Partida Rol por web

-Esperad.-La mirada del joven estaba perdida en sus propios pies sin atreverse todavía a decirlo. Ves como extiende una mano donde hay una moneda de plata de 50 denarios.-Es el pago al guardia de la puerta del patio. Mi amo y una dama se ven desde que empezó el torneo. Las noches que quedan me encarga sobornar al guardia para que deje salir y entrar a la dama. La noche que discutieron en el patio yo no estaba, pero desde que mi amo comenzó el romance Sir Duain le acosaba pidiéndole que cesara en su empeño de...amar a una sirvienta.- El rostro del escudero volvió a bajar, avergonzado de descubrir el secreto de su amo.-Debeis creerme-continuó con energía,-Daolen no pudo matar a su padre, por que ese día estuvo con la sirvienta y volvió tarde, de madrugada.-

Interesante lo que me ha dicho este hombre, eso exculpa a Daelon, y el trozo de cinturón, puede que sea una pista falsa que han dejado para que creamos que ha sido el, pero ahora mismo me ha dado una sospechosa mas, y otro móbil para querer acabar con la vida de su padre.

-Escudero, necesitaré el nombre de la doncella, ya que en caso extremo que se tenga que demostrar la inocencia de Daelon, ella tendría que testificar su coartada, y también quiero saber quién es el soldado que se deja sobornar, igual el vio al asesino aquella noche.

Me quedo un momento pensando, y le comento:

-Aún no me has explicado el por qué hay un trozo de cinturón de Daelon en la escena del crimen, y esa prueba la utilizarán contra el. Yo por ahora te creo, y creo en la inocencia de Daelon, así que si sigues colaborando así, no has de temer nada.

-No lo sé,-fué la respuesta clara y directa.-Aquella noche mi amo se fué y apareció de madrugada, cuando recogí su cinturón con la espada para pulirlo por la mañana ya estaba así. Le pregunté que había sucedido, él se encogió de hombros y dijo que no tenía importancia, ya compraría otro.-

Interesante, pero eso no nos explica como ha perdido el trozo del cinturón, a no ser que mientras no lo llevaba puesto, alguien se lo recortase para dejarlo como pista.

-Bueno, supongo que el guardia que se deja sobornar es el que hay ahora mismo, pero la doncella, ¿quién es ella?

Igual tendremos que hacerle una visita, pero a horas mas normales, siendo sirvienta, no creo que nos ponga ningún problema nadie.

-Juradme que no direis a nadie su nombre ni la relacción con mi amo, pues es la doncella de la hija de Sir Frederic de nombre Magdalena.-El joven escudero os mira con rostro serio.-Juradlo.-

Miro al lacayo con cara muy seria, y le digo:

-Por San Miguel y San Jorge, lo juro, ahora ves a hacer tu cometido.

Acto seguido, voy a descansar y dormir un poco, ya que estar toda la noche dando vueltas y conversando, me había agotado.

Mañana será otro día.

Gallowein no aparece por ningún lado y  al acerse más de noche decidís ir a dormir a la posada donde encontrasteis alojamiento. Allí encontrais a Gallowein y Eliott durmiendo. 

¿Que tal Gallowain?- le pregunta nada mas llegar.

Edgar me despierta de mi sueño, y me levanto a todo correr, y mientras me desperezo, les digo:

-Saludos compañeros, ¿habéis descubierto algo?, ¿cómo os ha ido?

Se fija en Gallowain y su aspecto de acabarse de despertar

-¿Estabas durmiendo? -preguntaba algo incrédulo, aunque la respuesta parecía obvia- se supone que estabas de vigilancia hasta que llegáramos para relevarte. ¿Ahora como sabremos si alguien ha salido o entrado? -intentaba no alzar demasiado la voz para no llamar la atención, pero estaba al borde del enfado-.

Estirándome y riéndome, le comento a mis compañeros.

-Si, jejeje, ya he hecho la vigilancia, y estaba cansado, en algún momento tenía que dormir. Os informo:

"Conseguí "entrevistarme" con el escudero de Daelon, el cual me esclareció un par de cosillas, la primera, es que su amo, se "entiende" con una chica de la corte, y la noche de actos fue una de ellas, la cual no es noble, y para no dañar su reputación, no podré daros su nombre (me hicieron jurarlo, y como caballero que quiero ser algún día, no puedo traicionar a mi palabra), la segunda, que ahy un soldado que vigila por la noche, el cual se deja sobornar para que pueda entrar sir Daelon a ver a su amiga, y claro, no tengo claro si alguien mas le habrá sobornado, habría que hablar con el para saber algo mas, de la chica ya me encargaré yo si es necesario. El trozo cinturón, en efecto de Sir Daelon, y tengo la ligera sospecha de que es una pista falsa que alguien ha intentado poner para que le acusen a el. ¿El cuándo se lo cortaron?, eso no he conseguido saberlo."

-¿Y a vosotros como os ha ido?

-Vaya nochecita-dice Eliott estirándose. -Que por cierto, todavía no ha pasado. Mañana os cuento lo de las doncellas con las que hablé.- Y se vuelve a tumbar en la cama.

Gallowain, ¿no se suponía que ibas a vigilar mientras yo avisaba al resto?- pregunta, algo sorprendido de que se hubiera ido a dormir, así tan tranquilo- bueno, ya no tiene remedio. Habrá que descansar y ya mañana seguiremos con las pesquisas. 

-Descansemos pues, yo me fui a dormir, porque ya no hacia falta vigilar, sabía que el lacayo iría a visitar al guardia para que luego Daoreon fuese a ver a su amante, creí mas correcto darles intimidad, además, así mañana por la mañana encontraremos cansados a los que entrevistemos, y será mas fácil que os cuenten la verdad. Ya me contareis mañana que habéis averiguado.

Vuelvo a mi cama, y me tapo toda la cabeza para poder dormir mejor, y que no me molesten los ruidos de los demás quitándose la armadura.

Si teneis pensado hacer algo esta noche hazedlo, de lo contrario continuaré con la mañana.

-Lo que descubrimos nosotros, es que Daoreon heredará todo el territorio de su padre y le armarán caballero próximamente. Él es el único beneficiado de la muerte de su padre, salvo que alguien más saque beneficio de que Sir Duain no tenga el poder de sus tierras... -el torneo de la mañana y todo lo acontecido durante la noche, hacía que el caballero también comenzara a tener sueño y no avanzarían demasiado esa noche-. Será lo mejor que descansemos y mañana temprano sigamos.

Waldon se deshizo de la armadura y se tumbó en el lecho, esperando que el sueño le venciera pronto y el constante movimiento y ruidos no le desvelasen hasta el alba.

Me giro en la cama, y asomo la cabeza por las mantas:

-Entonces mis sospechas mas siniestras, están tomando forma gracias a esa información. Despertadme mañana cuando el desayuno esté preparado.

Me doy otra vez la vuelta y comienzo a roncar.

A la mañana siguiente, mientras desayunabais en el mesón, Un gran alboroto llenó la ciudad y es que al parecer, el día anterior en la justa de espadas, se había decidido casi todo. Ya solo quedaban 30 escuderos de los 1500 participantes y la reina presentaría el presente en público para que fuera motivo de admiración y puja de los participantes.

Ningún alma quedó en el pueblo, ni aún en el castillo esperando ver cual sería el regalo. La reina Ginebra estaba en el palco junto a Sir Frederic, dos caballeros de la tabla redonda que habían sido loss encargados de custodiar el presente se encontraban flanqueando a la reina y al duque, con el cofre del presente delante.

Los 30 escuderos que quedaban estaban montados, al pié del palco, detrás y en orden, los caballeros que se habían trasladado al lugar. Los participantes del torneo entre los que estabais vosotros formabais detrás de los caballeros también en orden y por último una algarabía de pajes, doncellas, niños y villanos en general subidos en vallas y postes, carros y mulas para observar mejor cual sería el presente que tanto ha dado que hablar.

Nadie quería perderse la presentación.

La reina se adelantó:-Pueblo de Logres,-sus palabras eran cristalinas y llegaban a todos los rincones de la arena de juego. Aún elevando la voz, no distorsionaba nada de su dulce melodía.-Hace un par de meses decidí hacer una convocatoria para un torneo inusual, celebrado solo entre escuderos. Escuderos que han demostrado su valía, su pericia, tesón y audacia. Solo ha sido posible gracias a su fé en mi y en esta empresa, pues ya se encuentran un paso más cerca del honor de ser un caballero de mi esposo, el rey Arturo.-Hace una breve pausa mientras cesa el clamor entre escuderos.-He aquí el presente que decidí para el ganador de este torneo, la máxima gloria de los caballeros y de Britania.-Los dos caballeros de la tabla redonda, máximo esponente de la orden de caballería, los mejores, aquellos que se sientan con el Alto rey en la mesa redonda, abren el cofre. Asombrados por el contenido miran a la reina, Ginebra asiente con la cabeza y los caballeros sacan el presente.......