Partida Rol por web

Los últimos comentarios y la actitud de Morgan despertaban una desconfianza en mí, pero no había llegado hasta este agujero para quedarme a las puertas de un descubrimiento mayúsculo.

- Gracias Stuart. Gordon voy para allí.

Me ato a la cintura la cuerda que me facilita Devlin y le tiendo el extremo al joven.

- Vaya dándome cuerda según se la valla pidiendo.

Vincent se acercó a la bajada mirando hacia abajo.

Si le tranquiliza puedo vigilar que Gordon no intente hacer nada estupido, ya que no me costaría dispararle desde arriba, si bien no creo que el hombre sea un peligro, estoy encargado de la seguridad de la expedición, así que puedo hacer eso para tranquilizarlo Morgan.

- Así lo haré señor -

Una vez tiene la cuerda atada, Patterson comienza a descender ayudado por Stuart que va soltando cuerda, al principio parece inseguro y avanza muy muy lentamente, para después coger confianza y descender cada vez más rápido, al llegar a la altura de Gordon, véis cómo Patterson se fija en dirección al saliente que Gordon le señala y véis cómo hablan entre ellos , pero no podéis entender lo que dicen.

Al llegar casi a la altura de Gordon, ves claramente lo que te está señalando e ilumina con una linterna:  se trata de un cadáver no muy mal conservado al que aún le queda carne y ves claramente cómo tiene un agujero de bala en el centro de la frente.

- Ahora sabemos exactamente lo que le pasó a Williamson... le han disparado en plena frente mientras descendía o puede que alguien haya escondido aquí el cuerpo.

-¡¿Qué es eso?! -Preguntó mientras se asomaba por el hueco, se encontraba bastante inquieto, aquella conversación sobre algo y no saber qué era hacía mella en su espíritu presa de su afán de cotilleo.

Observo con desagrado el cadáver del  líder de la anterior expedición. Por un momento sentimientos de temor me abordan, ya que el tiro en la cabeza denota que fue asesinado, quizás por la persona que está en el mismo saliente que yo en este mismo instante, pero mi pragmatismo me hace pensar que, de ser el culpable, no se atrevería a hacerme nada en la delicada situación en la que nos encontramos.

Mi mente pasa a examinar el cuerpo, sorprendentemente bien conservado para el ambiente húmedo que lo rodea.

- Horrible final el este hombre, pero centrémonos en la tarea. Voy a registrarle en busca de algún indicio.

Busco en los bolsillos del sujeto en busca de algún objeto sin mucha esperanza ya que ya habíamos encontrado su cartera. Después mi vista y la linterna se dirigen a la parte de abajo del pozo intentando ver el fondo del mismo.

- Quizás deberíamos subir el cuerpo arriba y darle cristiana sepultura ¿Qué le parece? ¿O continuamos bajando para ver que hay en el fondo?

El cuerpo va vestido con jirones de ropas de explorador, muy parecidas a las que todos vosotros lleváis, entre sus bolsillos encuentras papeles que le identifican en efecto como el profector Williamson. Una parte de vuestra misión acaba de cumplirse, ya sabéis qué le ocurrió a la anterior expedición, o casi.

Gordon, pese a las sospechas de todo, parece no darse por aludido y mientras piensas que quizás pudo ser él el que disparó a toda la expedición uno a uno, te mira con aire de no haber hecho jamás daño a nadie y te contesta como si nada.

- ¡Fíjese! el Limo desaparece un poco más abajo -era verdad, Gordon señalaba un poco más abajo en el que parecía haber un corte casi limpio entre la zona cubierta por limo y una zona que dejaba a la vista el revestimiento de piedra del pozo. Miró un momento hacia arriba y dijo -Ya que estamos aquí bajemos a echar un vistazo si le parece, luego podemos venir a por el cuerpo.

- Muy bien. Avisaré a los demás de lo que encontramos y seguimos hacia abajo.

Lanzo un grito indicando a los compañeros que hemos encontrado el cadáver de Williamson y que vamos a continuar el descenso. También le aviso a Stuart de que esté atento para darme cuerda cuando se la pida y comienzo el descenso después de Lockly.

Grito a los compañeros del nivel superior para informarles del descubrimiento.

- ¡Eh! ¡Hemos encontrado el cadaver de Williamson! ¡Disparo en la cabeza! 

Espero unos segundos antes de continuar para darles tiempo a asumir la noticia.

- ¡Seguimos bajando!

¿Un balazo en la cabeza? Seguramente no fue asesinado en ese lugar, pero entonces no estamos solos en esta extraña ciudad.

Al escuchar que van a seguir bajando una gota de sudor frio corre por la espalda de Vincent.

¿Siguen bajando? ¿Que tan profundo es ese pozo?

- ¡No lo sé! Pero espero que no quede mucho. ¡Stuart, deme cuerda cuando se la pida!

Me pongo manos a la obra y continúo el descenso detrás de Lockly. La verdad es que no estoy acostumbrado a este tipo de ejercicio, y la tensión de la situación, tanto de la expedición como de este ambiente opresivo, comienza a provocar que una fina capa de sudor cubra mi cuerpo.

- ¡Oído! ¡ Queda muy poca cuerda, voy a hacer un empalme con otra! -se puso manos a la obra, pidió una cuerda al profesor Morgan que llevaba otra en su mochila y ató una con otra de una forma muy práctica y segura. Siguió dando cuerda.

Gordon y tú seguísteis descendiendo, tras varios metros más de descenso, empezáis a escuchar gorjeos que no adivináis a interpretar. Los gorjeos aumentan de frecuencia y volumen cuanto más descendéis.

- Esto no me gusta, creo que debo volver arriba con el resto... - no hacía falta ser muy listo para darse cuenta de que Gordon estaba bastante asustado con los sonidos que se escuchaban debajo vuestro.

Alumbro con la linterna la parte inferior del pozo cuando comienzo a escuchar los gorgojeos intentando ver cuál es la fuente del sonido. Ante el comentario de Lockly me vuelvo hacia él y observo su cara con el miedo reflejado en el rostro.

- Seguro que es un fenómeno físico perfectamente normal, no se amedrante ahora hombre estamos muy cerca. Hay pozos de brea que producen estos sonidos.

No sabía si intentaba convencer al explorador o a mi mismo pero respiro profundamente unos segundos y continúo el descenso.

-Un disparo en la cabeza... Mierda, no estamos seguros-. El periodista inquieto miró a su alrededor, las últimas noticias le habían sentado como si el hálito de la muerte recorriera sus nucas. Con su firme intención de desembarazarse del mismo se fijó en cada saliente, cada zona oscura esperando percibir algo funesto.