Partida Rol por web

yo sigo teniendo la misma confianza en mi que al principio, pero tu ponzoña ha echo mella y la corrupcion ha sabido elegir a sus victimas.
Al igual que el primer dia podeis mandarme al infierno si quereis, alli seguro habra menos asesinas y traidoras que aqui al parecer...

Y elthedrea sigo pensando que ellette no era una traidora, solo que su poder si podria corromperla, pero ha dado muestras de ambas cosas y no esta en mi mano juzgarla

No paran de discutir -pensé para mí-

Ya no sabía a quién creer, desde la llegada de Cénit y Gió....se habían inmerso en una discusión tras otra. Evité discutir, alzar la voz, estaba cansada de escucharlas y de no saber a quién creer. Decidí permanecer sentada en la raíz del viejo roble y seguir el curso de las conversaciones.

¿Y no sería mejor que cada una eligiese a quién analiza la otra y lo miren? Aunque...

Miro a Ellete.

¿Por qué la llamas brujo si es una chica? ¿No sería bruja en todo caso?*

Niego con la cabeza, confusa.

Cuanto más tiempo miren ambas a otras, más rápido nos analizaremos a todas. Y menos tiempo tendrán las traidoras para matarnos.

Sonrío y asiento con la cabeza, más autoconvencida. Miro entonces a Salem.

Hermana de la noche... No seas tan dura con tus palabras, me gustaría pensar que al menos estáis haciendo un buen trabajo exterminando a las culpables. Desde hace dos noches, hasta antes de las últimas resurrecciones, habíamos, si mis sombras no me engañan, conseguido reducir el número en uno.

Miro a Arien entonces y, aunque una pregunta cruza mi mente, decido posponerla.

Shaiya, como prefieras, le diré Bruja. El caso es que es que ella es una Bruja. Dijo sentada y tranquila, mientras escuchaba al resto.

Pero... ¿A qué te refieres con que es una bruja? Quiero decir, además del nombre, parece que esa palabra tiene cierto... Poder. Y no lo entiendo. Yo sólo sé que puede mirar en el interior de la gente... ¿Qué le hace distinta de Elthedrea?

Que lo explique mejor el Brujo, aun que creo que es volver a repetir la misma historia antes de morir Elthedrea.

Entonces que sea la propia Elthedrea la que te lo pueda explicar... es la unica que tiene ese poder como tal que sepamos.

El Brujo y el Vidente tienen el mismo poder, pero el objetivo del Brujo es apoyar a las asesinas y sembrar confusión en el Cónclave haciéndose pasar por la verdadera Vidente. O puede mantenerse oculta y usar sus conexiones con las asesinas para indicar a quién matar. Yo digo que es Salem, Salem dice que soy yo. Es un duelo en el que sólo está la palabra de una contra la otra. Pero parece que Salem ha perdido las aliadas que esperaba tener al principio. Supongo que desde que Titania y Brianne han dicho la verdad se ha servido de su muerte para intentar justificar que se han vuelto malvadas y planean eliminarla. Vamos, que no tiene más recursos que esos para seguir manteniendo su mentira.

Asiento con la cabeza.

Gracias por explicármelo. ¿Y no hay ningún modo de aclarar quién apoya a quien que sea irrefutable? En cuanto a lo de las amantes... Viene de que se olvidaron de analizar a una supuesta traidora, aunque tras su muerte la cantidad de traidoras seguía siendo la misma... Yo, si queréis, puedo explicaros mi don. Quizás así podáis ver cómo usarlo...

Digo con una ligera sonrisa mientras inclino mi cabeza como gratitud.

No me suena de nada tu don, Shaiya, pero si puede ayudarnos a revelar a las traidoras y no temes convertirte en su objetivo nos lo puedes contar. Si puede revelarte cuantas traidoras quedan en el Cónclave o si son más o menos podrá arrojar mucha luz a todo esto. Por cierto, ¿quién era la supuesta asesina? Yo ya he dicho antes que las cuatro traidoras que yo conocía eran Draely, Daphne, Gió y Vinya. Aún así podrían haber más, tal como Vinya dijo en el cementerio. Lo que no sé es cuántas, aunque supongo que pocas.

No, no las temo. Pero... Ellete dijo que podrían jugar con mi mente. Desde entonces... No sé qué pensar.

Niego con la cabeza. Y le miro a ella y al resto de compañeras, esperando algún tipo de guía.

Yo te respondere....
Titania y brianne han tenido que ser contaminadas, por la asesina Alfa, tu como conspirados del mal que puede ver en el interior de las hadas, ya son dos, otra que resucite a las caidas en favor vuestra 3 y esta noche mirare a Gio y te dire si sois 4....
Por lo demas
Estan la que puede robar los dones de las demas y pasarse al bando ganador en el ultimo momento que casualmente tambien esta en contra mia.......
Tras lo cual no es que no tenga argumentos, es que las que mas estais en este debate en la mayoria no teneis mi confianza en demasia... y parece que somos minoria, en eso apoyas tus argumentaciones "hermana"

Tranquila pequeña, tal vez estén jugando con tu mente, pero no del modo que tu crees. Me coloco justo detras de Shaiya y la rodeo con mis brazos. Cierra los ojos y déjate guiar por tus instintos, olvida todo lo demás. Yo confío en ti.  

Mi cabeza me aconsejaba acabar con Gió, pero mis instintos clamaban por otra de mis hermanas. Tan solo quería saber si coincidían con los suyos. En cualquier caso, mi decisión estaba tomada.

Mis manos se posan sobre las de Leporidae cuando me abraza y cierro los ojos, no puedo evitar soltar un suspiro contenido. Unas leves sombras rodean nuestros pies y parecen querer ascender hasta la rodilla. Mi voz es suave, casi como un hilo de pensamiento en voz alta.

Sé... Sé lo que ví... Pero casi todas mis hermanas parecen negarlo. Pero yo... Ví a quién me atacó... Recuerdo las flechas penetrando en mi piel mientras mis sombras batallaban por defenderme. Ví a dos hadas que eran una... Gió ha vuelto, pero dicen que es culpable... Confío en las hermanas de la noche, pero ellas confian en quien me atacó... Creo... No. No creo. Sé que al menos una de todas ellas miente.

Digo, bastante más convencida de is palabras. Aún sin abrir los ojos, las palabras de Leporidae, su abrazo, me dá la fuerza para seguir adelante, una vez que ya he comenzado, mi voz se vuelve más firme y decidida.

Mis sombras me protegen en la noche, cuando ellas están presentes pueden protegerme, aunque los efectos nunca son controlados por mí, ellas actúan por su cuenta. También pueden darme información sobre lo que sucede por la noche, aunque también es por su cuenta. No obstante... Ni la protección es perfecta contra todos los efectos en la noche. Yo... Yo...

Unas lágrimas parecen querer luchar por asomar en mis ojos, aunque consigo retenerlas con bastante éxito. No obstante, mi voz permanece firme, aunque vuelve a bajar a un susurro. Como un secreto que he querido ocultar hasta ahora. Me giro posando mis manos en su cintura, aunque todas pueden escucharme, no me importa, estas palabras van para ella.

Usando unas palabras que han dicho por ahí... Estoy condenada. Mi don puede matarme cualquier noche, en lugar de protegerme. Cuanto más lo uso, más fácilmente se vuelve contra mí. No... No quería decirlo, quería daros los datos que me dan las sombras, pero debe de descansar ocasionalmente para no devorarme. O seguir jugándomela. Aunque creí que podrían darme algo más de información que símplemente si quedan más o menos. Es por eso que siempre he confiado, y confío, en mi propia fuerza y resistencia más que en mis sombras, es más...

Justo tras esa frase, guardo silencio y mis ojos buscan los suyos, únicamente los suyos, aunque mis oídos están atentos a todo lo que sucede. No añado nada, símplemente espero su reacción a esto.

Mi dulce Shaiya. Mis ojos no pierden contacto en ningún momento con los suyos. Me calman, aclaran mi hasta hace poco destrozada mente.

Siempre he confiado en ti pequeña, pero estaba demasiado ofuscada como para escuchar tus palabras. No tienes que decir nada mas. Si han jugado con tu mente de alguna manera ha sido mediante la sugestión. Mis instintos no me han fallado, apuntan a mi próximo objetivo, como si fuesen flechas.

Es entonces cuando me permito apartar mi mirada de su bello rostro, para clavarla en Ellete.

Lo siento "hermana", pero estas condenada. Pues yo soy la cazadora y tu mi próxima presa. Cometiste un grave error al atacar a mi dulce Shaiya.

Tras mis palabras vuelvo a contemplar a mi compañera mientras la abrazo y acomodo su cabeza en mi pecho. No temas, todo se arreglará. Te lo prometo.

Siento cómo el corazón me palpita con una fuerza atroz con sus palabras. La melancolía que estaba sintiendo se borra como si nunca hubiese estado.

... Gracias... Gracias por confiar en mí... Por hacer que yo también confíe en mí... No dudaré más.

Mis palabras se vuelven firmes, y aunque de reojo observo a Ellete, finalmente decido pegar mi frente a la de Leporidae. Me obligo a detener el beso que mi ser pide, para sustuirlo por algo, sólo quizás, más importante.

Yo... Tengo algo que pedirte. Algo muy importante.

Solo tienes que pedirlo. Le digo mientras acaricio su tersa tez.

Cuando acaricia mi tez cierro los ojos. Inspiro profundamente para reunir el valor de lo que voy a decir.

Mientras mis sombras me protegan... No habrá problema. Pero... Si ellas consiguen acabar conmigo. Si de verdad lo consiguen, mis sombras me devolverán a la vida... Pero son unas cobardes, sólo obedecen a la fuerza. Y obedecerán a quienes me mataron. Si eso pasase... Si me ves amanecer muerta, si vuelvo a la vida... Por lo nuestro... Por todas: acaba conmigo. Si alguien tiene que hacerlo, quiero que seas tú.

Mis ojos buscan el valor en los de ella. No me gusta reconocerlo, pero ahora mismo me siento débil y vulnerable, aunque intento ser firme. Mis sombras parecen querer tomar más fuerza, pero por fortuna, el día las debilita. Con mi mano sujeto con la que me acaricia, sin desear que la separe de mí, como queriendo retenerla tras lo que acabo de pedirle.

Eso no pasará, no lo permitiré... Pero si tienes razón... Yo... Te lo prometo, lo haré. 

La atraigo hacia mi. Mis labios buscan los suyos y por un breve instante es como si estuviésemos solas en aquel lugar. 

Y te vengaré. Pero prométeme algo tu a mi. Procura que no te maten, ¿vale? Le digo mientras le guiño un ojo.

Me dejo guiar por ella y su beso me devuelve aún más a la realidad. Ella tiene razón, están jugando conmigo. Yo ya he dicho mi don. Y sólo confío en ella para lo que le he pedido. Mis brazos la rodean mientras la beso, pero pronto debemos volver a la realidad y recobrar la compostura, por mucho que me gustaría continuar con ella. La miro y le devuelvo la sonrisa y acomodo tímidamente unos cabellos que se me han colado frente a mi rostro impidéndome verla bien.

Lo prometo. Lucharé con mi fuerza contra mis sombras y contra nuestras enemigas. Sólo tienen que no cazarme mientras debo descansar. O malgastar su tiempo intentando atacarme mientras me defiendo... Soy un hueso duro de roer.

En ese momento no puedo evitar dedicarle una mirada afable a Cénit. Pero sólo dura un segundo. Rápidamente tomo la mano de Leporidae y me quedo a su lado, observando al resto de presentes.