Partida Rol por web

Lissa atendía en silencio escuchando a quien seria su tutor, le gustaba como hablaba y razonaba, sin duda era bueno en su trabajo y muy diestro con las palabras, de hecho se río un poco pues cuando hablo de la simbologia ella sabia algo sobre el tema, ya que se documento antes de tatuarse nada en el cuerpo.

Le gustaba lo que oía, aunque muchos quizás le aburriesen, quizás sin duda el iba a ser el mejor tutor que ha podido tener.

La conferencia era de un tema dificil pero el la explicaba de manera magistral, asumió un principio historico de la sociología, la filosofía y el saber catalogado como diferente y pecado de la iglesia católica y otras protestantes.

En la conferencia el afirmaba que mucho del conocimiento se daba por un misticismo antes de cristo, que  posteriormente en la edad media fue perseguido por la iglesia.

Por otra parte la orden de los templarios, después de cristo, establecieron y estudiaron muchos secretos asociados a las formas, a la simbología y al valor de la proyección de lo sagrado con la geometría.

El surgimiento de la masonería, los iluminati, rosacruz y ordenes que guardaban  creencias fundamentales y misticas,  entrando al hecho de que muchos conocimientos se implementaron en la arquitectura.

Y es ahí cuando comenzó hablar de la geometría sagrada.

La Geometría sagrada es un conjunto de medidas exactas que establece además de una armonía entre las curvas, una coherencia entre las medidas. Sé que muchos de los presentes no son arquitectos, pero la construcción basado en la geometría sagrada es  un arte rígido y de mucho simbolismo.

Las iglesias usaban geometría sagrada para su construcción. Las medidas del alto de las  vigas, el diametro de la cúpula central, la distribución y los ángulos obedecen a parámetros rígidos que cumplen la función de mantener el poder asociado a los números.

Seguramente muchos de los presentes pensarán que la númerología es asunto de superfuos que leen el tarot, pero hay que establecer que desde el inicio de la geometría se ha estudiado la coherencia entre el número, el simbolo y el poder.

Hoy en día se venden unas figuras que algunos usan para colorear que son llamados mandalas, y estos como la distribución de las grandes catedrales estan basados en geometría sagrada...

Para dar un ejemplo gráfico....

Continuo hablando por dos horas de este tema, y luego  se despidio dando por terminada la conferencia. El tema del que hablaba era totalmente nuevo para ti, y era realmente interesante porque no solo hablaba de la relación de la geometría sagrada con la arquitectura sino tambien con la música y con el orden de los planetas.

Definitivamente creo que es una de las mejores conferencias que he escuchado..- dice ella emocionada- no me arrepiento haber asistido.

Jordana no sabía que él era tu director de practicas pero comenzó hablar emocionada de lo mucho que le había gustado mientras tú te dabas cuenta que él era rodeado por algunos otros estudiantes que hablaban con él brevemente.

No daba crédito, estaba entusiasmada con la conferencia, creía que seria un autentico muermazo, pero a pesar de todo el hombre sabia de lo que hablaba y no podía creer que alguien como él no estuviese solicitado por los alumnos de su misma clase. 

El porte, el habla y el conocimiento que posee, era perfecto. Entonces dirigió su mirada hacia Jordana y volvió de las nubes.

- Ni yo tampoco de haber venido, de todas formas... - Se incorporó de la silla y estiró sus brazos. - Debería hablar con él, es mi tutor de prácticas, ya te contaré, jejeje. - Dio un beso en la mejilla a Jordana y como pudo paso entre los alumnos que podrían haber en la fila de silla donde estaban ellas.

- Perdón, paso, con permiso... - Recia mientras intentaba abrirse paso por aquella fila hasta llegar al pasillo, para finalmente subir al escenario.

"Bien relájate, tranquila, se natural, va a ser tu tutor y hay que empezar con buen pie... " Tomo aire a la par que subía las escaleras e intentaba hacerse paso entre los alumnos que rodeaban al profesor. 

- Disculpe, profesor... Profesor Mijaíl. - Alzó la mano llamando la atención del profesor agitándolo entre los alumnos, quizás captara su atención.

Digame- dice el  de manera seca mientras recoge unos papeles. Al parecer de que la conferencia había sido extensa no parecía cansado.

Miro al profesor con una sonrisilla y se dirigió a el con un tono formal. 

- Disculpe que le moleste, pero he decirle que me ha gustado mucho su conferencia y que bueno, soy de la clase de Arquitectura, este año me tocó elegir un profesor práctico y le he elegido a usted, es para que estuviese informado y bueno... - Se rasco una mejilla sonriente. - Me gustaría presentarme de manera formal, me llamo Lissa Monrou, es un placer conocerle profesor Mijaíl.- Sonrío al arquitecto tras finalizar, esperando que las presentaciones hayan ido viento en popa.

El hombre alza una ceja y se te queda mirando por un segundo, y te da la mano. Llameme  Walter por favor, así que usted es Lissa Monrou  la estudiante que me asignaron, iba a llamarle mañana, pero es agradable saber que me encontró antes.

Sonrie. Igual dudo que me haya escogido, el decano dijo que me iba asignar a los resagados, ¿es usted resagada?

Parece preguntar divertido.

Río suavemente mientras se rascaba la nuca, una pillada en toda regla. - Una rezagada, si señor. No tuve tiempo para elegir a mi tutor de prácticas. - Río suavemente.

- Decidí asistir a su conferencia y he de decir, que no es peloteo pero, ha sido genial. Me ha gustado los conceptos que ha expuesto y de la manera en que lo ha hecho. - Sonrío suavemente.

- Espero ser una buena alumna. - Finalizó con otra sonrisa típica de Lissa mirando al tutor.

Sonrie mientras te da una tarjeta. La espero pasado mañana Jueves en esta dirección a las 7:30 p.m, no llegue antes o despues, sino puntual, traiga consigo  algunos de los planos que usted haya diseñado, no le pido ninguna novedad, solo lo que usted ya ha hecho, supongo que eso no le resultará trabajoso...

Dice mientras arregla todo en su maleta y  se va.

Básicamente te quedas con la tarjeta en la mano y  caminas hacia Jordana quien esta un poco molesta porqué no le habías dicho que él es tu director de practicas.  Sea como sea  de camino a la fraternidad sólo hablaron de eso, y a pesar de que el edificio era un caos, agradecieron que las mocosas no vivieran ahí.

En soledad esa noche (pues el seminario terminó tarde) te preguntabas un poco sobre el simbolismo del que hablaba ese hombre.

Lissa se tumbó en la cama con la luz encendida aún observando la tarjeta que le extendió el profesor. Pensativa comenzó a recordar lo que le enseñarón cuando era pequeña sobre Dios, que hacia milagros, que revivió cuando nadie se lo esperaba que era un mesias y todo aquello.

La verdad es que solo le importaba de todo aquello actualmente lo que el ser humano hizo por él, crearón monumentos y edificios en su honor, se reza por el, se entierra rezando por él.

Lissa no pudo evitar suspirar y mirar hacia la ventana, quizás significara algo más profundo, como comentaba el profesor en la conferencia, sin duda era enigmatico...

- Esto es de locos. - Dijo mientras se levantaba de la cama dejando la tarjeta en la mesa que la tenia prácticamente al lado.

La joven comenzó a re-buscar en su carpeta de trabajos, estructuras, habitaciones, edificios... Quizás algo impresionara al profesor, pero, ¿a quién pretendia engañar? Quizás no entendiera el arte como lo entiende ella, tenia sus explicaciones lógicas y sus razonamientos para hacer esas estructuras modernas y vanguardistas, le encantaba el arte gótico con su punto moderno-actual, quizás algo de barroco también.

No paraba de darle vueltas y asi es como Lissa se paso la mayor parte del tiempo buscando algo que impresionaria al profesor.

Básicamente te preparaste para esa cita. Los dias siguientes te la pasaste en eso y planeando la venganza para la fraternidad masculina con tus compañeras, era a veces agradable ver la simplicidad de la vida frente a lo complicado de los estudios. Sin embargo te pasaba algo muy raro, desde que tuviste esa conferencia no dejabas de ver simbolos extraños en tus sueños, igual era ridículo porque para ti no significaban nada, posiblemente de tanto pensar en como impresionar al profesor  tu mente se programó y se puso ansiosa.

Fue entonces que llegó ese Jueves por la noche,  supones que da esas citas a esa hora dado que trabajará durante el día, sea como sea te queda bien porque las clases siempre estan ahí presentes.

El edificio donde estaba la oficina del docente estaba en un edificio viejo. Un vigilante con uniforme estaba en la puerta y tras asegurarse que si tenias cita con él te deja pasar.

Golpeas la puerta de la oficina y esta se abre. Debía estar la puerta ajustada porque el  profesor estaba sentado con varios documentos en su escritorio y no pudo abrirla. La oficina  es muy grande, y huele a libros viejos.

Lissa no comprendia que pasaba durante aquellos días, intentaba estar centrada en clase y en casa estar ayudando a sus amigas, pero habia algo que distraia en sus propios pensamientos, ¿por que aquello la distraia tanto? ¿qué querian decir aquellos simbolos? ¿no era mero ejemplo de simbologia...?

Apenas podia dormir, cada vez que cerraba los ojos veia aquellos simbolos pintados en la pared de su habitación de Phoenix, estaba desconcertada y a cada día que pasaba estaba más nerviosa, ¿deberia ir a un psicologo? Porque ya no sabia ni que demonios la pasaba, ni una tila la ayudaba a tranquilizarse ya.

Y llego el día de la reunión con el profesor, a las demás les pareció extraño que citara tan tarde a Lissa, aunque a ella no le extrañaba, sus clases terminaban rozando las cinco de la tarde. Se maquillo y arreglo el cabello para asistir a dicha reunion, tras haber paseado largo rato dio con el edificio, pero un gorila se le puso en medio, busco la tarjeta que le dio el profesor y le comentó que le pidio reunirse con él.

El gorila la dejo pasar devolviendole la tarjeta, Lissa cada vez estaba más extrañada, ¿para que queria un guardaespaldas? ¿De verdad que era tan famoso? Todo era muy extraño.

Lissa golpeo suavemente la puerta y esta se abrio por los meros golpes, miro la puerta mientras pasaba al interior y la cerró tras ella.

- ¿Profesor? - Preguntaba en bajo mientras cerraba la puerta y comenzó a acercarse. Lissa inspiró hondo y sonrío con suavidad el olor de los libros siempre le ha gustado, olia como una biblioteca.

Se posiciono delante de la mesa sosteniendo su bolso con su mano derecha observando la sala y los documentos que tenia en la mesa sin ser demasiado entrometida o cotilla.

Saco sus trabajos en silencio de su bolso, eligio sus favoritos y los que tan poco valoraba el profesor de la Universidad, mientras esperaba a que el profesor dijese algo.

El hombre levanta la mirada y sonrie mirando el reloj que habia en una esquina. Puntual, perfecto. Parecia verse muy complacido de que hayas llegado a la hora adecuada.

Se levanta y te enseña una silla invitandote a seguir pero sin hacer mayor gesto.

Sus movimientos eran rápidos y delicados, y parecía estar bastante centrado en lo que estaba haciendo.

Cuenteme señorita Monrou, ¿porqué estudió Arquitectura y cual es su interés profesional?, disculpe que entre en materia tan rápido pero el tiempo es oro, y deseo conocerla si es que vamos a trabajar juntos...¿tiene algún sueño?, ¿qué desea lograr?

Lissa miró al profesor con cierta atención, era un alivio que sonriera la verdad, eso queria decir que por fin habia hecho algo bien. Tomó asiento nada más se lo indico sosteniendo su carpeta entre sus manos y le contesto. -Podria decirse que siempre me ha gustado la arquitectura, los detalles de los edificios, el esmero y el trabajo que le ha podido costar y el hermoso resultado. Siempre he querido estudiarlo. Ya mi interés profesional es poder diseñar mis propios edificios, aunque quizás para esta epoca los pidan algo más modernos en cuanto a decoración se trata. - Hizo una breve pausa observando el lugar. -Tanto como mi interés profesional y mi sueño van de la mano, lograr ser una arquitecta de renombre, pero me temo que es lo que queremos obtener casi todos los alumnos. - Río suavemente mientras se rascaba una mejilla, Lissa siempre ha considerado aquel pensamiento como algo "ideal" para quien estudiase arquitectura, aunque ser cantante era también una de sus metas, pero eso no debia decirse delante de él. ¿Qué podría pensar de ello? ¿Qué solo estudia arquitectura por placer?? Mejor no decirlo...

De reojo mientras hablas  ves un libro con uno de los simbolos con el que has estado soñando.

Ignorante de lo que te llamó la atención el hombre comienza a hablar casi de manera automatica. Me gusta que mis estudiantes sean ambiciosos, querer algo más nos hace competitivos y mejores, pero no sólo querer algo nos hace mejores sino saber "primero" ser diferentes y "segundo" saber  más que los demás, porqué el conocimiento en este mundo es poder, ¿entiende eso?

Dice pidiendole los trabajos que ha hecho últimamente con una mano los cuales entregas de manera automatica.

Todos hacemos parte de este mundo,  pero busco que usted destaque. Estuve investigando y me di cuenta que usted es una de las estudiantes con mayor promedio de su semestre, pero el profesor Smith la señaló usted como mediocre, es curioso, ¿no le parece?

Lissa se quedo observando el libro de reojo. "Espera eso me suena...", pensó mientras hablaba el profesor que le prestó atención de manera instantanea, le seguia con la mirada como si la tuviese en cierta manera cautivada.

Asintia a lo que decia, tenia sentido, siempre hay que aspirar a más, pero ahora mismo la muchacha no daba para mucho.

- Entiendo lo que quiere decir, pero nunca me lo habia planteado tal como me lo refleja. Y la verdad es que más conocimientos sobre otras cosas podria ayudarme a ser mejor, se nota que usted lleva años en esto. -

Sonrio suavemente, que simple parecia en comparación con él. Se notaba sabiduria en sus palabras y al escuchar sobre su profesor y sobre sus notas arqueó ambas cejas.

- Quizás tratará de motivarme... - Se llevo una mano a un brazo mientras comentaba pensativa. - Pero, ¿en serio soy una de las mejores? Cualquiera lo diria. - Sonrío de nuevo, algo incredula.

Sonrie  él un instante.  Bueno si usted no lo cree..

En ese momento le suena el teléfono y lo mira de reojo, y notas sin mucho esfuerzo que la persona que lo llama comienza con R, pero logicamente el toma el telefono rápido.

Me disculpa un momento.

Dice dejandote sola un momento.

Estoy esperando a unas personas, por si golpean pidales por favor que me esperen.

Lissa asintió a lo que decía al profesor, se fijó extrañamente en la letra del móvil. "Una R... ¿Algun profesor? ..."  Al irse el profesor sintió en cierta manera como aquella sensación la iba abandonando poco a poco, no se encontraba agobiada en ningún sentido...

Lissa se levantó de la silla y se levantó para ir directamente al libro que le llamó la atención, queriendo intentar saber que es aquello que no le dejaba dormir. No andaba muy atenta a si llamaban o no, tomó el libro como pudo si nada se lo impedía y comenzaría a ojearlo.

El libro tenía este titulo:

La protección de los lugares sagrados, la lucha contra el mal y los caminos de desconsuelo.

Corresponde al escudo cósmico que nos cuida de las fuerzas externas adversas y también de todo lo malo que hay en nosotros mismos y que nos sabotea nuestro caminar.

Solo los ojos entrenados encontraran la información, la división entre lo sagrado y lo prohibido.

Lo miras bien, el resto del libro tienen varias páginas, todas en blanco.