Partida Rol por web

Yandrak dejó a su compañero hombre lagarto que hablara con él. Era mejor que alguien como él fuera el que se relacionase, pues sabría qué decir en cada momento. Por si acaso sacó su varita de curar heridas y si había posibilidad de curarle a través de los barrotes lo haría, pero no tenía intención de entrar en la jaula, aún no. No se fiaba de ese plano paralelo. Ahí nada era lo que parecía.

Esta vez Kassmal no le reconocía, pero sí pudo distinguir en él la raza de los Dientes Afilados. Al principio, no respondía, pero cuando Yandrak usó la varita de la tribu, recuperó el conocimiento y el color volvió a él.

Con detenimiento, os observó, sin decir ni una palabra. Al mirar alrededor, vio a sus captores muertos en el suelo, y sus ojos mostraron agradecimiento

¿Habéiss acabado con ellosss? Osss lo agradeceré eternamente dijo, haciendo fuerza para liberarse de las cuerdas que le apresaban. ¿Podéiss liberarme? Me apresaron cuando nos trajeron a este lugar tan siniestro por revelarme contra ellos, y me encerraron para dar un escarmiento a los demás.

Kassmal, ¿es buena idea que le soltemos? - le preguntó.

En su momento Kassmal se unió a nuestro grupo, pero ¿sería incorrecto pensar que éste fuese a intentar atacarnos?, tampoco tenía mucho sentido, pero en este mundo todo valía.

Esperó a que su compañero tomase la iniciativa.

Kassmal se encogió de hombros y asintió con la cabeza.

-No esss de mi tribu pero sssí, deríamosss liberarlo y él cuenta qué ha passsado...

Yandrak asintió a su compañero ante la idea de liberarle. Estaban en superioridad numérica, y si estaba en ese plano encerrado es porque no estaría del lado de los malvados, así que confiaba en él. Además, necesitaban información, era necesario que le contase todo lo que sabían para poder resolver aquel misterio de una santa vez.

Tras liberarle, el hombre lagarto se mostró totalmente agradecido, y os contó todo lo que sabía.

Hay un sendero en el otro lado de la fortaleza. Conduce al pueblo de los Escamas sombrías. Varios de los míos han sido llevados allí por los sacerdotess oscuros. Cuando regresan, ya no están vivos. Dos de mis compañeros fueron llevados allí hace uno o dos díass. Todavía no han vuelto, así que quizass los sacerdotes negros aún no los han asessinado.

Los humanos no van al puelbo de la Escama Sombría. Se suben al bote, y un hombre sombrío les lleva corriente abajo. El bote sigue las luces del pantano.

Si no lo habéis hecho, no os acerquéis a la torre de piedra. Allí vive una terrible criatura de la sombra, un tigre que camina.

Tras liberarle, el hombre lagarto se mostró totalmente agradecido, y os contó todo lo que sabía.

Hay un sendero en el otro lado de la fortaleza. Conduce al pueblo de los Escamas sombrías. Varios de los míos han sido llevados allí por los sacerdotess oscuros. Cuando regresan, ya no están vivos. Dos de mis compañeros fueron llevados allí hace uno o dos díass. Todavía no han vuelto, así que quizass los sacerdotes negros aún no los han asessinado.

Los humanos no van al puelbo de la Escama Sombría. Se suben al bote, y un hombre sombrío les lleva corriente abajo. El bote sigue las luces del pantano.

Si no lo habéis hecho, no os acerquéis a la torre de piedra. Allí vive una terrible criatura de la sombra, un tigre que camina.

Tras liberarle, el hombre lagarto se mostró totalmente agradecido, y os contó todo lo que sabía.

Hay un sendero en el otro lado de la fortaleza. Conduce al pueblo de los Escamas sombrías. Varios de los míos han sido llevados allí por los sacerdotess oscuros. Cuando regresan, ya no están vivos. Dos de mis compañeros fueron llevados allí hace uno o dos díass. Todavía no han vuelto, así que quizass los sacerdotes negros aún no los han asessinado.

Los humanos no van al puelbo de la Escama Sombría. Se suben al bote, y un hombre sombrío les lleva corriente abajo. El bote sigue las luces del pantano.

Si no lo habéis hecho, no os acerquéis a la torre de piedra. Allí vive una terrible criatura de la sombra, un tigre que camina.

Yandrak asintió ante las palabras del hombre lagarto, no tenía intención de conocer al tigre que caminaba, pero sí que le parecía una buena idea ir a investigar el tema de sus compañeros. ¿Sabrías guiarnos hasta el lugar del que nos hablas? Hacia el lugar donde se llevaron a tus compañeros. ¿Podrías?

No... contesta negando con la cabeza Al llegar aquí me revelé, quise atacarles y liberarnos a todos. Me retuvieron con facilidad, me golpearon y me ataron dentro de la jaula, para que todos pudieran verme. Dijeron que me dejarían allí hasta que muriera de hambre, y todoss los que passsaran por allí pudieran ver lo que no había que hacer.

Yandrak sonrió por compasión. Bien, pues ahora que eres libre, aunque no puedas guiarnos. ¿Estás dispuesto a ayudarnos y seguirnos? Andamos cortos de manos, y puede que tú nos sirvas de ayuda. Necesitamos llegar al final de este asunto cuanto antes.

Kassmal había estado gruñendo en silencio al recordar todo lo que le habían hecho pasar a aquel congénere suyo. La rabia por las criaturas sombrías no parecía parar de crecer en el frío corazón del reptil.

-Lesss haremosss pagar, primo... Essstoy harto con ellos, abusssando de nossssotros... Contesta al mago.

Corroboró con un gesto las palabras de Kassmal.

Si te unes, no lo lamentarás - le dijo tendiéndole su mano.

El hombre lagarto alzó la mirada y os miró uno a uno a los ojos. Algo debió ver en vosotros que asintió. Se acercó a uno de los guerreros caídos y le arrancó su arma de las manos muertas.

Contad conmigo

-Mi nombre es Kassmal, primo. ¿Por donde se llevaron esas cosas a los nuestros?

Creo que lo más rápido es que tomemos esa barca. Dijo señalándola. Sin decir mucho más, y sin esperar a que tomaran una decisión o discutiran lo más mínimo, se dirigió hacia ella. Sabía con qué clase de grupo se movía, y sabía que él tomaba la decisión, o podrían estar debatiendo eternamente cada paso que tenían que dar.

Kassmal miró a Yandrak y no se movió ni un milímetro. Él sabía bien cual era su deber.

-Mi deber esss salvar a mi gente, amigosss. La tribu siempre primero. Si deseais ssssubir  a ese bote no os lo impediré pero  no puedo abandonar a mi gente. Yo seguiré el camino que han seguido losss míosss.

Llevas razón, hay que salvar a esos hombres, dijo asintiendo ante sus palabras, pero esa barca es un medio mucho más rápido y seguro. Si les alcanzamos antes, podremos rescatar a los humanos y con su ayuda podremos rescatar a tus congéneres. Si somos más y actuamos de forma más rápida, podremos lograr nuestro objetivo más eficazmente.

Kassmal, vayamos en el modo más rápido. Supongo que todos cabremos en ella, ¿no?. Formando un grupo más compacto tendremos más posibilidades.

Por cierto, gracias por unirte a nosotros - le dijo al hombre lagarto familiar.