Partida Rol por web

Fuga

3. En el piso superior: examinando la planta.

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09/12/2009, 22:51
Ella Krazmersky

Ella sonríe tranquila ante la pregunta de Updike - La casa ya contaba con este cuarto antes de que nos mudásemos a ella. Tan solo hemos aprovechado esta habitación para guardar las cosas a las que menos uso damos. No tendría mucho sentido tener aquí un dormitorio... ¿no?

Después miró los rostros de ambos presos. - Parecen cansados, puedo prepararles algo de comer? Pueden estar tranquilos... tan solo somos un par de ancianos que solo queremos que pase esta noche lo más tranquila posible y que todo termine cuanto antes.

Las palabras de Ella suenan en todo momento sinceras y logra mantener ese tono tan tranquilo que empieza a caracterizarla. Tristán a su lado tan solo os mira, sin separarse de su ama.

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10/12/2009, 19:44
Steve Updike

Ladeo un poco la cabeza para mirarla y le dedico mi mejor sonrisa de comercial para expresar:

-No estaría mal, señora, no estaría mal… ¿Verdad, Morton? Pero por favor, abra esa puerta; no es que no me fíe, pero ya que estamos…

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10/12/2009, 19:49
Director

Ella abre la puerta de la habitación que queda en la planta superior. Es un cuarto algo pequeño que también parece no haber sido abierto en años. Este, al contrario que los otros dos, sí está amueblado. Tiene una cama en el centro de la habitación, con dos pequeñas mesitas, una a cada lado. En un lateral hay un armario de madera con motivos idénticos a los que figuran en el cabecero de la cama y en las mesitas. En un rincón se encuentra un tocador, con un espejo ovalado, también con los mismos motivos tallados en el marco del mismo.

Lo que os llama la atención es justo lo que hay en el rincón contrario. En una esquina podéis ver un niño vestido con ropa india, sentado en el suelo ante una caja repleta de utensilios para limpiar calzado. El niño os mira en silencio sin moverse.

 

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11/12/2009, 13:45
Morton Willis

Se encogió de hombros tras la proposición de Updike y continuó hacia la siguiente habitación.

Una vez más había una criatura de aspecto humanoide en la sala. Se adelantó unos pasos para observar la nueva sorpresa que le traería el nuevo artilugio.

¿También lo ha fabricado su marido? —dijo mientras avanzaba hacia el muchacho.

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11/12/2009, 14:03
Steve Updike

¿Cómo impedir que se me desencaje la mandíbula a causa del asombro? Miro a Ella, luego a Morton, a Ella otra vez, y de nuevo al ¿chico? ¿Es un niño auténtico, o tiene razón Morton y es un juguete de cuerda, como el barbero de la repisa, sólo que llevado a unos extremos increíbles de perfección? Pero entonces, la niña del violín… ¡Es sencillamente imposible! ¿Y quién los habría construido, Uder, ese viejo? ¿Pero dónde coño hemos venido a refugiarnos? Y esta mujer, Ella, ¿por qué no nos cuenta nada?

Me giro hacia ella, la sujeto por los brazos y la meneo, trato de no ser muy brusco, pero es que jamás tuve paciencia con las mujeres.

-¿Dígame, qué es esa cosa? ¿Me lo dirá? –le exijo.

Y ni siquiera espero a que conteste, me encamino hacia aquel ingenio, quiero saber, quiero tocarlo, comprender cómo funciona, cómo es posible que parezca tan real, por qué es tan fidedigna copia de la realidad, qué sentido tiene más allá de su funcionalidad: la de limpiar zapatos.

Incluso le hablo:

-¿Chico? ¿Chico?

Alargo unos dedos temblorosos para tocarle en el hombro.

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11/12/2009, 17:01
Morton Willis

Morton sonrió ante las evidentes muestras de nerviosismo que mostraba Updike. Más que sonreír marco una diminuta sonrisa sobre la comisura de los labios.

Dio un paso atrás y se cruzó de brazos. Observaba a Steve apresurándose por obtener una respuesta del muñeco.

Ahora Morton se sentía triunfal y un brillo en los ojos aclamaba su éxito. Una vez más la paciencia del hombre había dado su fruto.

Prueba decir las palabras mágicas... quizá funcione —se burló con sorna.

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11/12/2009, 19:07
Director

Notas de juego

Updike, una tiradita de mente por favor?

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12/12/2009, 02:04
Steve Updike
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Creo que era así, excelsa directora...

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12/12/2009, 11:38
Ella Krazmersky

Updike parece nervioso, antes de que Ella pueda responder a las preguntas de ambos hombres, Updike parece perder la paciencia y la agarra por los brazos dándole un meneo. En ese momento, Tristán se adelanta a su dueña encarándose con Updike. El perro comienza a gruñir y ladrarle defendiendo fiel a su ama mientras esta trata de tranquilizarle. 

Tranquilo Tristán, todo va bien, tranquilo. - A pesar de todo el perro permanece a la defensiva, ya no ladrando, tan solo gruñendo al desconocido.

Updike parece obsesionado con el limpiabotas, pues se acerca a él tratando de examinar y comprender cómo funciona aquello. A las palabras de "Chico, chico", Updike no obtiene respuesta alguna.

No habla, tan solo limpia los zapatos. Basca con que coloques tu pie sobre el peldaño para ello y comenzará a funcionar. - Trata de explicar Ella ante la mirada socarrona de Morton, quien parece disfrutar del nerviosismo de Updike.

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12/12/2009, 11:47
Director

El examinar a estos aparatitos supone un reto de lo antinatural, enfrentarte a un tipo de tensión mental el cual no has superado. La situación comienza a superarte. No alcanzas a comprender cómo alguien como Uder es capaz de fabricar aquellos muñecos tan reales. Al obsevarlo parece terriblamente humano, su aspecto, su mirada, su respiración, pues incluso parecen respirar! No entiendes nada, y aquello empieza a ponerte nervioso, demasiado nervioso.

Además, tener a Tristán gruñéndote de esa manera solo conseguía incomodarte más aún, si cabe, a pesar de que adoras a los animales, pues siempre te han parecido los seres vivos más respetables, lo que ves es lo que hay, no como las personas...

 

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14/12/2009, 11:01
Steve Updike

Retrocedo, las corvas se me vencen contra el filo de la cama y caigo sentado, dejando caer los brazos. Jamás me he sentido tan superado en mi vida ni siquiera cuando el juez, un feminista de los cojones, me condenó. Tengo los ojos brillantes y se me han erizado los pelillos de la nuca.

Los gruñidos del perrito taladran mi estupefacción. Giro el torso hacia ellos y trato de hacer un gesto para calmarlo, lo que piensen los otros dos no me importa demasiado. Me mojo los labios y expreso:

-Qué cosa maravillosa.

Maravillosa y espeluznante, por supuesto. Cuando me levanto y camino de vuelta a la puerta, pongo mucho cuidado en mantener las distancias con aquel limpia-botas mecánico.

-No me lo explico –expreso mi desconcierto-, con todo este talento que posee su marido, señora, ¿por qué no viven en una lujosa mansión? ¿Es que no tienen representante?

Meneo la cabeza, observando de nuevo el ingenio.

-Increíble –musito.

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15/12/2009, 13:47
Morton Willis

Permaneció callado esperando la contestación de la mujer.

Todavía permanecía dibujada esa exitosa sonrisa y Morton se recreaba en ello cada instante que pasaba.

Se acercó al ingenio y colocó el pie sobre él activando el mecanismo.

Es inofensivo —se burló.

- Tiradas (1)
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15/12/2009, 13:57
Director

Notas de juego

Tiradita de mente para el señor Morton?

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15/12/2009, 14:01
Morton Willis
Sólo para el director

Notas de juego

Lo dejé tirado en el post anterior por si hacía falta.

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15/12/2009, 14:04
Director

Notas de juego

Uy! perdón no lo había visto, aún no me acostumbro a eso de los dados escondidos ^^ ok ahora posteo.

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15/12/2009, 14:04
Director

Morton, aún sonriendo, coloca su pie en el artefacto. El joven se inclina cogiendo rápidamente uno de los botes de betún con el color más similar a la del calzado de Morton, y con un trapo comienza a limpiarlos. Sus movimientos son rápidos, precisos, coordinados... Nadie diría que se trata de un autómata más, parece totalmente humano.

En cuestión de unos segundos deja el zapato de Morton reluciente, y con un gesto de sus manos, invita a Morton a colocar su otro pie sobre el limpiabotas para repetir la operación.

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16/12/2009, 23:11
Steve Updike

-Increíble –repito.

Claro que también es increíble que Morton se muestre tan… inconmovible.

Sea como sea, luego de mirar de refilón las zapatillas que me he agenciado, considero que llega el momento de reunirse con los demás.

-Muy bonito, Morton, ya lo he captado –respondo huraño. Y volviéndome a Ella: -Está bien, señora, volvamos al dormitorio. –Casi se me olvida el toque de amabilidad: -Si no le importa.

Notas de juego

¿Volvemos al dormitorio, por favor?

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17/12/2009, 11:18
Morton Willis

Con un gesto Morton le recriminó a Updike el poco sentido del humor y, acto seguido, camino fuera de la habitación.

Una amplia mirada terminó de revisar el pasillo centrar en busca de alguna otra habitación por revisar. Confirmado el resultado negativo siguió a los otros dos camino al dormitorio.

Notas de juego

Al dormitorio!!