Partida Rol por web

11:50

31 de diciembre de 2012

Castillo de Wyvern, Manhattan, New York.

La fiesta estaba siendo todo un exito. La alta sociedad estaba a tus pies, entregada y embobada con la hermosa escentricidad de construir un castillo entre las nubes. La supermodelo de moda te habia lanzado miradas toda la noche, una copa mas y celebraria el año nuevo bajo sus sabanas de seda.

La musica sonaba y la vida era perfecta.. o casi.

Los ultimos meses de empeño en lograr aquella gargola robada terminara en tus manos habian sido fustrantes. El ladron habia terminado apresado por la policia irlandesa cuando intentanba sacar la mercancia del pais ilegalmente. Debia ser dificil esconder semejante estatua en una maleta...

El asunto estaba que dicha gargola habia sido devuelta al museo y el dinero invertido, perdido. Owen habia entablado una serie de negociaciones con el ayuntamiento para comprar la pieza pero al tratarse de una antiguedad tan rara, la alcaldesa estaba haciendose dura de rogar.

Me encontraba charlando con todos los asistentes a la celebración, intercambiando algunas palabras por compromiso y cordialidad con ellos, y sonriéndoles, a veces incluso tomándonos algunas fotografías.

Me asegure de agasajar especialmente al alcalde, al jefe de policía y al curador del museo, sin perder la oportunidad de beber unas copas de champagne con la modelo del año, cuando cruzaba a Owen le preguntaba si había alguna novedad:

-"Te diga lo que te diga la alcaldesa, envíale un regalo de parte de Xanatos Enterprises, algo bonito, por las molestias ocasionadas...quizás eso la afloje, sin embargo hoy tienes permiso de divertirte amigo mío"- dije chocándole una copa de champaña para luego seguir hablando con los invitados. 

11:59

Todos los invitados se preparaban, copa de champan en mano, para la cuenta atras. El confeti, los globos de colores... tenias fuegos artificiales perparados para que comenzaran a iluminar el cielo en cuanto la ultima campanada sonara y algunas sorpresas por el estilo.

Owem se acerco a ti con el gesto preocupado y mientras la cuenta atras daba comienzo te susurro.- Señor, tenemos un problema con la gargola de la entrada... se esta... autodestruyendo.- dijo sin saber muy bien como explicarlo. Sin mas se giro y comenzo a caminar fuera del salon. Tu preciosa gargola estaba en otra ala del castillo, frente a la puerta de lo que un dia fue el salon del trono. Owen caminaba acia alli con pasos rapidos, realmente era algo preocupante.

11:59

31 de diciembre de 2012

Castillo de Wyvern, New York.

Despues de pasar mas de mil años convertido en piedra, sin consciencia de los cambios del mundo. Algo sucedio. El cuerpo de la vieja gargola comenzo a despertar de su letardo. La piedra vieja se desquebrajaba dejando ver un mundo estrañamente familiar. Se encontraba frente a las puertas de la sala del trono del castillo que por tantos años habia protegido, en lugar de ocupar los torreones como habia echo siempre.

Desorientado y cansado por el largo letargo reconocio el potente sonido que salia de los pulmones de su viejo compañero, el cual corrio a lamerle para darle su bienvenida al mundo. Aquella gargola canina habia dormido custodiando el otro lado de la puerta...¿pero como habian llegado hasta alli?

Tras el saludo de mi cánido amigo me agaché para rascarle la cabeza.

- Hola viejo amigo,¿Qué haces tú aquí? -dije aun sabiendo que no me respondería- 

Me levanté de nuevo y comencé a andar por el castillo buscando a alguno de mis congéneres o a algún...humano.Esto no me gustaba,no estaba en el lugar de siempre y no se escuchaba nada por los alrededores.Saqué mi espada y caminé con cuidado por los pasillos junto a a la gárgola canina.

Los olores eran distintos. El aire tenia algo diferente. Tu canido amigo tambien lo notaba, olisqueaba cada piedra como si no la hubiera visto nunca. Todo estaba igual, pero de algun modo diferente. Tal vez alguna brujeria estaba teniendo lugar en el castillo.

Al adentrate en los pasillos comenzaste a escuchar ruidos. Parecia una fiesta de humanos, varias decenas si el oido no te fallaba. Debian estar reunidos en el salon de baile, donde se daban todos los festines. ¿Acaso los humanos habian vuelto despues de abandonar el castillo, o serian los barbaros tomando posesion de los terrenos conquistados?

Tu compañero corrio y se puso a dos patas ladrando al exterior de uno de las ventanas.

Se te hizo raro que el cielo mostrara tan pocas estrellas pero mas cuando desviaste tu vista abajo. El castillo estaba sobre algo alto que no era montaña de roca y abajo, a muchos metros un monton de cosas que emitian luces.

No habia rastro de arboles, ni animales, ni nada que pudieras reconocer alli fuera. El ventanal era demasiado pequeño para pasar por el y comenzar un vuelo de reconocimiento sobre aquella brujeria que habia cambiado el mundo.

Escuche con atención a Owen, con la copa de champaña al lado y mirando el reloj de la cuenta regresiva, todo marchaba en orden, pero justo algo tenia que salir mal, maldije por lo bajo y entregue con una sonrisa la copa a la modelo.

-"Todo esta bien, querida en un momento vengo a brindar contigo"- dije guiñándole el ojo antes de seguir rápidamente a Owen.

-"Como es eso de que se esta destruyendo!"- pregunto en susurros pero con un notable tono de impaciencia. 

La piedra se esta agrietando, señor.- dijo Owen.- Es como si algo quisiera salir de abajo y no, no señor, no he tomado nada raro.- aseguro contestando lo que suponia que ibas a preguntarle.

Llegaste ante las puertas que custodiaban viendo que no se encontraban alli ninguna de las dos estatuas. Solo pedazos de piedra tirados en montones donde se suponia que debian encontrarse.

Escuchaste ruidos al final del pasillo, parecia un perro grande y pisadas duras.- ¿Aviso a seguridad, señor? pregunto Owen.

-"No...no todavía, pero dame tu arma- dije a Owen tendiéndole la mano, desde hacia tiempo había ordenado que llevase siempre un arma por protección y yo también solía hacerlo, así como chaleco antibalas pues nunca se sabia si algún envidioso del campo legal o no te querría muerto, pero esta vez siendo la gala y una fiesta donde solo podría entrar gente con invitación previa no lo había considerado necesario- mantente detrás de mi"- dije caminando despacio mientras apuntaba.

Owen hizo lo que le pedias, con el movil en la mano y listo para hacer saltar la alarma al minimo peligro camino detras de ti. Viste unas sombras extrañas. Parecia como si las estatuas hubieran cobrado vida. La que parecia un perro estaba a dos patas, mirando por la ventana y la otra, con aspecto de un viejo guerrero, miraba el exterior con asombro. Tenia en la mano una gran daga antigua pero de hoja reluciente. La habias visto en su cinto, hecha de piedra como todo el.

La gargola canida se giro en redondo. Mostro los dientes a las dos figuras que se asomaban por el pasillo. Eran dos hombres vestidos con extrañas ropas. Uno llevaba una especie de palo corto metalico en la mano, el otro un objeto pequeño que emitia una ligera luz.

El animal gruñia y mostraba los dientes en posicion claramente defensiva, se tiraria al cuello de aquel que diera un paso mas acia ellos.

Uno de los hombres, el que caminaba con la pequeña luz en la mano miro a su compañero humano y murmuro.- Señor, esto no parece una broma, deberia llamar a seguridad ya.

-"No...-dije quedándome en el lugar- esto no debe saberse..."- dije mirando a los ojos a esa gárgola cuadrúpeda, decían que los caninos se calmaban cuando los miraban a los ojos, aunque a veces los lobos se enfurecían, era cuestión de tentar a la suerte.

-"Tranquilo muchacho...no voy a hacerte daño"- 

¿En qué mundo estábamos?¿Qué brujería es esta?

Seguí caminando en busca de las demás gárgolas,si estaban por aquí podrían estar en peligro.Me apresuré junto a mi compañero hasta que este se giró y fui en su dirección.Delante mía había dos hombres de pintas extrañas que hablaron entre ellos.

- ¿Quiénes sois y que hacéis en el castillo? - dije amenazante y con mi arma en alto-

Mire al anciano y a pesar del instinto de también apuntarlo, contuve el impulso.

-"Mi nombre es David Xanatos, el- no digas dueño- nuevo amo de este castillo, estamos en el año 2012- en ese momento vi los fuegos artificiales iluminando el cielo- bueno 2013 es año nuevo...los encontré a ustedes a muchos kilometros de aquí, supongo que algo las desperto"- hable con confianza pero con cuidado, no sabía que podía llegar a pasar. 

- Este castillo perdió a sus ruines dueños hace mucho tiempo por lo que sus legítimos dueños somos sus guardianes,no tú.

Luego pensé en la fecha que me había dicho.¿De verdad estaríamos en 2013?

- Y...¿dices que estamos en el año 2013? ¿Como han pasado más de 1000 años mientras dormíamos?

- Eso si que es una siesta...- murmuro el tipo Rubio. Se aclaro la garganta y añadio.- El señor Xanatos compro el castillo, es su legitimo dueño.

- Da la casualidad que de donde yo vengo no se puede comprar algo que no se quiere vender,por lo que nuestro hogar no está a la venta,humano.¿Dónde están mis hermanos?

-"Yo lo compre porque si estaba a la venta y lo mande a reconstruir en este lugar, para ustedes supongo que este debe de ser el nuevo mundo, o las tierras jóvenes, nos encontramos muchísimos kilómetros de sus tierras natales, y las costumbres cambiaron con los años... díganme hay algo que pueda hacer por ustedes?"- 

¿Cambiado?¿Por eso estaban esos millares de luces ahí fuera en vez de el habitual paisaje?¿Cómo había llegado el castillo aquí?¿Dónde estaban los demás?

Todas esas dudas se agolpaban en mi cabeza.

- Ya le he preguntado por mis hermanos,¿dónde están? Goliath y los demás.Y puede haber pagado,pero este castillo es nuestro hogar por lo que no renunciaremos a ello.

Acaricié en lomo de Bronx en señal de que si algo iba mal atacara.