Partida Rol por web

El Advenimiento

Capitulo IV

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02/11/2012, 20:15
Keloa

Keloa agradece en silencio que Udokal dejara de hacer comentarios sobre aquel humano recorriendo su cuerpo con sus manos. Quizá había sido brusca, pero sabía perfectamente que eso no iba a afectar en absoluto a un guerrero O'Shar como lo era su hermano.

Asiente a las palabras de Pazzo, pensativa.

Así que eso es una posada... Los otros pidieron una habitación y un baño allí.

Al entrar a la posada, Keloa ignora por completo las miradas de los demás, pues, suponía que serían las mismas que recibirían si alguno de ellos entrara en la cabaña de algún O'Shar.

Sigue a Pazzo, manteniendo la barbilla alta y la mirada fría.

- No imagino un motivo por el que un O'Shar entraría en un lugar así... Así que no deben haber visto a ninguno de los nuestros, no.

Afirma, con su sorprendentemente dulce voz, asintiendo a las palabras de Udokal sin dejar de mirar a quien parecía el jefe de aquel lugar.

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02/11/2012, 22:09

Poco a poco la sala va volviendo al bullicio habitual a estas horas de la noche, si bien, las miradas o los comentarios sobre los O´Shar no cambian, los cuales parecen aun mas grandes si caben por ir la lado de la pequeña Pazzo.

Notas de juego

Pazzo.. hago una pausa aqui, para que postees lo que le cuentas al Posadero.

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04/11/2012, 15:44
Pazzo-Bialy Stehlen

Al mirar hacia atrás, Pazzo puede ver que Udokal y su hermana la siguen de cerca. Se dio cuenta de que no hacía falta, ya que, en el silencio que se instaló en la habitación, los pasos de los grandullones se pueden oír con facilidad. Incluso el suelo se siente tembloroso debajo de sus pequeños pies.
Cuando los comensales vuelven a sus quehaceres y el ruido toma posesión del lugar, Pazzo vuelve a hablar con dueño del local.
Vera usted, como le he dicho, tengo algo que decirle
. Le hace una señal con la mano para que el hombre se acerque más y así nadie les pueda escuchar. Ella también se levanta de puntillas y se le acerca.
Mirándole fijamente a los ojos le cuenta sobre los O'shar y lo que el Lord ha dicho. Al acabar de explicar todos los acontecimientos, añade:
-Como le he contado, lo mejor es que se queden en el establo, con los animales, van a estar más cómodos así, pero usted decide. Ya me dirá si quiere que les transmita algo, ya que, no entienden nada más que su idioma local.
Al acabar, sonríe ampliamente y, con un gesto fugaz, vuelve a mirar a sus acompañantes. Ya ha hecho todo lo que pudo por ellos, a ver lo que les contesta el dueño del local.

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04/11/2012, 23:37

El posadero te escucha pacientemente, cuando al final acabas te dice bastante seriamente.

- Mira niña, como si es el mismo Rey de Thillgia, aquí o se paga o ni se come ni se duerme, aunque sea en los establos... El dinero por delante - No alza la voz, simplemente expone algo que para él es básico.

Notas de juego

Por cierto, no tenéis hambre?
De verdad vais dejar que durmais con unos animales... recordar que vosotros no domesticais ningun tipo de animal...

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06/11/2012, 01:18

Comienza a amanecer en la colonia. No puedes decir que hayas pasado una mala noche, desde luego con este frio hubiese sido mucho peor dormir fuera.

Por lo poco que has podido escuchar, parece que los cambios de turno de la guardia se producen cada 4 horas, y hay un buen numero de ellos, algunos cientos.

Te trae el desayuno un guardia distinto al anterior. El desayuno en si consiste en una copa de vino caliente, junto a un poco de queso y pan.

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06/11/2012, 02:47
"Alegre" Voki
Sólo para el director

Alegre dio una mordida al trozo de pan y miró al guardia, mientras masticaba ruidosamente.

—Oye, muchacho. ¿Sabes si aquí te dan cadena perpetua por tratar de sobornar a un guardia? Estoy dentro de la jodida ciudad, que es lo que quería y estáis gastando dinero en mi comida. Os hubiera ido mejor aceptando las jodidas monedas, digo yo.

Mordió otro pedazo de pan e hizo un ademán con la cabeza, hacia la salida.

—¿Por qué hay tantos guardias por aquí? Si estáis esperndo mi gran escape, podéis esperar sentados.

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06/11/2012, 03:31

- No estamos aquí por ti ignorante, ¿tan importante te crees? - Te dice con tono de pocos amigos, aunque algo somnoliento - Estas en una celda de las torres de la muralla, estamos para vigilar lo que hay ahí afuera... no a alguien como tu.

- De todas formas parece que vamos a tener suerte, según he oído dentro de unas horas te dejarán libre, asi ya no tendremos que soportar ver tu hermoso rostro. -

El guardia sale de la celda y cierra la puerta, aunque no escuchas que la cierre con llave

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06/11/2012, 20:25
Pazzo-Bialy Stehlen

Las palabras del dueño del local no gustaron nada a Pazzo. Que se supone que tengo que hacer ahora? Pagar la comida y alojamiento por ellos? Una cosa es ir de un sitio a otro y muy distinto es sacar dinero de mi bolsillo. Si les pago sus necesidades tendré que volver a hablar con el Lord. Ese hombre es muy rico, hmmm no está mal, incluso tendré una excusa para poder verlo y hablar con el en privado. Una sonrisa florece en la cara de la chica.
-Lo que usted diga, dice mientras le asiente con la cabeza, puede poner en mi cuenta los gastos de ellos. Primero tiene que hablar con ellos a ver que quieren hacer.
-De momento traiga dos raciones de comida, mirando hacia atrás añade, abundantes!!! Para mi, una infusión caliente y de momento nada más.
Después de un largo suspiro mira hacia sus acompañantes y hablando en su idioma les dice.
-Vamos a sentarnos, va hasta una mesa al lado de una chimenea, necesita calentarse. Sonríe pensando como se van a sentar en las sillas, como van a comer.
Se quita su abrigo y se sienta en una silla, se pone de espalda a la sala, pero ellos pueden ver el resto de gente, respira hondo y con paciencia les empieza a hablar despacio.
Esta noche van a dormir dentro de ... este sitio, salvo que prefieren dormir fuera. No va ser como en casa pero es lo mejor que se os puede ofrecer. Después de pasar por todo lo que contasteis antes, tenéis que estar cansados y con hambre. No se si necesitan agua, para limpiarse... Seguro que si... van a disponer de agua para lavarse.
-Ahora van a traer comida. La gente os mira con curiosidad, hasta que traen vuestros platos mirad a vuestro alrededor y fijaros en las costumbres que tienen para comer. Hay que esforzarse a hacer todo como los demás

Muchas cosas tiene que contarles, mucho tiene que poner de su parte

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06/11/2012, 22:08

Una vez que asumes la responsabilidad de los gastos, el posadero sonríe y os pide que os sentéis en una de las mesas, donde pronto os atenderán. Lo cierto es que la posada cada vez esta mas llena, y hay menos mesas libres, pero acabáis encontrado una, eso si, rodeados de mineros.

Una jovencita tras unos minutos os pregunta que deseáis tomar, y con que bebida queréis acompañar a la comida.

Parece ser que los mineros se entretienen retándose a ver quien bebe mas, esto no tiene pinta de acabar bien, al menos para algunos como continuen bebiendo al ritmo que lo hacen, otros parece que miden sus fuerzas en una especie de test de fuerza (pulsos) mientras a su alrededor otros mineros apuestan plata.

Notas de juego

Os tengo que preguntar que vas a tomar, porque lo de dos raciones es demasiado generico, no es lo mismo comer carne o pescado que verdura.

Tambien ir pensando en lo del baño y las habitaciones, en cuanto lo decidais avisarme, asi os lo puedo rolear todo en un mismo post.

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07/11/2012, 03:36
"Alegre" Voki
Sólo para el director

—De todas formas parece que vamos a tener suerte —dijo el guardia—, según he oído dentro de unas horas te dejarán libre, así ya no tendremos que soportar ver tu hermoso rostro.

—Si queréis puedo quedarme hasta que consigáis uno de esos tíos que pintan a la gente —Alegre señaló a un punto de la pared—. Creo que un retrato mío se vería bien por allí.

Cuando el guardia salió, Alegre notó que no cerró la puerta con llave. Se acercó a ella, probó a entreabrirla y luego la volvió a cerrar.

—Qué barbaridad. Ese muchacho tiene suerte de que sea yo el que está aquí dentro.

Miró alrededor y pensó que era posible que extrañase un poco aquel lugar.

—Bueno, en algunas horas se acabó la buena vida. Tendré que volver a conseguir mi propia comida, como siempre.

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07/11/2012, 06:20
Udokal

Udokal esperó pacientemente mientras Pazzo y el posadero negociaban, ajeno a la conversación que no entendía pero atento a todo lo que sucedía a su alrededor. Cuando la chica terminó la siguió hasta una mesa y aceptando su invitación se intentó sentar. Aquellas sillas eran algo pequeñas y tuvo miedo que no resistieran su peso, pero parecían fuertes. Se acercó a la mesa aunque no pudo meter las rodillas debajo pues era demasiado baja para él.
Cuando Pazzo les explicó su plan para dormir volvió a echar una mirada a su alrededor. ¿Como iba a poder dormir alguien allí con tanta gente? Quizá dentro de un rato todos dejaran de beber, comer y jugar se acostaran. No le atraía la idea demasiado, pero a pesar de las miradas curiosas no tenía sensación de estar en peligro allí así que no le importaba dormir allí. Si alguien intentaba algo le enseñaría cuan afilado estaba el filo de su hacha.
La idea del baño le llamó mucho más la atención. En los últimos días tan solo habían podido asearse lo justo para seguir su camino y ya necesitaba un buen baño completo. Le extrañó no ver ningún recipiente grande con agua por allí para hacerlo.

Quizá los tengan fuera.

Aunque afuera hacía frío no pasaba nada por lavarse y luego entrar a calentarse en la chimenea.
Siguiendo los consejos de la chica Udokal se fijó en las costumbres para comer a su alrededor, aunque no pudo dejar de fijarse en otras costumbres como el beber o las competiciones de fuerza. Sonrió con ambas y pensó que Keloa o él podrían derrotar a cualquiera de allí.
Tras la cena intentaría convencer a Keloa para que participara en una competición de fuerza, sería divertido.
Cuando la chica preguntó por la cena Udokal hizo su petición.

-Dormiremos aquí, es mejor dormir bajo techo si es posible. Y para comer yo quiero un buen plato de carne y beberé agua. Después nos lavaremos. Muchas gracias por todo lo que estás haciendo.

¿Qué iban a beber sino? Y la carne podía ser de casi cualquier tipo, no podía estar mucho peor que la de lobo. Era una suerte que se hubieran encontrado con aquella chica tan amable y dispuesta a ayudarlos en todo.

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07/11/2012, 12:49
Keloa

Keloa espera paciente a que Pazzo hable con el responsable de aquel lugar, sin entender nada de lo que dicen. Al final, la chica les hace acercarse a una mesa y, enarcando una ceja, mira primero a Udokal, divertida, antes de intentar sentarse ella misma.

- A ver quién ríe ahora...

Lo reta, pues aunque ella tendría ciertas dificultades, Udokal era mucho más voluminoso y se encontraba en clara desventaja para encontrarse cómodo en aquel lugar.

Cuando finalmente se acomodan como pueden, Keloa vuelve a escuchar a Pazzo, clavando su fría mirada gris en ella y sin que las facciones de su rostro muestren ninguno de sus pensamientos.

- Comer es comer. Aquí y en nuestro poblado.

Afirma sin más. No parece enfadada, utiliza su tono neutral... Y aquella voz tan suave y tan poco común entre los de su raza. Estaba dispuesta a aceptar ciertas costumbres de aquel extraño lugar, por el bien de sus compañeros y por respeto. Pero nadie iba a enseñar cómo debía comer.

Cuando la muchacha se acerca, Keloa primero la observa a la defensiva, pues no entendía qué pretendía. Dándose cuenta de que sus intenciones no son ofensivas, la pelirroja vuelve a fijarse en los demás, ignorándola, pues no entiende nada de lo que habla. Una vez Pazzo ha traducido sus palabras, Keloa asiente a las de Udokal, dando a entender que ella opinaba lo  mismo.

Estaba empezando a sentirse frustrada por no saber qué ocurría a su alrededor y tener que depender siempre de otra persona, así que no disfruta tanto como Udokal con el espectáculo que ofrecen los demás, aunque sí muestra curiosidad.

- ¿Crees que se están retando? ¿Por... Diversión?

Pregunta con curiosidad inclinándose hacia Udokal para que pueda oírla bien. Desde que estaban en aquel lugar, habían visto pocas muestras de admiración hacia la fuerza de los guerreros de aquella colonia. De hecho, por el contrario, parecía que las personas más respetadas no eran precisamente las más capacitadas físicamente. Así que aquel extraño pasatiempo había despertado la curiosidad de la pelirroja.

Notas de juego

Yo, pedir... no pediría nada. Más que nada porque Keloa no sabe todos los servicios que ofrecen en una posada, no sabe que debe pagar por ellos y mucho menos el dinero que tiene Pazzo... Así que lo que diga la morena : D

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07/11/2012, 13:22

Notas de juego

Bueno, esperare entonces por vuestra interprete.

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08/11/2012, 17:48
Pazzo-Bialy Stehlen

Pazzo tenía problemas en no reírse a carcajadas al ver a los O'Shar sentarse en las sillas. Udokal parecía un adulto sentado en una silla para enanos. Después de un rato parece que lo consiguieron. Con una sonrisa amplia la chica asiente con la cabeza el logro de sus acompañantes.

Mirando a su alrededor puede observar que en casi todas las mesas están sentados mineros. Con la ayuda del alcohol los espíritus se empiezan a calentar. Seguro que algunos acabaran pegándose, no seria la primera vez.

Mientras esperan sentados en la mesa, les empieza a contar a los pelirrojos donde y como se van a alojar.
-Udokal, has dicho que prefieres dormir bajo techo. Esto va a ser fácil, seguro que tienen alguna habitación libre. No se cuales son vuestras costumbres a la hora de dormir, pero vais a compartir el mismo espacio. Las habitaciones están en el piso de arriba.-Pazzo enseña con el dedo hacia arriba-También vais a tener acceso a unos recipientes de agua para lavaros. Momentos después, una chica se les acerca a la mesa.

Pazzo mira con amabilidad a la chica que les viene a tomar el pedido. Sabe que pedir solo raciones de carne le saldrá muy caro, pero como el Lord le va a pagar los gastos, le dice a la joven:
-Trae dos raciones abundantes de comida que incluya carne y algunas patatas o verduras, pero en principal carne. De beber, agua.- después de una pequeña pausa añade- que preparen una habitación para estos dos, dudo que tengáis camas tan grandes, pero que sea una habitación en la que van a estar cómodos ... y también dos bañeras para que se puedan asear.

Con una amplia sonrisa y mirando fijamente en los ojos a la pelirroja, le dice - ...se están retando por dinero. ¿Vosotros como hacéis los cambios en vuestra tribu? Era fácil preguntar si tiene dinero o como venden y compran cosas, pero seguro que no iban a saber que es eso.

Suspira y mira al techo cerrando un ojo, luego saca una moneda de plata de su bolsillo y la pone sobre la mesa. - En nuestras costumbres todo tiene un valor, esta moneda, la señala con el dedo, esto es algo que puede cambiarse por lo que sea, por comida o ropa. En vuestro pueblo si tú, y enseña a la pelirroja, a la cual aun no sabia el nombre, si tú tienes comida pero no tienes ropa, como haces para conseguir ropa? Estaba esperando que la entendieran. Le costaba mucho hacerse entender.

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08/11/2012, 23:15

La muchacha va memorizando las instrucciones de Pazzo, para volver después de unos 20 minutos con dos platos llenos de patatas cocidas con un par de chuletas de res. Con los platos os ponen unos cuchillos ridiculamente pequeños y casi sin filo, así como otro utensilio acabado en tres pinchos (tenedor)

Nunca antes habíais comido carne de res, pero tras el primer bocado comprobáis que es sabrosa, en cuanto a las pelotas de color claro que las acompaña (patatas) su sabor no tiene nada de especial.

Para cuando trae la infusión para Pazzo, apenas unos minutos después ya habéis acabado con las raciones (al menos Udokal) lo cierto es que era bastante escaso (para vosotros) mas aun después de llevar todo el día sin probar bocado.

- Lo de los baños no va a ser posible hasta mañana, pues todas estamos ocupadas en atender aquí - Os explica la jovencita, una chica de menos de 170 cm, de cabello castaño y bastante bonita, con rostro redondeado y ni gorda ni delgada (bueno tal vez para los O´shar su cuerpo este falto de trabajo)

- Hay varias habitaciones dobles en la segunda planta, aunque - dice sonrojandose algo - Las camas puede que os resulten algo pequeñas.

A vuestro alrededor los mineros siguen de celebración (como todas las noches) y parece que cada vez os prestan menor atención

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09/11/2012, 06:12
Udokal

Udokal miró con algo de fastidio a Keloa cuando ser burló al verlo intentando sentarse. No es que ella lo tuviera fácil tampoco así que no hizo ningún comentario y se sentó como pudo cerca de la mesa. Tuvo que sentarse y acercarse girado ya que de frente las rodillas le daban contra el borde y lo dejaban muy alejado. Cuando por fin lo consiguió miró a Keloa sonriendo como diciéndole "Ves, al final lo he conseguido".
Mientras traían la comida, Pazzo les preguntó por las costumbres a la hora de dormir y Udokal le contestó sin pensar.

-Pues yo suelo echarme en las pieles y cerrar los ojos. ¿Tu no lo haces así? Le daba la sensación que a veces los trataban como si fueran animales, y por lo que había visto y veía no podía justificar esa actitud hacia ellos pues veía muchos comportamientos animales a su alrededor. Después más serio contestó la pregunta. En nuestro poblado cada uno tiene su tienda y duerme dentro de ella. Y solo se compartía tienda cuando una lancera entraba en la tienda de uno o lo invitaba a la suya, pero aquellos detalles no le importarían a la pequeña humana. Miró finalmente a Keloa. No me importa compartir el espacio con ella, siempre que ella consienta. Si no dormiré en cualquier sitio cerca de la chimenea. ¿Esta gente acabará durmiéndose también no?

Hasta ahora no había tenido problema en dormir junto a ella, se trataba de supervivencia y no les quedaba otra opción, pero ahora que habían llegado a un sitio con gente y seguro era consciente que para Keloa podía resultar extraño tener que seguir durmiendo con él. Por primera vez en mucho tiempo se dio cuenta que quizás podrían hacer algo más que dormir y de alguna manera lo inquietó. Seguramente Pazzo desconocía las costumbres O'Shar, así que se ofreció voluntariamente para dormir allí, si aquella gente trabajaba no podrían seguir bebiendo y gritando mucho tiempo.

-Lo del agua estará bien. Llevamos días sin poder asearnos en condiciones, tan solo lo básico porque no podíamos entretenernos.

Mientras Pazzo comenzó a preguntarle a Keloa sobre las costumbres O'Shar, Udokal aprovechó para centrarse en la comida que le habían traído. Un poco de carne junto a unas bolitas amarillas. Junto a su plato habían dejado unos pequeños cuchillos y otro instrumento bastante raro.

¿Que pretenden que haga con eso?

Sin pensárselo mucho sacó su cuchillo del cinturón y comenzó a cortar la carne para después con la otra mano llevarse los trozos a la boca. Probó las bolitas amarillas, aunque no le sabían a nada.
Mientras tanto Pazzo parecía querer decirle a Keloa que podía cambiar aquellos pequeños círculos de metal por cosas, debía estar entendiéndolo mal porque la idea le parecía ridícula. ¿Quien iba a querer cambiar algo por círculos metálicos? Udokal sonrió ante la broma mientras seguía comiendo la carne y las patatas. Enseguida se dio cuenta que allí no había carne suficiente para saciar su hambre.

-¿Donde hay mas carne?

No hacía falta que nadie se la trajera, él mismo podía ir y coger un buen trozo. No le extrañaba que fueran todos tan pequeños si comían tan poco. Mientras esperaba respuesta se acercó a Keloa y se contestó en un susurro.

-Parece que se divierten con ello y cambian círculos metálicos también. ¿Crees que podrías ganarles?
Preguntó con cierta suspicacia.

Estaba seguro que Keloa podría ganar a cualquiera de aquellos mineros, pero también sabía que ponerlo en duda podría hacer que quisiera demostrar que si podía y aquello podía ser divertido, al menos aquella gente parecía pasárselo bien.

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12/11/2012, 20:07
Keloa

Mientras ella misma conseguía sentarse con algo de esfuerzo, Keloa mira de reojo a Udokal y no puede evitar que una media sonrisa aparezca en sus labios. La situación le parecía la mar de divertida, aunque no lo suficiente como para olvidarse del respeto mútuo entre los miembros de su clan.

Enseguida presta toda su atención a las explicaciones de su pequeña guía, asintiendo cada vez que parecía entender algún concepto. Su gesto no cambia cuando la morena les informa de que dormirán en al misma "tienda", aunque en la piel de sus mejillas sí parece haber más color del que es habitual, sobretodo cuando Udokal da su opinión.

Como suponía que él pensaba, una cosa era dormir uno al lado del otro en pleno bosque para protegerse del frío y los depredadores. Otra muy distinta era compartir un espacio común. Aunque sólo fuera para dormir, la situación era, para alguien tan distante como Keloa, lo menos, incómoda. Pero no iba a ser ella quien mostrara el mínimo signo de incomodidad.

- No hay problema en que compartamos el mismo espacio. Entiendo que es por cuestiones prácticas y que no estáis informados de nuestras costumbres...

Asiente, sabiendo y esperando que aquella situación dure tan sólo los 3 días antes de su partida.

Luego mira a Udokal y clava su mirada gris en él para añadir en voz más baja...

- Y no voy a dejar que duermas aquí, con tanto extraño y sin mi protección.

Y es que se había acostumbrado a no perderlo de vista en ningún momento, asegurándose de ese modo de que el único superviviente de su clan, seguía con vida.

Acto seguido, desvía la mirada y se centra en la comida que tiene delante, ya fuera por hambre o por acabar de una vez con aquella incómoda conversación.

Tal y como hace el pelirrojo, obvia los utensilios que ellos utilizaban para comer, gastando tiempo inútilmente a su parecer, y empieza a despedazar la carne llevándose un trozo tras otro a la boca con la mano. A pesar del apetito, lo hace despacio, masticando bien cada bocado y disfrutando del extraño sabor, tan nuevo para ella.

No está mal... Al menos sí hay algo que hagan bien por aquí...

Mientras come, escucha atentamente a Pazzo hablar sobre aquellos círculos metálicos, y a duras penas consigue controlar su expresión de sorpresa. ¿Para qué querían esas cosas? Si no eran comestibles ni abrigaban ni servían como armas...

- Si nosotros necesitamos ropas, nuestros hermanos las arreglan para nosotros. Igual que todos necesitamos comer y mis hermanas lanceras y yo nos encargá... bamos de conseguir buenas presas... -Empieza a hablar como si fuera la cosa más lógica del mundo... Aunque a mitad de la explicación, recuerda que debe cambiar el tiempo verbal y usar el pasado... Su tono de voz, tan suave y dulce, se torna triste por sólo un momento... Hasta que Udokal vuelve a hablar.

Al contrario de lo que cabría esperar, no se sorprende en absoluto por la pregunta de éste. Aquella ración era poca para ellos... Aunque suponía que suficiente para los pequeños y poco trabajados cuerpos de aquellos humanos. Asiente a las palabras de su hermano.

- Yo también iré a buscar un poco más.

Luego vuelve a observar el extraño comportamiento de los mineros, y enarca una ceja en respuesta al reto de Udokal.

- ¿Bromeas? Claro que podría. ¿Podrías tú? -Teniendo una idea tras mirar con picardía a Udokal, haciéndole entender que si ella se moja, él también lo tendrá que hacer, mira a Pazzo y con un gesto de la cabeza señala a los mineros que hacen pulsos- ¿Podríamos conseguir cosas de esas nosotros también? -Refiriéndose a las monedas- Debemos conseguir algunas para la comida, la ropa y las armas... ¿no funciona así?

Notas de juego

Aprovecho para avisar que puede que esta semana me retrase un poco con los post... Vuelvo a estar de guardias en el Hospital Clínico Veterinario hasta el domingo... Pero después de eso, ya no tengo más prácticas hasta el año que viene! >.<

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13/11/2012, 07:29

Notas de juego

Ok. Keloa, avisando no hay problema.
Aeryn tambien esta out estos dias.

Pazzo tu turno. Me imagino que los dos O´shar se estan levantando para conseguir mas comida...

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14/11/2012, 15:14
Pazzo-Bialy Stehlen

Claro que siguen teniendo hambre. - Pazzo sonrío - ¿A donde se se quieren ir a por más carne? Me gustaría verles... - Dejó de sonreír; con la cara pálida, grito un fuerte ¡NO!, porque se acabó de dar cuenta de que estos dos son capaces de salir a fuera y comerse el primer caballo que encuentran.

-La comida se pide a la mesa y se paga con esto... La pequeña se levantó en pie y volvió a enseñarles la moneda a sus acompañantes. Si quieren comer más, tienen que esperar. Pero antes de nada, quieren ganar monedas? esperadme aquí, voy a hablar con esta gente

Pazzo era más baja de pie que los o'Shars sentados, cosa que la hizo sonreír, se dio la vuelta para hablar con los mineros y pedir algo más de comer.

Primero se dirigió hacia el dueño del local. Se acerco a la barra y le hablo con su típica sonrisa Necesitamos en nuestra mesa otras dos raciones de comida... - después de pensárselo un rato, añadió - ...con doble de carne. Con lo que estos dos comen esta noche, yo como una semana.

Se dirigió hacia una de las mesas donde los mineros hacían pulsos. Escogió a la que mejor le parecía, ya que estos no eran tan gritones y ruidosos y, a su parecer, tampoco estaban tan borrachos. Les hablo mostrando su sonrisa.

-Buenas noches, amigas. Parece que os lo estáis pasando muy bien. No se si se han fijado en mis amigos, pero parecen muy interesantes en estas competiciones vuestras. De echo, la chica esta segura de que puede ganar a cualquiera de vosotros. Yo les he dicho que sois gente muy fuerte y que no es tan fácil ganarles, pero ella se empeña en que ninguno de vosotros es tan fuerte como para derrotarla. ¡Quieren demostrarlo? ...o prefieren quedarse con la duda?

Cargando editor
14/11/2012, 16:14

- Ja!!! ¿una salvaje? ¿crees que una salvaje puede ser mas fuerte que yo, pequeña niña? ¿estas delirando? - Te dice un hombre de aspecto rudo y con la cabeza totalmente rapada.

En eso se pone en pie. Parece realmente fuerte, mas de metro ochenta y cinco, y unos 100 kg al menos, si bien esta claro que ha bebido algo. Camina hacia donde están los dos O´Shar, seguido por un buen monton de lugareños

- !!Tu mujer!!! ¿Necesitas que alguien te ponga en tu lugar? Vamos... prueba conmigo... si pierdes, seras mi trofeo en la cama esta noche! - Te dice mientras flexiona sus brazos.

Tras sus palabras varios de sus compañeros saltan en carcajadas, mientras que otros se mantienen prudentemente en silencio

Notas de juego

¿Haceis caso a Pazzo y os quedais en la mesa, sin levantaros a por comida?