Partida Rol por web

Camila Zeno nació en una de las grandes casas caballerescas de lo que es hoy Italia a la vez que su hermano mellizo, Luciano. Ambos recibieron, hasta los 7 años, una educación muy similar: su madre les enseñaba a leer y, además, se dedicaban a los juegos. Lamentablemente, al padre de Camila le preocupaba algo: su otro hijo, Luciano, no era el varón que él esperaba. Jugaba con muñecas, se vestía con vestidos… Incluso, el día que le obligó a entrar en el mundo de la caballeresca, Luciano se resistió. Por miedo a el qué dirán, no mandó a su hijo a casa de Su Señor, sino que le suplicó que le permitiera que le instruyera. La gota que colmó el vaso fue ver a su querido hijo, vestido de mujer y jugando con uno de los jóvenes que él instruía.

Su padre estaba furioso, ¡vaya ejemplo para la familia! Recluyó a su hijo en su cuarto y a Camila la cogió para suplantar su lugar. Al fin y al cabo era un poco feucha, muy fibrosa y se le daba bien montar a caballo. Daría el pego perfectamente. Entonces pasó a darle un rápido repaso a las virtudes caballerescas que cualquier hombre debería tener. La adoctrinación de Camila fue satisfactoria: deseosa de escapar del aburrido mundo del hogar, haría cualquier cosa por viajar por el mundo.
Destacó en el manejo de la espada, en la equitación y en el trato con animales. Era una mujer que destacaba por su oratoria y por su falta de miedo al enfrentarse a los demás. Y fue un claro ejemplo de lo que ocurrió cuando, al cumplir 20 años, se encontró en tras una invitación para una cena firmada por la casa Giovanni. Como muestra de educación, Camila recogió sus bártulos, compró un presente para su anfitrión y partió. Encandilada por la apariencia exótica de una mujer llamada Lady Amisa, comenzó conversación con ella. En seguida se dio cuenta de que algo extraño pasaba cuándo le ofreció un ducado a cambio de matar a un pobre gatito. Aun así, las convicciones de Camila, impresas en fuego en su mente, no le permitieron caer en la tentación.La ira de Lady Amisa fue terrible.

Para sorpresa de todos los invitados, sus anfitriones no eran humanos… eran vampiros, seres del inframundo que lo único que deseaban era alimentarse cruelmente con su sangre. Pero una torcedura del destino hizo que la mujer la convirtiera: atacaban el castillo. Camila nunca supo cómo se las apañó para huir de los asaltantes, ni para sobrevivir sola las últimas noches. Solo supo que acabó vagando por Europa durante años, ocultándose a la luz del día y alimentándose de noche. Nunca olvidó sus ideales y, una vez en Francia, perdió el miedo de la no vida y pudo permitirse compaginar las dos cosas que más quería: la caballeresca y su condición como mujer.

Mi nombre es Raffaello Giovanni, y los que llevamos este apellido en vida sabemos que la muerte es solo el comienzo y que nuestras probabilidades de ser condenados a la prisión eterna del mundo se disparan por encima de las de cualquier otro mortal.

Aun que pensaba que yo me había librado después de llevar una vida plena y larga entregado y fiel a la doctrina cristiana. Nunca imaginé que a la avanzada edad de sesenta y tres años, todavía fueran capaces de reclamarme en las galeras de la vida eterna. De hecho consideraba un regalo de dios haber podido vivir tantos años y retirarme a Burdeos, lejos de los ilustrados charlatanes de mi Italia natal.

Pero mi sire, el más antiguo vástago que jamás he conocido, necesitaba peones para su plan. En realidad lo de que lo conocí es algo relativo, puesto que nunc a lo vi en persona. Todas sus enseñanzas e instrucciones llegaban a mí en forma de correspondencia, en un sobre lacrado con un nobiliario sello rojo a nombre de Ambrogino  G. A veces me guiaba a través de libros, o hasta alguno de sus escondites donde guardaba las más preciadas colecciones; en sus cartas me hablaba de nuestra gran familia y mis hermanos: su primo Mario, Baldesar y su hermana Rosaura, Gillespi y todos los demás.

Mi opinión es que Ambrogino era un estúpido fantasioso consumido por la locura de los años, y tenía que ser su utópica búsqueda de los fragmentos del Sargon lo que le llevó a su destrucción.

Pero nunca lo supe del cierto: Un día simplemente deje de recibir noticias suyas. Por supuesto, entonces invertí todos mis esfuerzos buscándolo, pues a pesar de mi opinión sobre sus métodos lo amaba y había sido el único vínculo que me ataba al mundo durante años.

Tras su desaparición me convertí en un ermitaño, encerrado en un viejo mausoleo parisino, solo hablé con los espíritus por décadas y seguí el rastro de otros vástagos de mi familia des de las sombras. Observando alejado sus intrigas y juegos de poder.

Por casualidad llegaron a mí noticias del gran descubrimiento que había hecho el rebaño, el nuevo continente. Pensé que quizás allí encontraría a mi sire o en su defecto un lugar donde exiliarme para siempre. El resultado fue el segundo.

Los espíritus todavía me traían de vez en cuando, noticias de mi familia en las tinieblas. Fue interesante durante un periodo; había especímenes dignos de mi más profundo respeto entre nuestra casta. Pero cuánto más tiempo pasaba, más cansado estaba de las lecturas y reflexiones infinitas, y más seguro que solo había un modo de sobrevivir al paso de las edades sin que me llevara la locura o terminara por echarme a las llamas.

Me enterré, y cuando desperté del largo letargo, lo hice en un mundo desconocido, un lugar que nada tenía que ver con lo que hasta entonces había visto. Quizás un sitio donde encontrar nuevas razones para existir.

Era diciembre y habia nevado, las botas hacian un ruido sordo al moverse sobre la nieve. Dos adelante, uno atras, dos adelante, uno atras. El frio y el esfuerzo hacían que una nube de vaho cubriese constantemente mi rostro. Dos adelante, uno atras, dos adelante, uno atras, parada en cuarta y a fondo.....fallo. Mi sangre cubre la nieve con un manto rojo. Oigo a Andréa gritar y llorar a mi lado. Me la arrebatan. Me quedo solo en la oscuridad.

Así es como terminó mi vida mortal y como me convertí en un vastago. Soy Armand Dómine y era el año 1.600. Le debo mi no vida a Bernard Prigent, mi pasión por la vida, por el amor, hizó que le llamase la atención y que en algún lugar escondido de su alma ya vieja y oscura algo se encendiese de nuevo, algo ya olvidado hace tiempo. Ese fue el motivo por el que me salvo de las garras de la muerte, ese es el motivo por el cual se convirtió en mi mentor.

Los primeros años de mi existencia los pase lejos de Paris mi mentor no quería que me distrajerá de mis estudios. Me enseño a manejar la espada correctamente, a vestirme, a cortejar correctamente a una dama y todo lo demás que le correponde saber a un caballero. A pesar de que los años que pase en la villa de Gaillon fueron muchos y estuve alejado del bullicio de la corte, no se me hicieron largos ya que la admiración y amor que le profesaba a mi mentor, hacía que todo lo demás fuera banal y sin importancia.

Un día mi mentor decidió que ya estaba listo para la corte y sus arpias. Nos trasladamos a una casa en el centro de París y fui presentado en sociedad. Aún recuerdo ese día como si estuvierá en el. Cientos de ojos fijandose sobre mi persona, pero sobre esa multitud estaban los ojos del principe, que se elevaban sobre los demás, frios, antiguos que me atravesaban como la luz al cristal. Debí hacerlo bien y mi mentor debía ser una persona importante ya que obtuve la aprobación del principe y sus arpias.

Los años siguientes fueron un ir y venir de fiestas en la corte. Poco a poco me fui forjando un nombre en la sociedad Cainita. Bernard estaba orgulloso de mi, casi todas las noches saliamos a cazar juntos,disfrutaba de su presencia y él de la mia, sin embargo poco a poco mi naturaleza me pedía volar solo. Bernard hacía tiempo que sabía que llegaría ese momento, antes que yo incluso, pero se resistía a la idea de dejarme marchar. La tensión comenzo a forjarse en nuestras vidas y Bernard no pudo más que ceder a lo que era inevitable, mi marcha.

Durante un tiempo me dedique a viajar por europa, Bernard estaba enfadado conmigo pero aún me quería y dispuso que no me faltara de nada. Conocí nuevos lugares y nuevas gentes, sus costumbres, sus cortes y sus rencillas. Sin embargo al cabo de un tiempo siempre volvia con Bernard. Fue en uno de esos retornos cuando me tope con dos figuras del pasado que ya casi habían desparecido de mi mente. Eran mi verdugo y mi amante de cuando mi corazón aún latia y podía sentir el calor del sol en mi piel. No recuerdo bien que paso esa noche ya que una rabia que nunca antes había sentido atravesó mi alma muerta y salío a la superficie.

Unos días después el principe ordenó que me presentará ante él para ser juzgado por mis crimenes. Las personas a las cuales habia dado muerte eran los ghouls de un invitado suyo. Solo la muerte definitiva podía esperar por mis crimines pero Bernard intercedío por mí. Nunca supe a que favor o favores tuvo que acceder pero estoy seguro de que no fueron sencillos. Fui desterrado del viejo continente y me embarque hacia el nuevo continente. Nada sé del vastago que me robo mi vida mortal pero ya poco importa.

La historia conocida

Aunque los españoles habían enviado previamente un ejército simbólico a la frontera sur de lo que ahora es Texas, los primeros europeos establecidos en la parte principal y corazón de Texas fueron los franceses. No obstante, la presencia colonial de Francia fue breve. Después de explorar el interior del actual territorio de los Estados Unidos, René Robert Cavelier de La Salle regresó a la zona con una gran expedición diseñada para establecer una colonia francesa en el golfo de México, en la desembocadura del río Misisipi. Salieron de Francia en 1684 con cuatro barcos y 300 colonizadores. La expedición fue atacada por piratas, indios hostiles y tuvo una mala navegación. Un barco desapareció a causa de los piratas en las Antillas, otro se hundió en la entrada de la bahía de Matagorda, mientras que un tercero encalló. Lograron establecer el Fuerte de San Luis de Texas, cerca de la actual ciudad de Victoria, Texas.

La Salle dirigió un grupo a pie hacia el este en tres ocasiones para tratar de encontrar la ruta más corta entre Texas y el Misisipi. Durante la última de las búsquedas sus 36 seguidores restantes se amotinaron, y fue asesinado por 4 de ellos cerca del sitio de la actual Navasota, Texas. La colonia existió hasta 1688, cuando un grupo de indios karankawa masacró a los 20 adultos restantes y tomó 5 niños como prisioneros. Henri de Tonti envió algunas misiones de búsqueda en 1689 cuando se enteró de la suerte de la expedición, pero no logró llegar a ningún fuerte donde hubiera sobrevivientes.

A pesar del fracaso de su colonia en Texas, los franceses continuaron reclamando el territorio, incluso después de que los españoles llegaran y lo colonizaran. El periodo francés de la historia tejana es conmemorado en el Sello del estado de Texas y como la primera (o a veces segunda) de las tradicionales "Seis banderas sobre Texas".

Fechas importantes

18 de febrero de 1685: La Salle estableció el Fuerte de San Luis en la bahía de Matagorda, reclamando de esta forma el territorio tejano para Francia.
1688: La colonia francesa es masacrada.
1689: La presencia física francesa es abandonada, aunque los franceses continuarían afirmando su reclamos sobre Texas por los siguientes setenta años.

El cardenal Mazarino, Jules Mazarin (Pescina, Abruzos, 14 de julio de 1602 – Vincennes, 9 de marzo de 1661) fue un hábil diplomático y político, primero al servicio del papa y más tarde al servicio del reino de Francia.

Ese era vuestro nexo, era él quien os unía. Un hombre carismático, que hacía años que dejo de ser tan solo un hombre para convertirse en un inmortal, finalmente como todos vosotros llegó el momento en que fingió su muerte para no llamar la atención. Pasaron más de veinte años hasta que se volvió a saber de él, hasta que os contacto y os propuso algo muy interesante: un nuevo mundo, vuestro nuevo mundo. 

Pese a su desaparición de la vida pública no se había alejado totalmente de la política y alargaba la vida de varios mortales importantes con su sangre manteniendo su salud a cambio de su más absoluta fidelidad. 

Uno de sus ghouls era René Robert Cavelier de La Salle, un explorador francés de renombre que pronto sería enviado a América y a vosotros se os había ofrecido un lugar en sus naves. Aceptasteis y la flota francesa sufrió numerosas bajas, el viaje era largo y debíais alimentaros. Todo fue encubierto, al menos en europa, pero lo expedicionarios que os acompañaban estaban nerviosos. Algunos incluso creían que la expedición estaba maldita o que Dios les castigaba. Las palabras del cardenal consiguieron mantenerlo a raya un tiempo, pero no para siempre.

La población del fuerte era cada vez menor y cometisteis el error de alimentaros de los nativos, aquel fue el verdadero motivo del fracaso del dominio francés en Texas: los nativos. 

El tiempo pasaba, corria 1687, habían trascurrido ya dos años desde que los franceses se establecieron en las costas de Texas. La cosa no podía seguir así. De los trescientos hombres que zarparon con vosotros desde francia tan solo cuatro docenas seguían con vida. Llevabais meses alimentandoos de los nativos y habíais recibido respuesta por parte de esos cambiaformas, los protectores de las tribus. 

Los hombres lobo acechaban fuera del fuerte, los franceses amenazaban con matarse entre ellos dentro, Jules como se hacía llamar por aquel entonces os reunió. Os convenció de que la única forma de sobrevivir a aquello era hacer uso de vuestra habilidad más preciada: la inmortalidad.

El plan era sencillo, René os induciría al letargo y cuando todo se calmara os devolvería a la "no-vida". Tan solo tenía un fallo y es que nadie podía imaginar que el fuerte caería en menos de un año. 

No teníais ni idea de lo que podía haber ocurrido desde que las tropas francesas os estacaron y os enterraron "por vuestra propia seguridad", pero había llegado el momento de averiguarlo. 

Sus orígenes se remontan a principios del Siglo XVI a la estepa Siberiana. Su sire (Mikolai) y sus 2 chiquillos (Savage y Alexei) descubrieron un Poblado en su Dominio masacrado por unos Hombres Lobo. Siguieron las huellas y descubrieron una pequeña tribu de Colmillos Plateados. Estuvieron vigilando y cuando vieron su oportunidad atacaron y mataron a todos los Garou que estaban allí. Lo que no sabían es que la mayoría de los Guerreros estaban de caza y cuando regresaron decidieron vengar a sus camaradas caidos. Mikolai y Alexei murieron esa misma noche combatiendo a los Garou mientras que Savage a duras penas logró sobrevivir aunque las Heridas que recibió tardaron mucho tiempo en curar.

Un pequeño grupo de Garou formado por tres de los Colmillos Plateados más jovenes salió en persecución de Savage. Por fortuna para este no consiguieron darle alcance antes de que este llegara al poblado más cercano. Una vez allí se presentó ante el Principe que un poco a regañadientes lo acogió bajo su protección hasta que se recuperara de las heridas.

Cuando se recuperó el Príncipe le habló así: - Te recomiendo que te vayas lo más lejos posible pues los Garou que te persiguen no pararán hasta que te hayas alejado mucho de su territorio o hayas muerto. Ante estas palabras Savage asintió y se fué de su Siberia natal para siempre.

Pasó por territorio normando y posteriormente sajón hasta que finalmente embarcó rumbo al "Nuevo Mundo".

Dos de sus perseguidores desistieron de su persecución cuando Savage abandonó Siberia pero otro de ellos llamado Viktor "Azote del Wyrm" decidió perseguir a Savage hasta acabar con su no-vida.

Una vez en el "Nuevo Mundo" Savage deambuló sin rumbo fijo de un lado a otro hasta que finalmente decidió asentarse en Texas allá por el año 1830. A los cinco años estalló la Revolución de Texas y Savage decidió permanecer neutral salvo cuando cualquiera de los dos bandos cometía la insensatez de adentrarse en sus dominios. Cuando eso pasaba los soldados fallecían a manos de una bestia a la que no podían ni ver ni oir y que acababa con ellos poco a poco.

Un día cuando estaba a punto de atacar a un destacamento de Texanos que habían entrado en su territorio Savage detectó un olor que hacía mucho tiempo que no captaba. En el último instante se giró para interceptar en el aire a un Garou. Vas a morir por lo que hiciste a nuestro poblado. Fueron las palabras que el Lupino pronunció a escasos centímetros de su cara.

La pelea se prolongó durante más de una hora. Cuando finalmente parecía que la batalla se iba a decantar de lado del Garou se oyó el sonido de un disparo justo cuando este se disponía a darte un golpe mortal. El Lupino cayó inerte ante Savage con una herida de bala en la cabeza que rebosaba plata y sangre casi a partes iguales.

Un instante después apareció un oficial del Ejercito de Texas que se hacía llamar Jake. En señal de agradecimiento decidió participar en la Guerra junto a él hasta que pudiera devolverle el favor de salvarle su no-vida.

Participamos en infinidad de batallas aunque sin duda la más sonora fué la Batalla de San Jacinto (1836) donde entre Jake y Savage dieron cuenta del Ejercito Mejicano que constaba de más de 1600 hombres.

Después de esta vinieron muchas más en las que matamos infinidad de Mejicanos.

Una noche Thomas, el malcriado y envidioso chiquillo de Jake, supongo que corroido por la envidia de ver que su sire prefería la compañía de Savage que la suya decidió poner en marcha su plan para librarse de Savage.

Diciéndole que Jake quería hablar con él condujo a Savage hasta un establo donde lo estacó a traición por la espalda, lo metió en un ataud y dijo a unos soldados que lo enterraran.

La historia conocida

La primera declaración de independencia para el Texas moderno, tanto por pobladores anglo-tejanos como por tejanos locales, fue firmada en Goliad el 20 de diciembre de 1835. La Declaración de Independencia de Texas fue promulgada en Washington-on-the-Brazos el 2 de marzo de 1836, creando efectivamente la República de Texas.

Cuatro días después, la Batalla de El Álamo, de dos semanas de duración, terminó cuando las fuerzas del general mexicano Antonio López de Santa Anna derrotaron a los cerca de 200 tejanos que defendían la pequeña misión que eventualmente se convertiría en el centro de la ciudad de San Antonio. "Remember the Alamo!" ("¡Recuerden el Alamo!") se convirtió en el grito de guerra de la Revolución de Texas. La Batalla de San Jacinto se realizó el 21 de abril de 1836 cerca de la localización actual de la ciudad de Houston. La fuerza entera del General Santa Anna de 1.600 hombres murió o fue capturada por el ejército del General de Texas Sam Houston, de 800 hombres; sólo 9 tejanos murieron. Esta decisiva batalla resultó en la independencia de Texas sobre México. Sam Houston, nativo de Virginia, fue presidente de la República de Texas por dos periodos separados, de 1836 a 1838 y de 1841 y 1844. También fue gobernador del estado de Texas de 1859 a 1861 cuando éste ya se había incorporado a los Estados Unidos.

Fechas importantes
1835: Comienza la Revolución de Texas. A inicios de este año Stephen F. Austin anuncia que sólo la guerra con México podría asegurar la libertad tejana.
2 de octubre de 1835: Los tejanos combaten contra un destacamento de caballería mexicano en el pueblo de Gonzales, con lo que comienza la Revolución.
21 de abril de 1836: Aparentemente habiendo aplacado a la rebelión de Texas, el General Santa Anna divide a sus fuerzas. Las fuerzas directamente bajo el comando de Santa Anna avanzaron a San Jacinto en persecución de los rebeldes fugados. Comandados por Sam Houston, los tejanos ganan su independencia en una de las batallas más decisivas de la historia cuando derrotan a las fuerzas mexicanas de Santa Anna en la Batalla de San Jacinto. El ejército de Houston de 800 hombres mató o capturó a toda la fuerza mexicana de 1.600 hombres, sufriendo sólo 9 bajas. Santa Anna pasa a ser capturado.
 

Es al oficial de la resistencia de Texas a quien debes tu no vida desde hace casi dos siglos, cuando su rifle abatió a un hombre lobo apenas unos segundos antes de que sus garras te destrozaran. Por aquel entonces se hacía llamar Jake.

Pronto descubriste que se trataba de uno de los tuyos, de un hijo de la noche al que Sam Houston, líder de la revolución texana, le debía lealtad a cambio de su sangre.

En el 1836 participaste con el en la Batalla de San Jacinto. Vuestro bando contaba con 800 hombres y los mexicanos eran más del doble. Aún así la suerte estaba de vuestro lado, entre tu y Jake disteis buena cuenta de todos los hombres de Santa Anna sin apenas despeinaros. Nunca debieron atreverse a un enfrentamiento nocturno, esa fue su condena. 

Pasaste unos años a su lado en agradecimiento, de los mejores años de tu no vida. Noches llenas de sangre.  Una noche Thomas, su chiquillo, te engañó y te estacó a traición. 

Eso es todo lo que recuerdas, eso es... todo. Si encuentras a ese niño estúpido lo desmembrarás lentamente ¡vaya que si!