-¡¿Qué?! No, debe de haber un error..
Susurró a la chica. En ese mismo momento dio un paso hacia adelante. Su instinto le decía que no le dejara hacer aquello a Ishtar.
Se dispuso a hablar, tomó aire..
"Me va a matar"
-Señor.. Tengo algo que decirle.
Se pone inmediatamente delante de Ypsilon para que no diga nada de lo que ella le ha dicho... quiere ver el torneo... se lo prometió a su padre y si tiene que hacerle callar, le hará callar... que por muy dragon negro que sea, hay una técnica que su padre le dijo que funciona con todos los hombres... llamada el cascanueces...
-Porfiiii - le susurra.
Pone unos ojitos suplicantes.
Imaginaos los ojitos del gato con botas XD
Denish escuchaba loq ue sucedia, entonces se acerca a Ypsilon y le pone una mano en el hombro y dice:
- No creo que se refiera a eso, ademas ella no es la unica que no es de esta region, sin duda el anciano se refiere al publico asistente
Tras esto mira a Ishtar y tras guiñarle un ojo dice:
- Vamos a ese reconocimeinto no?
Entonces mira a Ypsilon y a continuacion pasa una mirada rapida por los hombres y añade:
- Y no trateis de espiarnos eh
No puedo evitar escuchar toda la conversación, ante lo cual “miro” a la mujer que acaba de hablar, con una sonrisa picara y digo con voz tranquila
no se que quieres que vea, “preciosa”......
dejo unos segundos, para que al remarcar esa palabra, pueda pensar lo que no es, tras lo cual añado
soy ciego
Niega con la cabeza a lo que dice Denish.
-Es que yo no soy guerrera... solo vengo a mirar. - le susurra
Después vuelve a Ypsi con ojitos de cordero degollado... suplicante.
Mira a la muchacha...suspira y de manera paternal le susurra..
-Te vas a meter en un lío...
Luego mira a la otra chica, y sonríe levemente
-Déjala.. Ella se queda por aquí... Ahora vuelvo.. ¡No te muevas! Bueno..si te dicen por donde ir..Ya sabes. Espero que te lo pases bien.
Hizo un gesto con la cabeza y se dispuso a marcharse.
Se le ilumina la mirada cuando sabe que Ypsilon no la va a descubrir para que pueda ver el torneo desde el inicio. Sonríe y se aparta de su camino, asintiendo.
-Me quedaré por aquí...
Como una niña buena, vuelve a balancearse de adelante a atrás.
Solo tiene ojos para Hyozen, esa es su meta más cercana. Una vez llegue a ella, marcara nuevos retos. Cuando pasa por al lado de las dos jóvenes y del luchador que con ellas conversa, ignora la situación. Está concentrado y ese estado mental es muy complicado de hallar y sencillísimo de perder, y la circunstancias que pululaban por la sala eran propicias para minar a una mente equilibrada.
- Ray Stark, de la tierra del trueno.- se presenta sin más ante su nuevo guía.
Uno a uno, siguen a Hyozen al médico. Ishtar se queda sola allí, mientras los demás desaparecen. El aura de Hyozen era un león blanco, incluso a los que no poseían visiones del aura, les parecía evidente, tal era su poder.
Siguió durante minutos, caminando, y llegó a una amplia sala con camillas. Distribuyó a cada uno en una, en la cuales había una pareja de médicos.
Ishtar se quedó sola en cuestión de segundos. Incluso el anciano se marchó de allí, y comenzó a desplegar unos carteles.
Uno de aquellos allí, se acercó a la muchacha.
-¿Y bien? ¿Tu de donde eres?
Comentó, con una sonrisa, mirándola a los ojos.
Ypsilon está tardando mucho... se pone de cuclillas mientras dibuja en el suelo... lo único que puede hacer ahora es esperar a que Ypsilon va a por ella.
Levanta la cabeza cuando escucha que le están haciendo una pregunta... no sabe si contestar la verdad... seguro que si saben que es de Balaram, la echan de allí.
-Pues... pues... verás... soy de Balaram, se que no tengo que estar aquí... pero es una promesa!
-Eh..
El hombre se va atrás. Comienza a hablar con sus compañeros. De repente parecen llegar a un acuerdo.
-Así que de Balaran, ¿No? ¡Anda, corre con tus compañeros! No vayas a llegar tarde... Te harán una prueba médica igual que a ellos, aquí nadie se escapa..
Le guiñó el ojo
-Pero tranquila.. No te harán daño.
La miró con gesto paternal. Creía que tenía miedo a los médicos, simplemente, y por eso no había entrado con ellos.
-Por cierto... ¿Tu nombre?
-Eh?
No entiende muy bien de lo que habla ese hombre... ¿cómo que prueba médica?
-Pero... pero yo no... tengo que hacérmela...
Ella no es luchadora, así que no tendría por qué hacerse esa prueba.
-Que si..Anda, te acompaño.
Comentó, empujándola levemente hacia donde estaban los demás.
-Ya verás que no pasa nada..
-Pero... pero... Ypsilon me dijo que esperase...
El tipo es más fuerte que ella y consigue arrastrarla hacia donde quiera que vayan. Seguro que Ypsilon se enfada mucho cuando no la vea ahí donde ha dicho que espere.
Se colocó delante de la camilla que le había señalado Hyozen, sin duda ese individuo era podoreso, lo sentía y eso lo hacia tratarlo con respeto. En silencio aguardó a pasar la rutinaria revisión, sin duda no la necesitaba... pero era un trámite necesario según pudo comprobar.
-Supongo que será lo de rutina- el chico miro tranquilo a los medicos mientras esperaba las indicaciones que se dieran, en todo caso confiaba mucho de poseer una buena salud.
Sin decir nada veo lo que supongo que serán los médicos, no lo se seguro y las estructuras que son las camas, así que avanzo hacia una de ellas, salvo que me remarquen cual sera la mia y me siento en ella a espera de que me digan los médicos, diciendo solo un escueto
buenos día
Magok avanzo con paso firme a la camilla que le habían asignado, saludo con un gesto amable y sincero a los médicos que tenía asignados y empezó a quitarse la ropa.
Primero la camisa, doblándola pulcramente y colocándola en la parte superior de la camilla. Después repitió la misma operación con sus pantalones.
Acto seguido miró a los médicos y dijo:
¿Por donde quieren empezar señores?
Las cortinas de cada lugar se cerraron, mientras a cada uno le medían los reflejos, la vista, y la cantidad de sustancias en el cuerpo. Ocurrieron algunas cosas curiosas, como que a Kazuki lo trataran como un ciego, haciendo como si le fueran a golpear, y esa persona casi tuviera que salir de allí para acabar en otra camilla, o que la mujer de la zona de Magok tuviera que marcharse y ser sustituida por otro hombre. Sin embargo, nadie vio nada.
Tras media hora, mas o menos, poco a poco se fueron abriendo algunas cortinas, y de allí fueron saliendo todos y cada uno de los combatientes..
..En uno de ellos se encontraba Ishtar, aún con cara de inocencia, mientras el grupo volvía a la sala.. El pasillo se les hacía largo. ¿Contra quién les tocaría? ¿Cual sería el requisito de aquella primera prueba?