Subida por Selei
En enero nos regalaron un cachorrito de cocker, un muñequito precioso al que decidimos llamar Murphy.
El pequeñajo llevaba un par de meses con nosotros cuando recibimos el listado de pruebas. Al leer esta en concreto, nos dimos cuenta que el pobre animalito había recibido un nombre, juguetes y mimos, pero que no nos habíamos presentado formalmente. Así pues, procedimos a las presentaciones, uno a uno fuimos estrechándole la patita, cumpliendo así la dichosa prueba y poniendo fin a nuestro anonimato con Murphy.