Partida Rol por web

Continua, a pesar de todo, y al fin siente como sus esfuerzos se recompensan con un golpe certero...

-Maldita, es dura...+mascullo+

 Finalmente, la draña cae fulminada de los últimos golpes recibidos...

Bajo los brazos ya calmado. Cierro los ojos y entro en la Tormenta Sagrada para sentir su calida lluvia. El viento es fuerte pero su sonido natural es armonico para un hombre como yo. Dejo que la lluvia golpee mi rostro con los ojos cerrados y extiendo mis brazos para recibir su pureza. Despues de unos momentos de exquisita paz en el seno mismo de lo sagrado, abro los ojos y digo en voz baja:

 - "Muchas gracias, todopoderoso Silvanus, por las bellezas puras de nuestro mundo."

Luego hago una reverencia al cielo y acto seguido, ceso el conjuro. En un instante estoy nuevamente en aquella asquerosa mazmorra, alejada de todo lo natural de la superficie. Nuevamente estoy en el hogar del mal.

Me giro hacia Kurt, que ha sido herido reiteradas veces en este combate. Me acerco a su lado y sosteniendole el hombro en signo de afecto y sincera preocupacion le pregunto:

 - "¿Estas herido, amigo mio? ¿Quieres de mi ayuda?"

Levanto la cabeza hacia mis compañeros y pregunto en voz alta:

 - "¿Alguien necesita de una curacion?"

Saco mi varita de curacion mientras espero las respuestas.

 Desde el suelo, el guerrero aparta el cuerpo de la bestia, luego se levanta, orgulloso, sangrando de las heridas de mordisco que tiene en su escasa piel expuesta. e lleba una mano a ellas y ve el guantelete d emetal y cuero manchado de sagre, mira a los demás. Su frente se perla de sudor al tiempo que pierde parte de su calidez. Toma aire y lo expulsa, mientras se tambalea un poco.

 - Encontremos a esos bastardos huidizos, eliminémosles  vayamos a descansar. Odio estas bestias.

 El guerrero poco a poco recupera su compustura y su orgullo.

Niego con un gesto la ayuda del clerigo.

*Pero, maldita sea, estas drañas tenian una buena defensa... habre de tenerlo en cuenta.

Con el estoque en la mano, comienzo a recorrer la habitacion, echando un buen vistazo a la misma. Luego me aproximo al vampiro, la criatura que mis compañeros acabaron... Sin apuro, mas tampoco sin bajar la guardia, comienzo a revisarle y despojarlo de sus posesiones...

*No confies en los muertos. Solo aprovechate de ellos.

Los objetos de plata del altar son algo valiosos. Hay tres candelabros de plata, dos cuencos pequeños de plata y una daga de plata.

Las drañas no tienen nada de interés, el vampiro lleva un estoque mágico y poco más de interés.

No hay nada más en esta habitación. Solo la puerta por donde habéis venido y otra puerta que no habéis pasado. ¿Adonde os llevará?

Maldita oscuridad, a estas criaturas les gusta jugar sucio... pero ya aprenderan.

Recojamos esas cosas y si estais bien... tenemos que cazar a unos cobardes...

 El guerrero se seca el sudor que apelmaza el pelo en su rostro, su respiración continúa fatigosa.

 - Esa criatura me ha causado más daño de lo que esperaba... Ilesor, puedes hacer algo?

 Ante el comentrío de Aribeth, Kurt asiente.

 - No me gusta dejar enemigo a mis espaldas, y menos estando en su casa. No vaya a serque nos tiendan una emboscada. Terminemos con ellos y vayamos a descansar.

Respondiendo a Kurt:

 - "Puedo ofrecerte curaciones simples, pero nada mas. Las secuelas de mi lucha contra el fantasma me obligaron a usar mis recursos en mi mismo, aunque aun asi sigo con demasiadas de ellas. Aunque lo que te hizo la criatura fue beber de tu sangre, eso lo curarás despues de unas horas de descanso. ¿Quieres que cure tus heridas?"

Espero su respuesta mientras me siento a descansar un poco.

Me aproximo a la siguiente puerta, con pasos suaves...La expresion serena de mi rostro seria dificil de describir como curiosidad. Es como si...

Una vez mas, tomo mis recaudos, examinando la entrada atentamente, por si hubiera alguna sorpresita.

 Inspeccionas la puerta y no encuentras nada que te haga sospechar alguna trampa o mecanismo oculto.

Satisfecho, envaino el estoque. regreso a donde deje caer mi ballesta, la recojo y cargo con parsimonia, mientras el resto toma un respiro. Cuando estoy listo, miro a mis compañeros.

-Mas descansamos, mas se recuperan. Vamos y acabemos con esto de una vez...

 Kurt saca su varita y la emplea con él mismo.

 - No Ilesor, guarda tus habilidades por si tenemos problemas antes de ir a descanasar.

 Tras mirar a los demás continúa.

 - Vayamos ahora que están debilitados y luego descansaremos.

 Desenvainando su alfanjon de nuevo emprende la marcha por la puerta que ha asegurado Jaan.

Tiene razon si les dejamos ahora puede que se recuperen,puede que estemos cansados pero ellos tambiém por eso es el momento de continuar y acabr con todos ellos,animo compañeros ami tambiem me falta el alineto pero un esfuerzo más y abremos acabado con ellos.

doy animso a los compañeros y aliento al grupo a seguir adelante,y sigo trans los pasos de Kurt que ha dmeostrado ser un buen guerrero y un gran compañero.

Salís de la cámara y os encontráis directamente en un pasillo largo que se bifurca en el fondo hacia la izquierda. En medio del pasillo hay una puerta.

Sin embargo lo preocupante es el hecho de que en mitad del pasillo hay cuatro muertos vivientes desollados en pie, mirándoos con sus ojos inyectados en sangre. Detrás de ellos hay dos elfas oscuras con sus armas desenvainadas.

Vaya, vaya, vaya- dice una- asi que vosotros sois la escoria de la superficie. Habéis llegado lejos, pero no vais a pasar de aquí. Rendios o vuestra muerte será peor

Caminando al final del grupo y cuidando las espaldas, soy el ultimo en ver a las mujeres y muertos vivientes que aparecen... Los escucho con expresion cansada, mas gente que se interpone en nuestro camino... maldita sea. La propuesta que hacen casi, casi, me arranca una sonrrisa.

-Claro, por que no?+mascullo+

Alzo la ballesta y sin vacilar disparo a la que hablo.

Contesto con un virote a la joven que hablo... Este espacio no es el adecuado sin embargo y el virote se pierde...

-Tal vez deberiamos retroceder a la otra camara, tendriamos mas espacio para atacar y ellos solo pueden venir de a dos...

Comento, mientras recargo el arma con presteza...