Partida Rol por web

Durante el viaje por las cuevas, ¿he podido ver algo de lo que estoy buscando? ¿o necesito hacer otro viaje con más tranquilidad para explorarlo con calma?

Salgo el último de las cuevas, cargando el cuerpo muerto del niño atacado por los bichos, para devolverlo a los suyos de cara a que puedan darle una sepultura decente y puedan despedirse de él.

Avanzo despacio, en parte por llevar el cuerpo del niño y en parte por ir examinando con curiosidad las paredes de la cueva, buscando saber si las cuevas son naturales o si las ha hecho la mano del hombre.

Camino sin prisa y una vez fuera de las cuevas, entrego el cuerpo del niño a los habitantes del Little Lampligth, después poso el petate en el suelo y vuelvo a guardar el pico y a sacar la pipa. Pero en esta ocasión no la prendo, sólo la dejo en la boca vacía, para pensar y tratar de calmar mis nervios.

El Mayor parece contento, por lo que hemos debido de hacerlo bien, a pesar de no haber podido salvar al pequeño explorador. Al menos esta noche dispondremos de una comida decente y de agua para beber, aunque ahora mismo no tengo mucha hambre, por lo que como sin ganas y bebo con moderación. También nos ofrece un muñeco azul, por el que muestran cierto interés tanto Cross como Sonrisas, yo sólo le dedico una mirada breve, ya que no creo que la misión haya sido un éxito, aunque parece que los demás piensan que si.

- El muñeco... no tengo idea de para que sirve, la verdad. Pero sólo hemos conseguido este, así que repartidlo entre vosotros. Yo no lo quiero. - Dijo el muchacho con una sonrisa. - Así que, vosotros veréis. -

El Mayor continuó comiendo tranquilamente.

Cross se encogió de hombros al escuchar al fin al mayor.

Lo cierto es que los tres hemos luchado bien, no veo más alternativa que echarlo a suertes, si os parece correcto. Quizá no valga para nada, o quizá sí, pero supongo que ninguno querrá dejar pasar la posibilidad de que sea algo útil en estos días tan inciertos, ¿no? comentó el paladín con calma, una vez se hubo demostrado que tanto Sonrisas como el viejo Pete podían desenvolverse tan bien como el mismo, y que no habían sido una carga en lugar de una ayuda. Aunque nunca lo admitiría abiertamente, claro.

¿Puedo aprovechar la comida para coger agua decente y algo de comida?

Miro al joven Cross cuando comenta lo ocurrido en las cuevas y que hay que sortear el muñeco.

Por mi no te preocupes. Digo sin apenas levantar la vista del plato. Ese muñeco me recordaría de forma continua al chico muerto, y no dejo de pensar en que si hubiera bajado a las cuevas el primer día lo podría haber salvado, pero estaba tan cómodo descansando que ni se me ocurrió. Levanto la mirada del plato para observar al Mayor y decir. Quiero agradeceros tanto vuestra hospitalidad como esta comida, pero creo que será mejor que me marche mañana, todavía no se si iré a Rivet City o a Radio Galaxia, pero creo que es hora de partir.

Thabita llega a la Ciudad de los Niños junto con Pringoso, un niño bastante hiperactivo.

Allí, sólo se encuentra con un Superviviente, el Coronel Tsu, que parece estar tranquilo.

Cross, Pete y Sonrisas, han decidido retirarse de aquí.

Al llegar a Little Lampligth, observo que sólo hay un habitante, no veo a nadie más. 

Hola, soy Tabhita ¿Con quien tengo el placer de hablar?

Mi apariencia entre comica y grotesca no era bien recibida en casi ningún lugar, por lo que necesitaba ganarme la confianza de las personas con mi conversación. Pero realmente no éramos los únicos, un chiquillo aguardaba cerca intentando no llamar la atención.

Al notar lo afable que se mostraba Tabitha Prin dejo de lado su distancia.

-Hola. Comento levantando la mano y acercándose a El o la Super mutante.

- Mi nombre es Prin... Agacho la cabeza poniéndose colorada la cara

-... por Pringoso. Me lo coloco mi hermana a mi apodo.

Arrebatadamente Pringoso toma aire y las palabras salen despedidas de su boca.

-Pero no  lo soy... bueno no lo soy tanto. Una sonrisa se dibuja en su rostro.

- Oh. Un mutante y un niño. - Dijo el niño mientras salía de una casa. - ¿Qué queréis? ¿Me estáis buscando para darme un escarmiento? ¿Tratarme como a un niño? ¿Ayudarnos? Aquí el Señor Tsu está mudo desde el principio... no ha dicho ni hecho nada... -

El muchacho parecía muy seguro al hablar.

- Bueno, nos han atacado, pero los hemos repelido. Somos así de guays, ¿no creéis? Pero volviendo a lo anterior... ¿nos vais a hechar una mano o sólo venís a vivir del cuento? Y tu, pequeño, ¿Quieres un sitio aquí o qué? -

-Woooau. La cara de Prin era de asombro.

– ¿Ya eres Mayor? Yo no tengo problema en ayudar.  Se colocó al lado de Tabitha 

-¿por quién fueron atacados?.

- El Enclave, como siempre. Pero bueno, nos hemos podido defender. - Dijo el Mayor. - ¿Y ahora, ¿qué os trae por aquí, amigos? -

El muchachito que estaba callado se acerco viendo que no era peligroso/a y se presento, Hola Prin mi nombre es Tabitha, no me tengas miedo no soy mala. ¿Qué te parecen mis......? entonces otro niño salio de una de las casa y se puso a hablar muy rápido, apenas le entendía a la velocidad que hablaba. Ehhhhhhh. Si necesitas ayuda yo podría ayudaros, soy fuerte y no me gusta la gente que es mala.

Y usted no habla coronel......¿le pasa algo? Me incomodaba la gente que no se expresaba, sentía miedo, quizás fuese mudo, según este muchacho no había apenas hablado.

DIA 2

Al final os fuistéis a descansar y cuando comenzastéis a escuchar el ruido de los niños dando vueltas por el lugar, ya os despertastéis. Abristéis lentamente los ojos, cuando ambos pudistéis ver el cuerpo del Coronel Tsu muerto en el suelo. ¡Alguien le había aplastado el cráneo!

Pero no había pruebas de quién había sido.

Uno de los dos era el culpable...

Recursos A:

Agua Sucia x2. 1PV 1RAD.

UUUUAAAAAAHHHH. Después de la caminata que había hecho el día anterior me había venido de perlas el descanso.

Pero que diantres ha pasado,¿Qué has hecho Prin?, o mejor dicho asesino pringao. Será mejor que no te acerques a Tabhita o esta te machacará.

Por cierto quédate con el agua sucia, no la quiero.

El niño miro horrorizado al Coronel.  Pero se asusto mas al ver la reacción del super mutante. Se arrincono en la pared tratando de quedarse fuera del alcance de la Asesina.

-Yo...yo no e sido señora Tabitha...Un temblor salia de su columna vertebral y se extendida por su cuerpo.

- No.. no me haga daño. Los ojos se llenaron de lagrimas.

-Me iré pero no me haga daño.  Prin tomo el agua, su mochila y salio corriendo del lugar para evitar que Tabitha cumpliera su promesa.

NOCHE 2

Pringoso no sabía que hacer para salir de allí, por que las puertas estaban cerradas al caer la noche, pero en ese momento, una de las puertas de la Ciudad de los Niños voló por los aires y allí, en el marco, se podía ver a un enorme Behemoth armado hasta los dientes...

Y no era broma... hasta sus dientes eran armas...

El asesino de Pringoso intentaba escapar, cuando la puerta de la ciudad se abrió de golpe y un enorme Behemoth apareció tras ella, era realmente feo y aunque anteriormente había estado rodeado/a de aquellos seres, ahora era otro tipo de persona, saque mi supertrineo y me lance hacia él, pero era tanto el tiempo que llevaba sin pelear que apenas me acerque a golpearlo.

Ni que decir que "el asesino ni se acerco a ninguno de los dos".  

El Behemoth recibe el impacto de Tabitha con lo que parece ser una sonrisa. Y después, los impactos de bala de los niños de la ciudad tampoco parecen hacerle ningún daño. Enfadado, se lanza con los brazos abiertos sobre Pringoso, que intentaba escapar de allí, pero no de la furia de un Behemoth enfurecido...