Partida Rol por web

Sarreck devuelve la mirada de asco que le acaba de lanzar Terl -Ha sido un placer ayudarte -contesta con verdadera ironía.

Al ver que Terl sale del lugar, la psyclo se dirije hacia la puerta y se dispone a salir. Se nota que tiene ganas de salir del lugar...

Terl llega hasta la puerta de la habitación de Fregt.

Sarreck sale de la cantina.

¿Jugáis o no? - Se impacienta Fregt.

Mis cartas son 6,7,13,4,10

Mirando mis cartas, levanto una mano voy voy, no te impacientes

Kerr coge sus cartas y las mira. Con un gesto sibilino le indica a Schyferr que tiene una pareja de treses. Nadie se ha dado cuenta (o eso cree). Pide 2 cartas más, que le son totalmente inútiles.
Espera que Schyferr tenga algo parecido en la mano.

Sonrio ante el gesto de Kerr
Menos mal que la suerte le sonríe, a ver si saca una buena tajada

Fregt habla. 1º. Quiero una carta, dice mientras se la reparte.

Bueno Voy a grande y apuesto 10Cr.

Grug y Zargar, dice que vean y tiran las cartas... Saben que perderán pero como hay que ir al menos a una apuesta, ponen sus 10 Cr.

Ves que Terl se queda de pie frente a la puerta de Fregt.

Tras la puerta escuchas voces típicas de una timba muy apasionada.

Jajaja, ¡qué pronto se les va a acabar el juego a esos! Piensa Sarreck mientras se le dibuja una leve sonrisa en la boca al ver a Terl frente a la puerta de Fregt. Esto puede ser mejor que la timba de Keka...

Sarreck se acerca despacio y con disimulo para enterarse de lo que está pasando.

Con una amplia sonrisa, lanzo los 10 Cr
Veo la grande

Kerr lanza los 10 cr y sonríe. Esta partida le está quitando de encima toda la tensión acumulada. Sonríe.

A pequeña, no voy... Dice Fregt.

Terl se dispone a entrar en la habitación, para ver una vez más como esos bastardos juegan al Keka con más bebida en el cuerpo de la que pueden soportar. El jefe de seguridad parece dudar antes de entrar.

Repentinamente, Terl se aleja del lugar y se dirige hacia su despacho. Seguramente Kerr y Schiferr estén en un estado en el que no sean capaces siquiera de articular dos palabras seguidas. Con todos ocupados y la situación controlada no parece un mal momento para revisar los abundantes informes que tiene en el despacho. Además está el asunto de esa caja negra. Su contenido realmente le intriga.

Tras dudar unos instantes, Terl se aleja de la puerta sin nisiquiera entrar...

Sarreck maldice por lo bajo al ver que Terl se aleja del lugar sin haber hecho nada antes. Esperaba haber podido ver las caras de los otros al ver al jefe en la puerta o al menos, algo interesante. ¡Maldito sucio! Mucho hablar y poco hacer...

Sin pensarselo dos veces reanuda su marcha y se dirige a una de las timbas de Keka. Por allí habría más espectáculo.

La puerta de la habitación de Fregt se abre y Sarreck entra en la habitación.