Partida Rol por web

-Perdona que lo dude, tu tratas de conocer muchas cosas que no comprendes, mientras que yo trato de comprender las cosas que conozco, hay una clara diferencia.

-Quizá hablas con una seguridad excesiva de lo que pretendo o no hacer...yo busco conocer para comprender, y la misma comprensión implica conocer cosas, que antes no comprendías, pero podrías comprender. ¿O acaso conocías las disciplinas que tanto te gustan nada más nacer?

Algo molesto, añadió:

-Hay un largo camino hasta la sabiduría, y ese camino pasa por ampliar nuestras miras para poder comprender mejor el conjunto...y también por la comprensión de lo ajeno a tu persona.

-¿Qué sois? ¿Críos? Discutiendo así por nada - intervine como si fuese una madre que separa a sus hijos-. No creo que sea momento para discutir eso. Luego, si queréis, os vais a tomar una copa y ahí habláis de lo que queráis, pero, ahora,hay que ayudar a Bellis -dije en tono tajante-. Además, formaríais un buen equipo juntos, si no fuerais tan impulsivos - agregué-. Sois chicos jóvenes con inquietudes, que se preocupan por lo que ven y sienten. Que los enfados no os quiten eso; sería de estúpidos.

"Ahora, daos una abrazo" pensé, sonriendo para mis adentros, pues era lo único que me faltaba por decir para parecerme a una madre.

-Soy demasiado joven para beber - es la única respuesta que doy, soy consciente de mi comportamiento patético, pero no puedo soportar a la gente así.

-Supongo que me he dejado llevar un poco, lo siento. Y tienes razón, queremos ayudarle a él, no discutir cosas que no llevan a ningún lado.

-Muy bien - dije, algo satisfecha-. Que ya somos todos muy mayores para tener que hacer esto. Hablemos de otras cosas. Si casi no nos conocemos y, en lugar de preguntar, se discute. Vamos a ver- dije mirando hacia el cielo como si me otorgara inspiración para abrir un tema de conversación-. Veamos... a ver...¡Ah, sí! Venga, Bellis, cuéntanos más sobre tu pueblo, tus costumbres... cosas triviales, que, sino, estos vuelven otra vez a la carga- le murmuré.

En silencio continuo el ritmo del grupo, cuando crucemos un par de calles más llegaremos a la tienda, nunca había pensado en lo lejos que está de la plaza central.

-Pues no hay mucho más que contar-Digo como respuesta a Ireth-En el bosque no ví ningún riachuelo, era un bosque muy oscuro, pero por la mañana precioso-Continúo con la segunda pregunta-Respecto a mis costumbres, me temo que no hay nada más, entrenar entrenar y entrenar, combatir y ganar o combatir y morir-Hombre hay algo más pero no creo que a Ireth le siente bién, ahora no estoy en mi tierra no puedo ir por ahí...

Entrenar, combatir, matar y morir... Bárbaro.

Me siento bastante aterrado ante el resumen de la vida de Bellis, probablemente si así lo quisiera podría acabar con los tres que lo acompañamos sin siquiera despeinarse... ¿Qué gana matando?

Trago saliva y consigo armarme de valor.

-¿Por qué matas? ¿Qué tiene de hermoso como para motivar tu vida el hecho de sesgar una vida para siempre? Una vida es una asociación única entre millones y millones de partículas, ¿quién eres tú para decidir que esa unión ha de romperse?

-JAJAJA!!No es la muerte lo que me motiva si no el combate, el combate es el mayor arte que hay en el mundo, destreza,fuerza,agilidad,inteligencia, tienes que utilizar todas y cada una de tús capacidades para sobrevivir y para que sea bello, además la gente que muere en una batalla se debe sentir contenta no triste, porque es un verdadero honor.-Termino mientras recuerdo mis pasados combates.

-Qué vida tan interesante - comenté lacónica-. ¿No te aburre esa vida? Quiero decir, entrenar, luchar, entrenar aún más, luchar más - dije resoplando después-. No sé vosotros - continué, dirigiéndome hacia los otros dos muchachos-, pero yo me aburriría sobremanera. Bueno, aburrirme, más bien, me consumiría la rutina - reí, dando golpecitos con la mano al brazo de Bellis-. No, supongo que tú estarás en el paraíso haciendo eso.

Paré de reírme inmediatamente cuando el muchacho más joven preguntó. Tenía razón."Si no puedes dar la vida, ¿quién eres para quitarla?" pensé. 

-No conozco otra cosa, ya se lo que os debe parecer, de todas formas tenemos nuestras formas de romper la rutina, de divertirnos sobremanera, al menos yo-Termino sin hacer más comentarios sobre como nos divertíamos, no entendían mi forma de vida y por mucho que se la explicara no la entenderían nunca.

-Es extraño que a poca distancia de este pueblo tan tranquilo donde nunca pasa nada, tengamos como "vecinos" a todo un pueblo guerrero. Debes reconocer que nos es extraño. Bueno, más que extraño, es algo que se sale de lo normal. Jamás hemos oído ninguno de nosotros nada de más allá de las fronteras de este pueblo y, entonces, encontrarnos con un hombre que dice tales cosas de la guerra, la lucha y el honor... pues, nos desconcierta -maticé-. Les desconcierta, a mí me parece fascinante. Aunque, claro, nunca me he visto envuelta en una gran guerra ni cosas por el estilo, pero debe ser cuanto menos interesante - pensé en voz alta-. ¿Y vosotros? - me dirigí hacia los otros muchachos- ¿Qué hacéis en vuestro día a día? Y, por favor no digáis estudiar o escudriñar libros porque eso lo damos por supuesto.

-Bueno...lo de poca distancia es lo que suponemos, pero según lo que he leído, hay posibilidades de transportar materia, incluso materia viva, a largas distancias, pero nunca lo he probado. Al fin y al cabo, hay que saber dónde ir.

Ante la sugerencia de dedicarse sólo a escudriñar libros, el joven esbozó una sonrisa:

-Creeme, siempre hay un apartado más allá de estudiar, una práxis del Ars Magna, dicho de forma rimbonbante. A si que también practico con hechizos...desde mover cosas, hasta creación de objetos o cosas más devastadoras.

Honor... ahora resulta que matar a una persona aumenta tu honor.

Al escuchar el comentario de Nathan sobre transportar materia viva de un lugar a otro empalidezco, un viaje de esas características solo puede llevarse a cabo descomponiendo la materia y haciéndola viajar por un agujero de gusano, o en su defecto haciendo que las partículas del cuerpo cambien de fase estando en un lugar donde las distancias sean conceptuadas de forma diferente y así ser capaces de avanzar miles de kilómetros en un instante.

Dudo que un "arcanísta" pueda llegar a tal nivel de comprensión, quizás consigan transportar materia, pero únicamente utilizando ciencia que desconocen.

Quiero discutir con Nathan esa teoría del transporte de materia, pero me limito a negar con la cabeza.

-Solo estudio, es mi vida.

¿Estudiar?¿Solo estudias?-Digo extrañado.Que aburrimiento, ¿Como puede vivir una persona para estudiar?-¿No te aburres?Estar todo el día encerrado, mirando escritos día tras día.

En mi caso el ejercicio físico me hacía feliz, superarte cada día más y más, y saber que cada vez aguantarás más tiempo en una carrera en una pelea o incluso en...

-Al menos no me dedico a matar gente - Es la única respuesta que doy a Bellis, me parece inaudito que encima  me diga que no hacer daño a nadie es aburrido.

Por única contestación lanzo una mirada asesina a Thane, si hubiera estado en mi ciudad por una contestación así le hubiera retado a una batalla a muerte, la cual no podría ganar, me alejo del grupo diez pasos atrás, aunque sabía que no sería bién recibido yo había puesto todo de mi parte para entender ese mundo donde ellos vivían, pero si ellos se empeñaban en no entenderme era su problema, le diría a Ireth donde está mi ciudad y después me marcharía de ahí, al contrario que ellos era totalmente capaz de sobrevivir yo solo en la naturaleza salvaje no necesitaba a nadie una vez saliera de ese sitio.

-¡Espera! No te tomes a mal las palabras de nuestro pequeño amigo, la juventud y la extrañeza de tu postura lo ciegan.

Girándose para mirarle, dijo:

-Aún debemos ir a ver si encontramos tu pueblo en algún mapa.