Partida Rol por web

El reaper no parece haberse dado cuenta  de mi presencia, lanzo mi pierna apra golpearla la parte de atras y el musculoso enemigo no llega a caer, mi cuchilla relampaguea con la luz de la luna pero este consigue esquivarla en el ultimo instante, se gira e intenta poner una mano sobre mi para poder golpearme. Veo su rostro lleno de heridas e incisiones a escasos centimentros del mio cuando la misma noche se ilumina con fuego... una serie de trozos de fuego caen desde el cielo a la tierra provocando un ruido ensordecedor que alcanza su apogeo cuando toca tierra. El impacto es tremendo y el silencio se extiende por el bosque... teniendo en cuenta la trayectoria, ha caido en nuestro campamento... veo como el ser frente a mi sigue mirando hacia el cielo asi que intento rajarle de nuevo directo a la yugular.

Se que tengo que ver que ha ocurrido en el campamento pero no puedo dejar a un reaper suelto por ahi sin mas... el campamento tendra que esperar unos segundos mas.

Cuando Khan me indica que me quede quieta, tras escuchar un ruido sospechoso entre los matorrales, le hago caso. La aparición de aquella persona realmente me había cogido por sorpresa, y ver cómo Khan intentaba descuartizarlo me indicaba que no se trataba de nadie amigo. Saco el arco, y me dispongo a apuntar, cuando de repente el cielo se iluminó, tal y como había ocurrido momentos atrás, cuando estabamos con el colocón en la tienda, y de repente, aquella bola de fuego calló al suelo, donde el campamento, al igual que cuando estaba en trance. Pero esta vez era demasiado real, el suelo incluso había temblado.

Trago saliva, y aunque quiero correr hacia el campamento y ver que todos estan bien, lo principal era ocuparnos del tipo que tenía Khan cogido. Vuelvo a colocar el arco, y apunto, en la entrepierna -el cuello me parece mejor opción, pero sé que a lo mejor le doy a Khan y podría hacer más mal que bien-.

La sombra musculosa ambos claramente la identificáis como un reaper, gracias a la luz emitida por las hogueras celestes. Khan se ha enzarzado en una pelea sin tregua mano a mano con el tipejo. Éste está a punto de recibir un duro golpe en su cabeza, procedente de un sujeto que hace casi dos como él, pero consigue girarse para esquivar la parte más dolorosa.  Pocos segundos después, una flecha emplumada penetra en el cuello del reaper y se queda atravesada. Un chorro de sangre caliente baña la cara y el cuerpo de Khan como un aspersor de aguas rojas. Clover, a pesar de la oscuridad reinante, había aprovechado muy bien los destellos de luz añadida por los fuegos celestiales y rauda lanzó un dardo certero. La flecha cercenó la carótida limpiamente del atacante, ahogándole y desangrándole a gran velocidad. El reaper cae al suelo, boqueando y derramando su vida por el suelo del sotobosque. Ya no será un peligro para nadie nunca más.

Ese maldito cabron es grande de narices, no solo evita mi golpe sino que el suyo casi me abre la cabeza, gracias unicamente a mis reflejos en el ultimo instante sigue todo dentro de mi dura mollera. Me giro para volver a encararle cuando de pronto una flecha atraviesa su cuello, partiendole la carotida y matandolo practicamente en el acto. No puedo evitarlo y de entre las sombras puede verse mi sonrisa ante el certero golpe de Clover. Me acerco al cadaver y con el cuchillo saco la flecha para que quede entera, me levanto y se la entrego a mi compañera. - Muchas gracias... un poco mas y me abre la cabeza como un melon maduro.

Miro en la direccion de la posible pelea con reapers y despues hacia el campamento, una dificil eleccion pero sea lo que sea lo que ha caido en el campamento, la vida de nuestros compañeros es mas importante. Miro a mi compañera con respeto. - Lo primero, nuestra manada. - Espero a que asienta como que esta de acuerdo y me pondre en marcha hacia el sitio de la pelea.

Al oír el chasquido del cuello del reaper al romperse, lo dejo caer al suelo como si fuera un perro maloliente al que he roto el cuello. Ah, no, espera, que es eso precisamente. Me giro para comprobar que Tristán está bien y me lanzo a ayudar a Shade, ya que lo necesita más que mi amigo. Entonces, el cielo se ilumina y la Gran Bola de Fuego cae. Si no fuese un guerrero curtido, habría gritado de miedo. Sin embargo, como lo soy (y bastante fiero), mantengo la compostura y utilizo la rabia que me da el pensar cuánta gente puede haber muerto en el campamento para atacar al reaper que combate contra Shade: me acerco por detrás, le cojo de los brazos y los estiro hacia atrás colocando un pie sobre la espalda del reaper, sin parar de estirar con fuerza hasta que escuche los ruidos de sus huesos rompiéndose.

Por supuesto, espero que Shade le dé el golpe de gracia, al fin y al cabo, es su combate, no el mío.

Aunque tenía todas las de perder, arriesgué y gané. La flecha le había dado de lleno en el cuello al reaper, desangrándolo. Un suspiro de alivio se escapó de entre mis labios, acompañado por una sonrisa orgullosa, al ver que he sido realmente de ayuda.

- Sí, pongámonos en marcha. -Susurro, devolviéndole la sonrisa a Khan. Cojo la flecha y la echo a mi espalda, en el carcaj. Espero a que mi compañero retome el rumbo, pues mi orientación seguía sin ser demasiado buena.- Seguro que Tier ha logrado frenarlos. -En otras situaciones no podía confiar mucho en él, pero en cuestiones de combate... Si él no podía, que la Diosa se compadeciese de nosotros.

Atrapas al reaper con suma facilidad, estás acostumbrado a hacer eso con osos con peor mala leche y olor que este grandullón. Shade sonríe levemente al ver tu estratagema, no es que le haga mucha gracia haber necesitado ayuda pero no es idiota. En cuanto ve que lo tienes bien sujeto le raja el cuello con uno de sus cuchillos de caza. El cuerpo empieza a sacudirse convulsamente, como siempre que un animal se desangra, y acaba muriendo rápidamente entre tus brazos. Tristan, viendo que la fiesta se está terminando, decide ponerle fin al suyo también. Le clava su espada en las tripas y lo abre en canal de abajo hacia arriba, haciendo que le salgan todas las vísceras y le cuelguen como un adorno tribal. Tras eso, le da el remate final cortándole la garganta, con lo que el desgraciado caníbal cae muerto instantáneamente al suelo, con las tripas desparramadas por el suelo, a su lado.

Tras dejar atrás al reaper muerto, continuáis con la búsqueda de vuestro equipo. Oís como se mueve de nuevo algo entre unos arbustos y os preparáis para otro ataque, cuando emerge el rostro infantil de Grey.

-Les he encontrado, están aquí- sonríe orgulloso de su pericia. Los tres os dirigís hacia donde señala Grey que ha localizado a los demás. Camináis unos minutos hasta que oís el sonido reconocible de metal contra metal y gruñidos de dolor. A medida que os acercáis conseguís ver en la oscuridad las sombras de tres hombres fornidos y el olor metálico de la sangre y las entrañas. Hay muerte en el aire.

-Shade, enciende un fuego, no podemos seguir yendo a oscuras todo el rato- le ordena al veterano trampero mientras limpia la sangre de su espada en las pieles y telas que recubren al cadáver destripado que tiene a sus pies.

-Seremos más visibles- le recuerda éste muy serio mientras hace lo mismo con su cuchillo, antes de guardarlo en la funda.

-Lo sé, pero no podemos ir tropezándonos con todo de camino a casa- contesta éste muy seriamente.

Los dos hombres levantan la mirada cuando oyen ruido procedente de unos metros más allá, alguien se acerca. Al minuto aparecen tres figuras, dos altas y estilizadas y otra más bajita. Mientras, Shade ha sacado algo de sus bolsillos y ha empezado con la tarea de improvisar una antorcha. Para cuando las tres figuras alcanzan vuestra altura, Shade os ciega levemente con la llama de fuego que ha prendido en su antorcha. Es entonces que reconocéis a los tres recién llegados: Khan, Clover y Grey.

Un fogonazo de luz os deslumbra levemente, tras haber pasado un buen rato entre tanta negrura. Alguien ha encendido un fuego. Cuando vuestros ojos se adaptan a la nueva iluminación, veis el escenario algo más completo. Tristan, Shade y Tier, con las manos y las ropas cubiertas de sangre, parecen estar intactos. A sus pies hay tres cadáveres de reapers, uno sin heridas aparentes, más apartado, y dos destripados, uno con el cuello cercenado y otro con las tripas saliéndose por fuera de su cuerpo. De ahí proviene principalmente el fuerte olor a matadero que habéis notado al principio, al acercaros.

El olor que inunda mis fosas nasales al llegar a nuestro destino hace que un nudo se me forme en la garganta. Preparé el arco nuevamente, por si acaso, pero otro fogonazo más me demostró que no haría falta que otra flecha más fuese disparada, al menos por ahora. Así que la coloqué en el carcaj y bajé el arco.

- ¿Estáis bien? - Pregunto, y aunque estoy preocupada, en mi voz no hay emoción alguna, como es habitual. Me acerco a Tristan, Shade y Tier, aunque mi mirada recorre el cuerpo de mi hermano.- Están por todos lados... -bajé la vista, a los cadáveres de los reapers.- a Khan también le atacó uno de la que veníamos en vuestra búsqueda. -Luego volví la vista a mis compañeros.- Algo está pasando en el campamento.

Llegamos al claro donde se encuentran nuestros amigos, la carniceria es... interesante y el olor inunda mis fosas nasales... es un olor penetrante pero los he oido peores. Desvio mi mirada del campo de batalla a mis compañeros, despues de una rapida inspeccion parecen no tener ninguna herida de importancia... mas bien parecen completamente ilesos. Sonrio levemente, siguen siendo las maquinas de matar de siempre.

Clover hace las preguntas y tambien describe nuestro enfrentamiento con el reaper, mi fallo es algo que se repite en mi mente pero es algo para otro momento. Clover lo ha hecho bien... se nota que Shade la esta entrenando duro. Sus ultimas palabras sin embargo son las importantes... - Deberiamos darnos prisa. - Probablemente haya algo que saquear de esos cabrones pero el saber que pasa en el campamento me resulta mas importante ahora mismo.

Con la garganta borboteando sangre y los brazos flácidos en mis manos, dejo caer al último reaper sin ningún miramento. Esbozo una media sonrisa algo bobalicona, mientras recuerdo el sonido de sus brazos siendo desencajados poco antes de que Shade lo matara. No sé por qué me gusta tanto el sonido de los huesos partiéndose (ya sea de brazos o cuellos o lo que sea), pero me gusta. Joder, si me gusta.

Empiezo a inspeccionar los cadáveres por pura rutina, a ver si encuentro algo útil para desvalijar, sin siquiera levantar la cabeza de los cadáveres cuando aparecen Clover, Khan y Grey. Si hubiesen sido enemigos, ya lo sabría. Al final les he hecho venir para nada, pero más vale preve... pre... hmmm... bah, da igual.

- Hey -Saludo a los recién llegados. Asiento con la cabeza en dirección al chico. Bien hecho.

Tristan lanza una mirada hacia Shade, que está muy silencioso. Sonríe levemente a Clover y con un gesto afirmativo de cabeza le da a entender que todo está bien. Él hace lo mismo, aunque algo más discretamente, con la muchacha.

-Deberíamos irnos, esas luces en el Cielo no pueden ser nada bueno- dice éste finalmente, con voz algo cavernosa.

Tristan afirma con la cabeza.

-Será lo mejor. ¿Dónde está Cassandra?- pregunta repentinamente al ver que no ha venido con ninguno de vosotros. Os mira inquisitivamente a cada uno, esperando una respuesta razonable que no sea "Uy, pues la perdimos por el camino".