Partida Rol por web

La leyenda de Roshendal

Capítulo I "Mi Tierra"

Cargando editor
29/05/2014, 19:57
Ken

Mi cara de sombro no podia ser mayor al ver aquella combinación de seres en mi puerta, un Kobold rojo, una criatura que no sabria ni definir, incluso dos conejos estaban hay parados como si cualquier cosa, pero el hada habia dicho que ese grupo eran elegidos y que tenia que recibirlos y tratarlos como compañeros, aun así cada vez tenia mas claro que el hada estaba loca,se suponia que ese grupo tan extraño tenia que ser capaz de cumplir una profecia con final desconocido, en mi opinion estabamos muertos.

- pasad, la mesa esta preparada y supongo que tendreis hambre - indique al extraño grupo - Mi hada me dijo que vendriais -

Cargando editor
30/05/2014, 00:19
Brégor

  -Lo cierto es que tengo bastante hambre, así que acepto tu oferta ¡Jajajaja! - Bregor se acercó a Ken y a Tara y les estrechó la mano. A continuación se sentó a la mesa y se sirvió algo de beber mientras el resto tomaba asiento.

  Dirigiendose hacia Ken dijo:

  -A ver si tu nos puedes arrojar algo de luz en este asunto de los elegidos, porque nadie nos ha explicado nada aún. Por cierto, mi nombre es Bregor. - Bregor dió un gran trago de su bebida dejando vacia la jarra. - ¡Buffff, estaba seco! ¡Jajajaja!

Cargando editor
30/05/2014, 05:29
Michael

-Mi nombre es Michael- dije acercándome y ayudando a Tara con las cosas- déjame que te ayude- le dije poniendo las cacerolas en su lugar para luego tomarle la mano- unas manos así de delicadas no deberían hacer labores así-le di un beso en el dorso de la mano- como dije mi nombre es Michael, puedo saber el tuyo?- la miré a los ojos y me erguí, soltando su mano lentamente.

-Y acepto la oferta...siempre estoy hambriento-

Cargando editor
30/05/2014, 16:36
Kurtok

Kurtok se dirige a Ken y ajeno a los manjares que en la mesa se ofrecían solicita:

Vamos a ver... ¿Sería posible una infusión de mandrágora tirsoide del norte aderazada con unas acelgas tildosas y un poco de romero curtido y envuelto en tierra roja? Algo sencillo, no quiero entretenerles en la cocina con cosas difíciles de hacer. Ah y para beber un poco de hidromiel de abejas de las colmenas del este por favor.

El pequeño gnomo indiferente se pone a hablar con un geranio que luce en la ventana del local.

¡Hola pequeño! ¿cómo estás? A siiiiiiiii, claro, ¿te riegan poco dices? no te preocupes yo lo arreglo.

Dirigiéndose otra vez a Ken vuelve a solicitar:

Un poco de agua también para mi amigo de la ventana, ah y tendrían un cervatillo para mi tigre comienza a babear demasiado...

Notas de juego

Editado para corregir una falta de ortografía que me hacía daño a la vista...

Cargando editor
30/05/2014, 17:50
Ken

- Es un placer conocerte Bregor - saludo al hombre cuanto entro en las ala y dijo su nombre - Me llamo Ken y podeis comer todo lo que querais, no hay mucho pero lo que tengo esta a vuestra disposición, en cuanto al asunto de los elegidos no se demasiado -

El hombre que se llamaba Michael paso completamente de mi para dirigirse a tara y tomar su mano, desde luego no tenia una gran educación y eso pensado por mi que me habia criado en los bosques no era mi adecuado.

La extraña criatura entro despues sin pararse siquiera a ver nada y comenzo hacerme la petición mas extraña de toda mi vida - Temo que no dispongo que esas cosas que me solicitas, pero hay algo de carne cruda para el tigre si lo deseas -

Cargando editor
30/05/2014, 19:32
Gladia

      Gladia miraba a Rallitas con una mezcla de miedo e interés.

      -¡Wow, no sabía que había animales tan rayados por estos lares! Aunque he visto una vez un búfalo a rayas, era rosa. Era bonito. Si. Oh, yo los ayudo con los víveres. Miel hay pero no de la que pides, ¿qué tal si me dicen los nombres todos? Oh, ya alguno dijo. Es que estoy distraida. Hola Iato. -la pequeña medía no más de unos cinco centímetros y brillaba cuando se emocionaba.

Notas de juego

Tara anda un poco ausente por la operación del abuelo, no se asusten si no responde todavía.

Cargando editor
31/05/2014, 11:18
Kib

Cambie el semblante al ver la mesa con comida. Llevaba días de camino a base de pan duro, queso rancio y vino amargo. Me separé de la pierna de Michael, al tiempo que él se dirigía hacia al chica, y me abalancé hacia la mesa, cada uno tenía sus prioridades.

Me eché un trozo de pan tierno a la boca sonriendo de felicidad.

- ¡Oh pfsí! ¡Hidromiel efftaría pfgenial, llevo meses sin pfprobarla! - Intenté pronunciar con la boca llena de comida

Yo soy Kibpf, pfor pfcierto. 

 

Cargando editor
02/06/2014, 06:19
Iato

         El elfo se sienta y toma una manzana. La corta por la mitad con una daga reluciente que saca de entre sus ropas. Mira alrededor. No habla mucho. Solamente dice: -Gladia, ¿sabés algo de la invasión? Será en dos días pero los búhos han comentado que pueda adelantarse.

        El hadita niega con la cabeza.

       -Tenemos que estar listos. Alimentáos bien. No sé si no deberemos irnos antes...

Notas de juego

El miércoles seguimos, estoy esperando a Mc a ver si vuelve. Igual interactuad entre vosotros, yo me meteré para alguna cosa nomás, pero conversad.

Cargando editor
03/06/2014, 14:50
Kurtok

De repente Kurtok grita: ¡¡¡¡¡¡SILENCIO TODO EL MUNDO!!!!!! - todo el mundo paraliza lo que estaba haciendo, algunos comienzan a tocar sus armas por si fuera una voz de alarma- SSSSSHHHHHHHHHHHHHHHH ordena Kurtok, el personal comienza a ponerse nervioso, parece como si Kurtok hubiera escuchado algo e intuyera enemigos cerca....

Ahora que ya estáis callados puedo empezar...

Kurtok comienza a cantar:

 

Kurtok mató a un orco

Kurtok mató a dooooooooos

Kurtok mató a treeeeeeeees

interrumpe el soniquete: ¡Vamos todos juntos!

Kurtok mató a cuatrooooooooooooo

Y los orcos se acabaron

y los orcos se acabaroooooooooooooooon

El pequeñin se inclina antes los estupefactos asistentes a su "cántico alarmante"

Miradas asesinas de sus compañeros rodean al gnomo por el mal momento que les acaba de hacer pasar a todos.

Cargando editor
03/06/2014, 15:37
Kib

- ¡Bfrafo! ¡Bfrafo! Empecé a gritar con la boca aún llena.

 

Seguía sin tener ni idea de qué hacíamos allí, pero la cosa se empezaba a animar. Me descolgué el laúd y mientras lo afinaba le pregunté a Kurtok.

¿No sabrás más canciones verdad? - Hice sonar un par de cuerdas buscando el todo de lo que acababa de cantar. - Bueno, mejor cantemos alguna canción que sepamos todos, no? ¿Alguien se sabe la de la dama del lago?

Cargando editor
03/06/2014, 18:13
Ken

Niego con la cabeza mirando al extraño ser que cantaba de esa forma tan demente, se supone que somos un grupo de elegidos que podemos hacer algo grandioso, que salvaremos al mundo incluso, pero lo unico que parece que podamos conseguir es matarnos entre nosotros.

- Si me disculpais tengo que hablar en privado con mi Hada, comer tanto como querais y demas -

Me encamino hacia la puerta para justo antes de llegar girarme y mirar directamente a Gladia - Gladia, ven -

Cargando editor
04/06/2014, 20:46
Iato

    Ken se había separado un momento para hablar con la hadita. Tara sirvió algunos platos más de carne. Todos estaban comiendo algo o bebiendo, algunos charlando, y otros comenzaban a tocar sus instrumentos musicales. El único que estaba serio era el elfo. Rallitas, el tigre blanco, se puso en un costado en donde la chica también le dio un pedazo de carne. Los conejos estaban comiendo vegetales, uno diciendo lo bueno que estaba todo y el otro, como siempre, diciendo lo malo que estaba todo.

    Pero el elfo, él seguía tenso. Sus ojos de pronto volaron hacia la ventana. Se paró de golpe y dijo -¡Silencio! -hasta el hombrecito desnudo se quedó ojiplático con la forma de hablar del ser. No era un grito el que emitió, sino una orden. Todos callaron. Ken todavía no había podido hablar con Gladia como quería pero tuvo que prestar atención.

    En ese instante todos sintieron un sonido: eran voces. Hablaban en un lenguaje incomprensible. Una sombra entonces cubrió la ventana. El enorme tigre se puso a rugir por lo bajo. -Escondeos en alguna parte de la casa, rápido -apuró Iato esta orden. Gladia bajó el brillo de sus alas. Los dos conejos hicieron algo que el incubo había querido hacer cuando los conoció, se unieron formando un conejo blanco que se metió bajo un mueble. La sombra se hizo más grande.

    -Va a entrar en cualquier momento...

Cargando editor
04/06/2014, 21:32
Kib

"¡¿Pero qué demonios?!" Pensé. Dejé el laúd sobre la mesa y me apresuré a buscar un buen sitio donde meterme. Era pequeño, pero no tanto como para caber debajo de un mueble. ¿Un armario? No muy obvio. Me empezaba a poner nervioso cuando vi el cubo de la fregona. ¡Perfecto! Me lancé de cabeza, lamentablemente no me di cuenta de que no cabría hasta que no me hube quedado encastado bocabajo y moviendo de forma efusiva las piernas, que me habían quedado fuera. Como no había demasiado tiempo para intentar salir me senté en el sitio mientras pensaba... "Soy un cubo del revés no tiene nada de raro, soy un cubo del revés no tiene nada de raro..."

Cargando editor
04/06/2014, 21:47
Tara

Servia la comida, pero no podía dejar de mirar al elfo que había visto en el bosque, eramos los elegidos, iban a traernos más gente, esperaba que fueran guerreros, pero en cambio nos trajeron aquellos seres tan raros, uno de ellos medio borracho empezo a cantar y no pude más que mirar al elfo, mi mirada lo decia todo "¡¿En serio?!" Deje el plato en la mesa y me aleje de ellos, nos enfrentabamos a una gran amenaza y ellos estaban de fiesta, comiendo, bebiendo y cantando, o no sabían la gravedad del asunto o les daba igual, teníamos que irnos, pasad desapercibidos, ¿pero como lo hariamos con este grupo? Llamaríamos demasiado la atención.

De pronto una sombra lo cubrio todo, un rugido de un tigre me puso sobre alerta y saqué mis espadas, el elfo dio una orden de que nos escondieramos, pero era demasiado, no serviria de nada, me coloque detrás de la puerta, si alguien entraba no me esperaría alli y podría desarmarle o atacarle por sorpresa, vi como uno había intentando esconderse en un cubo, quedandose pataleando, eso solo confirmaba mis sospechas, era mejor estar preparada para el ataque o esconderse y que el ataque nos pillara por sorpresa

Cargando editor
04/06/2014, 23:01
Ken

Aun no había conseguido hablar con Gladia cuando el elfo nos mando callar y se quedo totalmente quieto esperando algo, una sombra cubrió entonces la casa y todos retrocedimos unos pasos, no tenia la menor idea de que seria esa cosa, jamas habia visto una sombra así cerca de mi casa o del bosque de hadas.

La orden del elfo habia sido entonces que nos escondieramos en la casa, pero mi casa no tenia lugar donde escondese, dos habitaciones y el salon donde nos encontrabamos, yo era un cazador y un granjero no un rey que tuviera un castillo con miles de habitaciones y zonas ocultas.

Me apresure a entrar en mi habitación y buscar en uno de los frascos que tenia en la estanteria, tenia varios venenos, pero necesitaba uno especialmente letal si esperaba lograr hacer algo con el, seleccione el frasco negro y derrame su veneno en las puntas de mis flechas antes de cargar una en mi arco y apuntar a la puerta.

Cargando editor
05/06/2014, 00:28
Brégor

  Bregor dejó de comer, limpió el cuchillo con el que estaba comiendo y se lo guardó en la bota derecha. A continuación se levantó y anduvo despacio hasta la ventana que señaló el elfo. Se colocó con la espalda pegada al marco de la ventana. El enorme guerrero le hizo  una señal a Iato para que estuviera atento, levantó su brazo derecho hacia la espalda y aferró el mango de su espadón con la mano, iba a intentar algo. Cuando todos estuvieron preparados, Bregor hizo una breve afirmación con la cabeza, dió un rápido giro, abrió la ventana agarró con fuerza a la sombra que asomaba por la ventana y la tiró al suelo del salón y colocando el espadón sobre el ser que los espiaba y dijo:

  - Muy bien amigo ¿Nadie te ha dicho nunca que está muy feo espiar por la ventana a la gente?

Cargando editor
05/06/2014, 04:25
Michael

Al escuchar la voz del elfo mis orejas también temblaron y los ojos gatunos se agudizaron, al ver que la chica se ponía detrás de la puerta, lo cual era mi idea, me decidí por el segundo escondite, de un salto giré y me quedé pegado al techo, justo en la esquina de la sala, con una pierna en cada pared y las manos aferrándome, mis uñas habían salido para aferrarme mejor al techo y una daga se mostraba aferrada entre mis dientes.

No pensé que el humano fortachón fuese a intentar algo así, pero de funcionar, sería bueno para todos...

Cargando editor
05/06/2014, 08:12
Kurtok

Kurtok como siempre,  ajeno a lo que sucede alrededor...

Mira Rallitas, este ficus estaría más contento al lado del geranio ¿no te parece? - dice mientras acaricia a Rallitas - Quizás pudiera quedarme aquí un tiempo  y ayudar a esta gente a cuidar sus plantas porque me parece que no tienen ni idea, las pobres sufren y nadie hace nada por ellas.

Cargando editor
07/06/2014, 03:30

                En un minuto nomás las cartas se dan vuelta, diría un hombre sabio (y adicto al juego) y a este grupo le pasó algo similar. Fue sólo un momento cuando todo cambió.

                Kib buscó cobijo en el cubo de la fregona y se quedó atascado. Dado vuelta de nuevo, intentó pasar por un cubo con piernas. Al menos el mismo no contenía agua y podía respirar. Por lo pronto eso era lo importante. Tara, en vez de buscar cobijo, pensando que era lo mejor, se puso al lado de la puerta principal para pillar al que ingresase por sorpresa. Ken pensó que no habría suficiente espacio en su humilde morada para la acción que el elfo pidió, así que en cambio, se fue a la cocina a buscar sus venenos. Estaba revolviendo todo cuando sintió el estruendo…

           Bregor, con toda la buena voluntad de la cual hacía acopio intentó tomar a la sombra por sorpresa, por lo que se apresuró a coger al ser por la ventana y tirarlo al suelo. Claro que él no sabía que el mismo no cabía por la ventana. Se encontró con un brazo grande como cuatro troncos que se unía a un torso descomunal. Desde su posición elevada, sujeto a la pared, el íncubo, Michael, vio a la criatura. Era un Orco de tiro… así se llamaban a los que, por su enorme tamaño, se usaba para tirar carretas enteras.

           Kurtock estaba delirando con una planta. Él era un amante de la vegetación y al momento le pareció lo más apropiado.

          -GROAR….!!! –dijo el Orco cuando notó que había gente adentro. Entonces Iato se colocó su capa y se hizo invisible a todos. De pronto la puerta de entrada se abrió sola, era el elfo, la cerró de nuevo y una raya asomó en la piel del orco que ahora intentaba tomar a Bregor con sus enormes dedos.

           Justo ahí Ken encontró un frasquito pequeño de veneno de araña escarlata. Unas gotas causaban parálisis total por dos horas. El Orco soltó a Bregor cuando Iato lo hirió, pero con su tamaño y fuerza tardaría minutos en romper la pared de entrada.

Cargando editor
07/06/2014, 10:41
Ken

Notas de juego

Una duda Bregor sigue sujetando el brazo del orco?

Nota de la Dire: depende de lo que Bregor postee :P