Partida Rol por web

Al destapar el frasco y olerlo, captas un leve olor a vampiro, ahora que sabes como huelen lo reconoces. Al mismo tiempo te llega a sangre...solo que no es sangre...no lo comprendes.

Al entrar en la cocina, el calor y el ruido son insufribles, los jefes gritan a los subordinados, que a su vez gritan a las camareras que les devuelven los gritos y todo eso caldeado por las llamas de los fuegos.

Te ordenan que saques el cochinillo del horno de una maldita vez.

El olor nauseabundo del vampiro envuelve mis sentidos cuando destapo el frasco. Me doy cuenta, con un estremecimiento de furia, que es sangre del no muerto lo que se halla ahí dentro, encerrado entre las frágiles paredes del contenedor. Tengo que hacer un esfuerzo para no arrojarlo lejos de mi. Pero, finalmente, la razón se impone, y lo conservo, auqnue sólo sea para que no advierta de que su mentira ha sido descubierta. Y quizás tenga, como él ha dicho, propiedades curativas, aunque no ciertamente algo que quisiera comprobar, ni que necesitare hacerlo.

Sólo me resta, ahora, esperar a que salga todo bien.

De momento hago todo lo que se me ordena, sacar el cochinillo, ir por mas vegetales lo que sea para escabullirme y aparentar la forma de una dama de compañia de Marie LeMarc

Excelente, esto es más difícil de lo que pensé. Tengo que salir de este lugar.

Salgo de la cocina y me asomo un poco al salón principal para tratar de llamar la atención de una de las damas que podrían tener  la oportunidad de acercarse a Marie.

La llevare afuera y hare un cambio con ella, después me acercaré a Marie con la escusa de que su vestido se ve un poco desarreglado, en su dormitorio  le explicare lo de Thaddeus. Sera conveniente utilizar todo mi carisma y  mi “don especial”, no solo me servirá de convencer a una dama sino también al Chef de que me deje un momento y que después de eso trabajare con todo mi esfuerzo y más. Si al regresar como dama me preguntace por él le repondere "el muy maldito dijo que se sentia mal y despues se hizo el que se desmayo en los arbustos, se hubiera inventado una mejor escusa si quisiera que sintiera lastima por el"

Cuando por fin consigues acercarte a la señorita Marie, esta te mira extrañada.

-¿Quién eres?-

No hay nadie lo suficientemente cerca para escucharos, el ruido es alto, pero hay mucha gente en el salón de baile.

La "doncella" se acerca a Marie LeMarc saludándola con una reverencia y en voz baja le hace de su conocimiento que tiene un mensaje de parte de Thaddeus.

No se exalte señorita pero tengo el mensaje de un joven llamado Thaddeus, según él muy importante, me gustaría que fuéramos a su habitación para darle más detalles.

Los movimientos de manos son ambiguos, de lejos pareciera que se hace referencia a ropa y modales pero de cerca se logra trasmitir la idea que necesitan ir a su habitación inmediatamente.

En ese momento resuena en mi cabeza lo dicho por Thaddeus:

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