Partida Rol por web

- Parece que tampoco os soprendería la guerra a raíz de los acontecimientos.

Comento a sus palabras para luego volver a centrarme.

- ¿Y los Unicornio? El púrpura destaca entre el naranja.

Resalto los colores del clan tanto de los Shinjo como el de nuestros anfitriones, entre quienes empieza a postularse el posible conspirador si debemos creer todo lo indicado hasta el momento.

¡Quién me iba a decir que confiaría en la palabra de un Escorpión alguna vez en mi vida!

Aunque no tenía motivos para mentir, dado que los Kitsune podrían confirmar facilmente su versión.

Notas que la Dama Doji no está muy cómoda con la conversación que mantiene con Doji Raigi.

Con el gato gris caminando junto a mí observé como la dama Doji parecía terriblemente incómoda. Esperaba que la joven no se fuese de la lengua, pero tenía que hacer algo por si acaso. Poniendome con disimulo a espaldas del grulla para que no me viese saqué mi abanico e hice un gesto con él a la dama indicandola que estaba dispuesta a cubrirla si quería  librarse de esa incómoda conversación.

- ¿Una guerra a raiz de los recientes acontecimientos? - digo. Todo es posible.

- ¿Qué es lo que quereis saber de los hermanos Shinjo? - pregunto.

- Solo con quién charlaban - simplifico todo para luego aclarar - Resultaría fácil descubrir cualquier detalle incongruente entre tántos testimonios iguales.

- Con unos y otros. - respondo. Estuvieron hablando un rato con el Karo, posteriormente conmigo y con Isawa Hitsukawa.

- Ignoro si hablaron con alguien más durante la velada.

- Yo te acompañaré a ver la habitación del Daimyo Nisshoku-san. - digo.

Vamos pues. Confirme al Komori, esperando que fuese algo desvelado en aquella estancia.

Divertido, acompañado por dos Dragones, el Murciélago se encaminó hacia las habitaciones donde el crimen se había cometido, esperando encontrar algo de interés.

Cuando llegais a la habitación hay un eta esperando en la entrada.

La escena es horrible, la suave y amarillenta luz de las velas que la iluminan no hace sino incrementar dicha sensación.

Observais que en le centro de la misma está el Daimyo boca abajo con un enorme charco de sangre a su alrededor. En la espalda tiene una herida de arma blanca que atraviesa su yukata (una especie de bata de baño rokuganesa).

El escritorio está volcado al lado suyo habiendo papeles desparramados por el suelo y la tinta derramada formando un negruzco charco. También hay una tetera rota en el suelo y la estera debajo de la misma está empapada.

Parecía lógico descartarlos de antemano, a fin de cuentas parecían de los que iban a todos lados juntos, o eso se deducía de las palabras del Escorpión.

- Muchas gracias entonces Bayushi-sama. Me encargaré de resaltar vuestra inestimable colaboración si llegamos a resolver todo le asunto.

Las palabras en mi boca parecían demasiado forzadas, como si en verdad esperaba cumplirlas a pesar de que no me hiciera gracia alguna el hacerlas. Un pequeño golpe de suerte en favor del cortesano.

Con un asentimiento Bayushi Ejiro se aleja de ti.

A Isawa Hitsukawa lo encuentras conversando con los Mantis.

Al verte llegar te hace una ligera inclinación de cabeza a modo de saludo.

- ¿En qué puedo ayudaros Ayako-san?

-Se trata de ese dragon ,Aiko-san .Se trata de un juramento casi tan importante como el de clan,el del casamiento.Un matrimonio es algo sagrado y vinculante en el que no solo particitan sus contrayentes sino tambien su propio clan.Si yo he podido darme cuenta otros tambien y hay escorpiones en este lugar.
Aiko-san debeis recapacitar lo que estais hacfiendo o ello podria llevara la deshonra tanto vuestra,como la de vuestro marido,como la del clan y eso es algo que no puedo permitir .

El semblante siempre risueño de la Dama Doji cambia completamente. Ambos podeis verlo incluso con el abanico desplegado.

- Desconozco a que os referís. - dice. Si os referís a Mirumoto Rai os diré que tan sólo es un amigo.

Desde la espalda de Raigi para que este no me vea, vuelvo a hacer a Doji un gesto indicandola que puede utilizarme como excusa o coartada

Observas que su mirada empieza a buscarte cada vez con más frecuencia pero no parece cortar la conversación con el Doji aunque no sabes exactamente el motivo por el que sigue hablando con él cuando claramente no quiere hacerlo.

-Por favor Aiko-san no quiero dañaros solo ayudaros pero para ello solo encesito la verdad y no me la estais proporcionando el primer paso es asumirlo,dejarme ayudaros y no pasara nada poseo contactos,influencia y mi habilidad de palabras no es la peor ,dejarme ayudaros no solo por vos ya sino por la deshonra y por el clan admitid la verdad y despues os ayudare a tomar las medidas necesarias para que nadie ose manchar vuestro nombre ,el de vuestro marido o eld el clan ayudarme a ayudaros ,decidme la verdad.