Partida Rol por web

El alien que tiene atrapado al compañero, presiona con sus tentáculos sobre el cuerpo del soldado, haciendo que le falte el aire, pero la fuerza del enemigo no parece ser suficiente. Seguramente estará distraído por todo el movimiento del lugar.

Aquella situacion se nos estaba escapando de las manos, demasiados problemas seguidos, para colmo Kreutz acababa de disparar a Ai-Chan y esta habia salido disparada por culpa del impacto, cayendo en una posicion imposible y a pesar de ello, poniendo todo su empeño para poder ergirse. Pero era hora de actuar, tres fallos ya serian demasiados, asi que ahora no podia permitirse el lujo de volver a fallar el disparo, Mcbell apunta al tentaculo que tenia prisionero a su compañero, apunta, se toma su tiempo para atacar.....!!!MALDITA SEA¡¡¡, que coño me pasa, mierdaaaaaaaaaaaaaa. Volvio a fallar, las cosas se ponian peor y lo peor de todo es que Perkins estaba contribuyendo a que eso sucediera.

Van a morir todos por mi culpa. Mierda.

Tenemos que ayudar a Kreutz. Apunto a la  base del tentaculo que tiene preso a mi compañero para no darle a él. Tras unas decimas de segundo con mi objetivo en la mira disparo con exito. ¡Eso es!

Tras muchos intentos fallidos, el disparo por fin impacta en el bicho que tiene prisionero a Krustz y este, debido al impacto, suelta a vuestro compañero que rueda lejos de él en pocos segundos.

Ai-Chan aún lucha por levantarse del suelo, debido al impacto anterior de rifle, pero su brazo biónico parece no responder a sus órdenes.

El soldado se levantó recuperándose de la presa del alien desafiando con su mirada a la demencia. HIJODEPUTA !!!! gritaba mientras vaciaba el cargador en la criatura para volatilizarla. La sangre caía por su herida abierta en el pecho, pero eso no parecía detenerle para nada, Su visión se teñia de ese mismo color esperando poder ver el cuerpo de ese monstruo.

Kreutz logra volatilizar al engendro con el disparo de su laser, mientras que su implante comienza a brillar y siente como un hormigueo recorre su herida. Si pudiera ver de forma microscópica su herida, podría ver un montón de nanomáquinas reparando los tejidos rotos y cicatrizando la herida desde dentro.

A los pocos segundos, su implante deja de brillar y se encuentra totalmente curado.

De repente, sentís como el suelo comienza a temblar. Parecen ser pisadas, por el ritmo que llevan, pero no podéis dar crédito a que algo o alguien pudiera realizar este tipo de movimietos en el suelo que pisáis. Aunque, visto lo visto, se puede esperar cualquier cosa.

Una especie de mezcla entre humano y alien comienza a aparecer en la puerta de la sala. Sus movimientos son lentos, pero con cada paso, os dáis cuenta como retumba toda la sala. Posee una especie de implante en el ojo derecho, y muchos de vosotros pensáis que probablemente, haya sido un extraterrestre que ha sido utilizado para experimentar.

El enemigo se queda de pie junto al cuerpo de Ai-Chan, que lucha por ponerse de pie, mientras que su ojo biónico se ilumina con una luz roja y tras unos milisegundos, un rayo de energía carmesí sale de su ojo para impactar en el cuerpo de vuestra compañera, la cual queda reducida a cenizas.

En ese momento, la criatura se gira hacia vosotros, con un movimiento que parece totalmente robótico y os mira con su ojo bueno, el cual es negro como un pozo sin fondo.

- Destruir... -, dice en vuestro idioma, pero con un acento muy extraño.

¡Que coño es esa cosa! Sera mejor que tengamos cuidado. Les digo a mis compañeros al ver lo que le ha hecho con Ai-chan.

¿Ahora que? piensa Perkins al notar el estruendo porducido por lo que parecian unas pisadas, no tardo mucho en hacer acto de presencia la respuesta. la tragedia estaba servida en bandeja, aquel alien o lo que fuera habia fijado a Ai-Chan como su objetivo a destruir y asi lo hizo, sin contemplaciones, sin dudar, pensado y hecho.

Perkins sabia que tenia que luchar o morir y se decidio por lo primero, si tenia que morir, seria luchando.

ASALTO DE COMBATE CONTRA JEFE SUPREMO

INICIATIVAS

Peterson
Kreutz
McBell
LetsRock
Alien Supremo

¡Pagaras por lo que le has hecho a Ai-chan! Grito mientras le apunto con el rifle. Lentamente aprieto el gatillo, pero el disparo no le alcanza. Maldita sea, me tiembla el pulso.

El olor a carne chamuscada comienza a llenar la estancia. Todos veis el cuerpo muerto de vuestra compañera, del cual sale humo y más humo, hasta que de repente, se convierte en cenizas.

Sus manos buscaban entender que ocurría en su pecho con miedo a llegar a tocarlo, pero presentes y cercanas. Su asombro fue interrumpido por una extraño temblor. Con lo que recuperó su rifle de su correa. Aun nervioso y excitado por la ráfaga anterior cambiaba el cargador del rifle mientras observaba la criatura entrando en la sala. No podía temblar más en una situación tan delicada lo que provocó que tuviese que presenciar aquel escenario. Sus ojos se agrandaban mientras ella desaparecía en cenizas y por alguna extraña razón de nuevo una furia incontrolable se apoderó de Mathias. yo cumpliré tu venganza, lo prometo... click... AHORA ¡¡¡ MUEREEEEEEE !!! apretaba el gatillo con fuerza enfocando a esa horrible criatura mutada.

El Alien recibe el disparo en todo el pecho, haciendo que trastabille hacia atrás y que casi caiga al suelo. Sin embargo, este se recupera rápidamente, centrando su mirada en el soldado que le acaba de disparar a quemarropa con un arma laser.

Perkins vio como su compañera se desacia en cenizas, un cumulo de emociones se entrelazaban en su mente, apenas la conocia pero formaba parte de su equipo y con eso era suficiente como para apreciar la vida de alguien.

De repente ve como su compañero ataca con exito al puto engendro que acababa de aparecer por la puerta y este pega un pequeño traspies, Bien, ahora es la mia. Perkins apunto con su arma hacia el alien con la intencion de darle de lleno, pero algo lo despisto en el ultimo momento que le hizo fallar el disparo.

MALDITA SEAAAAAAAAAAAAAA

Let´s Rock apunta a la cabeza del alien, mientras dispara una ráfaga con su rifle.

El disparo impacta en el rostro del alien, haciendo que este gire la cabeza hacia un lado, para, acto seguido, volver a mirar a los soldados, mientras le sale un poco de humo en el lugar del impacto. No parece haberle afectado mucho.

El Alien gigantesco sale corriendo hacia el soldado que le acaba de disparar. Mientras corre, podéis observar como baja los hombros, para arrollar a su enemigo, mientras que de su carne salen puas y pinchos pocos segundos antes del impacto.

Cuando impacta sobre el cuerpo de LetsRock, sus puas se clavan en su carne y la fuerza del impacto hace que vuestro compañero salga despedido hacia una de las paredes, quedando atontado.

El alien ahora continúa buscando otro objetivo...