Partida Rol por web

Llegáis a Wanchi sin más dilación.

Realmente, no es un lugar tan turbio como pensabais, aunque seguramente no viviríais en un barrio así. Las calles están llenas de bares, locales de top less, prostíbulos... Y, también, alguna que otra sastrería (que a pesar de la hora, están abiertas, algo curioso), restaurante lujosos... Incluso, al final de la calle en la que os encontráis, podéis ver lo que parece un estadio al fondo (aunque no sabéis a qué deporte pertenecerá).

Buscáis un sitio para aparcar. Aunque estáis en China, y aparcar en un lugar como ese a estas horas es casi imposible, recordemos que Feng Shui es un juego que se basa en las películas de acción, y... ¿En cuántas películas de acción hay problemas para aparcar?. Pues eso. Aparcáis sin demora cerca de lo que parece un teatro. Pensáis que allí no tendréis problemas con maleantes, se supone que un teatro es un lugar algo más culto.

Cuando os bajáis, tanto Jin Lau como Karin Wong miran a Takeshi... ¿Dónde se encuentra el lugar?. Lo cierto es que Takeshi no lo tiene muy claro, estuvo una vez, y casi que de pasada... Tendrán que buscarlo por la zona de los burdeles. Eso, claro está, si es que no quieren perder el tiempo haciendo cualquier otra cosa antes...

Se nota que te va bien el negocio Jin, menudo cochazo, me da que no podría comprarme uno de esos hasta pasado un par de años...jajaja - dice Takeshi a Jin -

Cachis no recuerdo el sitio exacto del restaurante.... - dice Jin pensativo -

Grrglgllglglglglr.... [ suenan las tripas de Takeshi ]

Vaya, con eso de las prisas y la acción no cene nada...jajaja, ¿os apetece que vayamos a algún sitio a cenar algo?, siempre hago mejor el trabajo con el estomago con algo, aunque solo sea algo de Ramen en algun puesto ambulante - dice mirando a Karen y Jin -

Tu como ya has cenado Jin, no creo que tengas tanta hambre..., por cierto...¿ has probado alguna vez Jin el licor de Bilis de serpiente? -dice mirando con curiosidad a Jin -

Me acuerdo de un puesto ambulante de comida por aqui cerca, anda cerca tambien de un pequeño bar de licores exóticos, tal vez el viejo que lleva el puesto ambulante de comida, nos diga el paradero exacto del "Club Social " de Fast Eddie que buscamos... - dice Takeshi a ambos -

El GTR de Jin cruzó el barrio Hong Kongnés. Allí se sentía como en casa, era el lugar perfecto para relajarse, de no estar en una misión, una misión que no pidió a todo esto, y no dejaba de pensarlo ¿y si Jack solo se la estaba metiendo doblada y a palo seco? ¿y si todo es mentira? o peor ¿y si fuera verdad? Esos pensamientos le taladraban el cerebro.

Jin detuvo el coche en un sitio libre.

-¿Te gusta el coche? si, es mi favorito, japonés como tu jajaja.

Jin bajó del coche y miró hacia todas partes, como un niño en una tienda de caramelos. Se abrochó el botón de la chaqueta para que no se notara el bulto de las pistolas y anduvo junto a sus compañeros.

-Claro, por mi no hay problema, me tomaré una copa. De paso podríamos preguntar el sitio como bien dices.

El escaparate de una tienda le hizo detenerse.

-¿Al final vais a dejar que os vista o no? Yo me voy a comprar un abrigo largo si o si, tengo que meter a mi pequeña bajo la chaqueta, y no podré llevar una escopeta sin un abrigo largo.

Avisó a Karin y Takeshi.

Tambien debere de ir con una de esas, o no podré esconder la escopeta ni el bate que tengo colgado en el lado derecho, cosas de cuando era Jefe de banda, no hay que perder las buenas costumbres... - dice sonriendo mientras recordaba alguna batallita con su banda de antaño -

Cuando menos se esperen que tenemos armas, mas destrozas podemos hacer, ademas....¿has practicado el tiro de palillo al malote?, es divertido, si se lo clavas en el ojo has ganado, si le metes un palilli en cada ojo, eres la puta ostia... -dice sonriendo a Jin -

Esa tienda de ropa que andas mirando Jin, esta de paso al sitio que os digo para comer algo y tomar una copa, creo que esta detrás de la tienda , si recuerdo bien.... - dice pensativo Takeshi -

Se bajó del coche tras los chicos. miraba de un lado a otro observando los alrededores, siempre tenía que fijarse bien en todo, no fueran a necesitar salir corriendo por cualquier cosa y es bueno conocer el terreno.

- Deberiamos ir a comprar algo de ropa y despues comer algo.. aunque en verdad parece que estamos aqui por placer en vez de por trabajo.. - comenta con una sonrisa por lo último que ha dicho.

Al hablar de las armas, ella responde.

- No hacen faltas armas tan grandes.. las pequeñas las puedes esconder mejor, sobretodo las chicas que llevamos tan poca ropa.

Decidís que de momento, lo mejor será ir a un lugar dónde os puedan proporcionar vestimentas para ocultar vuestras armas. Andáis un poco por la acera, y llegáis a una sastrería, sin demora, accedeis al local.

Allí todo está mango por hombro, nunca mejor dicho, mientras un hombrecillo, ya de avanzada edad, corretea de un sitio a otro, cogiendo agujas de un lado, una cinta métrica de otro, trozos de tela de un lugar y de otro... Parece que no se percata de vuestra presencia, el tío está metido de lleno en su trabajo...

Yeiii, ¿alguien que pueda servirnos de ayuda con la eleccion de ropa? - dice encarando la voz al hombre bajito -

Mientras responde o no aquel hombre, empieza a mirarse ropa en la tienda, cogiendo una elegante gabardina, ni muy antigua, ni muy a lo matrix, algo entre medias que daria el pego en algun sitio para vestir bien.

¿que tal em sentaría esto Jin y Karin?,¿estoy elegante?, es muy al estilo de uniforme largo de gabardina de cuando estudiaba en el Instituto, que tiempos...jejeje - decia sonriendo, recordando antiguas batallitas de cuando era jefe de banda juvenil -

Jin saludó al hombre educadamente y se introdujo en su local, mirando las estanterías, tocando la tela con los dedos para notar su textura y calidad, pero levantó la cabeza de sus quehaceres para opinar sobre la prenda de Kitano. Jin asintió y levantó el pulgar.

-Ey, me gusta. Aunque yo te pondría bajo ella un buen traje.

Jin se acercó a una estantería y cogió una minifalda y se la enseñó a Karin con una sonrisilla y con un leve arqueo de cejas.

Luego se aclaró la garganta y la dejó en el sitio que estaba antes.

-Señor ¿Tiene usted algún traje italiano? este cuerpo solo lo toca ropa europea ¿entiende? aunque no le hago ascos a la tela Libanesa ; también me gustaría un abrigo de media cola, azul o en su defecto negro.

Inquirió, luego señaló a sus compañeros.

-Algo elegante para ellos, yo pago esta ronda.

Jin sacó algunos billetes para parecer convincente, y se puso a contarlos.

Entraron en la tienda y observó al que era el dueño, le resultó gracioso ver como corría de un lado a otro.

Mientras sus compañeros le preguntaban y pedían la ropa, ella caminaba acariciando cada tela, viendo cada vestido o traje que habia alli. Hacía tanto tiempo que no entraba en una tienda asi para comprarse ropa de ese estilo.. hacía muchisimo tiempo. Podría decir que desde que está con ellos, no se había vuelto a poner ni una falda ni un vestido.

Cuando Jin le enseñó la falda, le miró y alzó una ceja, negó con la cabeza.

- Si vosotros vais a ir de etiqueta, yo tambien.. y esa prenda no es muy elegante..

Mira la gabardina que les muestra Takeshi y sonrie.

- Te queda genial, como un guante.. pareces otra persona vestido asi - rie mientras sigue observando la tienda.

Takeshi se queda como petrificado viendo una chaqueta de hombreras remachadas, acaricia la chaqueta, su rostro parece super serio, casi como a punto de salirsele las lágrimas.

Yui..... - dice en un sussurro apenado, mirando la chaqueta fijamente mientras acaricia los hombros, la chaqueta, con la punta de los dedos -

Jin, si no te molesta esta la pagaré yo, se la debo a alguien..., es algo personal del pasado - dice mirando apenado la chaqueta, muy serio -

Jin miró un momento a Takeshi, iba a protestar airadamente, pero algo en su mirada le dijo que no lo hiciera.

- ...Por supuesto

Dijo serio, haciéndose hacia un lado para que pudiera pagar al anciano.

Las ropas de este lugar son demasiado caras para vuestro nivel adquisitivo. A lo que podéis alcanzar, es a una ropa decente, quizás de marca, pero no a esta clase de ropa. Por lo que estáis viendo, esta ropa parece bastante cara... Al menos la calidad de los tejidos que veis es superior... Ni sisando de la caja del Restaurante podríais llegar a comprar esto...

Ya podéis echarle cara, y que pague Jin Lau, o la única ropa que tendréis será la que lleváis puesta...

El hombre por fin se percata de vuestra presencia. Le decís lo que queréis, y empieza a sacar varios tejidos de una calidad cualto menos, sublime. Parece que este sitio es de calidad... Aunque claro, la calidad, seguro que se paga.

Dais al hombre unas directrices básicas de lo que queréis, y rápidamente se dirije hacia lo que parece la trastienda. Después de unos momentos, viene cargado con una gran cantidad de ropa... Os dice que os la probéis. Cada uno se dirije hacia unos de los vestidores que tiene en un lado de la tienda. Lo cierto es que la ropa os queda bastante bien, no haría falta ningún ajuste.

Tras vuestra aprobación mutua, el hombre, mirandoos, os dice- ¿Os lo llevaréis puesto? ¿Quién pagará? -Diciendo esto último, os mira. Exceptuando a Jin, por la ropa que vestíais, no tenéis pinta de tener más dinero que un currito normal, y la suma de la ropa, es elevada...

¿¡¡ 300 000 yenes la chaqueta !!?,¿que está tejido de oro o qué? - dice con los ojos desorbitados Takeshi mirando al dependiente de la tienda, con una cara, que tenia toda la intencion de machacar la cabeza a aquel hombre con el bate de beisbol -

¡¡¿ pero si es una simple chaqueta ?!! - decia aun bastante enojado Takeshi -

Cabreado deja la ropa que escogio en su sitio, además de dejar con recelo la chaqueta que había cogido, mientras la cariciaba por última vez y le daba un beso con la mano, al poco salió de la tienda muy cabreado pegando un portazo.

Jin observó la reacción de Takeshi ¿que le ocurría, por que era tan importante esa chaqueta?. Luego se volvió hacia el tendero.

-Discúlpalo, es extranjero. Ponlo a mi cuenta.

Jin sacó una tarjeta del bolsillo. Por supuesto, no tenía su nombre real, pero era totalmente legal, abierta en Suiza, que, junto con Islas Caimán, era el lugar favorito para que asesinos y maleantes abrieran cuentas. Había oido que era sobre un rollo para que no le robaran dinero y demás, pero él lo hizo, pues, como casi todo lo que hacía en la vida: porque quedaba guapo.

-Incluya esa chaqueta, por favor.

Dijo refiriéndose a la del japonés.

-Oh si, nos las llevamos puestas, vamos de fiesta.

Luego señaló a Karin con una sonrisilla.

-Si sobreviven a esta noche estas ropas, le hablaré bien de su tienda a mis amigos.

Dijo con doble sentido, que solo cogerían sus compañeros.

Despues de dar varias vueltas por la tienda mirando cada prenda de ropa que había por allí, se decidió por un vestido de color oscuro y corto, que vió perfecto para la ocasión y, ¿por qué no? Que le había gustado y era de las pocas oportunidades que tenía de comprar un vestido de gran calidad y parece que bastante caro.. pero no dirá que no.

- Yo me lo llevo puesto.

Dijo al tendero y salió del probador con él ya puesto, en los brazos llevaba la ropa que traia puesta. Lo dejó sobre el mostrador y dió una vuelta sobre si misma.

- Qué os parece??? - preguntó a sus compañeros - Es adecuado?

Bien, perfecto... -Diciendo esto, el hombrecillo toma la tarjeta de Jin Lau. La pasa por la máquina, os cobra, le da a Jin la cuenta... Todas esas cosas que no son interesantes para el trascurso de los hechos porque no tienen disparos ni situaciones emocionates. Así pues, salís del lugar vestidos para ir de fiesta, cargados con las bolsas donde se encuentra vuestro anterior vestuario.

Ahora, podéis elegir. Tenéis puesto de comida ambulante, restaurantes, locales de fiesta... Todo eso sin olvidar a lo que habéis venido aquí, y es a destrozar el local de Fast Eddie.