Partida Rol por web

Camino junto a mis nuevos compañeros con la mano en el bolsillo y la otra sobre el pomo de mi espada. Observo con curiosidad los nuevos compañeros que tengo y les preguntó, mientras subimos el camino hacia el templo: 

-Bueno caballeros, como han llegado ustedes aqui? Estan de paso, o ya conocian la existencia de esta...gesta.

Wiberg observa con una sonrisa el regateo entre Tunaster y Adam. A pesar de que el bribón parecía tomarse poco en serio a su diosa Mystra no le vió maldad alguna. Finalmente se despide de Tunaster con cálidas palabras.

No se preocupe, hermano Tunaster, pronto tendrá notícias nuestras. Luego, se dirige a sus compañeros Esperad un momento, voy a quitarme estos ropajes para que no me identifiquen como clérigo de Mystra. No quiero que me suceda lo mismo que a Tunaster. El norteño se marcha a un lugar apartado y se despoja de la túnica de clérigo, escondiendo el collar con el símbolo de su diosa en el interior de su pecho.

Adam Serawyr escribió:

Wiberg Axentrot, encantado.

Thomas Klifford escribió:

Ahora que no está Tunaster... he de deciros que los superiores de mi templo me han enviado con la intención de ayudar en los inicios de este nuevo templo. Después de lo que nos ha contado este hombre no sé qué creer. Sus palabras parecen sinceras, pero su locura pasajera me hace dudar, y la construcción de un currupto templo de Mystra en una ciudad tan grande me parece imposible. En todo caso mejor que lo comprobemos con nuestros propios ojos.

¿Qué se os ocurre que podríamos hacer? ¿A alguno se le da bien mentir?

En lo alto de las murallas, podéis ver a un par de soldados haciendo guardia en la parte superior.

La gran estatua de la mujer contiene una nota de color. Lleva una cinta en la cabeza, con un disco plano y ancho pintado, un círculo de siete estrellas blanquiazules y una bruma roja surgiendo desde el centro

Entráis por las puertas de la muralla y llegáis a un amplio espacio amurallado que se encuentra a cielo abierto. El suelo está cubierto de baldosas de obsidianas, entre las cuales se han incrustado azulejos de piedra blanca con forma de estrella, imitando en cierto modo el cielo nocturno. Dos grandes estatuas de piedra dominan la zona, ambas representando aparentemente a la misma mujer. Las estatuas se alzan separadas entre sí, pero mirándose mutuamente, con las manos alzadas hacia la otra, casi como si formasen un arco sobre el centro del templo. Además, hay cuatro atares de Mystra más pequeños en las cuatro esquinas del patio del templo.

En el patio, podéis ver a otros tres curiosos y a un sacerdote hablando con un guardia. 

El sacerdote os ve y, con una amplia sonrisa, se acerca a vosotros

¡Que Mytra os bendiga, amigos! expresa alegremente cuando se acerca

Si buscáis a la Madre de toda la magia, habéis encontrado uno de los lugares en los que habita aquí en Faerûn. ¿Habéis venido al templo en busca de curación, o quizá deseáis libraros de alguna enfermedad? Las donaciones que pedimos a cambio de nuestras bendiciones son muy competitivas

Adam se para frente al acceso del templo y lo observa con curiosidad. Bueno, supongo que ahora es cuando nos fríen a flechas y nos sacrifican en honor al Señor de los Nueve Infiernos, ¿no? musita en voz baja mientras el clérigo se acerca. Cuando éste se dirige al grupo, contesta a su saludo.

Saludos. Oh no, no se preocupe, no requerimos de curación... por el momento, al menos. Añade con una sonrisa. Sucede que fui educado en mi infancia en el culto a la Señora de los Misterios; y aunque hace tiempo ya que no visito uno de sus templos, en la ciudad nos han hablado de éste, el primero en muchos kilómetros, y no he podido resistir el convencer a mis compañeros de acercarnos a presentar mis respetos. Desconfiando de sus facultades para mentir, Adam prefiere mantenerse a caballo entre lo cierto y lo falso, de modo que su historia parezca más creíble. Es un trabajo magnífico el que se ha llevado a cabo aquí.

¡Y que le bendiga a usted y a los presentes! - contestó el gnomo. Hemos venido a admirar tan bello templo y con gusto querríamos que nos lo enseñase. Venimos de Whullen, allí nos han hablado de este templo y queríamos venir a verlo. Mi nombres es Yandrak y soy descendiente directo de Bahamut. Mi amigo es Bahy y va allá a donde yo voy. ¿Cuál es su nombre, señor?

¡Oh, disculpen mi grosería! No me he presentado. Mi nombre es Shan Zhar.

Es un enorme placer que hayan venido desde tan lejos para contemplar el templo.

Shan Zhar escucha las palabras de Adam sin cambiar el rostro.

¿Y alguien en particular les habló del templo? Parece que oculta algo, señor, sus palabras no son del todo sinceras, me temo.

Este templo se construyó aquí gracias a la señora Arzhas. ¿No habéis oído hablar de ella, de la mujer que con su coraje y habilidad ayudó a hacer realidad este templo? Sin duda, si debemos dar gracias a alguien por este logro, es a ella

-Saludos hermano, soy un viajero que va de ciudad en ciudad. Necesito refugio por unos dias y descansar mis doloridos pies. Encontre a esta gente subiendo y me recomendaron este lugar. Tengo algo de dinero si es necesario las donaciones por el alojamiento.

Dándose cuenta de que empezar a levantar sospechas no es lo mejor que puede hacer, por mucho que después de ver el templo tenga aún más claro que la conspiración fue un invento del clérigo, Adam intenta enmendar su error y tranquilizar a Shan Zhar.

-Bueno, lo cierto es que tiene razón, no he dicho toda la verdad. Pese a que fui educado en la iglesia de Mystra, nunca me he sentido cómodo en su seno, y renuncié a dirigir mis rezos a la diosa ya desde bastante joven, aunque continuaba fingiendo devoción por ella. En aquel entonces me parecía una diosa arrogante y caprichosa. Pero siempre ha sido generosa en sus dones hacia mi familia, así que, de algún modo, he hecho las paces con ella... desde la distancia. Clérigos, siempre tan intuitivos. Comenta poniendo los ojos en blanco.

Después de esta pequeña "confesión" sincera, para intentar distraer las sospechas del clérigo, Adam opta por permanecer callado y dejar a sus acompañantes que hablen con él.

Wiberg pensó en contarle a Shan Zhar una media verdad acerca de la verdadera razón de su visita al templo y hablarle de Eberhard Nolten, el prior del templo de Mystra cercano a Argluna del que procedía el norteño, que le había encomendado la misión de investigar esta reciente construcción. Pero al ver que los demás tomaban la iniciativa, mantuvo la boca cerrada y esperó a ver cómo se desarrollaba la conversación, ya que al contradecirse unos a otros el grupo se pondría en evidencia levantando más que sospechas.

Ante las palabras Thomas, Shan Zhar le responde

Lo siento mucho, pero en el templo no podemos acoger a ningún aventurero. ¡Quitaríamos el trabajo a las posadas, y dónde se habrá visto eso! No, lo siento, no podemos

Sonrió ante las palabras de Adam

Ya entiendo. Mystra siempre te dará la bienvenida cuando te sientas llamado de nuevo. De hecho, si estuvieras dispuesto y te interesara, te mostraría la manera de pertenecer a este templo. Pero es necesario que quieras tener devoción a nuestra diosa.

Bueno, si puedo servirles de ayuda... Sólo búsquenme. Sientan total libertad en curiosear por ese patio

Disculpe, Maese Shan Zhar, porque no nos cuenta usted alguna gesta, aventura o hazaña de esa tan gran mujer de la que hablas. Jamás oí hablar de ella, y por lo que comentas parece una mujer de lo más peculiar. Has fomentado la curiosidad de un gnomo y eso solo puede resolverse dándole respuestas. Dígame, ¿quién es esa bella mujer de la que habla y cómo es posible que sus gestas no hayan llegado nunca a los oídos de un gnomo como yo? - Yandrak mostraba sincera curiosidad siempre había sido un gnomo muy curioso y su afán por la investigación y la búsqueda de sus raíces le había llevado a querer saberlo todo.

De hecho, si estuvieras dispuesto y te interesara, te mostraría la manera de pertenecer a este templo.

-No creo que debamos llegar a tanto.- Contesta, la idea parece divertirle. Hace ademán de querer encaminarse hacia una de las grandes estatuas del patio interior, aunque la pregunta de Yandrak le llama la atención, y espera a que el clérigo conteste al gnomo.

Se entretiene observando al resto de personas que pasean por el patio, con la intención también de evitar más preguntas por parte de Shar Zhar

Como un espectro silencioso, se movia el desaliñado montaraz a través de sus compañeros de viaje mientras estos hablaban con el interlocutor del templo, al acercarse al clérigo norteño Wiber, le susurra algo al oido que nadie salvo él alcanzan a escuchar -Tu eres un devoto de Mystra, muéstrate como tal, quizá obtengamos acceso al templo fácilmente si lo haces, habla con este hombre y danos acceso para terminar con esto de una vez por todas y demostrarle a ese loco que no hay nada extraño aquí.... y por supuesto, cobrar nuestra parte!!.

Claramente Askabal era un hombre astuto y observador, recordaba las ropas del clérigo que cargaba antes de cambiarselas para el viaje, y sabia de sus intenciones de no ser descubierto como un seguidor de Mystra en caso de que algo extraño estuviera pasando, y le parecía prudente; pero ahora era claro que el acceso al interior del templo iba a ser denegado y eran necesarias otros tipos de estratégias.

Luego de susurrar las palabras al bárbaro/clérigo, sigue caminando, inquieto y observando las murallas del templo, fijándose en cual de ellas podría trepar cuando la actividad de la guardia fuera mas escasa y cual de ellas podría traer mayor ventaja estratégica a la hora de penetrar el templo.

Wiberg permanece atento a las palabras de Shan Zhar. Por lo que dice, para poder entrar en el templo deben ser devotos de la diosa. Entonces Askabal se le acerca y le comenta en voz baja:

Askabal escribió:

Tienes razón, amigo. Parece que no hay otro modo de entrar... Wiberg se acerca hacia Shan Zhar antes de que parta.

Por favor, espere un segundo, hermano Zhar. Me presento, soy el hermano Wiberg Axenrot, un clérigo de Mystra procedente del lejano norte. Me gustaría conocer más de esta nueva congregación que han creado ustedes aquí, si no es molestia. ¿Es eso posible?

Disculpe, Maese Shan Zhar, porque no nos cuenta usted alguna gesta, aventura o hazaña de esa tan gran mujer de la que hablas. Jamás oí hablar de ella, y por lo que comentas parece una mujer de lo más peculiar. Has fomentado la curiosidad de un gnomo y eso solo puede resolverse dándole respuestas. Dígame, ¿quién es esa bella mujer de la que habla y cómo es posible que sus gestas no hayan llegado nunca a los oídos de un gnomo como yo?

¿De alguna gesta? No hay mayor aventura que creer en la diosa de toda la magia y crear un templo por ella y para ella. ¡Esa es la mayor gesta de todas!

Me presento, soy el hermano Wiberg Axenrot, un clérigo de Mystra procedente del lejano norte. Me gustaría conocer más de esta nueva congregación que han creado ustedes aquí, si no es molestia. ¿Es eso posible?

La sacerdotisa principal del templo, la señora Arzhsa, que es la que os podía hablar mejor de todo esto, ahora está ocupada con asuntos privados del templo. Sólo tiene tiempo para hablar con lo adoradores que han avanzado lo suficiente por la senda como para alcanzar la Sagrada Confianza de Mystra.

Acudid a los servicios nocturnos y regocijaos en Mystra. Pero si buscáis aprender más que el feligrés o el clérigo normal, quizás estéis interesados en el conocimiento revelado y en la Sagrada Confianza de Mystra.

Si realmente estáis interesados en convertiros en parte del templo y guizás ganar la Sagrada Confianza de Mystra, puedo lograr que acudáis a un servicio especial de tres días que se lleva a cabo en el atrio intermedio. Requerimos una donación de 25 piezas de oro por cada uno interesado en llevar a cabo el servicio. Sí, es caro, lo se, pero no demasiado para los que realmente están interesados en expandir su conocimiento de la diosa de la Urbidumbre, ¿no?

-Señor, creo que le confunden mis ropajes. Pues no soy un aventurero, sino un viajero. Busco a cierta persona, y busco lugares que ayuden a la concentracion, pues solo con ella puedo encontrar mis metas. Espero que no malinterpreten mis intenciones, pero consideraba su templo como una buena fuente de concentración, si su devoción forma parte del ímpetu de descubrir nuevas formas de concentración, creo que tendra la amabilidad de permitirme entrar. 

Realmente es una secta bastante radical... Piensa Adam, a quién la historia de la "Sagrada Confianza de Mystra" le resulta extraña. Se encoje de hombros y responde con una sonrisa. Ningún precio es caro para entregarse a la Señora de los Conjuros, claro, pero...¿En qué consisten esos servicios exactamente? ¿Los lleva a cabo la propia señora Arzsha?

Es un templo extraño, algo sectario y bastante alejado de la doctrina oficial de la diosa, medita para sí, además del hecho de que no ofrezcan asilo a otro clérigo de su misma fe. Sigo sin creer la historia del loco, pero puede que merezca la pena seguir haciendo averiguaciones en los oficios nocturnos, supongo que esos serán gratuitos.

¿Los rezos nocturnos normales son de entrada libre?

¿De alguna gesta? No hay mayor aventura que creer en la diosa de toda la magia y crear un templo por ella y para ella. ¡Esa es la mayor gesta de todas!

Yo me refiero a las gestas que ha hecho ella a lo largo de su vida. Usted dice que ha creado un templo en su honor, me parece fantástico, pero lo que sigo sin saber es quien es ella...

Ganzua estaa atento a la conversación de sus compañeros, mas no intervenía. El sólo quería terminar la mision cuanto antes para cobrar la recompensa.

Espero que no malinterpreten mis intenciones, pero consideraba su templo como una buena fuente de concentración, si su devoción forma parte del ímpetu de descubrir nuevas formas de concentración, creo que tendra la amabilidad de permitirme entrar.

Y lo es. No hay nada mejor que la presencia de nuestra diosa para concentrarse. Por eso os recomiendo venir esta noche, allí sentiréis todo su poder

.¿En qué consisten esos servicios exactamente? ¿Los lleva a cabo la propia señora Arzsha?

Entiendo su curiosidad, pero no se pueden explicar con palabras. Es una sensación tan intensa que hay que vivirla. Si vienen, seguro que les pasa lo mismo que a mí

La señora Arzhas no lleva a cabo los servicios generalmente. Pero les haré llegar su interés en ella, a lo mejor puede acercarse.

¿Los rezos nocturnos normales son de entrada libre?

Me temo que no. Los rezos nocturnos son para los miembros del templo y para los que quieran iniciarse.

Yo me refiero a las gestas que ha hecho ella a lo largo de su vida. Usted dice que ha creado un templo en su honor, me parece fantástico, pero lo que sigo sin saber es quien es ella...

Sinceramente, amigo, el contacto con la diosa Mystra es la mayor gesta de todas. Aún así, si vienen esta noche, intentaré que ella en persona les reciba. Así, podrá preguntarle todas las cosas que quiera.

Juntando las manos, con una sonrisa feliz, os pregunta:

Y bien, ¿cuento con ustedes?