Partida Rol por web

La espera era larga, la necesidad acuciante. Hasta su llegada tendrían que aguantar como pudiesen. Ya se encontraban en la cuenta atrás cuando desde Nova Vivo les informaron de que ya había sido enviada una nave con suministros y las herramientas necesarias. A una persona en Abstrah empezó a bombearle el corazón con normalidad.

El viaje duraba un mínimo de diez horas, en vuelo rasante y teniendo que desviarse de algunos lugares no transitables. No había colonias desde la ciudad hasta el núcleo militar y durante al menos una hora de trayecto la radiaccion creaba transferencia con las comunicaciones. Por lo demás el paisaje era arena y agua, al menos la parte en la que la protección de las ventanas aun no era necesaria, a partir de ahí poco importaba como fuera el entorno, el radar se encargaba de dar los avisos y la nave ascendía a los 30 metros sobre la tierra, su máximo.

A pesar de todo se consideraba un trayecto tranquilo. En esta ocasión la travesía duró doce horas y tres cuartos. La nave iba bien cargada, mas de cincuenta cajas prensadas con la alimentación básica, mas de veinte con recambios para distintos mecanismos y dos cajas enormes y alargadas, selladas y aseguradas que habían ocupado casi todo el largo de la nave. Ademas, en esa misma nave, habían aprovechado para llevar a un grupo nuevo de soldados de apoyo.

Velero A Cuatro. Nave reforzada de transporte. Con carácter transcolonias. Capacidad para atravesar campos medios de radiaccion. Altura máxima treinta metros, velocidad máxima 90Km/h

Los habían metido junto a los suministros. Se había adaptado la zona para acoplar los asientos, no eran excesivamente incómodos y si muy funcionales. La pared de la nave hacia de respaldo y los cinturones se ajustaban por magnetismo. Moverse no era aconsejable aunque les dieron permiso para subir dos veces hasta la zona de los pilotos y poder usar el baño. Cada asiento estaba se había situado donde había sido posible acoplarlo, por lo que a excepción de cuatro soldados los demás habían ido por separado.

Finalmente la nave alcanzó su destino, no hubo aviso ni cambio que delatara la llegada de ese momento. La sensación de movimiento dentro de la nave era nula por lo que hasta que los pilotos no lo anunciaron y se empezaron a abrir las compuertas nadie sabía que habían llegado a Abstrah.

yo cojo uno de esos asientos, antes de salir hago un barrido para analizar los componentes del aire, la radicación, temperatura, oxigeno y demás

-cojo mi equipo con mis ordenes, salgo de la nave y le pregunto ha alguna de los soldados que donde esta el oficial al mando, espero a que salgan todos de la nave para indicarles donde esta el oficial al mando.

Con mi macuto al hombro me aproxime a la nave, un Velero a Cuatro como lo denominaban. Observe detenidamente la nave desde fuera, su maniobrabilidad era buena, su velocidad no era ninguna maravilla pero estaba igualmente bastante bien, pudiendo llegar a alcanzar una altura maxima sore el terreno de unos treinta metros. Era una "avispa" rapida y perfecta para transporte entre ciudades incluso con unos niveles medios de radiacion. Me gustaria pilotarla pero esa tarea recaia sobre los pilotos, mi unico trabajo era sentarme y esperar que las horas pasaran hasta el aviso de llegada.

Subi hasta alcanzar uno de los camarotes, abri la puerta y me di cuenta de que habia un unico asiento en el... me encogi de hombros, ya era una suerte de que nos hubiran puesto asientos y todo asi que el estar solo tampoco me resultaba un gran problema. Deje mi macuto debajo del asiento y me sente con la intencion de dormir las horas que durara el viaje, una vez en destino empezaria lo bueno.

Las voces de los pilotos me despertaron, anunciando nuestra llegada al nucleo militar. Fui rapidamente al baño para asearme un poco y tras esto con mi macuto a la espalda baje de la "avispa" con la intencion de ver quienes eramos los nuevos en llegar, seria interesante ver que tipo de gente estaban reclutando para el nucleo militar.

No hay demasiada gente alrededor y los que hay están ocupados y no te hacen mucho caso. Una mujer que reconoces como una cadete de ingenieros te hace un gesto con la mano para esperes ahí. A pesar de ser cadete parece que es la que se encarga de la llegada de los transportes. Desaparece en el interior de la nave antes de que puedas cruzar media palabra con ella.

Yul se sento en el primer asiento que vio, al parecer les agruparian ya que eran cuatro asientos, por lo que pensoq ue serian de momento pocos para ir como refuerzos aunque a ella realmente le daba igual que fueran uno dos o miles, tenia claro porque estaba alli y que era lo que queria hacer y lo iba a hacer sin dudas. El viaje lo paso entre durmiendo y mirando a la nada, cuando alguien le hablaba realmente no le hacia caso, no le interesaba demasiado lo que podian decirle. Un par de veces se levanto para ir al servicio y para darse un pequeño paseo mientras tanto por el hecho de descansar las piernas principalmente mas que por otra cosa.

Al llegar se pone en pie mientras coge sus cosas y dice:

- Por fin, que lentos, por favor, como hemos podido tardar tanto 

Camina hacia la entrada de la nave para salir de un salto de esta y observar el lugar, se queda mirandolo todo con mirada bastante seria mientras piensa:

- Bien aqui estamos, si hace falta levantar todos los cimientos lo voy a hacer y me da igual, estos se van a enterar

pues me quedo esperando y de paso observo como es la base y la gente que sale del transporte, si perder de vista mi macuto (supongo que el resto este en los contenedores que hay en la nave). saludo a la persona que ha bajado de la nave.(llevo un chaquetón largo que me cubre el uniforme).

Buenas señor, señorita

Y el día del traslado había llegado. En el macuto llevaba lo básico, además de alguna cosa extra que pudiera hacerme falta en la nueva base, aunque imagino que allí tendrán material con el que poder trabajar, no nos van a soltar en mitad de la nada sin lo mínimo para sobrevivir.

Durante la estancia junto a las cajas, tuve tiempo de sobre para mirar todas ellas y adivinar qué había dentro. Comida, recambios... eran cosas básicas que necesitaríamos allí a donde íbamos. Pero las dos largas y selladas me tenían en ascuas. ¿Serían dos cuerpos? ¿Alguien que le tiene miedo a los vuelos y ha decidido viajar así? ¿Algún otro recurso de utilidad? No pude saberlo.

Por otro lado, también iba una nueva remesa de soldados para la nueva base, desde oficiales hasta reclutas. Estaba claro que pasaríamos mucho tiempo hasta que llegara el refuerzo. Va a ser unas semanas muy duras me temo.

Un único desvío nos entretuvo durante el vuelo, pero al fin, tras el aviso del piloto, habíamos tocado tierra. Habíamos llegado a la que fuera nuestra casa de ahora en adelante. Recojo el bulto, tanteando que todo esté en su sitio, y salgo de la nave.

Un individuo que oculta su uniforme bajo un largo chaqueton me saluda, a mi y a la mujer que acaba de bajar. La mujer parece ansiosa por empezar, o al menos asi lo aparenta a mis ojos... en cuanto al individuo con tatuajes en la cara... no lo se, pero me resulta curioso que oculte su uniforme, eso me da la idea de que no debe ser un cadete pero bueno tmapoco es que importe mucho ahora mismo.

- Buenas. - El individuo con tatuajes ha sido educado asi que no pasa nada por devolver el saludo con la misma cortesia... aunque no llego a entender porque el uso del señor y señorita de forma cortes, esto es el ejercito, aun asi no hago hincapie en ello.

Oigo los pasos de otro individuo y me desplazo ligeramente para poder abarcarlo dentro de mi campo de vision.

Bostezo y me acomodo la mochila en la que llevo mis cosas. Dormiré en el viaje- pensaba, aunque sabía que luego nunca podía dormir en los trayectos.

No busco ningún asiento en particular y me siento en el primero que veo que está libre. Dejo mi mochila a mis pies, donde no estorbe a los demás y pueda tenerla vigilada.  

Vuelvo a bostezar, me estiro, me froto los ojos y me amaso el pelo, intentado despertarme. Parece que funciona.

Con los ojos algo rojos del sueño y el pelo despeinado, empiezo a mirar a todos los lados, buscando algo que pueda entretenerme durante el viaje.

Tal vez sea buena idea hablar con alguien, van a ser unas cuantas horas de viaje y al final, allá donde vamos nos acabaremos conociendo todos.

-Hola- me atrevo por fim a decir, aunque ya estemos llegando, con los ojos muy abiertos a quien esté a mi lado- Noelie, arreglo cosas.

empiezo a dar vueltas después de esperar mas de 15 minutos con cara de cabreo y dar patadas a piedrecitas.

-tengo cosas más importantes que hacer, que estar aquí quieto sin hacer nada

hola noeli, yo tambien "arreglo" cosas

Algo me hace pensar que no estamos hablando de lo mismo. Ladeo la cabeza y sonrío. 

-¿Cadete también? ¿o tengo que hablarle de Señor?

Me ajusto la mochila mientras bajamos, mientras entrecierro los ojos para que la luz no me moleste.

En esta base relativamente nueva, seguro que hay muchas cosas para hacer, mis llaves inglesas piden que las use a gritos.

con mi edad tengo pinta de cadete??

La paciencia no parece una de las virtudes del hombre con tatuajes, eso sin duda. Una cara nueva mas aparece en el lugar, se presenta como Noelie... parece ser que al final tocara dar nombres y todo. Dice que arregla cosas... y el de tatuajes responde que é tambien.

- Buenas Noelie. Alucard Berlin, oficial de combate.

"Tatuajes" hace un comentario sobre si a su edad puede ser un cadete... es cierto que se han dado casos pero sin duda tiene algo de razon, entre eso y lo de ocultar su uniforme, y por lo tanto rango queda claro que es el oficial... y muy probablemente el oficial mecanico.

La espera había sido larga, pero por fin el día señalado para su salida había llegado. Deseando como estaba ponerse en marcha de una vez, cuando dos soldados abrieron la puerta de la sala en que esperaba no perdió un instante para ponerse en camino.

Fué introducido en la nave desde un corredor completamente desierto, y en el breve recorrido por su interior tampoco se cruzó con nadie.

Pudo identificar perfectamente como aquel transporte, que se veía que necesitaba una buena limpieza, era un Velero A4 por su fuselaje a medida que avanzaba por las entrañas de la nave esquivando cajas y demás elementos de avituallamiento.

Le señalaron un asiento malamente improvisado para que se acomodara en el, lo que le resultó irónico y no pudo menos que sonreir ante aquella circunstancia. La verdad es que no esperaba una cosa mucho mejor que aquello, pero el silencio y excesiva ceremonialidad con la que esos dos se dirigían a el le causaba gracia. Esa pareja no aguantaría ni un asalto en el exterior ni con la bestia más dócil.

Agradeció el hecho de tener un minúsculo compartimento para él solo, pues así eludía el verse obligado a aguantar los cuchicheos habituales de los reclutas cuando van camino de un nuevo destino. Además hacía poco tiempo que había vuelto a recuperar esa vitalidad y energía que lo caracterizaba y deseaba un poco de tranquilidad.

No tardó en perderse en la lectura que había dispuesto para el viaje y los primeros días de estancia en Abstrah, por lo que desistió la oferta de ir al baño en ninguna de las dos ocasiones en que tuvo oportunidad. Prefería aprovechar el tiempo y disfrutar de aquella lectura que Ziara le había recomendado hacía tiempo.

Enfrascado como estaba en la lectura, junto a una pequeña cabezada que se obligó a realizar para estar fresco y despejado una vez llegara a destino, el trayecto le resultó rápido apesar de que habían tardado más de la media en llegar según le habían informado.

Recogió sin prisa sus pocas pertenencias y se encaminó con paso relajado hacia la salida de la nave. Antes de pisar la pista de aterrizaje pudo observar como ya había en el exterior algunas personas que como él llegaban a Abstrah en aquel transporte, todas más jóvenes que él por lo que pudo apreciar.

Entre aquella gente le llamó la atención un hombre joven que lleva con orgullo el distintivo de oficial de combate y que, por como se mueve, complexión y su formal apariencia de soldado se adecúa perfectamente a los canones militares con los que él se identifica. No como aquel cuadro desteñido que oculta el uniforme.

soy tekel-ketel del grupo 5 de ingenieros de .... eso no tiene importancia, no han venido a recojernos?

Ladeo la cabeza hacía el otro lado manteniendo la sonrisa. -En un sistema meritocrático, los ascensos no depende de la edad sino de la habilidad demostrada por lo que, la edad que aparenta, dato que no tengo, no es suficiente para determinar si es cadete u oficial- amplio la sonrisa- pero deduzco que lo segundo, Señor.

Me giro al nuevo oficial y relajo la sonrisa, siendo esta más sincera- Saludos Señor Berlin, un placer- acompañado de un ligero inclinamiento de cabeza.

Tras esto, me separo un poco del hombre tatuado, y reviso mi mochila. Coloco cualquier cosa que se haya movido. 

tienes razón  cadete NOELIE por meritos puedes ascender, los más fáciles para ascender lo tienen los luchadores y los más difícil los de la sección medica, aunque los luchadores dependen mucho de los ingenieros y de los medicos

Despues de recibir el saludo de Noelie y contestar a su ultimo conmentario con una leve inclinacion de cabeza y una leve sonrisa, escuche los comentarios del oficial de ingenieros... parecia el tipico comentario que provocaba las rivalidades entre secciones, podia sonar a mala intencion o no la verdad es que para que algo moleste debe importarte un minimo la persona que lo comenta y en este caso, no es asi... aun asi un pequeño recordatorio tampoco iria mal.

- La seccion de medicos se dedica a curar a los heridos en combate y a mejorar nuestra posibilidad de supervivencia en los diferentes teatros de guerra y por ello tienen mi agradecimiento, al igual que la seccion de ingenieros por reparar nuestras armas y aeronaves, pero tampoco hay que olvidar que somos nosotros los que estamos ahi fuera combatiendo y muriendo. Esto no se trata de quien es mejor o quien asciende mas rapido, estamos aqui para proporcionar a la humanidad una posibilidad de recuperar su planeta. Las secciones individualmente son importantes pero no autosuficientes, nos necesitamos unos a otros para conseguir que esto funcione. - Miro al oficial de ingenieros. - Asi que tu comentario esta fuera de lugar... y agradeceria que no volvieras a hablar otra vez asi de la Seccion de Combate.