Partida Rol por web

[DM05/21] – Viy

Capitulo tres: Primera noche

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20/05/2021, 21:01
Yure Kovalenko

- ¿ Cómo... sabes eso?- empecé a formular la pregunta, pero la terminé en mi cabeza. 

No tenía nada que perder... fui al círculo con mis compañeros

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20/05/2021, 21:04
Inha Holub

Tras soltar el candelabro, Inha se dejó llevar por el impulso del pelirrojo mientras la abrazó con fuerza dentro del círculo de sal. Era la primera vez que se encontraba tan cerca de un hombre, aunque no pudo detenerse en ello ya que el peligro les acechaba en todas partes y no se sabía como iba a reaccionar la bruja al fuego. Por ello un tanto temblorosa rodeó con sus delicados brazos el cuerpo de Ilya y se mantuvo con la mirada hacia el tétrico escenario que tenía delante. 

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21/05/2021, 09:58
Mykola Ivanovich

Mykola continuaba absorto rezando desde el atril, de vez en cuando, levantaba la mirada atento a los pasos de la bruja.

- Ya no viene hacía mí, menos mal...- pensó el músico.

Oyó a Fiódor gritar.

Cita:

-¡Corred, insensatos! ¡El círculo de sal es protector!

- dijo mientras creaba un círculo protector- ¿con qué? ¿con sal?

Sus compañeros se metieron en aquel círculo y Mykola no esperó ni un segundo, corrió y se unió a ellos.

Dentro del círculo la bruja los miraba desde fuera.

Espero que esto sirva Fiódor. Parecemos gallinas dentro de una jaula, se lo hemos puesto muy fácil a esta bruja...- Mykola lanzó un escupitajo hacía la hija del centurión.

Hecho esto, abrió el misal y continuó rezando.

El Señor es mi pastor
Nada me faltará
El Señor es mi pastor
En pastos delicados
Él me hará descansar
Junto a aguas de reposo
Me pastoreará
Confortará mi alma
Me guiará por sendas de justicia
Por amor de su nombre....

Movía la cabeza concentrado en leerlo todo exactamente cómo estaba en el misal.

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21/05/2021, 16:24
La bruja

Inha intento con toda su buena fe prender fuego al camisón de la bruja, pero este estaba totalmente empapado, hace apenas unos instantes Fiódor le había arrojado una palangana de agua. Yure también trato de unirse a Inha en su intento de quemar a la bruja como hacia la antigua inquisición en la edad media. Pero ambos desistieron, el camisón de la bruja estaba completamente empapado, tardarían toda la noche en prenderle fuego, y claramente, la bruja no iba a estar de brazos cruzados esperando a que la quemara viva.

Fiódor trazo un amplio circulo con sal en el suelo y grito a sus compañeros que se metieran en él. Como había dicho Mykola, parecían gallinas en una jaula. Ilya e Inha abrazados, Mykola con uno de los misales en la mano, Yure aun con el candelabro, y Fiodor con la bolsa de sal.

La bruja comenzó a recorrer el circulo de sal, palpando una barrera invisible y comenzó a dar vueltas alrededor del circulo mientras miraba con ojo llenos de ira al interior. Daba vueltas y vueltas mientras llena de rabia escuchaba los rezos.

La noche transcurrió lentamente, los seminaristas se turnaban para continuar con los rezos, y la bruja seguía dando vueltas entorno al círculo de sal, buscado alguna grieta para poder entrar. Al final, justo antes de despuntar el amanecer amenazar con un dedo, regresó al féretro y se tendió en él.

El silencio volvió a inundar la iglesia, solo roto por las entrecortadas respiraciones de los seminaristas.

Notas de juego

Inha: no es necesario que gastes el punto de Superación.

Fiódor: Gastas otro punto de Superación. La bolsa de sal es algo razonable de llevar (aunque un poco raro).

Gasto un punto de superación para invocar la protección de guión e ignorar el daño.

Ya no se puede invocar la “protección de guion”. La amenaza esta por encima de 8.

Tampoco se podría aplicar los bonos que comentas, ya que el daño ha sido por un presagio (un [1] en el dado) y no por una tirada.

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21/05/2021, 16:28
Tsibulia

Cuando asomaron los primeros rayos de la aurora, se abrieron las puertas de la iglesia y entraron Tsibulia y sus compañeros cosacos. ¿Qué ha pasado aquí? Pregunto Tsibulia al ver el circulo de sal y las caras pálidas de los seminaristas. 

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21/05/2021, 22:16
Ilya Borotkin

El único intento por detener a la bruja que surtió efecto, finalmente, fue el círculo de sal de Fiódor. Por si acaso, los seminaristas se fueron turnando en la lectura del misal durante la noche dentro de aquel círculo. Como bien dijo Mykola, parecían gallinas dentro de una jaula, pero por suerte la bruja no podía entrar en la jaula y estuvo toda la noche rondándolos.

Cuando Ilya sintió, al comienzo, que la joven Inha le correspondía su abrazo, la apretó un poco más fuerte y le habló despacio:

No se preocupe, señorita Inha, que todo irá bien. Saldremos de esta.

Ni el propio Ilya estaba realmente seguro de aquello, pero su papel en aquel momento consistía en infundir seguridad a la aguerrida joven. Sin embargo, la noche fue pasando y la bruja, aunque seguía dando vueltas, no podía llegar a ellos. Tras el paso de las horas, Ilya pensó en algún momento que desfallecería de cansancio y sueño, pero la alerta lo mantenía espabilado. Finalmente, la bruja se retiró de nuevo al ataúd poco antes de que rayara el alba.

Eso es —dijo Ilya—. No soporta los rayos del sol. En la oscuridad de esta iglesia y de la noche estamos perdidos, pero… el sol… Eso significa que durante el día de hoy, en lugar de dormir nosotros también, hemos de buscar una manera de aprovechar que este engendro duerme… Turnémonos en el descanso, ¡pero aprovechemos las horas de sol! —Después, Ilya pensó durante un segundo—. Por cierto, ni una palabra de esto a los cosacos. Como sugiramos siquiera que la hija del centurión es una bruja, nuestros cuellos no valdrán dos kopeks.

Poco después de haber hecho esa sugerencia, salieron los primeros rayos de la aurora y las puertas de la iglesia se abrieron. Apareció Tsibulia con sus compañeros y preguntó qué había pasado. Ilya se adelantó.

Estimados. Hemos rezado toda la noche por la joven alma de la hija del centurión. Eso —dijo señalando el círculo de sal— son nuevas prácticas fúnebres del seminario, ya ven, la Madre Iglesia no deja de innovar en su afán por cuidar de las almas y el cuidado de sus hijos, siempre bajo la guía y la inspiración del Espíritu Santo. —Al decir esto, Ilya se santiguó y miró al cielo brevemente. Después, devolvió su atención a Tsibulia—. Estimado, algo más: creemos que es nuestra obligación rezar no sólo durante la noche, sino también durante el día, así que les pediríamos que nos dejen aquí mientras aprovechamos también la luz del día para velar a la amable y santa hija del centurión. Si tienen a bien traernos unos bocadillos y unas vianditas para saciar nuestro ayuno, entonces se lo agradeceremos, pero creemos que es mejor que sigamos con nuestras plegarias sin salir de aquí. Les estamos muy agradecidos.

- Tiradas (1)

Notas de juego

He hecho una tirada de Interacción + rasgo «Pico de oro» (+1) para convencer a Tsibulia y los cosacos, y he sacado un hermoso sin sacar un solo 1, así que evito cualquier presagio horrible ^^

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22/05/2021, 01:12
Inha Holub

La noche resultó ser un verdadero martirio y por esto es que no se separó de los brazos de Ilya en todo momento debido a la situación en si, más allá de que la bruja con sus intentos de acceder dentro del círculo ya era de por sí muy inquietante. Así que las horas resultaron eternas sin importar las ideas que consumidas por miles de razones, los mantenía allí de pie, sin poder hacer nada más. 

—Muchas gracias—dijo a Borotkin.

Una vez el amanecer les ofreció un nuevo día para comenzar, agradeció las palabras de su caballero y le regaló una suave caricia en la mejilla por haber tenido el noble gesto de protegerla. Sin embargo para la sorpresa de la joven, más allá del intercambio de miradas con el pelirrojo, fue el hecho de observar como la bruja regresó al ataúd. Al fin tenían un poco de paz. 

Pero incluso antes de siquiera pensar en algo, apareció en la escena el Centurión y ante las sabias palabras de su compañero, esperó una buena respuesta por ello. Posiblemente accedería. 

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22/05/2021, 03:38
Fiódor Kravchenko

Ser de utilidad reavivó un tanto mi maltrecho ego. La noche se presentó larga y penosa para un aragán como yo que sufría aguantando a pie firme sin asiento ni movimiento. Pero me entretuve componiendo poemas, reuniendo todas mis dudas sobre la naturaleza de la bruja en un caldo grotesco, y reconciliándome con el estado actual de mi mundo. Muchos pensadores habían tenido que luchar esa batalla antes.

 

 

Los rezos cristianos eran válidos. Pero también eran salvíficas las supersticiones paganas. ¿Había entonces capas superpuestas de leyes que gobernaban distintos aspectos del mundo? ¿O simplemente eran vías distintas que llevaban al mismo punto y por eso afectaban al mal por igual? Como fuese yo ya había aceptado la existencia de lo desconocido y reparado las defensas de mi fortaleza mental. Mi última proeza reflexiva, minutos antes de despuntar el amanecer, consistió en quedarme embobado mirando el círculo y sumergirme en un estúpido bucle: "sal del círculo de sal del círculo de sal del círculo de..." ¿Cuando incorporaría nuestra sociedad el bufonazgo remunerado? Eso sí que sería un síntoma de ilustración.

 

 

Al meterse la bruja en su ataúd me dejé caer, agotado, y preparé la pipa para un desayuno reglamentario de vino y humo. No pude evitar una carcajada ante el tapiz de despropósitos que era nuestro viaje. Me habían vuelto las ganas de chanza:

 

 

-Tampoco tolero bien el sol, pero no compartimos la bruja y yo el concepto de buena velada. Miradla, de festejos toda la noche y ahora al jergón para no rendir cuentas con el alba. Es la viva imagen de un seminarista

 

 

Ya estaba dispuesto a empezar con el planteamiento de todas las incógnitas que deberíamos resolver para librarnos de la dama nosferata cuando escuché el crujido que anunciaba la apertura de puertas. Me incorporé de un brinco martirizando más a mis pies y permanecí serio asintiendo con brío a las palabras de Borotkin. Sí que estaba ágil de pensamiento para llevar toda la noche con el arcabuz cargado y sin poder disparar.

 

 

Un nuevo método, claro que sí. Ahora salpimentamos a los difuntos para que lleguen a gusto del Señor, o del diablo que también es de paladar fino. Si quieren a sus abuelas, entiérrenlas con guarnición y un toque de romero. La autoridad en materia nos amparaba así que esperé que se tragasen el embuste como leche materna.

 

 

-Agradeceríamos también dos puñados más de sal. He gastado casi todas mis reservas en el rito funerario de esta noche y debemos continuar con la liturgia. A título personal pediría también unas cuerdas y algún objeto afilado, pues querría hacer penitencia en honor a esta muchacha. No es algo común, pero al fin y al cabo ella solicitó mi presencia y quiero purificar mis pecados del todo para interceder por su alma.   -Apostillé en voz baja y tratando de parecer un piadoso meapilas.

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22/05/2021, 09:22
Yure Kovalenko

El fuego no surtió ningún efecto contra la bruja, pues su camisón estaba completamente empapado, sin embargo, el círculo de sal que Fiódor había trazado nos mantuvo a salvo el resto de la noche.

Cuando los rayos del sol despuntaron y se colaron por las rendijas de la desvencijada iglesia, la bruja... o lo que quiera que fuera aquel ser, volvió a su ataúd.

Cuando Tsibulia abrió la puerta se encontró, el que imagino a sus ojos, sería una inexplicable escena. Borotkin, con la labia que le caracterizaba, se dio prisa en justificar sus elementos. 

Fiódor, siguiendo con la mentira del donjuán, pidió más sal al cosaco. A lo que yo asentí:

- Bueno, creo que necesitaríamos algo más de un par de puñados- digo mirando a Fiódor, indicándole con mi mirada que tengo una idea.

Notas de juego

Ya no se puede invocar la “protección de guion”. La amenaza esta por encima de 8.

Ok, punto de congnición eliminado y de superación añadido de nuevo. El modificador con mi rasgo  "atento a los detalles" que es de cognición también pasaría a ser +1, ¿ no?

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23/05/2021, 23:00
Mykola Ivanovich

La garganta le dolía al músico, no habia rezado tanto en su vida y era gracioso, que la destinataria de tanta verborrea fuese aquella malnacida.
Tosía mientras la bruja estuvo toda la noche rodeando el círculo-qué pesada...- su cara de rabia le hizo alegrarse de estar dentro del círculo de sal.
No era el lugar más cómodo, apretado junto a sus compañeros,pero al menos estaban a salvo.
Tuvo mucho miedo, ni el fuego ni los rezos parecían molestar a la novia de Satanás.
Las piernas le flaqueaban, no había mucho espacio y ninguno de sus compañeros se atrevió a salir de aquel improvisado círculo protector.
Estuvo tentando de hacerlo pero el miedo a lo que pudiera hacerle la hija del centurión, lo mantuvo firme.

La luz del alba empezó a entrar en la iglesia y con ella, la bruja volvió a su ataúd.
Ilya habló pero Mykola solo pudo balbucear unas pocas palabras.
- Gra...gracias Fiódor, te debo la vida.- dijo saliendo del círculo y cayendo al suelo agotado.

Todavia nos quedan varios días, o peor...noches aqui con ella- señaló al ataúd- deberíamos descansar un poco y pensar en cómo acabar con todo esto. Os lo ruego, aprovechemos el día.- dijo soltando un bostezo y frotándose los ojos.

Cómo me duelen las rodillas- estuvo masajeándolas con cara de dolor.

Los cosacos entraron preguntando que había ocurrido.

- Buenos días señores, yo necesito descansar y beber algo, estoy afónico,he rezado por el alma de esta señorita con todo mi corazón. Si me permiten saldré de esta iglesia a tomar el aire.- le dijo a Tsibuila mientras se acercaba cojeando a la puerta.

-Necesito un trago- pensaba el músico relamiéndose.

Notas de juego

Perdón por el retraso.

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24/05/2021, 18:01
Tsibulia

El cosaco se rasco la cabeza. Seguro que quieren quedarse rezando también durante el día, no prefieren ir a desayunar algo y dormir un poco. Ahora vendrán las viajas a rezas. Esos decrépitos cuervos que son solo pellejo y trapos negros no saben otra cosa que hacer, se pasaran el día velando a la difunta. Y aunque no hubiera funeral, las viejas seguirían viniendo a rezar. Como si Tsibulia las hubiera invocado, un grupo de mujeres bajas, encorvadas y totalmente vestidas de negro comenzó a entrar en la iglesia. Se santificaba, dejaban un par de flores silvestres cerca del ataúd y se arrodillaban a rezar.

Tsibulia volvió a mirar al grupo. Traeré todo lo que necesiten, un saco de sal si hace falta. El centurión a indicado que no os debe de faltar de nada. Luego miro a las viejas que como cuervos sobre una verja se habían distribuido por los bancos de la iglesia. ¿Seguro que quieren pasar el día aquí?

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25/05/2021, 01:03
Ilya Borotkin

«Tanta labia para esto», pensó Ilya mientras veía entrar al ejército de viejas penitentes. Le dijo a Tsibulia:

Ciertamente que, habiendo quien vele a la difunta, no tenemos por qué quedarnos nosotros durante el día. Bien nos vendrán las viandas, el sueño y el aire, como dice nuestro compañero Mykola Ivanovich. El saco de sal, de todas maneras, lo aceptaremos para continuar expiando nuestros pecados y rezando por el alma de la hermosa hija del centurión.

Al salir de la iglesia, susurró a sus compañeros sin que Tsibulia le escuchara:

Alguna otra cosa nos tendremos que ingeniar, pero esta vez el círculo de sal, en lugar de hacerlo a nuestro alrededor, quizá sería mejor hacerlo alrededor del ataúd, digo yo.

Y, después de eso, se acercó a Inha y le ofreció su brazo mientras caminaban.

Debe estar cansada, señorita Inha, permítame ayudarla —dijo mientras recordaba con esperanzas la caricia en la mejilla que le había hecho la joven esa noche.

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25/05/2021, 01:50
Inha Holub

Ya al escuchar que unas mujeres vendrá a rezar, directamente descartó en su mente la posibilidad de quedarse allí encerrada y pensó que tal vez había una posibilidad de salvarse de ello. Aunque lo dudó al rato al considerar que el Centurión es alguien de poder y posiblemente sea capaz de buscarlos por cualquier rincón. Así que no le quedó más opción a Inha que resignarse y asentir a la sugerencia de Ilya. 

Bien pensadosusurró desde la cercanía al pelirrojo y respondió al Centurión segundos después—. Entonces es mejor tomarnos un descanso, reponer fuerzas y alimentarnos. Ser siervos de Dios requieren cierto esfuerzo extra, así que es necesario aquello. 

Y al ver que su compañero le ofreció su brazo, la joven aceptó con gusto ya que había sumado muchísimos puntos durante toda aquella noche e Inha no lo olvidaría fácilmente. 

Muchas gracias, Ilya—dijo en un susurro, aferrada al brazo de aquel hombre con delicadeza—. Muy cerca de usted estaré. 

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25/05/2021, 13:34
Ilya Borotkin

Inha tomó el brazo que Ilya le había ofrecido. Tras escuchar la respuesta de la joven, Ilya puso su mano libre sobre la mano que Inha tenía en su brazo y después contestó en voz baja mientras la miraba a los ojos:

No podrían salir de su boca palabras más agradables en este momento, señorita Inha. Su cercanía es el único solaz en estas horas de terror. Estaría dispuesto a pasar mil noches en un círculo de sal rodeado por cien brujas si fuera necesario para tenerla a usted abrazada a mí como anoche y sentir sus delicados dedos acariciando de nuevo mi rostro.

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25/05/2021, 13:42
Mykola Ivanovich

Saliendo de la iglesia y recuperando, poco a poco la normalidad al andar.
Mykola escuchaba los susurros de Inha e Ilya.
- No les entiendo- movía la cabeza incrédulo, [/I] no sé cómo tienen tiempo para esas tonterias.[/I]

Cuando se alejaron lo suficiente de la Iglesia, el músico se dirigió a sus compañeros.

- ¿Qué vamos a hacer? Yo no quiero volver a estar cerca de esa bruja, escapemos- les dijo

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25/05/2021, 14:13
Yure Kovalenko

- Justo en eso es en lo que estaba pensando cuando pedí más sal- respondí a Ilya cuando propuso hacer el círculo en torno al ataúd. Después le dejé que continuara sus devaneos con Inha.

- Busquemos un lugar donde meditar A SOLAS- recalco estas últimas palabras. Tengo algunas cosas que proponer.

 

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25/05/2021, 16:00
Tsibulia

Nada de estar a solas. Replico el cosaco con cierto recelo. Puede que el cosaco empezara a dudar de los seminaristas, cambiaban rápido de opinión parecían pálidos y tan proto querían estar cerca de la muerta como a cientos de metros de ella. Pero el cosaco había dudado de los seminaristas desde el primer momento.  Ya tendréis tiempo para meditar a solas por la noche. Ahora venir a casa del centurión a beber algo de aguardiente de cerezas.