Partida Rol por web

Prosigue.

Responde el androide sin más.

  Un leve parpadeo y la pantalla se actualiza.

  El cargo recae sobre la Candidata F027, Jovielle Beaumont.

  Felicidades

  A partir de ahora, tuya será la responsabilidad de resolver cualquier posible empate. 

Al ver el resultado de las votaciones, no puedo evitar enarcar una ceja, y dirigir mi mirada hacia Billy

no lo entiendo..... no me conoces... porque me has votado? Yo me vote a mi mismo, precisamente porque no me fio de ninguno, no me esperaba ningún voto

Me quedo con gesto nulo escuchando a las maquinas mientas hablan. Parece como si me fuera la vida en ello. Quizás fuera así, no lo podía saber todavía.

- Felicidades Jovielle, espero que nos sirvas bien de ayuda. No creo que el cargo pueda superarte.- En realidad no sabía muy bien lo que decía ni la finalidad de aquello. Palabras vacías que resuenen entre la mezcla de voces.

El frío y el cansancio se comenzaban a apoderar de mi, y la vista de aquella ventana artificial no hacía más que aumentar dichas sensaciones. Jugaban con nosotros como querían...

Las voces de nuestros anfitriones volvieron a sonar en la sala, consiguiendo que luchase contra la pesadez de mis párpados, queriendo saber qué tenían que decir esta vez. Lo que anuncian me deja pasmada. Era cierto que en las obras de teatro siempre había querido ser LA escogida. Añoraba de verdad ser la protagonista y tener la voz cantante, pero en una situación como esta era lo que menos me hacía falta. Me arrepentía de haber votado por mi misma, ¿pero qué otra cosa podía hacer?

- Trataré de hacerlo lo mejor posible... -Fue lo único que logré decir. Ni tan siquiera me molesté en tratar de ocultar el tono de disgusto en mi voz. Luego me giré hacia Brenda.- Gracias, supongo. -Sonreí, resignada.

Billy solo volvio al escuchar que darian los resultados. Se habia sorprendido porque su voto casi logro una victoria. Rio un poco antes de que su candidato le llamara la atension.

No se, me pareces inteligente y ademas crei que no iba a servir de nada mi voto. lo miro sonriendo Me sigo sin fiar de vos, pero ya escuchaste a la maquina si habrias ganado podias renunciar. le comento con simplesa, no encontrando mucho problema en su voto.

-Vaya, si llego a saber que te iba a disgustar no te habría votado...-Le digo a Jovielle en tono de disculpa-Te he votado a ti porque me has ayudado cuando casi no podía ni andar. además me has parecido una chica con buen criterio. No puedo anular mi voto?-Pregunto sin esperanza al robot.

No quería que el puesto fuese para uno de esos asesino y Jovielle me parece de todo menos malvada, aunque no se si es bueno juzgar por las apariencias... Espero no equivocarme.

- No te preocupes. Es solo que no me atrae la idea de formar parte directa en toda esta locura. De todas formas, si veo que no lo estoy haciendo bien puedo renunciar. Igual que vosotros podéis pedir que lo haga si no estáis convencidos de cómo lo llevo. Así que de verdad, no te martirices.

-Sinceramente, tía, no sé si darte la enhorabuena o el pésame. De veras, no sé si lo que acabas de conseguir es un honor... o un marrón -aun así, le ofrezco mi mano, sea como fuese. Seguro que agradece un apretón, pues por un motivo u otro, parece algo nerviosa.

La duda sigue rondando mi cabeza. "Resolverás los empates". ¿Los empates de qué? ¿Habrá más votaciones? No sé, el caso es que el cansancio tanto mental como físico se están acuciando en mí, por tantas horas, tanta presión, la caída de la noche cada vez más cercana... Necesitaba un descanso y más de una explicación.

Enhorabuena supongo - dije desde mi rincón a la nueva líder del grupo, aunque no tenía muy claro si era una bendición o no... sólo el tiempo lo diría.

Luego miré a Gabriel - Gracias - dije simplemente sin saber que más decir pero sin moverme mucho de dónde estaba, el miedo a lo desconocido y a esos "asesinos" aún estaba latente en mi interior.

Desde mi sitio observaba el resultado. No entendía muy bien los móviles para que otras personas hubieran votado a ciegas, por eso yo había votado en blanco. Pero bueno. Lo que está hecho, hecho está. No sabíamos si era una asesina, o yo que se que... pero me daba la impresión de que no iban a hacer falta muchos desempates de sea lo que fuera lo siguiente, así que en el peor de los casos, esto no era un error.

- Y ahora... ¿Cual será el siguiente paso?-

Por un lado pienso en agradecer a quien me ha votado, pero por otro se me quitan las ganas al pensar en lo claro que dejé el hecho de que no quiero colaborar con asesinato alguno. -Yo también estoy deseando saber qué coño pasará ahora. De hecho estoy deseando salir de aquí...supongo que como todos. -digo y sonrío levemente al percatarme de lo obvio de mi comentario. Algo de alegría y optimismo en este lugar...creo que es necesario. -Jovielle, te deseo suerte. Espero que no la necesites.

Enhorabuena, Portavoz. Zack, no puedes retirar tu voto una vez concluido el plazo de finalización de emisión de voto, no obstante puedes convencer a todos para abrir unas nuevas votaciones, ella misma puede renunciar al cargo, o puedes matarla. Cualquiera de las opciones te serviría para tener que escoger un nuevo Portavoz. El paso a realizar ahora es sencillo: descansar para poder continuar con el Proceso, en el cual deberán de seleccionar al grupo más apto entre ustedes mediante la descalificación de los menos aptos. No obstante, antes...

Un brillo en sus ojos.

Hall, saca unas dosis de comida en bandejas. Rápido.

Tras las paredes, algo comienza a moverse. Pueden notarlo en la vibración del suelo antes incluso de que un nuevo panel se despliegue hacia dentro. 

En bandas, dos docenas de bandejas, cada una de ellas con lo que parecen ser galletas.

Muerto de hambre y cansado, como cuando te das un atracón de maría, me abalanzo sobre las galletas y empiezo a devorar una. Realmente suena bien eso de descansar. ¿Descalificaciones? Mañana me preocuparé sobre eso. Ahora mismo necesito echarme algo al estómago y sobar como nunca...

En silencio, intentando aparentar calma, me acerco a la bandeja. Tomo una galleta, la acerco a la nariz y la olisqueo. - Carbohidratos, azúcares, quizá fibra vegetal, grasa animal... - enumero - ¿Y la proteína? - pregunto antes de dar un ávido mordisco.

Definitivamente, agotado física y mentalmente de tanto plantearme las cosas, decido rendirme por ahora a mis necesidades biológicas. Cojo una bandeja y como sin miedo aparente aunque en mi fuero interno sí tengo miedo de la comida y lo que ésta pueda llevar. -Tienes razón, una buena chuleta estaría de lujo ahora mismo. -digo como respuesta a la mujer.

¿Selección natural? ¿El más despistado la iba a ...? Esperando que no hubiera un bocazas que dijera en alto lo obvio, sencillamente cogí una galleta para comermela. Quizá estaba paranóica y no se trataba más que de una tontería... No sabía que pensar.

Muevo lentamente la cabeza a modo de agradecimiento ante aquellos que me dan la enhorabuena o bien me desean suerte. Se veía en sus rostros que ellos mismos no habrían deseado este puesto. Menos aún tras lo dicho por el maldito androide. La muerte parece una opción viable en cualquier situación. Y eso me pone nerviosa. Bueno.. ¿y a quién no?

A pesar del cansancio, cuando una de las paredes comienza a abrirse saliendo de ella un par de bandejas con comida, me acerco, y cojo una de las galletas. Por poco que sea vendrá bien meter algo en el estómago. Es el primer día y ha sido bastante movidito. A saber cómo serían los siguientes...

No le gustaba la idea pero sabía que tenía que comer. Aquello le recordaba  a las granjas de animales automatizadas. Todo calculado a la perfección para el engorde y a posteriori el sacrificio del animal para su consumo.

Me limpio con la manga las lágrimas y me acerco a coger de mala manera una bandeja. En silencio vuelvo a mi lugar y en voz baja. -Me llamo Idoia... Dicho esto me pongo a comer en silencio.