Partida Rol por web

Tras hablar por el intercomunicador, puse rumbo a la base para dejarles allí.

La velocidad de Clave volando era mayor que la del sonido, así que tras escuchar un breve ¡BOOM! y notar una ligera estela, pudisteis ver como Clave lograba huir de allí junto con Salcedo y su esposa. La misión había sido completada y esta vez con éxito.

El problema era Granito, y al parecer, también lo era Brainstorm, que tras tomarse su tiempo apuntando al bloque de piedra humana, algo pasó en su armadura. Parecía que no había sido reparada bien, o que algún mecanismo se quemó y aquel rifle explotó sobre él mismo, dejándolo gravemente herido y con un brazo desangrándose. El dolor era enorme y tan solo tardó unos segundos en perder el conocimiento.

Por último, Mercurius logró encajar un duro golpe en Granito, haciendo que aquel metal solidificado que eran sus brazos lograse agujerear una ligera parte de su cuerpo, después Milo, combinando su ataque con el de su compañero, algo que deberían haber hecho desde el principio, golpeó en el mismo punto, haciendo que la grieta se hiciera aún mayor y finalmente, Carlos logró que su disparo penetrara en la dura coraza que era la piel de aquel metahumano. Segundos después, y aún escuchándose los gritos de Brainstorm, Granito cayó tan inconsciente como el resto de sus compañeros.

La misión había sido un completo éxito. Parecía que cuando los planes se organizaban bien, podrían conseguir cualquer cosa que se propusiesen... Pero el problema ahora era Alec, el pobre había sufrido un duro golpe en su brazo. Y la cosa pintaba mal, tremendamente mal...

Gra... gra... gracias... ¿Quiénes eran estos y quiénes sois vosotros? Dijo Salcedo a Clave con los ojos casi cerrados.

No parecía ser real. El plan había sido exitoso por una vez y salvo alguna que otra desinteligencia, todos habían hecho lo que debían. Pero la victoria no había sido gratis, Alec estaba mal. MAL.

_¿Milo, tú eres el más rápido, verdad? ¿Puedes llevarlo con Chaman? Mercurius y yo saldremos por donde entramos.

De todos modos a Carlos había algo que le molestaba profundamente. Todos esos hombres allí indefensos, a su merced... ¿No habría que hacer algo con ellos? ¿Aprisionarlos para que no hicieran más mal? Pero no se le ocurría cómo.

Todo había salido bien, afortunadamente, pero...

¡Nooo!

Rápidamente, tras escuchar a Carlos, agarré a Alec y lo saqué de allí a toda prisa. Tenía que llevarlo ante Chamán, él sabría qué hacer.

_Mercurius ve adelante, yo te sigo.

Aumentando la velocidad lo máximo posible, volé hacia el refugio para que Chaman pudiera sanarlos en caso necesario. Casi no escuché la pregunta del hombre y, sin mirarle, le contesté evasivamente.

Nada, mala gente que quería apresarle. Está a salvo y le explicaran todo lo necesario en cuando se sientan mejor.

Apreté el vuelo, quería llegar allí cuanto antes.

Milo montó a Alec en el coche de Ofelia.

Hola  - saludé a Ofelia. Alec necesita ayuda rápido, tiene este brazo francamente mal y está perdiendo mucha sangre. Hay que ir a toda prisa.

Tras ver como todo iba sucediendo rápidamente y quedándoseMercurius y su compañero solos con los enemigos nokeados,  miró a Carlos y sonrió, -"Hace tiempo cuando trabajaba para la poli, escuche que habían diseñado unos grilletes de manos y pies que iban conectados a un collarín que inician los poderes mutantes..."-, luego mira para todos los enemigos inconscientes en el suelo... -"¿Podrías materializar un juego de estos para cada uno...?, sería bueno meterlos en las sombras durante una larga temporada, ¿no crees...?"-

Carlos escuchaba voces por el telecomunicador pero intentaba no prestarles atención para poder concentrarse en algo más importante. Si las cosas que Mercurius decía existían, din dudas era la oportunidad de hacerlo, para evitar futuros enfrentamientos y poner fin al peligro del Apocalipsis.

Pidió a Mercurius, que conocía esos collares, que transformara su brazo en ellos, para tener una visión clara de qué debía hacer aparecer. Con esa visión y la tranquilidad con que contaban al menos en ese momento, esperaba tener éxito. Si no deberían huir antes de que todos despertaran.

Definitivamente ése día casi todo salía bien. Los collares aparecieron y entre Mercurius y él se los pusieron a los rufianes.

_Mercurius, revisa que estén bien puestos por favor, que tienes experiencia en esto, y si está todo bien avisa a la base para que vengan aquí a buscarnos.

Jimmy se asegura de que todo este correctamente y luego llama a la base... -"Compañeros,? Carlos y yo tenemos una sorpresita para vosotros, necesitamos que vengan a buscar nos con un vehículo grande, resistente y seguro..."-

Tras terminas de hablar con la base, Jimmy coge el tlf y llama a uno de sus contactos de la policía... luego de unos minutos cuelga y mira a Carlogs... -"hecho... ya están en camino..."-

_Deberíamos intentar interrogarlos antes de que lleguen, ¿no? No tendremos otra oportunidad, si la policía se hace cargo quizás nunca sepamos para quién trabajan.

Carlos empezó a ir de un lado al otro cacheteándolos para que despertaran, y así poder preguntarle quién era el jefe a cualquiera de ellos.

-"Me parece una Buena idea, además con estos dispositivos no podran huir a ninguna parte jeje..."-

Tras los golpes recibidos por parte de Carlos, Flora se despierta y abre los ojos. Se le queda mirando y le lanza un escupitajo de color verde fosforescente a la cara. Luego mira a su alrededor para comprobar el estado de sus compañeros y al comprobar como Fiebre está rodeado de un charco de sangre os vuelve a mirar y os grita:

¡Asesinos! ¡Asesinos!

Con Brainstorm ya en la base, y Milo y Clave cargando con él, Chamán lo atiende y lo mete directamente en uno de los lugares que os habían habilitado hacía ya bastantes meses atrás. Hacía mucho tiempo ya desde vuestra llegada a Superhéroes Inc. y hacía mucho también que no habíais tenido que usar aquellos compartimentos de sanación que había diseñado Chamán.

Pero ahora, lo prioritario era introducir allí a vuestro compañero y dejar que el líquido y el poder de vuestro jefe sanador hiciese el resto del trabajo. Alec era clave en lo que restaba de misión, él tenía que convencer a Salcedo de que trabajase para su empresa, antes de que la otra empresa lo encontrase, lo contratase y de nuevo se organizase el cataclismo que iba a suceder en el futuro.

_Si quieres que le salvemos la vida responde rápido: ¿Para quién trabajan? ¿Por qué secuestraron a ese hombre? En cuanto tengamos respuestas le daremos asistencia médica.

-"No mas que vosotros, que queriais acabar con el mundo... Ya sabeis de lo que somos capaces y ahora solo sois unos simples presos simples... será mejor que colaboreis si es que no os quereis quedar así, malheridos y sin poderes..."-

No sabemos su nombre, pero quien vino nos avisó de que Salcedo era un hombre muy importante para el futuro. Un futuro en el que nosotros obtendríamos un buen puesto si le ayudábamos. Salcedo era una pieza muy importante en sus planes y debíamos evitar que vosotros lo encontraseis.

Ahora soltadnos y curadle. ¡Cumplid vuestras promesas!

_¿Soltarlos? Nunca hablé de soltarlos, hablé de curarlo, y lo haré si eres más específica. ¿Cómo nos contactamos con él, o cómo lo encontramos? ¿Y a ustedes nunca se les ocurrió preguntar qué tipo de futuro era ése? ¿Secuestraron a un hombre solo para obtener un buen lugar en el futuro? Me das asco, pero aún así necesito tus respuestas, y tu amigo herido las necesita aún más.

Carlos entonces dio la vuelta para dirigirse a Mercurius.

_En cuanto esta chica diga todo lo que sabe, llama una ambulancia. Cumpliremos nuestra palabra.

La chica no sabía que la policía ya estaba en camino y no tenía por qué saberlo.