Partida Rol por web

Ya habian tenido tiempo suficiente de estudiar el comportamiento del monstruo y Urumi se percat de que una maniobra a la defensiva sería inutil. Atacó ahora a la cabeza, el cuerpo central pero no de una forma corriente. El ser apenas se inmutaba de los daños lo cual significaba que poseía un ferreeo blindaje. De modo que si no podían dañarle desde fuera, habría que destruirle desde dentro.

La joven mentalista, intenta levantar su escudo para interponerlo entre ella y el ataque, aunque es demasiado lenta y el chorro de agua la alcanza de lleno tirándola al suelo y provocándole varias heridas.

Por su parte, Urumi se acerca y le aplica Ki directamente al Leviatan, con la intención de herirle. Pero parece que sus escamas son demasiado resistentes para el ataque de la joven.

Esto se esta poniendo muy peligroso. Lo mejor es atacar hasta que caiga, pero si me acerco lo suficienta, si vuelve a hacer un ataque en area de esos, podria colocar mi escudo de forma que proteja a todos.

Una vez que mi plan esta mas o menos desarrollado, avanzo a donde se situa el Leviatan y le golpeo con mi espada mientras preparo mi escudo para cualquier posible contraataque

El leviatan gira un momento la cabeza, aprovechando el momento para que Yusuke deslice su espada entre las escamas de la criatura, clavando su arma varios centímetros en su tierna piel.

La criatura ruge de dolor, pero se mantiene en su sitio.

AAAAUUUUUHHHH me duele todo...

Jumai, sigue concentrado mientras sigue acumulando magia a su alrededor, la cual crepita en pequeños relámpagos.

El Guardián junta las manos y entre ellas se acumulan las descargas eléctricas. Y, en un momento, lanza las manos hacia delante disparando la esfera eléctrica.

El impacto alcanza al Leviatan y, en cuanto lo haces, la electricidad recorre el cuerpo entero del monstruo y, en apenas unos segundos, empieza a oler a calamar a la plancha.

Tras unos minutos, el calamar lanza un último rugido lastimero y se sumerge innerte en las aguas.

Al ver como el calvo concentraba tanta energía eléctrica para luego lanzarla con gran poder contra el Leviathan sonreí.

No aparté la vista ante los destellos de energía aprovechando que tenía los lentes puestos, observé como la electricidad recorría a la criatura y la iba friendo por dentro.

-Bien hecho viejo, bien pensado, es ciencia!- bueno había sido magia, pero tuvo que pensar un poco para ello- excelente!- dije levantando el puño con el dedo pulgar levantado.

Suelto un suspiro de alivio mientras me siento en el suelo.

---Parece que ya está, hemos acabado con la criatura....- el agujero sobre mi cabeza se cierra hasta desaparecer- ¿ Estais todos bien? ¿ Hay algun herido?

La descarga llena de luz el ambiente friendo literalmente a la criatura que se hunde inerte en el agua. Urumi no tiene claro si el leviatán ya estaba en las últimas o el poder de Jumai ha sido tan grande que ha acabado con él casi de un golpe. Sea cual sea el caso, no puede más que elogiarle.

-Bravo monje, ha sido espectacular. Salvo unos rasguños superficiales nada grave Khenta. No bajéis la guardia aún, tal vez haya más sorpresas.- 

Le preocupaba la estabilidad del barco y si podrían llegar a puerto a pesar de los daños en él. Eso es algo que solo el capitán podría saber.

Ellos están contentos, celebrando ya la victoria. Pero a mi me sabe amargo, a derrota. He recibido dos heridas, el Leviatán se me ha resistido, además se ha escapado Velfire y he hecho el ridículo. La vergüenza me absorve, no sé como me podrán mirar-me a la cara...

-"Buen trabajo monje, ojalá pudiera decir lo mismo de mí..."-

- ¿Estáis todos bien?

Pregunta el capitán desde la zona del puente.

---Creo que si ¿ hay algun herido entre los marineros?- pregunto preocupado por los demas- Deberiamos alejarnos de esta zona cuanto antes, no sea que hayan mas brotes....

Por el comportamiento de los tripulantes de la nave, parece que ya está, que se terminó con el Leviatán, y que Velfire se ha ido. No obstante quiero asegurarme de que estamos fuera de peligro.

-Perfectamente- dije limpiándome el polvo de la ropa y guardando la daga- perdí una daga pero bueno...compraré otra en cuanto lleguemos a destino-

Tras decir esto me acerqué a Lilith y le ofrecí la mano para ayudarla a levantarse.

-Estas bien? Quieres que revise tus heridas? Lo hiciste muy bien, cambia esa cara- le dije sonriendo.

El peligro pasó y el aura de Urumi fue calmándose progresivamente.

-Solo tengo unos pocos arañazos, nada grave. El barco parece haberse llevado la peor parte. ¿Seremos capaces de llegar a puerto, capitán?-

Se sacudió el polvo y se frotó un poco las magulladuras. La gabardina había hecho su función, aunque era probable que cuando desembarcaran necesitara algunas ropas nuevas, ya que las suyas habían quedado con desgarros y no era una imagen agradable para un Guardián.

Dynamo se ofrece para ayudar con mis heridas, pero la verdad es que me da pavor... No obstante estoy herida, y no sé cuanto encontraré a una sanadora con la que no mie siente incómoda.

-"Me sentiría mejor si me revisara una mujer, pero no sé si Urumi o otra chica aquí en el barco me podría curar. Pues todos son marineros. Aihhh..."-

El leviatán había sido derrotado, y por ahora se podía decir que estaban fuera de peligro. Habían superado la primera prueba de su peregrinaje con creces. Ante los elogios de sus compañeros, Jumai recupera el buen humor y olvida las penurias del viaje.

-Esta victoria la hemos logrado entre todos, podéis sentiros orgullosos de vuestro trabajo. Especiamente tú- dirigiéndose a Lilith- Jamás hubiera pensado que una jovencita como tú pudiera albergar semejante poder. 

Tras el discurso moralizador, Jumai se gira y observa el estado del barco y la tripulación

-Si alguien está herido, yo puedo curarle con mi magia- dice Jumai mirando a sus compañeros y al capitán.

Las palabras del monje llenaron mi corazón, a pesar de mi fracaso mis compañeros me habían tratado mejor que nadie (sin contar mis santos padres).Con mi pazucha tapo mi rostro y con una trazada rápida borro con mi muñeca las lágrimas de mi rostro. Entonces les hablo usando mi mente:

-"Gracias, sois todos muy amables, y lo importante es que Khenta está bien y que llegaremos a nuestro destino."- Esto se lo digo a todos. -"Jumai, tu curación me iría de perlas."- Esto solo a Jumai. -"¿Donde perdiste tu daga? Podría devolvértela, o al menos intentarlo..."- Sólo a Dynamo.

-Pues...- me erguí y me rasqué la  nuca- se la lancé a Velfire y esta rebotó en su escudo y cayó al agua, siendo acero ya debe estar varios metros bajo el agua, pero bueno tampoco es que era una gran daga mítica o algo- comenté quitandole importancia al asunto.