Partida Rol por web

Digimon & Pokemon ¡Fusión!

Un nuevo día comienza

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08/09/2015, 02:04
0.- Compañero: Trapmon

Trapmon intento por varios minutos romper la seda que cubria a su querida Elhen, pero sus dientes tiernos y suaves solo se pegaban con la seda. Aún sin rendirse la bolita peluda fue a por una piedra pequeña, con ella rasgo la seda con la fuerza que aún le quedaba, parecia que no avanzaba nada, pero gracias a sus compañeros que le ayudaron en minutos su querida Elhen fue libre. Esta lo levanto y lo abrazó con ternura, esos brazos se sentían calidos y protectores, no queria abandonarlos jamás.

Ante la avalancha de alabanzas al principio se sintió avergonzado, pero luego tomo actitud orgullosa y dijó:

-No fue nada, yo hice todo lo que pude para salvarte. Por algo somos compañeros.-Luegó bajó la vista y musitó avergozado-Pero heri a los otros digimon's, crei haberte lastimado. Vencí a muchas arañas pero tambien los lastime a ellos, soy de lo peor.............

Las palabras de su humana de pronto le dieron risa, no tenia idea de como su querida Elhen podria con otros digimon's con su delicado cuerpo humano. Trapmon estaba para eso, para vencer a los digimon's malos y protejer a su querida Elhen de los seres siniestros que intentaran hacerle daño. Iba a comentarle esto pero de pronto sintió una bajada subita en su energia, eso combinado con el gruñido en su pancita indicaba que el hambre lo atacaba de nuevo. Dando una cabezada silenciosa asintió a las palabras de su querida Elhen, era hora de comer.

Mientras avanzaban, Trapmon murmuró en sus pensamiento-Mil Gracias Arceus, gracias por permitir que mi querida Elhen y los demas humano esten a salvo. Mil gracias-

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08/09/2015, 03:16
- Elen Jhonson James

La escritora forcejeó con todas su fuerzas en aquella horrenda y pegajosa camisa de fuerza, no podia moverse ni gritar, era una pesadilla terrible. Como ese sueño recurrente donde era envuelta en telarañas y llevada a una araña nodriza donde esta le extraia los fluidos de manera lenta y agonizante, todo para terminar como una momia seca con una expresión permanente de terror en su rostro.

Este terror provoco que Elen cayera inconciente, no supo nada y sabia que habia pasado despues. Solo despues cuando sintió que las restricciones de la tela de araña abandonaban su cuerpo es cuando pudo reaccionar y abrir los ojos para encontrarse libre y con su compañera frente a ella. Todo el terror paso a convertirse en ternura y a conmoverse al ver por todo lo que su compañera habia pasado, era pequeña y aún así habia peleado con valor, sufrido y desesperarse mucho, todo por ella. Rapidamente e ignorando su cuerpo adolorido y acalambrado fue hacia ella, la levanto con ternura y la froto contra su mejilla con devoción maternal, mientras lo hacia le decia tierna y de modo maternal:

-Flabmon, muchas gracias. Debiste haber sufrido mucho por mi culpa. Cielos, eres muy valiente para ser tan chiquita. Ah, como te quiero Flabmon.

Luego de elogiar el colosal esfuerzo de su amiga y compañera Elen vió que los demas se reunian a comer la fruta del arbol. parece que las arañas fueron vencidas en una pelea muy dificil, habia grietas y arañas moribundas por doquier, al igual que su guia queria saber como habia pasado la campal. Tambien debia alimentar a su pequeña hada guerrera, queria premiarla por todo lo que habia hecho, pero solo pudo darle lo que una princesa asustada e indefensa podia darle a su salvador: Un beso lleno de afecto y agradecimiento.

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08/09/2015, 12:18
- Fénix Ember

Todo pasó demasiado deprisa como para que pudiera estudiarlo y analizarlo con calma... Si es que quería llegar a eso.

Las arañas las recordaba, y aquel árbol frutal, también. El caos que se sucedió en pocos segundos también lo tenía grabado en la mente. Y, después, por último, la tela blanca, suave, envolviéndola sin compasión.

Recordó que gritaba, y que deseó zafarse de aquello como si hubiera vuelto al río, y volviera a hundirse. Pero era totalmente inútil. Además, aunque le dolía reconocerlo, estaba muy cómoda en aquel capullo. Extremadamente cómoda.

Pensó que podía dormir durante días, semanas enteras, soñando lo que le viniera en gana, sin mayor preocupación que darse la vuelta para seguir durmiendo. Se preguntó si a Fennekin le hubiera gustado algo así también: dormir sin preocupaciones.

Sin embargo, también recordaba que ella no era así, que, en el fondo, le gustaba moverse, caminar, contar historias, y vivir la aventura que estaba viviendo junto al resto de humanos que habían ido a parar a aquel lugar extraño. Sentía que eso pertenecía a un pasado extraño, y dudaba, incluso, que fuera el suyo propio. Fénix adoraba su capullo, y se sentía segura, protegida y descansada. Era lo mejor.

Hasta que vio que era una mentira.

Despertó de desesperado letargo cuando escuchó los gritos agónicos de ayuda. Los sentía cerca, y temía que estuviera ocurriendo una catástrofe. Pero, ¿qué demonios estaba pasando allí fuera?

Arrugó la nariz ante lo pegajoso del tejido que la envolvía, y se sintió mareada, débil y hambrienta.

-¡Fennekin!- gritó con todas sus fuerzas, de manera aguda, aunque pensó que aquella tela podía amortiguar sus gritos.

Miró el pequeño reducto de espacio que tenía, y comenzó a sentir algo de claustrofobia. El pensamiento empeoró cuando se imaginó que la tiraban a un río.

-¡Fennekin!- volvió a gritar con más fuerza aún, temiendo por su vida-. ¡Ayúdame!

Comenzó a arañar aquella seda con las uñas, o lo que quedaba de ellas, pues tenía la mala costumbre de mordérselas, y cayó en la cuenta de que apenas conseguía nada.

-¡Fennekin, te necesito!- gritó una vez más, casi al borde de las lágrimas.

Notas de juego

Móvil, sorry D:

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08/09/2015, 17:27
Z-Out- Iván Kozlov

Ivan estaba aún dentro del capullo, su compañero no había acudido a su rescate hasta el momento, o al menos eso parecía.

Me ahogo!!! fue su grito tratando de calmarse para ahorrar el mayor oxígeno posible.

Y de allí no se escucho más...

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08/09/2015, 17:30
0.- Compañero: Fletchmon

Fletchmon con las pocas energías que le quedaban volo hasta el capullo de su compañero y con su pico empezo a abrir la seda.

No desesperes pronto saldrás...!

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08/09/2015, 22:47
z.Out. Compañero: Larvitar

Larvitar fue directamente hasta donde se encontraba el capullo en el que estaba encerrado su compañero, utilizando tanto su cuerno como las uñas comienza a romper poco a poco la seda:

Iván, ¿Te encuentras bien? 

Casi sin tiempo de que le conteste, rápidamente, se dirige hacia donde se encuentra Treecko:

¿Podrías conseguirme alguno de los frutos? Soy demasiado pesado y es difícil para mi llegar.

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08/09/2015, 22:51
Z-Out- Miguel Suárez

Tras las explicaciones de Treecko, se quedó mirando la fruta que tenía entre sus manos. Sin pensarlo dos veces, comienza a comérsela sin preocupaciones. Le daba igual si era venenosa o no estaba madura, aquel sabor le parecía increíble después de tanto tiempo sin comer.

Cuando acaba con ella, las palabras de Treecko le vuelven a resonar por la cabeza:

¿Algo Negro? No vi nada negro ni ayer ni en el tiempo que los he visto hoy, aunque supongo que tampoco sería en lo que más me fije. Entonces aquellas abejas que también nos atacaron, ¿Llevarían esa cosa negra? - pregunta mirando a Sylveon.

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09/09/2015, 20:43
z.Out. Compañero: Swimon

El pequeño digimon apenas entendía la situación, no era el único aparentemente. Sin embargo lo único que le preocupaba era el bienestar de Bran, por supuesto también del resto. Fue un momento peliagudo y lleno de peligro, afortunadamente todo acabó bien, en parte.

Bran, ¿estás bien? - Contento y aliviado, la bola azulada preguntó a su compañero de dos piernas. Quizás él estuviese bien, al menos no herido pero sí cansado. - No lo entiendo, unos cuantos Spinarak y Ariados os atraparon en su tela de araña, a vosotros y a Sylveon. - Contestó como pudo a su pregunta pese a que había parte que no dijo por el momento, ya que no estaba muy seguro de haberlo entendido de alguna forma.

Desvío su mirada en la misma dirección que las coloridas arañas se marcharon raudamente. - Al ser derrotadas, le salió de su cuerpo una especie de algo redondo y negro que se rompió, y entonces escaparon. No sé que era y por qué estaban dentro de los Spinaraks y Ariados. - Añadió confuso. Si había una respuesta Shphemon desde luego no la sabía.

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09/09/2015, 21:25
Z-Out- Klaus Rhode

El capullo que envolvía el cuerpo del joven rubio, se fue rompiendo ante sus intentos por salir de aquella pegajosa trampa hecha con tela de araña. No recordaba como acabó ahí, ni mucho menos cuando, ahora lo único que le importaba, su máxima prioridad, era salir de eso sin estar en lo cierto de que el resto de humanos hayan corrido su mala suerte.

Una vez desecho aquello, respiró profundamente, varias veces, hasta que finalmente su acelerada respiración volviese a la normalidad debido a la claustrofobia producida por las telas. Se quitó como pudo los restos, y medianamente se incorporó fijándose más en sus compañeros de viajes. Unos viajes la mar de extraños, sin olvidar la demostrada peligrosidad.

¿Qué ha pasado? ¿Estáis todos bien? - Preguntó con un hilo de voz y sin nada de seguridad, se encontraba nervioso, y hasta asustado. No era para menos teniendo en cuenta su última experiencia en aquel mundo.

Ya más tranquilo prestó atención a la mencionada fruta por Sylveon, no dudó en cogerla, la observó detenidamente como si quisiese analizarla hasta en búsqueda de información. No lo podía evitar, así era él. Intentaba hallar respuestas, no obstante, por mucho esfuerzo que dedicase a ello no es que funcionase debidamente.

¿Te refieres a ésta? - Señaló a la que tenía en la mano, una pieza de fruta cuyo nombre ignoraba pero su color llamaba la atención, azul. No recordó haber visto algo similar. Instintivamente la limpió con torpeza utilizando la manga de su chaqueta. No es que fuese la higiene ideal, aún así menos es nada. Con recelo le dio un discreto bocado saboreándolo al máximo. Necesitaría fuerzas si quería continuar con su viaje a ninguna parte.

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10/09/2015, 09:26
z.Out. Compañero: Treecko

-No hay problemas hermano.

Respondió Treecko, con aquella pausada tonalidad en su timbre vocal, a Larvitar. Colgado como estaba, cabeza abajo, el lagarto no demoro en incorporarse demostrando una agilidad en los árboles que distaba mucho de sus movimientos, aunque normales, de los de en tierra.

Aprovecho para bajar algunos frutos extras para el resto de la compañía, de cierta forma sentía que era su responsabilidad, ellos habían fallado en proveer la comida la noche anterior precisamente por un ataque arácnido, claro que no al nivel como el que habían acabado de superar.

De todas formas aquello lo hacía pensar, y el analítico lagarto no dejaba de preguntarse la razón del porque tantos ataques, había escuchado que varias parejas habían tenido ya escaramuzas aquí o allá.

-Sylveon, no crees que nuestro mundo está demasiado violento últimamente. Ni siquiera cuando acabábamos de nacer de los huevos, en aquella etapa los demás digimones salvajes iban a su rollo y pasaban de nosotros. Algo está alterándolos, o tal vez puedo estar equivocado, pero no lo creo.

Concluyo encogiéndose de hombros dándole un último mordisco a la baya, pero con esa mirada casi hipnótica esperando respuesta del Digimon líder.

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11/09/2015, 01:55
sylveon

Syveon escuchó todo lo que le contaron sobre lo sucedido, y ante las últimas palabras de Treecko asintió. Llevas razón. Algo se huele en el ambiente, algo maligno y me da la sensación de que está relacionado con ese artefacto negro del que hablais. Ese que llevaban los digimons incrustados en el cuerpo.

Sylveon se acercó para observar los restos e intentó agarrar uno con uno de los apéndices de sus orejas. Pero en cuanto lo tocó sintió como si le quemara. ¡Auch! Gritó molesto. ¡Auch! Volvió a hacerlo al segundo intento. No entiendo, cada vez que lo toco es como si me dañara, siento a la vez fuego y frío. Siento como si algo malo fuera a sucederme. Dijo al observar los restos de aquel mecanismo. Después miró a los humanos de aquel extraño mundo del que decían venir. ¿Vosotros sabéis qué puede ser eso? Dijo señalando los restos de la tuerca negra. Es un artefacto que jamás había visto antes. Quizá si Klaus tuviera su ordenador en condiciones pudiera saber lo que era, pero era una lástima que llevara tanto tiempo roto. Aunque con un poco de suerte, alguien podría saber qué era eso exactamente.

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11/09/2015, 10:50
z.Out. Compañero: Treecko

Treecko ciertamente,  aunque había comentado sobre las extrañas piezas negras, simplemente pasaba de los fragmentos desperdigados concentrado en su tarea de traer más bayas. No fue hasta después que terminara de compartir la información con Sylveon que noto cuando este trataba de tomar alguno de aquellos fragmentos que el material se presentaba corrosivo para el digimon.

Sin duda alguna la situación despertó su interés, parpadeo dos veces mientras sus pupilas verticales se fijaban en Sylveon no estuviera lastimado más sin comentar nada al respecto o moverse de su sitio. Parsimoniosamente y manteniendo una disposición algo distante rodeo cuidadosamente uno de los pequeños pedacitos negros en el suelo olisqueando el aire a su alrededor, por notar si despedían algún olor característico

-Puedo percibir la humedad en el ambiente y pronosticar el tiempo. Se complació en sí mismo a modo de broma pero manteniendo la voz neutral, antes de proseguir. –Pero no tengo idea que podrá ser esa pieza, quema y hiela al mismo tiempo. Umm.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: percibir

Tirada: 1d100

Resultado: 75

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11/09/2015, 21:20
- Elhena Medianor

Elhena seguía dando de comer a Trapmon, pero escuchaba las palabras de Sylveon. Ella había estado observando el combate aunque de reojo. Había visto lo que había caído, y le había parecido...

Un engranaje dijo, en voz alta, como si todos sus pensamientos los hubiese escuchado los presentes. Quiero decir, que me pareció un engranaje. Miró a los pokemon, aunque no sabía si sabían lo que era esa pieza. Un engranaje es una pieza que se utiliza en máquinas para que funcionen. Por ejemplo, los relojes antiguos tienen engranajes que hace que giren las agujas Si no entendían qué eran las máquinas o los relojes, eso ella no había caído. Puso a Trapmon a la altura de sus ojos. Si esos bichitos tenían engranajes, ¿vosotros también? empezó a palparle la espalda Con lo grande que era se te tendría que notar...

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13/09/2015, 19:23
0.- Compañero: Flabmon

—¡Eleeeen!— gritó Flabmon, con lágrimas en los redondos ojos, y haciendo sus hojas temblar.

No podía creerse que, finalmente, hubiera salido de aquel capullo horrible. Temía que se quedara para siempre encerrada en él, sin poder hacer nada, y pasando el tiempo, como cuando había estado esperando a que apareciera la primera vez.

Pero, no, todo, al final, había salido bien, y Flabmon podía volver a ver a Elen. Su suerte no tenía límites, y se sentía la digimon más afortunada del mundo. También se sentía algo avergonzada, por no haber podido hacer nada para ayudarla, pero estaba tan feliz que nada ni nadie le empañaría tal sentimiento.

—Me alegro tanto de que estés bien— dijo, aún con los ojos brillantes—. ¿Te duele algo?— preguntó, preocupada de repente.

Cuando vio que los demás comenzaban a comer los frutos de aquel árbol, Flabmon bajó del regazo de Elen, y se acercó para coger un par.

—Toma, Elen, toma— decía, mientras empujaba con su redondo cuerpo los frutos, haciéndolos rodar—. Come, y recupera energías.

Flabmon, sin embargo, no consideraba que debiera comer, por lo que se limitó a quedarse dejar de Elen, mientras ella sí que comía. Pronto, comenzó a notar sus tripas moverse, y a hacer ruidos extraños.

Con los ojos aún llorosos, no tuvo más remedio que coger también un fruto para ella, y acompañar a Elen en esa extraña merendola.

—¿Maligno?— preguntó Flabmon, en cuanto escuchó aquella palabra desde la boca de Slyveon—. No, maligno no—, gimoteó, y no pudo evitar temblar un poco, haciendo que las hojas de su cabeza bailaran frenéticas.

Pero, se dijo a sí misma que no debía de tener miedo, pues estaba allí para proteger a Elen, de cualquier cosa, por lo que, respiró profundamente, y se hinchó como una pelota.

—No te preocupes, Elen— dijo, orgullosa—. Yo estoy contigo.

Sin embargo, se deshinchó cuando vio que ni siquiera Sylveon estaba seguro de aquellas cosas negras.

—No, no lo toques—- dijo Flabmon, temiendo por la salud del digimon rosado—. ¿Y si también se te mete una a ti?— preguntó, y pestañeó ante la ocurrencia—. ¡Ah!— gritó—. ¿Cómo podemos saber si no tenemos una como esa  nosotros?— preguntó a la vez que aquella mujer con el pelo azul, mientras miraba a su propio digimon. Ella también lo pensaba. Oh, era lo peor que les podía suceder.

Se mordió el labio inferior con nerviosismo, mientras contemplaba a Treecko inspeccionar los restos de aquel artilugio.

Ten cuidado— dijo Flabmon, aunque lo pronunció tan bajo que dudó mucho que llegara a oírlo el digimon verde. 

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13/09/2015, 19:25
- Fénix Ember

Cuando Fénix salió por fin de aquel capullo, y consiguió respirar aire limpio, notó que los ojos le lagrimeaban de felicidad. No podía creer que estuviera viva, y mucho menos después de haber pensado que no saldría de ahí nunca.

Miró a Fennekin, divertida y agradecida, y chocó los cinco con una de sus patas delanteras, mientras reía.

¡Equipazo!— dijo, sonriente.

Escuchó las conversaciones que se sucedían a su alrededor, y temió que lo que creían un mundo donde los digimons luchaban, como en el reino animal, se convirtiera en algo mucho menos oscuro.

Frunció el entrecejo, haciendo una mueca de dolor, cuando vio que Sylveon tocaba los restos de aquella cosa negra con sus apéndices, y miró a la Elhena cuando expuso su teoría de qué podían ser.

Fénix se acercó un poco más a los restos, y se dio cuenta de que tenía razón: parecía un engranaje.

Oh, es verdad— dijo, mostrando lo evidente, mirando a la chica del pelo azul—. Es un engranaje— lo contempló de nuevo, y le dieron ganas de tocarlo, aunque fuera, con un palo, pero temió que algo malo pudiera suceder, y su inconsciencia no debía imperar, aunque tuviera muchas ganas de probarlo, por lo que se alejó un poco de aquel artefacto, y miró a Elhena—. Pero, no lo entiendo. ¿Cómo puede haber algo así en el  mundo digimon?

Miró a su alrededor como si le fuera a dar la respuesta, y ladeó la cabeza.

¿Hay gente como nosotros?— preguntó, aunque sintió una especie de eco en su mente, como si ya se hubiera formulado esa pregunta antes—. No, mejor, ¿podéis fabricar cosas, máquinas y eso?— cuestionó, pensando que, tal vez, era otro digimon el que podía construir eso.

Si no había nadie más que ellos en aquel mundo, y todos sus habitantes eran digimons, debía de ser otro digimon el que estuviera haciendo eso.

—Qué raro— terminó diciendo, cogiendo una de las bayas que Treecko iba recogiendo, y pensó que estaba realmente deliciosa—. Puede que sea más complicado de lo que creamos. Puede que, quizá, sí que haya más gente como nosotros aquí, pero escondida. O puede que sean digimons, pero que se hagan pasar por gente como nosotros. O han sido espías en nuestro mundo, y han venido aquí con la tecnología aprendida.

Su mente comenzó a volar, y pronto sintió dolor de cabeza. Lo suyo no era pensar, sino actuar.

—Bueno, la cuestión es que debemos patear más culos— resumió—. Bien, eso se me da de muerte— dijo, riendo, mirando a Fennekin. 

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14/09/2015, 08:05
Z-Out- Nagisa Saya

Sentada en pose de flor de loto y con Totodile todo recargado en su regazo, habiendo logrado esto tras  la dramática actuación de un aparente lánguido digimon, Nagisa iba recogiendo algunos de los frutos que Treecko hacia rodar por la hierba en dirección a los presentes al tiempo que comía ella y alimentaba al cocodrilo, otras el atrapaba alguna por sí mismo.

-Aquí tienes, esas tripitas no deberían rugir más. Le susurro con una sonrisa, y mientras mordía la jugosa fruta escuchaba lo que hablaban los demás, ya mas calmada y volviendo a ser la joven pausada de antes.

-Fenix, ¿no?. Cercioró el nombre de la chica castaña, antes de dar su opinión al respecto coincidiendo con ella.

-Concuerdo contigo, si hemos sido traídos hasta aquí de la forma tan peculiar en que llegamos, tampoco podemos negarnos a la posibilidad que a otras personas no les haya sucedido algo así antes, aunque también cabe la posibilidad que sea un digimon quien cree esas piezas, ya vemos que no todos son de carne y hueso como Magnemite por ejemplo. Ahora por qué las arañas tenían esa pieza dentro de sus cuerpos no lo sé, pero estoy convencida que no son de la clase mecánica.

La propia Nagisa se incorporó para sacar el cuchillo de buceo que siempre llevaba en su pantorrilla, para con la hoja del arma tantear un poco la pieza.

-Me pregunto qué material será, y como podemos saber su propósito. ¿Por qué quemaría a Sylveon? . ¿Alguno de ustedes chicos sabe de mecánica o algo por el estilo?

Pregunto al resto de la compañía, pues a ciencia cierta aquello no era su campo.

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15/09/2015, 21:23
1.- Compañero: Totodile

Totodile se dejó mimar por Nagisa, hasta que su estómago decidió que ya podía comer por si mismo. Miró a su humana, pero no parecía comer demasiado. En ese momento a Totodile no le importaba lo que era ese engranaje, le importaba que Nagisa no comiese.

Estás muy delgada se bajó de su regazo y corrió a por una fruta entera. Volvió con una bastante grande y se acercó hasta su humana. Ésta es todo para tí. ¡No puedes dejarte nada! le dijo la criatura, sentándose frente a ella, esperando que se lo terminara todo.

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15/09/2015, 22:02
Z-Out- Klaus Rhode

Aún aturdido, el joven Klaus no se enteraba demasiado de lo que sucedía a su alrededor, y menos de las conversaciones que fueron surgiendo una detrás de otra, y fue la de la una supuesta rueda, una pieza de engranaje lo que llamó la atención de uno de los portadores de un ordenador pese a su mal estado.

¿Qué me he perdido? - Preguntó un poco para hacerse notar y volver a la realidad que tanta falta le hacía. - ¿Una qué? ¿Pieza? ¿De dónde? - Se acercó a los restos con curiosidad con la tentación de coger alguno de ellos, no obstante Sylveon lo intentó con un resultado nada deseable. Simplemente se limitó a ponerse de cuclillas cerca y sus claros ojos analizaron hasta el último milímetro de lo que diablos fuese aquello.

Sí, se parecen a una pieza, como un engranaje, ¿un motor quizás? - Fue lo primero que se la pasó por su cabeza. Que los compañeros no humanos, especialmente el guía dijesen que fue la primera vez que lo veía le dijo mucho. - Si nadie sabe nada, tal vez vengan de otro mundo, de otro lugar. - Dio por sentado que estaba en otro, a fin de cuentas todo lo que vio desde luego del suyo no era, por descontado.

Aún tenía en la mano aquella pieza de fruta, inconscientemente la mordió mientras seguía con su particular escrutinio. Tragó el bocado, y continuó con su teoría, hipótesis, o lo que fuese aquello. - ¿Es posible que les afectara de alguna forma? Su forma de actuar quiero decir. Tal vez les molestase , no sé, debería de hacerlo aunque teniendo en cuenta lo que he visto de aquí, no sabría decirlo con seguridad. - Otro bocado más después de haber expuesto aquella cuestión que le intranquilizaba sin saber muy bien el qué.

Se incorporó para dirigirse a los demás. - En cualquier caso, dejando por obvio que es fabricado por el aspecto, o eso quiero creer por el momento. Alguien o algo tenía pensado que los mencionadas criaturas, hiciesen algo. Tengo mis reservas de que fuese un accidente de todos modos. - Y es entonces cuando cayó en un detalle, o tal vez fuese una coincidencia.

Los beedrills, ¿actuaron como siempre o de forma extraña? Son ideas, nada más, no tengo pruebas por el momento. - Comentó de forma pensativa. ¿En qué estaría pensando el chico rubio? Quizás dejase pasar por alto quién sabe qué, o quizás el problema radicaba en que pensaba demasiado.

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16/09/2015, 08:40
Z-Out- Iván Kozlov

Una vez que Ivan logra salir del capullo con la ayuda de Larvitar, entra inmediatamente en sí, su experiencia en la vida lo ayudaba a ubicarse rápidamente en el espacio, más que por voluntad por mismo instinto. 

Al ver el fruto que Larvitar le traía lo compartio con el y se dirigió al objeto en cuestión, pienso que esa pieza intervenía de alguna manera con el comportamiento, quizás dentro del cuerpo de los digimon emitía algún tipo de onda o reaccionaba de alguna manera que tornaba más agresivas a las criaturas., bueno es solo una suposición claro.

Iván estaba listo para continuar.

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16/09/2015, 08:47
0.- Compañero: Fletchmon

Fetchmon seguía destruyendo el capullo donde Álex se encontraba, tanto dio qu logro librarlo.

Álex estas bien? pregunto algo nervioso mientras los demás elaboraban conjeturas!