Partida Rol por web

- Brogar keis malaks dseos...ungh... Ortdo pulbara klala.

Tras un momento de silencio:

- Mushi djde engair kokorie. Vasha padura muti Kabala. Capichi tuti frutti.

¡EWREHTWI WBHWEHI IWEHTGIEHTH!

Dice Kerr mientras golpea con fuerza la jaula. El vehículo sobrevuela esas repugnantes masas verdosas que crecen por toda esta bola de barro.
Kerr golpea de nuevo la jaula y luego pasa un dedo por sus labios, indicando a los prisioneros que permanezcan con la boca cerrada.

¡CALLAOS DE UNA VEZ!

Dice Kerr mientras golpea con fuerza la jaula. El vehículo sobrevuela esas repugnantes masas verdosas que crecen por toda esta bola de barro.
Kerr golpea de nuevo la jaula y luego pasa un dedo por sus labios, indicando a los prisioneros que permanezcan con la boca cerrada.

Al ver una figura que se intenta escabullir, me dirijo hacia allá, volviéndome un segundo a la jaula tras oir el estruendo
¡¡Haz callar a esas bestias!! voy a ver una cosa
Sacando la porra me dirijo en busca del pequeño ratoncillo

Al ver una figura que se intenta escabullir, me dirijo hacia allá, volviéndome un segundo a la jaula tras oir el estruendo
¡¡Hug haddke e thake wuage!! tonko ke one peig
Sacando la porra me dirijo en busca del pequeño ratoncillo

Schyferr se dirige hacia tu posición. Parece que te ha visto.

Terl observa como Kerr y Schyferr vienen hacia él, con varias de esas criaturas enjauladas. Al observarlo, el jefe de seguridad se dirige a ellos. ¿Que demonios está pasando aquí? ¿de donde habeis sacado todas esas repugnantes criaturas?

El monstruo se acerca a los dos de su misma especie que acaban de llegar. Su gutural voz resuena en la cabeza de todos los humnos. GHUG TAR IN REA TE KAGLAR. SIRGU LEA SE AKAR.

Sin perder de vista a la criatura
Nos avisaron solicitando un control de plagas, además de un CD de datos que contenía. Por eso acudimos ¿y tú? ¿de dónde has sacado a estas ratas?

Lo humanos que están en las jaulas observan como el enorme psyco se dirije al que había gritado
uka wana mobi, ptenka putanka wana ¿uwina? ¿awana hou?

Veo como el monstruo se dirije hacia el lugar en el que me encuentro.

¡¡Dios mio!! ¡¡Que Budalah me ayude!! ¡Me han descubierto!

Entonces otra de las horribles criaturas interrumpe al que venía hacia mi y se pone a gritarle. Me doy cuenta de que si tengo una oportunidad de escapar, es ahora.

Echo un rápido vistazo a mi alrededor, y trato de buscar de nuevo la cobertura de la máquina voladora, mucho más segura que estas cajas de cartón. Al menos, mientras no eche a volar, será más sólida.

Las insensatas me observaban mientras reconocía un yacimiento. Las traje para divertirnos un poco, explica Terl. Sin embargo, Schyferr, recuerda que yo no tengo porque darte explicaciones, dice el jefe de seguridad con su habitual tono amenazador.

Las dos enormes criaturas parecen mantener una conversación: KLAG UT HAGAR SE MET IARAKA. TE EGO NE TU KER TAZME.

- No desperteis la ira de los demonios. Aún no sabemos que quieren e nosotros no empeoremos nuestro destino antes de tiempo. Y entonemos una plegaria pidiendo el perdón a nuestro señor y su interecesión, roguemos entender porque hemos sido puestos en esta situación.

El sacerdote no se deja afectar por haber ido a parar a esta jaula con todos estos incrédulos ante la fe, y entona un cántico ritual de forma monótona en voz baja.

- Note muneri loma des turke monique. Antana kantaro monte. Lie nuerta, nieta dofesa.

El sacerdote no se deja afectar por haber ido a parar a esta jaula con todos estos incrédulos ante la fe, y entona un cántico ritual de forma monótona en voz baja.

- Metete por el culo la plegaria, que yo ya intentaré meterles a estos bichos una lanza.- dice en un ataque de frustración Tom.

Sin embargo el cazador está de acuerdo con el clérigo en esta ocasión: no hay posibilidad de huida mientras los monstruos estén aquí, así que será mejor contenerse y esperar una oportunidad mejor.

- Akunga mikono pepe, tapir cocoloco akimanejamibarka kire.- susurra frustado uno de los individuos de las celdas.