Partida Rol por web

Rhogar carga escaleras arriba con todas sus fuerzas mientras reza una plegaria a su Señor. Al final de su carrera golpea con todo su cuerpo al clérigo intentando romper su concentración.

En cuanto Morodar se concentra parece como si el portal negro se calmase mientras que cuando lo hace Rhogar una energía negra surge del portal y golpea al bravo paladín.

Los esqueletos también comienzan a maniobrar, tres de ellos se dirigen a por Rhogar mientras que otros dos hacen lo propio con Merhin, aunque uno de ellos al maniobrar recibe un potente mazazo por parte del enano.

Los otros dos parecen quitarse de encima la magia de Morodar y disparan sendas flechas al mago que aciertan de pleno sobre él.

Merhin golpea sin demasiados problemas al segundo esqueleto, y rápidamente se encamina en ayuda del paladín, que en muy poco tiempo se ha visto rodeado por tres esqueletos.

Morodar comienza a escuchar unas voces viniendo del portal y sin entender por qué se dirige hacia él. De repente surgen unos tentáculos negros que intentan cazar al mago pero Morodar los esquiva sin problemas.

Kalarel, viéndose demasiado cerca de Rhogar, alza un amuleto y de repente se desvanece de su lado para ir a aparecer en el círculo de runas del suelo al lado de Morodar.

¡¡MALDITOS!! Caeréis ante el poder de Orcus y no impediréis mi victoria.

Golpea con su maza de la calavera al mago y, a pesar de sufrir el castigo divino de Bahamut, hiere a Morodar que nota como su cuerpo se comienza a congelar.

Mientras tanto, en las escaleras, el otro muerto viviente va bajando lentamente y al llegar al suelo cae inconsciente...

El mediano corre al otro lado y lanza una de sus dagas que hace perder el equilibrio a Kalarel.

El clérigo se levanta maldiciendo por lo bajo la caída mientras intenta quitarse de encima la sangre del cuerpo sin éxito. Al mirar alrededor hace una rápida evaluación de la situación, y viendo el estado del mago y al que parece ser su peor enemigo, se centra en ese lado del campo de batalla.

No te preocupes Morodar, Bahamut está con nosotros... dice justo antes de musitar una plegaria elevando su símbolo sagrado.

Ésta se ve respondida en parte, pues las heridas de su compañero se cierran mientras Kalarel se encoge de dolor, pero lo que sea que haya al otro lado del portal parece cabrearse y cebarse con Mikael...

El intento de Mikael por frenar el ritual tiene el único resultado de lanzar un golpe de energía necrótica contra Mikael. Pese a eso, Morodar ve frenado el ataque de Kalarel y se siente mucho mejor.

Morodar se extrañó de que Mikael no supiera nada de este tipo de criaturas y repasó mentalmente sus conocimientos de religión. Luego lanzó una onda de energía para separa a Kalarel de él pero los nervios de no poder moverse le hicieron fallar.

Rhogar da un pasito hacia atrás mientras lanza su aliento de fuego contra el grupo de esqueletos. Sin esperar el resultado de su acción se lanza hacia el extraño clérigo.

La llamarada de Rhogar acaba con los esqueletos mientras los otros dos que quedaban se lanzan a por Zenram acosándole sin ningún tipo de problemas. El pequeño mediano está en inferioridad...

Merhin tenía claro quien era el enemigo, rezando a los dioses para que el pequeño Zemran pudiese apañárselas por sí mismo, cargó contra el sacerdote, tratando de acosarlo con su martillo.

Kalarel se sorprende ante la rapidez del enano y al tratar de retirarse el enano le golpea en una pierna.

MALDITO. Siervos de Orcus, ¡PROTEGEDME! - al decir eso, los esqueletos se ven cubiertos de una energía oscura y se mueven para flanquear a Merhin mientras Kalarel apunta al enano con su vara.

Sufre la ira de Orcus. - un rayo helador de energía negra golpea al enano que siente como las fuerzas se le escapan mientras Rhogar escucha como una voz lo llama y le hace acercarse al portal que saca unos tentáculos oscuros de los que el paladín se defiende sin problemas.

Morodar sintión que la vida volvía a sus piernas y el hecho de que el ser no le hubiera atacado le dio ánimos para atacar a Kalarel y de paso llevarse por delante a uno de los esqueletos en un estallido de energía multicolor. El clérigo de Orcus intentó apartar los ojos pero el fogonazo llegó a darle aturdiéndole unos segundos.

El pícaro mediano intenta aprovechar el momento de debilidad del clérigo pero parece que las luces le han dado de refilón: De la siguiente no te libras

Morodar siente como una energía necrótica surge del portal y le impacta. Parece que el portal se ha estabilizado, pero Rhogar, Mikael y Morodar sienten que parte de sus energías se han perdido en el proceso.