Partida Rol por web

Escucho las palabras del Dios cambiante. ¿Me había dicho títere? Eso era un insulto y me indignaba escuchar aquellas palabras. Pero me calle. Aquel era un dios que había insultado a nuestra creación y algún día recibiría su merecido.

Su forma demoníaca me hizo estremecer. Pero no me daba miedo. No iba a vacilar cuando defendía lo que mi señora había creado con tanto esfuerzo. Preferí ignorar a aquel dios.

Voltee la vista para ver a los demás presentes. Me estremecí al ver a la Diosa Knhoss tan cerca. Una belleza inigualable y un aura increíblemente pura. Me quede admirándola durante unos momentos, antes de tomar algunas flores de los arboles que habíamos creado.

Con velocidad, pero sin perder la delicadeza arme una corona de flores. Una boberia sin duda. Pero para mi era un símbolo que presentar ante aquella mujer. Respire profundo y me acerque a ella haciéndole una reverencia y extendiendo mis manos con la corona. Haciendo tintinear las cadenas de mis manos con el movimiento. Manteniendo la vista baja susurre.

-Mi señora...acepte este ínfimo presente como muestra de mi admiración hacia usted...-

Me temblaba todo el cuerpo ante su presencia. Sin duda era hermosa y llena de poder. De pureza. Era la primera vez que tenia contacto con los demás dioses aparte de mi Madre.

Observe que junto a ella se extendía un tentáculo El Gran dios que se escondía en los océanos Lo observo con ojos brillantes y una sonrisa. Quería darle un presente. Parecía tan frágil y a la vez tan poderoso también Meto la mano dentro de mi túnica, sosteniendo la corona con la mano derecha. Aun conservaba piedras preciosas de las que habían sobrado de los Dracos.

Extendí mi mano izquierda temblorosa en dirección al Dios. Aguardaba que las aceptara como otro presente. Mantengo la vista fija en el, y la leve sonrisa. Antes de mirar de reojo a la Diosa que aun tenia enfrente. Y bajar la vista en señal de respeto.

Mi paseo aún no había terminado. Las maravillas del agua creadas por Pyaray sólo encontraban competencia en las maravillas de la tierra, donde Shenkis y Eria regaban vida por doquier. Pude ver de lejos la gran montaña caminante. Más mi contemplación fue interrumpida por unas graciosas criaturas, nuevas en Albur. Al parecer, la pequeña Diosa Menor había logrado una nueva especie, aportando aún más riqueza al mundo. Dracos. El nombre se formó en mi pensamiento. 

Sentí la presencia de su creadora. Eria, humilde se acercó hasta mí con un presente. Una hermosa corona llena de vida y color, una muestra de la magnificencia que adornaba el mundo.

-Gracias pequeña Eria. Es muy hermosa. Atesoraré este presente y lo imbuiré de vida. Mientras esté conmigo conservará su frescura. Mientras la corona me acompañe, sus flores no se marchitarán.

Besé en la frente a la pequeña y seguí recorriendo el mundo. A cada paso, un nuevo descubrimiento, algo más para apuntar, nuevos saberes para la posteridad.

El corazón de Knhoss se conmovió al ver a su hermano suplicante y afligido. Cada una de sus lágrimas le pesaron y le dolieron. Más ella era la Diosa de la Sabiduría y el Conocimiento; sus acciones no se regían por sus sentimiento, si no, por la razón. 

Con calma, sin mostrar animosidad respondió.

-Yradarkos, hermano, esta vez te has excedido. Debes comprender que la creación no te pertenece únicamente a tí. Todos tomamos parte de ella. Si tanto deseabas esa isla, bastaba con pedirla. Entre los dos, con nuestros poderes unidos, podríamos haber trasladado los Picos del Principio hacia otro lugar. Entre los dos, colaborando, podríamos haber extendido la llanura de las almas para que tu hijo pudiera gobernar en paz el reino de la muerte. Me acusas de destruir tu morada. Más yo no he hecho nada de eso. Todo ha vuelto a estar como era, antes de tu arrebato. Fíjate que ni un grano de arena falta allí.

-Dices que por mi culpa las almas de los que caminan por Albur sufrirán. ¿No te has puesto a pensar qué parte tienes tu en ello? Cada acción acarrea una consecuencia. Has tomado sin pedir permiso hasta ahora. Desde el primer instante de la creación. Más ese tiempo ha acabado. Si actúas como un niño caprichoso, así serás tratado. Te amo, hermano, pero no dejaré que abuses de mi paciencia.

La Diosa se acercó hasta él y lo abrazó. Era su hermano más pequeño, no lo dejaría de lado, aunque tuviera que tomar medidas drásticas para educarlo.

Después de crear unos seres que protegerían las vidas débiles de las zonas del sur... Karak miró al cielo y vio que allí no había nada que protegiera el espacio aéreo y se compadeció de las bestias que allí habitaban y pensó en hacer algo.

Durante muchos años buscó por todo Albur, pero lo único que encontró fue el gran enfrentamiento entre algunos de sus hermanos mayores y que estaban repercutiendo sobre toda la Creación, y así finalmente encontró lo que buscaba...

La criatura solo aparecería cuando haya propósitos egoístas por parte de alguna raza hacia otra, incluso cuando algún Dios Mayor o Menor distorsione la Belleza del mundo. Esta criatura sería una criatura de paz, y defensora de lo correcto, o al menos de lo que Karak pensaba que era correcto

Díole entonces forma de serpiente, pero sin escamas; Una boca muy grande y con monstruosos colmillos, pero que no se nutría nada mas que el aire que respiraba; Era enorme, pero su majestuosidad no era por su tamaño, sino por lo que implicaba: el cambio; y era también peligrosa, pero no porque fuera agresiva, sino que con ella venía la Destrucción y Creación al mismo tiempo...

La presencia del dios se hizo patente en las proximidades como una presion que cambiaba de sentido, su representacion fisica no estaba, pero su mente habia sido atraida por las palabras del dios menor.

-Estas en lo cierto que fui yo quien levanto esas maravillas conocidad como islas gemelas, pero no lo hice con un motivo egoista, sino para compartirla con todos y cada uno de vosotros. Puedes decirle a tu maestro que tanto tu como el sois libres de tocar mis islas con vuestras manos, siempre y cuando repeteis a las Naras que alli habitan.... Eso si, recordad que ese lugar esta tocado por el caos, y a veces las cosas no salen como uno espera... No es una amenaza ni muchisimo menos, claro... Solo es que no quiero que pase nada parecido a lo de nuestros hermanos que pelean por una isla muerta.

El Gran Á descendió hasta el Inmaterium, sorpresivamente. Un instante no estaba allí, al siguiente sí. 

Extendió los dedos y trajo a todos sus Hijos hacia sí; los Grandes, y los Chicos. Incluso Ailnor volvió al plano de los Dioses ante la llamada del Padre; incluso Jeldhor se quedó -aparentemente- quieto para oir sus palabras.

- Hijos, comenzó Á. El tiempo es una cualidad que fluye, pasa... y se va. Como bien sabe Arezos, todo cambia; y ya han moldeado esta tierra en los huesos de Albur. No creen que es hora de comenzar a poblarla de vida, vida que se desarrolle, vida que acompañe a los Kohiri en su admiración por su obra?

Con estas palabras, Á esperó la respuesta de sus Hijos...

Ppp'pl'pl'pLLLeeesssssss'p'ppm'nnn

Vuestras mentes están colapsadas, luchais por la creación tan solo a través de los eventos de vuestros menores sin ser capaces de cambiar el mundo, anhelais forjar vuestras civilizaciones y dejar así vuestra huella más grande.

El mundo seguirá cambiando, pues el mundo estuvo vivo a nuestra llegada, y aún seguirá vivo cuando no estemos

El dios se mostraba del todo amorfo, lejos del líquido elemento parecía una bolsa verde, aplastada por su propio peso, y por un orificio burbujeaban las palabras acompañadas de nauseabundos gases que emanaban como hilos verdes por la cámara de Á.

Voto avanzar :3

Siiii, nuevos hijos para mi, creadlos creadlos, siii mas muertos.

Yradarkos se pronunció el primero, era una decisión que había tomado desde el primer dia que bajó a Albur y creó un hogar para su hijo.

Shenkis se sintió atraída por la llamada de Á, y a muy sopesar suyo, se reunió con el resto de sus hermanos, por suerte, Eria, seguía a su lado cuando fue atraída, observo al resto de sus hermanos, la idea de mas seres inteligentes, no acababa de gustarle demasiado, podrían destruir muchas obras creadas, la inteligencia.... pensó, mirando a Knhoss... era en si una maldición para los seres no divinos, sin una tutela estricta hacia el ser que la posee puede desencadenarse una destrucción involuntaria en el mundo... pero era un paso que tenían que dar, y aunque su voto era nulo, no iba a impedir al resto de dioses que creasen nueva vida inteligente, ella misma había creado una sub raza inteligente, pero había sido bien enseñada para salvaguardar los bosques.

Shenkis se retiro del grupo no sin antes decir- haced hermanos, lo que tengáis que hacer, y yo, actuare en consecuencia- no era una amenaza, ni sonó como tal, pues su voz se mostró tranquila y después de ello, se aparto del resto.

Una golondrina se poso sobre el hombro de Él y le hablo, pues era el dios errante

-poderoso Él, los tiempos avanzan y el mundo también ha de seguir su camino, pero aun los kohiri han de descubrir muchos lugares en Albur, y cuando cambien las eras nuevas razas aparecerán celosas de sus territorios, preferiría que los kohiri tuvieran aun mas tiempo para explorar el mundo-

Entregado su mensaje el ave salio volando pues no podía permanecer mucho tiempo en un solo lugar

Él no dijo palabra alguna antes las palabras del gran Á. Su mirada estaba fija en su orden y en el largo camino que les quedaba por recorrer.

Escucho las palabras de sus hermanos, pero su cabeza seguia atenta a sus hijos y no les debatio.

Incluso cuando Jelghor se poso sobre su hombre apenas se movio. No obstante se requeria su voto para el juicio de las edades y entonces, solo entonces, despues de mas de quinientos años levanto la vista a algo que no fuera su labor

- Hermanos, lo que se nos propone es una decision dificil ¿en verdad esta el mundo preparado para se poblado por criaturas libres? Vuestros hijos, al igual que los mios, aun no han encontrado su hogar en Albur ¿No creeis que merece la pena darles tiempo, antes de que otros seres corran a usurpar su lugar?

Knoss escuchó las palabras de su padre y con paciencia meditó acerca de la decisión que debían tomar. Aún se encontraba agotada por el reciente enfrentamiento con su hermano. Necesitaba tiempo para reponerse y poder desarrollar el concepto que ella tenía para el mundo.

Desde su lugar en el éter se pronunció.

-Padre, el tiempo no significa nada para nosotros, que estamos desde un principio, que estaremos eones después. Déjanos unas eras más para disfrutar de la vida en su estado primigenio, del mundo en su forma recién estrenada. Más adelante traeremos a aquellos que con su accionar, terminarán de completar tu obra. 

No somos quien para determinar si es el momento justo para que el mundo siga su rumbo, el destino sigue avanzando y no podremos detenerlo, podremos modificarlo con nuestras acciones pero no evitar que ocurra, por eso debemos dejar que lo que tenga que ocurrir ocurra, y que el tiempo y la vida prosigan su curso natural.

El reloj del Tiempo es inexorable... y sus Hijos ya veían los proyectos que desarrollar...

Estooo... pues es que veras... asi entre nosotros y que no se chive nadie (eh! gran Á xD) no tengo intencion de sacrificarlos, pero es que asi le cerraba la vocaza a Pya xD.

Pero si, entre mis planes esta darle fin a los Tal-Kohiri, llegado el momento.

Lo que si que tengo en mente es en crear mas razas, y las que vengan despues seran las dominantes (si llego antes que nadie, seran los humanos)

Creo que ya lo habia dicho, que no tenia intencion de moldear el mundo, con 13 dioses haciendolo me parecia innecesario. Claro que solo se han limitado a hacer maravillas (algunas horrorosas xD) y en lugar de darle color, lo que esta es haciendose inhabitable xD. Él, como dios, no va a moldear la tierra por que si, no por fastidiar, si no por que no esta en su naturaleza.

Asi, pues, antes de hacer el turno, una duda. Willem, ¿cambiar el terreno tiene que ser en un area contigua? quiero decir una casilla junto a la otra ¿o puede ser levantadas en diversos lugares con un maximo de 9 casillas? lo digo por levantar los 9/18/27... templos a Jeldhor, siendo casillas de una o dos, por todo el mundo (sin invadir espacios) y de distintas clases, lagos, bosques, colinas, desiertos... seran buenos lugares donde levantar las ciudades.

Sobre tu evento... lo que quieras, es tuyo xD.

Sobre el nuevo turno, pues si... basicamente, es lo que me queda por hacer en esta edad, para crispacion del master xDD. Luego ya es recoger poder para abrir la segunda edad, con la primera raza y plantar pinos, abetos (comandar raza) para que pueblen el mundo de vida. En la segunda edad, mi paso por albur debe de ser minimo. y en la tercera inexistente.

Por cierto, no veo yo a los centauros manejando un barco :P

Cita:

 Deben tocarse las casillas. Y es una regla final, porque ya la tuve que hacer 3 veces esta aclaración... me la apunto para las preguntas frecuentes. 

Eso, eso. Que con todo este trascendentalismo esta faltando lo indispensable.