Partida Rol por web

El sol sangra el cielo de Cormyr. La tenue luz comienza a tomar intensidad y poco a poco el cielo va tomando el característico color azul. Después de vuestros pericias al final termináis en Dhédluk, otra vez. Esta comunidad del Bosque del Rey, hogar de granjeros y tallistas de madera, sirve de punto de partida para nuevas aventuras y trabajos.  Siempre acabáis en la villa de Dhédluk.

La Posada del Perro Loco normalmente está repleto, especialmente al atardecer. La algarabía de los gritos de los parroquianos suele oirse a kilómetros de distancia. Esta posada es un punto de reunión de aventureros, jugadores empedernidos y sinvergüenzas, un sitio ideal para buscar algún trabajo. Sin embargo a estas horas del día no hay mucha actividad en la taberna de la posada, los borrachos todavía duermen.

Despues de una larga jornada en la que no habia conseguido nada interesante se dirige a la aldea una vez alli se va directo a la posada- Otra jornada masme tomaré algo antes de irme a la cama.- Dice mientras entra en la posada, habia poca gente pues normalñmente este local siempre está repleto. echa un vistazo a la poca gente que se halla en él está el tabernero una camarero un par de personas en una mesa y dos enanos uno en cada lado de la barra parecen como yo extranjeros pero es muy tarde para tener algun altercado con ellos, asique se va hacia una mesa- Tabernero traigame algo de beber y comer que estoy seco.

Después de tu estancia en Ínmermar, concretamente La Posada de los 7 Peces Frescos, tu contacto, Hamark (comerciante con ciertas influencias y oidos en todas partes), te ha contado que quizás encuentres la respuesta a tu enigma en la Posada del Perro Loco en Dhédluk:  Quizás encuentres a alguien que te de una pista sobre los asesinos de tu pueblo. Espero a gente importante cuyo destino es la posada que te he mencionado.

Con este pensamiento en la cabeza tomas asiento junto a una mesa vacía.

Llego a la posada caminando pesadamente llevo horas andando por el bosque y necesito una buena cerveza.. entro y al ver el interior semivacio siento alivio prefiero descansar un poco antes de empezar a emboracharme y cantar con los habituales parroquianos me coloco en una silla cercana a la hoguera, tengo los pies detrozados y ademas estoy casi seguro de que ese niño con el que tropece me robo algo refunfuñando rebusco y veo que aun conservo mi bolsa, quiza estubo de mas darle una patada.. Cuando veo a la camarera acercarse pido una cerveza grande y me recuesto en la silla perezoso

Cuando entras ves que la taberna está casi desierta. Con la excepción del tabernero una camarera, un par de aldeanos en una mesa y dos enanos uno en cada lado de la barra. No bstante te llama la atención de un guerrero que se haya sólo en una mesa junto a una ventana bien separada de la otra mesa, la ocupada por dos aldeanos. Este personaje de apariencia robusta porta una gran espada larga envainada en una funda de cuero curtido con algunos motivos grabados.

La camarera te sirve una jarra de cerveza y se dispone alejarse cuando la puerta se abre de golpe y un enano de aspecto fiero entra con pasos pesados. Tras echar un vistazo a los presentes agarra una silla de una mesa cercana a la puerta y se coloca junto a la chimenea no sin vociferar a la camarera que se acerca a la barra:

- ¡Camarera, una jarra gigante de cerveza que este enano tiene sed y poca paciencia!- Dicho esto deja su martillo de guerra apoyado junto a la pared y se recuesta en la silla.

Lezort se queda mirando al recien enano con el martillo gigante y preguntándose quien de los que estaban en la sala si es que estaba podria ser la persona que le habian mencionado que sabria quienes habian sido los asesinos de mi familia.

Tras mirar a todos se levanta y con un caminar tranquilo pero seguro se acerca al ultimo enano que ha entrado.

Buenas noches viejo enano ¿podria un simple humano a invitarle a un a cerveza?

Mientras la camarera se apresura a acercarte la cerveza, ves por el rabillo del ojo como el individuo de la mesa que porta una espada larga se levanta. Se ajusta la espada envainada a la espalda, toma su cerveza y su silla y avanza con paso tranquilo hacia la chimenea . Este se acerca y te dirige la palabra:

- Buenas noches viejo enano ¿podria un simple humano a invitarle a un a cerveza? - te dice con voz amable.

Lo miro con detenimiento, intentando descifrarle.

-Mi buen caballero solo un necio rechazaria una cerveza y mas si esta es gratis, pero aun asi estas tierras inhospitas me han enseñado a ser cauteloso asi que porque no te sientes y me cuentas tu historia mientras bebemos.

El enano se queda mirando como te acercas a él y te habla con voz ronca y segura:

-Mi buen caballero solo un necio rechazaria una cerveza y mas si esta es gratis, pero aun asi estas tierras inhospitas me han enseñado a ser cauteloso asi que porque no te sientes y me cuentas tu historia mientras bebemos.

En ese momento la puerta se abre y un individuo de corta estatura, vestido con ropas de campesino. Luce una estúpida sonrisa y anda con pasos cortos pero rápidos. Mira con los ojos entrecerrados al interior de la taberna, y al localizar al guerrero y el enano se acerca tambaleandose.

- Vamos, ya te he dicho Luician que no molestes a los clientes - dice el tabernero mientras seca con un paño un vaso - la mayoría de las historias te las inventas.

Sin caso omiso el llamado Luician se acerca a vuestra mesa y os habla con voz ebria soltando un tufo a vino y cerveza:

- Buenos días valientes aventureros - dice - Si me invitais a una copa, puedo contaros una historia que quizás os interese - y agarrando una silla añade: - ¿puedo amables aventureros?.

Puede sentarse buen señor pero tenga cuidado no vaya a caerse su equlibrio no anda muy fino- Tabernero traigale algo a este señor porfavor- Dice en voz alta para saber con certeza que el tabernero le ha escuchado- Bueno, amigo que es esa historia que nos tiene que contar, somos todos oidos- Mientras espera que conteste se toma un buen trago de cerveza

- Llevo unos días de reposo en la posada. Un descanso merecido sin duda. Pero el dinero se está acabando ya y es hora de ponerse en marcha. La última salida fue provechosa económicamente hablando, no así en lo personal ya que varios de mis compañeros no salieron de esa cueva nunca. Sólo sobrevivimos tres. Uno de ellos no soportó la presión y acabó con su vida ahorcándose desnudo y con la bolsa del dinero colgando de su cintura. El otro se volvió loco y se dice que se fue al desierto a hablar con unos seres que sólo él conocía y podía ver. Y el último de ellos, un servidor, aquí en esta posada está reposando. – hago una pausa ya que otro enano le pide una cerveza a la camarera con la que estaba hablando. Eso me recuerda que tengo mi jarra vacía y le pido otra a la camarera. Una vez que me la sirve prosigo con mi historia:
- Como te decía, ya no me queda apenas presupuesto así que esperaré un par de días como mucho a ver si llega algún negocio y si no me iré en busca de ellos directamente.

Has observado como han entrado dos individuos. El primero se ha sentado, porta una espada larga y luego ha entrado el enano del martillo que se ha sentado junto a la chimenea. Acto seguido el primer individuo se ha acercado al enano  cuando ha entrado Luician. Ese borracho vendería a su madre por una copa. El conoce muchas historias de los alrededores. Muchos cuentan que la mayoría son inventos y desvaríos de un borracho. Aunque algunas son ciertas. Escucha su voz pastosa:

- - Buenos días valientes aventureros - dice - Si me invitais a una copa, puedo contaros una historia que quizás os interese - y agarrando una silla añade: - ¿puedo amables aventureros?.

- ¿Sabéis que el Consejo de Mágicos Reales van a traer personas importantes a la posada? - comenta con una sonrisa malévola.

Se disponía a hablar de nuevo cuando Juiciar lo increpa acercándose a la mesa.

- ¡Deja a los clientes en paz! - le coloca una jarra en la mesa - siempre estás contando historias absurdas.

Tabernero no pasa nada, haya de donde vengo cualquier historia puede ser cierta e visto muchas cosas muy raras.- Le dice al tabernero en modo que se tranquilice.

Muy bien, Luician ¿cual es esa historia que nos tienes que contar? Estamos impacientes por saberlo

Luician habla con voz alta, pero con voz algo gangosa, por lo que puedes oir con algo de dificultad la conversación. has oido:

Consejo de Mágicos Reales. Tus ojos se han abiertos de par en par. Si el Consejo de Mágicos Reales desvía sus intrigas políticas hacia aquella villa, algo importante pues se está cociendo. La curiosidad te carcome.