Partida Rol por web

La mañana del quinto día despertó con las miradas y preguntas de todas las convocadas pues un ruido crepitante se escuchaba en el cónclave...

Las miradas de todas se cruzaban intentando adivinar su procedencia... y los primero rayos de sol delataron su origen... bajo los árboles en el centro, sobre la hojarasca, un hada se arrastraba destrozaba, su cuerpo magullado y mutilado, buscaba refugió entre las miradas de las compañeras...

Alzo su testa, con la cara tambien enmarcada en sangre, y la reconocisteis... era Brisa, sus labios quisieron esbozar unas palabras pero su cuerpo cayó sin vida, sobre la hierba, mientras una lágrima recorría su cara, haciendo surcos puros entre la sangre de su rostro...

Tras la muerte de Brisa, solo quedó un testigo... un camino carmesí que su propia sangre había creado hasta el árbol donde normalmente solía dormir en el conclave Brisa...

Estaba en un profundo sueño, en el que no sentí para nada despertarme. Era raro en otras ocasiones había sentido como no me había quedado dormida del todo, pero esta vez fue diferente.
Cuando abrí mis ojos, y me los limpie, no pude dar crédito a lo que veían mis ojos.
El cuerpo de Brisa estaba allí sin vida. Baje de mi árbol y volé hacia ella rápidamente.
Me puse a su lado y agarre su mano.

¿Por qué te has ido, por qué tu?. Dije en voz alta.

Solo podía pensar, porque esta vez y cuando más lo necesito no he podido ver quien te ha hecho daño. Si no hubiera caído en este sueño seguro que hubiera podido ver aquellas que te hizo mal.

Me sentía triste por no poder ayudar esta vez, aquellas hadas en las que querían saber de mi. Agache mi cabeza y me despedí de Brisa.
 

OHhhhhh!, por los dioses, otra mas... esto no parece tener fin, el mal esta bien arraigado dentro del grupo y no parece que se pueda estirpar ya... ya no podemos hablar de etar "todas" unidas, pero si podemos aliarnos las que sabemos de nuestra inocencia, pues solo asi hay aun esperanza.... la confianza ya no se puede dar por hecho, pero si las pruebas que demuestran la inocencia de nuestras hermanas... Ellete estoy contigo y Valery tambien os apoyare a ambas....

Me despierto y me horrorizo por lo ocurrido. Brisa, otra muerte más, no...

Con un gesto de mi mano mando a mil mariposas azules hacia el cuerpo inerte de Brisa para que lo velen en su viaje.

Todavía con los ojos cerrados, oí a mi alrededor voces y gritos de dolor, y con rabia, los abrí para encontrar a Brisa muerta, destrozada, en el suelo. - ¡¡Maldita sea!! tenemos que acabar con ésto, no podemos continuar de ésta manera... ¡Acabaremos todas muertas si no logramos pararlo! - dije con rabia,.

Esta noche no la había pasado con Leporidae, los últimos acontecimientos me habían llevado a pensar, en mi soledad, en la oscuridad de la noche.

Al ver un nuevo amanecer, veo el final de Brisa y cierro los ojos, maldiciendo haberlos abierto en primer lugar. La escena es atroz. Rápidamente alzo mi mirada hacia Ellete.

Vamos, por favor, tienes que decir algo...

No obstante, mi susurro no parece ser escuchado, sus palabras no delatan a nadie, verdadero o falso. Cierro los ojos y, ahora sí, me coloco al lado de Leporidae y le sonrío débilmente.

Mis sombras vigilan... Me han dicho que continúan siendo el mismo número.

Observo el espectáculo de las mariposas. Susurro muy débilmente en el oído de Leporidae.

Hazme el favor de pasar la noche conmigo. Me siento... Mejor si lo haces.

Aunque todo había comenzado como ofrecerle mi ayuda, de algún modo siento que necesito pasar la noche con ella otra vez, de un modo que no alcanzo, o no deseo, comprender.

Shaiya lamento decirte a ti y a las que confiáis en mi, que esta vez no he podido ver nada. Lo siento, pero más lo siento por Brisa porque no podré vengar su muerte a esas traidoras. Pero tan solo recordaré que aun sigue viva Daphne una traidora.

Dijo mirando a Shaiya y a las que confiaban en ella, muy apenada en sus palabras y en su rostro. Se aparto de allí porque se sentía involuntariamente culpable de la muerte de Brisa por no poder ver a las asesinas.

Tranquila pequeña, cuidaré de ti. Le dije a Sahiya.

Brisa no se había ganado mi confianza, no me caía bien, pero estaba claro que la había juzgado mal.

Antes de que acabe el día otra traidora caerá y su corazón y su alma serán mías. Y al final caeréis, todas y cada una de vosotras, pues no sois mas que una cobardes. ¡Echadle ovarios y venid a por mi si el miedo os lo permite! 

Nocturna estaba apartado del grupo,sola,no quería saber nada de nadie. Esa maldita Brisa,ella era suficiente,se bastaba por si sola,pero había ahondado en ella,la había vuelto DEBIL. Quizás era mejor que se hubiera ido al infierno. Pero que pensaba? Esto no podía seguir así,ella no,no podía dejarla ir.

Sin mediar palabra se acerco a su cadáver,rodeado por las mariposas de Ayra,aquellos insectos con los que Alba tanto le gustaba jugar.

Estas segura? Dijo a nadie y cambio la cara De acuerdo Añadió a su extraño monologo. Se agacho al lado del cadáver de Brisa y entonó Con el beso de la noche yo te entrego mi mayor don. Y besó sus labios ensangrentados dejando que un colchón de oscuridad tapara a las dos

Sonrío débilmente con las palabras de Leporidae y rápidamente la rodeo con mis brazos por la espalda y apoyo mi cabeza en sus hombros.

Gracias...

Le digo. Deseo tomarla más cerca de mí, pero no es el momento. Observo a todas las presentes, a Nocturna en particular, mientras hablo.

Ellete... No te preocupes, al parecer esta noche jugaron con tu mente. Lo siento.

Su acusación sobre Dpahne hace que la mire de reojo, pero no añada nada. Suelto una leve risilla.

Creo que... No lo dije bien antes... Mis sombras vigilan. Son el mismo número de traidoras... Algo va mal. Si Vinya lo era, y quiero pensar que así lo era... Hay alguna nueva entre las traidoras. Quizá quien te impidió ver algo, Ellete.

Luego le susurro al oído a Leporidae.

¿No te sirvo yo?

Mi voz mezcla broma con inocencia y provocación, a partes iguales.

La escena resultaba atroz, el camino de sangre que dejó tras de sí Brisa se secaba con los tímidos rayos de sol que se descubrían  entre las ramas de los árboles

Otras más....hasta cuándo....que pare esto por favor -dije en susurros con cierto temor en mi voz-. Esta vez me mantuve al margen de la conversación que se originó, no tenía ganas de hablar, estas últimas situaciones me habían dejado trastornada y no pensaba ya con claridad.

Los labios de Nocturna buscaban los frío y sellados labios de Brisa cuando un leve viento alzó el viento alrededor... los ojos de Brisa se abrieron de para en par, y su cuerpo se llenó de un brillo sin igual que recordaba el olor del amanecer...

No hizo falta que Brisa tocará sus labios pues, el alma de Brisa inundaba de nuevo su cuerpo... la sangre que su cuerpo había dejado en el camino avanzaba rápida hasta piel desapareciendo al contacto con ella, no quedaba rastro de sangre sobre el suelo, tan solo... ahora estaba Brisa que poco a pòco se erguía ante vosotras mientras el viento acariciaba su piel dandole la nueva bienvenida...

Después de concluir el beso que le daba a Brisa contempla,con satisfacción,como sus ojos abiertos vuelven a ver la vida. Sonríe levemente pero ese gesto se corta de inmediato y se levanta

Me complace volverte a ver de nuevo Hermana Brisa. Le tiende la mano para levantarla

Callada y espectante vi como Brisa caía y luego volvía a la vida.

Espero que tu vuelta nos ayude a destruir a las traidoras, Brisa.

Dije sinceramente.

Ví como Nocturna susurraba unas palabras y se inclinaba hacia el cuerpo inerte y ensangrentado de Brisa, de repente todo su cuerpo brillaba, los rastros de sangre desaparecía y sus ojos volvieron a la vida.

Una gran sonrisa se dibujó en mis labios, no pude reprimir mi alegría:

- Me alegro de tu vuelta Brisa, espero que puedas esclarecer un poco las cosas con tu testimonio- dije mirando de reojo a Nocturna que estaba a su lado-.

Ohhh que alegría Brisa, estás viva, miro a Nocturna y le doy las gracias.

Recojo mis mariposas y me vuelvo a mi roca.

Con cara triste y apenada por la muerte de Brisa y apartada hacia un lado. Contemplé como Nocturna le daba un beso a Brisa.

Para mi asombro, fue cuando Brisa despertaba y volvía a estar entre nosotras. A lo que dije desde la distancia.

Brisa, me alegro de vuelta, y siento mucho no poder decir quien te hizo esto. Perdóname. Dije mirándola y agachando la cabeza.

Abrió los ojos tomando una gran bocanada de aire, y sonrió con dulzura a Nocturna.

-Gracias hermana-Le susurro a Nocturna, luego miro a las demás -Lo siento hermanas, no puedo ayudaros, no recuerdo nada de lo que me paso, solo un dolor agudo que me corroía las entrañas, la muerte- Suspiro

Con alegría, Eglantine se acercó a Brisa, incluso aún algo aturdida por lo que acababa de suceder - Oh, hermana, me alegro tanto... - dijo mientras la abrazaba - me alegro tanto de que estés de vuelta... -.