Partida Rol por web

Empiezo a apurar el paso, azuzando a Nimue no tanto para animarla a que venga conmigo, que se ve que ya lo hace motu proprio, sino para insistir en la coartada de mi normalidad como viajero con una mascota.
 

Todavía quedaban por saber los detalles, pero se habían confirmado sus sospechas y las de Noah. Eso debería facilitarnos la misión cuando entremos... si llegamos a entrar. Tras esperar unos instantes, cada vez más inquieto, Alaric sintió un profundo alivio en el pecho al ver volver a los dos sanos y salvos. Se giró hacia sus compañeros y susurró:

-¿Lo capturamos?

Dieter y Nimue llegan a donde se encontraba Ulrich esperándoles, los dos campesinos que les seguían intentan ocultarse sin mucho éxito tras unos arbustos y esperan observando.

Mientras decidís un curso de acción Dieter y Nimue llegan a donde se encuentra Ulrich, observáis que el campesino que les seguía trata de ocultarse tras unos arbustos y, tras unos minutos otro campesino sale de detrás de una loma y se acerca al primero.

— Supongo que sois conscientes de que os han seguido — afirmo directamente al verlos llegar —. ¿Qué tenéis? ¿Queréis que me encargue de esos dos?

Mi mirada es decidida bajo la capucha, como si no me importase lo más mínimo tener que acabar con dos pobres aldeanos si eso beneficia a la Alianza.

Reprimo la tentación de mirar hacia atrás, y asiento gravemente a la pregunta de Ulrich.

—Sí —comienzo, en un susurro—, lo he visto. Son... extraños. Hablan como imitándome, y han insistido mucho en que vayamos hacia la casa del alcalde. Y es cuando nos hemos vuelto. Se han despedido como si les diera igual, pero entonces se han vuelto y han venido tras nosotros.

-Esto no me gusta. Dudo mucho que Dieter y tu... Nimue, no sepan que les siguen- dijo Noah mientras se arrodillaba en el suelo con cierta delicadeza. -Mantegamonos ocultos y preparados para actuar rapido. No sera prudente atacar si no somos atacados por lo que preferiría pensasemos en acciones que nos permitan defendernos u ocultarnos-.

-Voy a intentar discernir que ha descubierto Dieter, que alguno de ustedes vigile a esos dos e intente descubrir mas- tras sus palabras, el germano de sangre judia se preparó para lanzar un hechizo formulaico de forma obvia para todos al realizar un pseudo ritual en el que empleaba ciertos materiales especiales para lanzar su magia, en este caso, una fina pluma.

Noah se detuvo a escuchar con atención mientras veía a lo lejos lo que sucedía. -Han invitado a Dieter a ver al alcalde de su pueblo, al parecer fue en ese momento cuando ambos decidieron regresar, pero los campesinos les han venido siguiendo. Ulrich ha hablado de encargarse de ellos, no estoy seguro de a que se refiera.

Arianne, preparate para atacar, pero no lo hagas salvo que sea estrictamente necesario, no debemos causar un mal entendido. Debemos acercarnos mas, yo me mantendré escuchando todo mientras pueda-. Les informó mientras intentava avanzar lentamente en la maleza.

Al escuchar las palabras "Arianne" y "atacar" mi cara comenzó a palidecerse. Miré a ambos lados de la cabeza de Noah como pensando que hacer o decir. No quería hacer daño a nadie a no ser que fuera totalmente necesario para salvar a mis compañeros, y esta no parecía una situación de vida o muerte, al menos de momento.

- A.. ata.. atacar... ¿Yo? Pero si no han hecho nada, quizá, quizá podamos hablar aún con el alcalde- dije completamente nerviosa por aquella situación que cada vez me gustaba menos.

Diciéndolo como para mi misma dije: "Quizá... Solo por si a caso".

- Alaric, ¿Podría encender una pequeña llama para mí?, le estaría muy agradecida.

Supongo que no necesito hacerles daño, quizá solo lanzándoles una llama a los pies pueda ahuyentarlos... Pensé intentando autoconvencerme de que podía evitar un combate en el cual alguien pudiera salir herido.

Veo cómo se acercan esos individuos y decido que lo mejor es avisar al resto del grupo de ello, de modo que miro a Alaric en la lejanía y, sin mover las manos y tan solo diciendo en voz ténue las palabras adecuadas, invoco a la magia para que le lleve mi voz.

Dieter y Nimue han vuelto y les han seguido — pronuncio en la mente del magus.

Veo cómo se acercan esos individuos y decido que lo mejor es avisar al resto del grupo de ello, de modo que miro a Alaric en la lejanía y, sin mover las manos y tan solo diciendo en voz ténue las palabras adecuadas, invoco a la magia para que le lleve mi voz.

Escuchas unos murmuros en tu cabeza...

El tiempo pasa y los dos campesinos no dan señales de regresar a su poblado, "escondidos" entre matorrales observan a vuestro grupo. Notáis que de vez en cuando realizan un gesto parecido a darse la mano durante unos minutos y posteriormente proceden a resumir la observación.

El tiempo pasa y los dos campesinos no dan señales de regresar a su poblado, "escondidos" entre matorrales observan a vuestro otro grupo. Notáis que de vez en cuando realizan un gesto parecido a darse la mano durante unos minutos y posteriormente proceden a resumir la observación. De repente uno de ellos comienza a mirar fijamente en vuestra dirección e inmediatamente realiza ese gesto.

Después de realizar los gestos me vuelvo hacia Dieter. Soy consciente de que la loba me entiende, pero naturalmente me siento más cómodo hablando con un humano.

— Ya he avisado a Alaric. Deberían regresar en breve.