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La Larga Búsqueda: El Rastro de la Sangre

Venecia

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03/04/2020, 14:08
Narrador

Lope acudió a su cita con Giacomo Giovanni, mano derecha del Príncipe de Venecia.

La situación política era incierta. Quizás no en apariencia, pero bajo la superficie podía sentirse el agitar de la marea. El Lasombra tenía sobrada experiencia en identificar esas cosas. La familia Giovanni había consolidado su poder a lo largo de la península, en parte gracias a la ayuda del propio Lope, si bien la ciudad todavía se mantenía como dominio Lasombra. Sin embargo la ambición de los italianos parecía no saciarse nunca. Se había iniciado una guerra en el seno de los Capadocios. Los rumores de que el propio Augustus Giovanni había consumido el alma del mismo Antediluviano del Clan cobraban cada vez más fuerza y la caza de todo aquel nigromante que no tuviera la sangre de la Familia había comenzado. La influencia de la Herejía Caínita, tan presente en la ciudad durante los Siglos anteriores, habia sido consumida casi del todo por los fuegos de la Inquisición y el vacío de poder se estaba ocupando rápidamente.

Hasta ahora, la posición de Lope había sido cómoda, pero sus últimos encargos habían sido cumplido más por el peso del compromiso que por voluntad propia.

Con tales pensamiento cruzó el patio del palacio y recorrió el camino hasta el despacho de Giacomo en la planta superior. Allí, el Giovanni lo recibió de pie, tran el escritorio de madera noble, rodeado de ricas estantería colmadas de libros. 

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03/04/2020, 14:17
Giacomo Giovanni

El Vampiro, de aspecto joven y aseado, engalanado con ricos ropajes a la última moda de la época alzó la vista hacie él.

-Buenas noches, Lope -le saludó.

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04/04/2020, 19:10
Narrador

Sin perjuicio de algún roce entre Rodrigo y los criados de Fátima, el viaje hasta Venecia trancurrió sin mayor percance. La Assamita permitió que sus invitados sacieran el Hambre con sus Muñecas de Sangre y entre las bellas siervas y los mercaderes había donde elegir, siempre procurando no acabar con la vida de ninguno de ellos.

La Caravana se detuvo a las afueras de la ciudad, con el objetivo de no llamar en exceso la atención.

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04/04/2020, 19:28
Fátima al-Faqadi

La Assamita se apresuró a organziar a su gente y se dirijó a los occidentales.

-He de atender nuestros asuntos. Si deseáis honrar la Tradiciones habríais de presentaros ante el Príncipe de la ciudad, Ernesto Valero. Lo encontraréis en su palacio al este de la Plaza San Marco. Aza puede guiaros. Si preferís la discreción, podéis aguardar aquí, pero aseguraos de que nadie os ve.

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05/04/2020, 13:52
Rosalía Caeiro

Rosalía no estaba convencida de que presentarse ante el Príncipe fuera la mejor idea, pues sin memoria ni apenas idea de qué consideración les tenían los Vástagos de Venecia era en extremo arriesgado. Quizá pesaba sobre ellos otra Caza de Sangre, o tal vez hacía dos siglos habían hecho enfadar a algún miembro de la corte veneciana por a saber qué razón. Quizá los Tremere tenían peso allí y si se hacían notar actuarían contra ellos... Demasiados "quizá" para tomar una decisión...

Dirigió la mirada hacia la ciudad que se adivinaba más allá de tierra firme. ¿Era la primera vez que la veía? Los armoniosos perfiles de los palacios que se recortaban contra el cielo nocturno le resultaban desconocidos, pero eso no significaba nada... Cerró los ojos un instante, tratando de rebuscar en su desgajada memoria algún recuerdo de la corte de Venecia y, sobre todo, de su Príncipe, ese tal Ernesto Valero.

- Tiradas (1)

Motivo: Int. + Cult. Estirpe

Dificultad: 6

Tirada (6 dados): 4, 10, 5, 4, 2, 7

Éxitos: 2

Notas de juego

No sé si con 2 éxitos me da para saber algo del Príncipe y de la corte. Si no, me basta con recordar algo del Príncipe.

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05/04/2020, 16:05
Lope Garcés, «el Peregrino»
Sólo para el director

El juego al que los Giovanni están jugando es arriesgado, pensaba Lope.

Entendía esa ambición que él mismo había sentido tiempo atrás. Sin embargo se preguntaba hasta qué punto merecía la pena todos los riesgos que estaban asumiendo la familia para engrosar tanto poder. Diabolizar un clan entero como parecía que se proponían era tenía sus ventajas: una vez ejecutado el plan ya no quedaba nadie que realmente tuviera un motivo de peso para confrontarles.

El peligro era residía en actuar de forma evidente: que todo saliera demasiado a la luz, que demasiadas personas empezaran a hablar de ello... En ese caso los clanes considerarían que los Giovanni estarían sembrando el germen de alguna futura conspiración en el seno de sus proles, y decidirían dar ejemplo eliminándolos de alguna forma cruel y ejemplarizante. La sutileza, como ocurría en la mayoría de las veces, es la medida con la que se deben planear todas las acciones.

Con esos pensamientos en mente, y tantos otros que abarrotaban su mente privilegiada, saludó con sobriedad y elegancia a su "mecenas":

Buenas noches, signore Giovanni. - dijo mientras intentaba adivinar el propósito de esta reunión.

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05/04/2020, 19:55
Giacomo Giovanni

-La señorita Al-Faqadi ha llegado a la ciudad. Al parecer, ha cumplido su encargo. Os felicito. Os aguarda en la habitación principal al fondo del pasillo. Ahí tenéis su pago -añadió señalando un barril sellado apoyado en la esquina.

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05/04/2020, 20:00
Narrador

Rosalía recordaba a un Ernesto Valero como un Lasombra que en vida fuera un noble aragonés, pero nunca lo situó en Venecia. No recordaba que lo hubiera llegado a conocer personalmente, pero al menos había oído hablar de él.

Recordaba haber visitado Venecia en sus tiempos con de Chiquilla junto a su Sire, pero poco tenía que ver con la imagen que intuía en el horizonte.

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05/04/2020, 20:14
Rosalía Caeiro

-Creo que deberíamos presentarnos ante el Príncipe -decidió por fin mirando a sus compañeros.

Siendo un Lasombra, y además aragonés, tal vez su buena relación con Lucita podía servirles de ayuda. Además, estaba harta de esconderse y huir.

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06/04/2020, 10:49
Aza Serdar

Aza comenzó a dar instrucciones a los integrantes de la caravana por si tenía que abandonarla para acompañar a sus invitados, tal y le había pedido Fátima. Les indicó un punto de reunión más alejado por si las cosas se torcían y tenían que abandonar aquel lugar, un pequeño bosque de abedules cerca del camino que habían realizado. Les indicó que no hicieran fuego, cuantas menos miradas atrajese la caravana, tanto mejor. También les dijo a los criados que si surgía algún problema, y si era posible, que uno de ellos acudiera al campanario de la Plaza de San Marcos y lo esperara en la cara oeste. Toda precaución era poca.

Cuando acabó, se dirigió a un robusto arce cerca de donde la pequeña comitiva de vampiros discutían su siguiente paso. Apoyó su espalda en la corteza y esperó a que tomarán una decisión.

Me he convertido en una maldita nodriza... Espero que tomen una decisión antes de que despunte el alba.

 

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06/04/2020, 19:03
Thomas Daister

-Muy bien. Pero más nos vale ser muy cautos. -respondió Thomas a Rosalía. Después se volvió hacia Aza-. ¿Nos guiais pues?

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06/04/2020, 19:36
Lope Garcés, «el Peregrino»
Sólo para el director

Años de guerras y alianzas entre cristianos y musulmanes, entre Lasombras y Assamitas... Habían engrosado mucho la lista de contactos de «el Peregrino», sabía que Al-Faqadi cumpliría con su encargo.

- Me alegra oír que tuvo éxito en su misión. - Dijo con un tono neutro. - Siempre tuvo mi confianza, es un persona muy capaz. 

Se giró hacia el barril y con un ademán hizo llamar a un lacayo para que lo cargara. Tras ello se giró hacia el Giovanni y con una reverencia dijo: 

- Si no necesita nada más, iré a felicitarle y a entregar el pago.

Notas de juego

Asumo que "mi parte" ya me la dará ;P

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07/04/2020, 12:45
Aza Serdar

- Por supuesto, síganme - dijo en el idioma que hablaban los vampiros. Lo hablaba de forma fluida, pero era difícil desprenderse del acento persa.

Rosalía había despertado su simpatía, al menos en la primera impresión, pero no sabía que pensar de los demás, de momento. Todos parecían cansados, con un peso invisible a sus espaldas. Esperaba que esa carga no lo arrastrara a él también.

- No nos han presentado debidamente, y me gusta saber con quién viajo - dijo Aza mirando al grupo - Mi nombre es Aza Serdar.

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07/04/2020, 19:00
Thomas Daister

Thomas se acercó y tendió la mano a Aza.

-Thomas Daister, Caballero a la vieja usanza. Es curioso cómo nuestra condición se sobrepone a todos los prejuicios. ¿No os parece?. Si nos hubieramos conocido de mortales seguramente habría sido en frentes opuestos de un campo de batalla. Decidme, Aza. ¿Lleváis mucho tiempo entre los Hijos de Haqim?

Notas de juego

Los Hijos de Haqim es un apodo para los Assamitas.

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07/04/2020, 19:06
Fátima al-Faqadi

Un siervo de palacio tomó el barril y lo cargó tras Lope. El Lasombra recorrió el camino hasta la habitación indicada. En su interior una mujer miraba por la ventana contraria a la puerta. Si piel era como el ébano, tan oscura como sus ropajes. Dos puñales curvados se cruzaban envainados sobre su cintura. La mujer se dio la vuelta y sus ojos felino lo escrutaron.

-Buenas noches, Señor Garcés.

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07/04/2020, 20:09
Rosalía Caeiro

-Tenéis razón -dijo Rosalía acercándose también-, parece que hayamos olvidado la cortesía en estas noches extrañas, disculpadnos. Mi nombre es Rosalía Caeiro. Gracias por haber velado por el buen discurrir del viaje hasta aquí. ¿Nos acompañaréis hasta Constantinopla, Aza? -sonrió y echó a andar siguiendo al sarraceno.

Notas de juego

Entre nosotros hablamos en langue d'oil (francés antiguo). Te lo pusiste, ¿verdad?

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07/04/2020, 23:38
Aza Serdar

No esperaba tal cortesía, le cogió por sorpresa. Para él los occidentales eran bárbaros incultos que no sabían hacer otra cosa que matar en nombre de su dios, extendiendo sus obtusas creencias más allá de lo que podían abarcar. Por otra parte, ¿qué los diferenciaba de muchos de los hombres de su tierra, o incluso de él mismo? Desechó rápidamente aquellos pensamientos identificándolos como un signo de debilidad.

- El destino tiene curiosas formas de mostrarnos el verdadero camino, caballero Daister - estrechó su mano con firmeza. - A veces pienso en el hecho de que casi ni me acuerdo de mi antigua vida, pero eso, dada nuestra condición, no significa mucho, ¿no es así? 

Se volvió hacia Rosalía e inclino la cabeza ligeramente a modo de reverencia.

- Si así lo quiere mi señora al-Faqadi, les acompañaré. Pero díganme, ¿cuáles son sus planes allí? Dicen que es peligroso incluso para los nuestros.

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09/04/2020, 10:49
Lope Garcés, «el Peregrino»
Sólo para el director

- تصبح على خير صديقي - saludó en un perfecto árabe. - He oído que has cumplido tu objetivo con éxito.

Con un nuevo ademán indicó al lacayo que dejara el pago junto a la puerta de entrada. Lope se acercó hasta la ventana y pensativo dijo: 

- ¿No te parece increíble que tras tantísimas noches de muerte y odio, estemos hoy aquí haciendo negocios? No creo que seamos amigos, pero en un mundo tan despiadado como el nuestro todavía queda confianza. 

Y así era. Quizá en el futuro ella le traicionaría a él, o al revés... Pero en noches como estas sentía que no todo era tan oscuro.

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09/04/2020, 20:07
Fátima al-Faqadi

El críado abandonó la habitación después de dejar la carga.

Con la gracia de una gata, la Assamita se acercó y olisqueó el barril sin abrirlo.

-Bueno, la muerte y el odio son los impulsores de nuestro negocio -le sonrió Fátima-. Los Giovanni parecen sobrados de ambas cosas. ¿No te parece?

 

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10/04/2020, 13:23
Hákon Svarta

Hákon, acompañado de su enorme lobo de pelaje plateado, bajó del carro y más por vieja costumbre que por necesitarlo de veras se estiró con aspecto perezoso. Echó un vistazo en derredor y se acuclilló junto al animal para susurrarle algunas palabras. Como siempre, no era conveniente que Jarl entrara en ciudades. Sería asaeteado a primera vista. 

Se acercó junto al resto y atendió a las presentaciones con el sarraceno con gesto torvo. 

-Hákon -se presentó, saludando con un gesto del mentón y cruzando los brazos al pecho, por debajo de la pelliza negra que cubría sus hombros.

-Hagamos acto de presencia en el Elíseo y resolvamos cuanto antes lo que la diplomacia exige. Aún queda mucho camino hasta Constantinopla. 

Por su parte, no iba a revelar los motivos por los que iban a aquella ciudad a un completo desconocido, por mucho que fuera un circunstancial aliado.