Partida Rol por web

Pegado a la pared asiento levemente ante las señas de Keghart, con cuidado desenfundo mi espada lentamente y me acerco de nuevo al orco de la silla con máxima cautela

Cuando os disponéis a entrar podéis ver bajo la luz de la linterna que está sobre la mesa que el único orco despierto cae dormido y golpea su enorme cabeza sobre la mesa. Parece que la suerte está de vuestra parte. Los orcos de las literas parecen que siguen roncando.

Aproximándose con cautela a las literas, Keghart empuña su arco firmemente mientras mira cómo sus dos compañeros se acercan a sus respectivos objetivos. Espera a que todos estén en posición, mira a Dzarklex y a Tebryn y asiente con la cabeza. Acto seguido tensa su arco en un grácil movimiento, apunta a la cabeza del orco que permanece dormido frente a él y deja a la flecha deslizarse suavemente de entre sus dedos.

Sigo atento el movimiento de Keghart y salgo de la acogedora sombra del muro ya con la espada lista

me acerco al orco de la silla e inspecciono el mejor sitio para asestar mi golpe , su cabeza esta sobre la mesa lo cual deja la parte posterior del cuello expuesta. Me muevo con cuidado a un costado y agarro el arma con las dos manos a unos centímetros de su nuca, el sonido de la cuerda destensandose me indica que nuestro guía a disparado, así que bajo con fuerza la espada para clavarla en la base del cráneo del orco

Cuando veo que el grupo se prepara para el ataque retrocedo hasta lo mas hondo de la sala y espero pacientemente alli con uno de mis conjuros preparados por  si hiciese falta.

Tebryn se coloca detrás del orco y espera la señal del explorador que apunta cuidadosamente a poca distancia. Tensa la cuerda y con un gesto de cabeza del segundo suelta la cuerda y la flecha va a parar al cuello del orco que duerme en la litera superior con un certero impacto. El individuo comienza a gorgotear y convulsionarse.
Por otro lado, el halfing tapa la boca del de la mesa y corta la garganta de su enemigo. La mano en la boca amortigua el ruido del orco que pierde la vida, pero no impide que las botas golpeen al suelo. El cuerpo se debate en espasmos, hasta que deja de forcejear instnates después y permanece inmóvil. Tergyn se limpia la mano llena de baba verdosa en las andajosas vestiduras del muerto con un gesto de repugnancia.
El orco de la litera inferior se mueve y por instante esperan con el corazón acelerado. El halfing se gira, el mago se tensa y Khegart coloca otra flecha en su arco...Pero se da la vuelta y sigue durmiendo.

Sobresaltado, Keghart prepara otro disparo y espera a ver la reacción del orco, pero por suerte éste vuelve a quedarse dormido, ajeno a la suerte de sus compañeros.

Tensa el arco una vez más, esperando acabar con el último orco de la estancia y poder continuar explorando aquel pasaje subterraneo. Cuidadosamente aplica tensión a su arco y apuntando a la cabeza del último orco, dispara su saeta con fuerza.

Fysium solo encuentra una forma de ayudar a sus compañeros. Usar el nombre de Helmo para que ayude a sus compañeros el combate. La letania comienza, con palabras que refuerzan el valor de sus compañeros. 

La flecha de Khegart se calvó en el hombro del orco. El clérigo rápidamente entra en la habitación tras sus palabras dedicadas a su deidad mientras el mago y el halfing se tensaban. El explorador y los presenten sentían como una fuerza mística entraba en ellos. El orco se incorporó profiriendo un grito de dolor.
- GRaugr, rorogr ukar - exclamó.

Rapidamente Keghart da un salto hacia atrás, no sabía como, pero su flecha había errado el blanco. Busca otra flecha velozmente en su carcaj y prepara un segundo disparo, debía ser rápido, el orco parecía ligeramente aturdido, pero no tardaría mucho en lanzarse al ataque, o lo que es peor, en alertar a otros orcos.

Viendo lo ocurrido levanto la mano y disparo rapidamente el hechizo que tenia preparado contra el orco.

Me sobresalto al escuchar el grito del orco , mi primer impulso es ir a su encuentro sin embargo lo pienso mejor un segundo y vuelvo a la sombra del muro aprovechando que el orco centra su atención en mis compañeros , con la espada corta lista me muevo buscando la espalda del bruto

El último orco se levanta y cae de la litera profiriendo un último grito cayendo al suelo con un golpe pesado. Los cuatro aventureros permanecen en silencio. Por un momento temen por su vida.

De repente, un ruido os asalta, son muchos pared de pares que se aproxima desde el pasillo. Antes de que os de tiempo a nada, en el recinto irrumpe una cantidad abrumadora de orcos que os apunta con sus armas. El clérigo, el más cercano a la salida escapa a tiempo, pero los otros tres son amenazados con sus armas y con gestos os indica que los acompañéis.