillas que le esperaban y que esperaba descubrir más al salir del crucero.

Sasha levantó la vista de uno de los ordenadores que arreglaba, acostumbrándose a la tecnología y componentes terráqueos tan diferentes a los de su raza. Era la última en llegar, a la que menos hablaban, quizá por ser de la raza que era, una Genii, que tantos problemas había dado a Atlantis. Sin embargo, tras la ayuda por lo de las bombas nucleares y la ayuda medica de Atlantis a los Genii, la presión sobre ella se había calmado un poco.

El misterioso Akenjo estaba como siempre a sus cosas, al igual que Kutar, nadie sabía lo que pensaba, muchos creían que estaba loco y que era raro, algo que viene de serie en el SGA-7 todo sea dicho, pero su habilidad con las armas pesadas habían sacado de más de un apuro al comando, por lo que era impresindible.

Dean se encontraba en el piso superior, en la pequeña habitación que tenía el oficial arriba. Estaba sentado frente al escritorio, delante de una botella de ron, borrando a base de alcohol algunos de sus recuerdos más duros, que siempre le venían a la cabeza cuando tenía misión. El oficial se puso en pie, cogió el M-4 colt que tenía no muy lejos y bajó la escalera metálica hasta el piso en donde estaban todos.

Iba vestido con el traje de campaña de Atlantis. Como la mayoría del resto, salvo un detalle personal que todos ponían a su indumentaria. Dean no era demasiado duro con eso.

-A formar.

Ordenó en tono cansado y carente de interes, además, el tono de su voz era más ronca de lo habitual por el ron que había vuelto a beber.

-El objetivo de esta misión ya la sabeis. Venimos como escoltas, no como equipo de supresión. No disparamos si no nos atacan o si corren peligro nuestros protegidos.

Su tono de voz se volvió autoritario.

-El teniente Sheppard nos estará esperando en el hangar para darnos el resto de detalles. Arménse y equípense. Teneis dos horas para hacer lo que gusteis, os sugiero que os preparéis y entreneis un poco. Os estaré esperando junto al teniente.

Informó, apoyando el rifle en el hombro.

Akenjo salio de sus extraño pensamientos, fue a las taquillas de la Nave donde tomo su equipo táctico, alli tomó a "Hayate" su Pistola 9mm, "Shosuro" su subfusil de 11 mm y su apreciada VibroEspada "Carmilla", en  una extraña nostalgia vio la foto de su hermano y familia que tenía en la Taquilla....

De camino al lugar donde Dean ordeno que fueran, para hacer tiempo, se fue a su habitación, cogio su unidad de computadora más un par de libros, de traducción de Daniel Jackson,metidas en su mochila.

Por fin, un poco de acción...., a ver que nos depara la misión de "escolta"

A la orden de formar de Dean deja de hacer lo que está haciendo y cae al suelo con elegancia y gracilidad y le pone en pie para formar en una linea frente a su Teniente.

Dean informa de la situación y da las primeras directrices. Eso de tener que esperar para la acción a que te ataque es un rollo, pero si no cumple la encerraran de nuevo con toda la chusma de la cárcel.

-Sí, señor!

Va a prepararse para la misión.

 Se levanta tras escuchar la voz por el micro.Con su rostro serio y destrozado como siempre, se levanta con el uniforme ya puesto.Solo faltaban dos horas para otras de las díficles misiones o tal vez fáciles que realizaban amenudo.Escucha la voz del oficial y cumple la orden.Escucha todo con una actitud de desgana en su interior, ya que en el exterior intentaba dar la impresión de estar interesado por lo que decía, aunque algunas veces se le escapaba algún que otro suspiro que intentaba disimular incorporando su cabeza cabizbaja.Tras recibir toda la información se dirige a su taquilla, con rostro vacío y frío.La verdad es que no le gustaban estas misiones, mas bien en general.Había demasiado ambiente violento y eso le disgustaba bastante y lograba ponerle nervioso, algo raro en su personalidad.Se coloca su pistola de 9mm en el costado de su pantorrilla, se prepara una mochila con todo el equipo médico necesario y útil para el lugar al que iban.

Sabía que en esos momentos no podía tener la misma tranquilidad que en su sala de trabajo de la nave, y eran los momentos en que verdaderamente debía presentar su temperamento de hierro y sus nervios de acero.Por último coge su apreciado cayado y se queda unos momentos mirando la esfera que poseía, como si pudiera ver más hayá de lo visible, como si algo le estuviera hablando.Pasan unos segundos y aparta la vista mientras cerraba de nuevo la taquilla.

-A ver si acaba rápido.....- murmura frustrado tras interrumpir sus sueños, sus únicos momentos en que podía estar feliz aunque una felicidad efímera que acaba en el despertar y abertura de sus ojos.

Schhhhiiiiink

Morktarg chillo de alborzo cuando Kutar paso la piedra de aflar sobre el filo de la hoja; sentia que pronto iba a ser usada...ah,el combate de nuevo, al fin, otra vez resonarian los gritos, las explosiones, la ira y el fuego...si, esa era una buena vida para un Morktarg, el ultimo de su especie y clan, la ultima hoja de los mil muertos....

Schhhiiiiiinnnnkkkkkkk

Con un ultimo pase de la piedra sobre la hoja, Kutar levanto su machete delante de sus ojos tapados por las gafas de sol graduadas solo para el; los morktarg nacen; luchan y mueren en la oscuridad, tal es su destino y su alegria.

El machete giro como una peonza sobre la palma de la mano de Kutar; brillando solo para el, manteniendo el equilibrio perfecto de la hoja; mudo testimonio de la perfecta artesania detras de la espada de combate; un mero gesto, en apareiencia descuidado envaino la hoja en el arnes que colgaba de su cintura.

Primado Dean, los demas lo llamaban teniente pero para el,no era mas que otro lider de guerra, tal y como lo fue Kor.asec en su dia, la dulce sangre del cuello del Unash aun le duraba en la boca; que gran noche, la noche de los mil gritos, la noche en que murieron y fueron libres al fin; o eso pensaba..solo cambio un amo por otro...

Aunque los Tauri eran buenos amos, no tenia nada que objetar, lo alimentaban, vestian y equipabann, incluso trataban de entrenarlo en cosas que el no entendia..¿ idiomas?, ¿ciencia?..eran conceptos extraños de modo que Kutar se encogia de hombros y hacia lo que tenia que hacer...matar, matar bien, matar con ira y fuerza, en nombre de los Tauri y de los Morktarg..

En la cabeza de Kutar la imagen de Kor´asec se impuso sobre la del primado Dean.

Morktarg Kree...escucho su mente en dos idiomas a la vez, era hora de la accion, Kutar se mordio el labio expentante y mientras el primado hablaba, el pensaba en lo necesario.

¿Escoltas?...supuso que los demas Morktarg de su grupo sabran de que habla, Kutar se levanto y camino pesadamente hasta el pequeño nicho donde tenia los restos de su vida, trofeos de mil batallas y mil escaramuzas, recuerdos de honestos enemigos asesinados y de los camaradas caidos.

Se puso eltraje de proteccion, una buenza pieza de equipo, cargando con un sonoro chasquido el cargador de su pistola, una pesada pistola de alto calibre que satisfacia los estandares de Kutar, era una pieza de equipo pesada pero quepara el, ni siquiera llegaba a la categoria de molestia.

Acaricio la piel escamosa que cubria el interior de la taquilla y de la que colgaban la mayoria de recuerdos de los combates.

Shem packa rec Morktarg murmuro para si inaudible; larga vida a los Morktarg.

Sin nada mas que cargar con los multiples pertrechos que los Tauri gustaba de imponer a los guerreros, Kutar camino al hangar, con la mano posada comodamente sobre el filo de su caracteristico machete.

Escucha la voz del teniente que les ordena que se preparen para la próxima misión. Termina lo que estaba haciendo, en su trabajo no puede dejar nada desmontado ni a medias, siempre tiene que dejarlo todo listo o tal y como estaba.

Se pone en pie y se sacude las manos, camina en dirección hacia su taquilla, con sus compañeras alrededor. No dice nada, solo se termina de vestir ya que llevaba solo el mono, y se pone el traje. Se recoge el pelo en una coleta y carga su mochilla para echarsela al hombro. Por último coge su M4 para ir al punto donde han quedado.

Es interesante el idioma Ghoauld...-decia en voz baja Akenjo-

Por los pasillos de camino al hangar iba leyendo el libro, esquivando a la gente que pasaba por ellos...., tranquilamente pasaba las hojas, teniendo el libro delante de él....

Vaya, la verdad que es extraño algunas formas de decir las palabras, muy a lo grekk, arak, parecen quejidos mas que palabras.....

Primero antes de ir al hangar, se paso por el comedor, siempre venía bien desayunar para tener el estómago lleno...

En ese momento aparto por fin el libro, cerrándolo y metiéndolo en la mochila...

Ponme un doble de todo a ser posible, hoy estoy con poca hambre.... -le decia a quien servia el desayuno -

Se acerca a su taquilla y la abre. Allí tiene su equipo básico y sus armas. De espaldas a los demás, se quita la camiseta sudada y los pantalones, que no son del equipo, quedándose solo en ropa interior. La verdad es que poco le importa que haya mas gente allí.

-Quizá debería darme una ducha... después de tanto ejercicio viene bien...

Se decide... coge una toalla limpia de su taquilla y camina hacia la zona de duchas. Los que aun quedan en la sala común pueden oír el agua correr. Al cabo de unos 10 minutos vuelve a la zona de las taquillas, envuelta en la toalla. Se coloca frente a su taquilla y deja caer la toalla al suelo. 

Se pone primero la ropa interior, luego los pantalones del equipo y por ultimo la camiseta interior y la del equipo encima... el chaleco la mochila y por ultimo sus armas: un machete y una cosa infrome que a saber que es.

El Cocinero del Apollo se acercó al oriental, dejándole dos bandejas cargadas. Le dio una palmada en la espalda.

El tipo era checo, no muy alto, y para nada fornido, mas bien tirando a gordo.

-Vaya muchacho, eres de los que me gustan: de los que no dejan nada en el plato jajaja ¿que tal, te gusta la comida que hago? gente como tu da trabajo a los mios.

Charló amable y cordial, quitándose la gorra. Miró a ambos lados, asegurándose de que nadie lo veía.

-Ahora vengo..

Dijo, guiñando un ojo. El cocinero fue hacia la cocina y trajo un buen pescado frito con especias. Manjares solo para los oficiales, pero ¿que diablos? nadie a esas horas estaba en la cocina, solo ellos.

-Dame tu opinión sobre esto, quiero impresionar al coronel.

Akenjo se va a una mesa cerca de donde esta el cocinero, para probar el pescado y decirle...., con la boca aun llena saboreando el pescado, le hace al cocinero un gesto de perfecto, en su punto....., al llevar al rato la bandeja vacia le cuchichea al cocinero...

..le añadiría un poco más de sal, con algo de esa estupenda salsa que preparas, acompañando al pescado la mayonesa que haces, con eso, se chupara los dedos, ya sin esas cosas, esta exquisito el pescado...

Te has ganado que te enseñe un truco....

Mira...

Akenjo coje una manzana, mostrándosela al cocinero...

¿Ves esta manzana?- al taparla con el pañuelo que siempre llevaba consigo Akenjo, un pañuelo azul oscuro, con bordes blancos y las siglas bordadas de A.Y., al retirar el pañuelo aparece una granada...-

Genial ¿no?,-al poco, da un par de pasos atras, hasta estar a 2 metros del cocinero, quita la anilla de la granada , da la espalda al cocinero, lanzándole un objeto esférico que por mero reflejo empluma el cocinero , ante sus ojos el cocinero, ve que lo que ha cogido al aire,  es la manzana con un bocado pegado por Akenjo, mientras se va Akenjo, pone de nuevo la anilla en la granada, dándosela a un soldado de los que entraban , que le dice...

Lleva esto a la Sala de Armamento, donde están guardadas las granadas, hay gente que deja cualquier cosa en el comedor.

 Cuando se disponía a ir al hangar, se acuerda de que le faltaba algo en su equipo.

-El maldito cuchillo....- mumura con desgana mientras se da la vuelta y se dirige hacia las taquillas.Observa que sus compañeros se preparan, puede oler las ansias, las ganas que tienen por llegar allí y luchar como fieras salvajes, solo un muro de un centímetro detenía frágilmente las ganas de matar de sus compañeros, que se rompería fácilmente nada más comenzar la acción.Abre la taquilla y agarra el cuchillo.Lo mira intrigado, como si todo aquello tuviera un significado, pero para el solo era un estorbo más que aparte de la poca utilidad para lo que le servía en su trabajo,además quitaba vidas, cosa que el odiaba.Se lo coloca en la funda atada al triceps y ahora si se encamina al hangar dispuesto a marchar.

Kelly habia estado leyendo tranquilamente cuando la llamada le sobresalto, termino la ultima pagina que estaba leyendo justo antes de encaminarse hacia donde les habian convocado; una vez alli escucho atentamente las indicaciones de su oficial, parecia que iban a bajar a "tierra" Kelly estaba muy nerviosa ya que iban a ver a una nueva raza extraterristre y en un lugar que nunca antes nadie habia visto, por lo que estaba segura de que seria un viaje muy emocionante y en el ue podria aprender muchisimo. Una vez les habian dejado libres Kelly se dirigio hacia la sala comun, alli termino de leer el capitulo que habia dejado a medias para seguidamente ducharse tranquilamente, en la ducha Kelly pensaba:

- Vaya, que nervios, que veremos sin duda debe de ser algo muy interesante, que suerte que hayamos sido nostros los elegidos, aunque en este grupo parezco la niña tonta y buena que no ha roto un plato, bueno en realidad soy el cerebro del grupo, pero mira al menos trabajamos todos bastante bien y nso complementamos.

Seguidamente tras terminar de ducharse la mujer comienza a coger su equipo, primero mete las proisiones y el equipo standar como puede ser una linterna en la mochila que llevara para seguidamente colocar en su lugar su Tablet PC en donde tiene almacenados todos los datos biologicos que ha ido encontrando ademas de la infomacion que podria serle de utilidad ya que espera poder hacer algunos analisis para poder comprender mejor el resto de criaturas y sers que encontrase ademas aun tenia pendiente el analizar su compañera Genii que le llamaba mucho la atencion y queria hacerle algunas pruebas.

Tras esto Kelly se encamina hacia la armaria dispuesta a coger su equipo, lo primero que coge es la pistola de 9 mm reglamentaria del comando y seguidamente el famoso P-90 el cual engancha co le seguro puesto en el chaleco como deben de hacer, tras esto coge su gorra y tras colocarsela se dirige al lugar de reunion indicado no sin antes coger un pequeño libro de bolsillo y ponerlo en uno de los bolsillos de su uniforme

Kutar permanecia inalterable en el sitio designado para la reunion del equipo; sino fuera por que es una persona de carne y hueso, cualquiera diria que es una estatua que habian puesto para decorar; incluso su respiracion era discreta y acompasada, parecia estar concentrandose...

Kutar en realidad calmaba sus almas de sangre...su primado le habia dicho que escolta y segun los libros que habia leido para familiarizarse con la cultura de la que era esclavo ahora, escolta eran portectores, este cambio en sus esquemas mentales le obligaba a coregir su actitud y forma frente a la mision...

No se esperaba no poder matar no; la verdad es que eso era una tortura para el...¿ que guerrero niega de destruir al enemigo que tiene uno delante?....

Los demas Morktarg andaban pertrechandose; el no necesitaba tales artificios, solo cargaba con todos los trastos que le habian impuesto por que su primado lo ordenaba; en verdad solo deseaba recuperar su Tekkeka pero eso era imposible fueron todas destruidas durante su liberacion.

Lastima....era un arma digna de un morktarg, letal tanto a larga como corta distancia; uno de los morktarg con los que convivia parecia tener alguna idea de que como recuperar tales armas; quizas algun dia hablaria con e sobre como hacerlas; la mujer Kyra era.....se habia vestido a su lado; para Kutar las relaciones con las entidades femeninas de los Morktarg eran una cuestion de supremacia fisica; primero el macho debe demostrar que es un padre digno; sino los morktarg se debilitarian, algo impensable, antes muertos que debiles.

Una vez se habia calamado lo suficiente como para la rabia morktarg no estallara; kutar abrio los ojos en el hangar; no sabia el tiempo que habia pasado...pero daba igual; era un morktarg; el machete del mismo nombre salio de su funda como por arte de magia; un golpe que habria descabezado a cualquiera que estuviera delante..

Kutar hizo danzar al machete,perdiendose en los brillos de la hoja....eso era verdadero arte...

Akenjo sigilosamente se acerco a B-K. , conocía algo de ese enorme guerrero, opto por ponerse a su lado y no por su espalda, a los de su especie eso lo veían como una manera de retarlos a muerte por querer sorprenderlos, sin vacilación, ni miedo en sus ojos, dio una palmadita de "machote" a B.K.

¿En qué andas pensando B.K.?, aunque nuestra misión sea de escolta, si aparecen enemigos que seguro pasará, podrás gastar esas ansias de matarlos contra ellos, o siempre te puedes liar a tajazos entrenándote en mitad del bosque en algún descanso que hagamos...

De todas maneras si necesitas algo, solo tienes que pedirlo.... -con una extraña sonrisa en sus labios y los ojos semi cerrados -... , lo más seguro que te sorprendería...

Acto seguido, en su mano puso un cargador, lo tapo con el pañuelo,al rato de quitar el pañuelo, en el lugar del cargador había una figurita de acción del propio B.K.

Es un truco genial  , no sabes lo que me ha costado conseguir uno que se pareciera a ti, parece un Action Man con tope esteroides. -decía entre serio y bromeando -

Puedes Hacer lo que quieras con la figura, es tuya, no estes tan tenso, en casi todos los sitios que vamos hay enemigos, así que podrás deleitarte, haciéndolos picadillo.

El grupo al completo se dirige hacia el Hangar pasadas las dos horas. El lugar era impresionante. Repleto de cajas con el logo de alto secreto en sus laterales, naves auxiliares, algunos Jumpers de Atlantis y demás. Allí, el primero en llegar fue B.K luego Akenjo, Kelly y Sasha vinieron juntas, la rubia insisitiendo a la morena de que le dejara hacer pruebas, luego vino Kyra y por último el doctor.

Ante vosotros, Mckay, Sheppard y Dean hablaban entre ellos. Al veros a todos, el grupo se acerca para dar las instrucciones finales antes de la misión.

Os suena raro que el propio Teniente Sheppard esté allí. Se nota que los altos cargos están mas que interesados en hacerse con la tecnología de los Grax.

El primero en acercarse es el teniente Sheppard. Iba vestido con su traje de Atlantis, no preparado para la guerra, por lo que deducis que esta misión será solo vuestra: la gloria o el más absoluto fracaso será vuestra y de nadie más.

-Supongo que ya habreis repasado la misión pero será mejor que recapitulemos, por si hay alguna duda. Los Grax pidieron a Atlantis ayuda para resolver algun tipo de negocio o algo así, desconocemos de que se trata, son una panda de reservados. Sea lo que sea, no es asunto nuestro, solo velar por la seguridad de los Grax más importantes.

Hizo una pausa y anduvo ante vosotros, mirandoos uno a uno.

-Me he jugado el culo por vosotros, y no me gusta que jueguen con mi culo. La Teniente Coronel Carter había preferido enviar al SGA-3 pero yo insistí en vosotros, así que no me la jugueis ¿de acuerdo? solo ir y volver..nada de armas.

Se detuvo de nuevo ante vosotros.

-Y bueno, disfrutad de ser los primeros hombres que ponen las botas en ese planeta. Para cualquier duda sobre lo que sabemos de los Grax preguntadle al Doctor Mcckay, si no, ya podéis embarcar.

Escucha atentamente al Teniente Sheppard y asiente... eso de que haya poca acción no le gusta mucho, pero que se le va a hacer... ya descargará energía cuando vuelva a la Atlantis.

-Señor, Sí, Señor!

Ella prefiere embarcar ya aunque impacientarse es malo...