12 de Diciembre de 2030

La noche es fría en la ciudad, un frente polar se acerca y las temperaturas empiezan a bajar. Pero a ti eso no te importa, esta noche la ciudad te sabe a Kilbeggan y Montecristo. Un regalo de Rowan que estabas disfrutando hasta que una puta llamada te arruinó la noche.

Era Morrison, el jefe de la UDIM. Hay un cadáver todavía humeante en el hotel Four Seasons. No te ha comentado mucho pero parece un caso importante, en ese hotel sólo puede permitírselo la crème de la crème de la ciudad y del país.

Cuando llegas allí la prensa ya está haciendo acto de presencia, esas aves de presa armadas con cámaras digitales y grabadoras esperando saber quién es el fiambre para poder publicarlo en sus blogs o en los periódicos sensacionalistas para los que trabajan.

Enseñas tu placa y un uniformado te levanta la cita y te permite acceder al hall. Subes en el ascensor hasta la última planta, en ella se encuentra la Suite Presidencial. 50000 dólares la noche, el sueldo de un agente de todo un año.

La suite es todo lujo, pero no centras tu atención en los detalles. Tus pasos te llevan al cuarto de baño donde el jacuzzi está preparado para pasar una noche inolvidable pero parece que ha acabado en tragedia.

En el suelo a pocos metros ves el cadáver de un hombre. Ves mucha sangre alrededor del cuerpo, y el cadáver del hombre ha sufrido mucho daño. Desde la distancia observas golpes muy precisos y laceraciones en brazos y torso.

- Buenas noches Nemain. - te saluda tu compañero, un modelo DRN que sólo se utiliza la UDIM ya que para los agentes de otras unidades utilizan el estándar MX.  - Espero que no te hayan fastidiado la noche. El fallecido es Milton Brass, el jugador de los Starks.

Milton Brass es el jugador estrella de los Starks, el mejor equipo del país de fútbol americano. Sus poderes como mejorado son de tipo Beta, por lo que puede seguir jugando al fútbol. 

El espejo del ascensor me devolvía una imagen algo borrosa y desdibujada por los residuos del alcohol y el tabaco. Puta llamada...Habría sido una buena noche,solitaria, pero buena. El Kilbeggan de Rowan era realmente excepcional y aún mejoraba y espesaba sus efectos con el humo de aquellos cigarros. Montecristo nº 2.... Por todos los dioses, aún tenía su sabor suave y casi dulce en los labios. Pero ahora estaba allí, estudiando mi reflejo e intentando que la música que me acunaba desde los auriculares me devolviese la lucidez necesaria. Estaba cansada, me dolían las costillas y añoraba el humo denso y el licor áspero. Me aparté el flequillo de la frente justo cuando se abrió la puerta. Joder...

-Música off. - Y salí al pasillo.

La puerta de la habitación estaba abierta y custodiada, la función ya había empezado. Así que saludé y crucé la estancia deprisa para dirigirme al meollo del asunto. Dorian ya estaba allí.

-Ey Dorian... Pues mira, sí, ha sido una llamada inoportuna, sí. Justo estaba entre un irlandés y un cubano...- y le lancé una media sonrisa mezclada con una mirada envenenada; siempre tenía que sacarme el tema con ese rintintín... como si el cabrón no supiese de sobra cómo eran mis noches...

La escena era brutal; realmente se habían ensañado con aquel hombre. Y me acerqué un poco más, sorteando agentes, para verle mejor. Brass, eh? Le había visto en algún partido. Un jugador muy impresionante.

-Joder... quien quiera que hiciera esto odiaba a este tío. - me giré para observar el cuarto de baño, lo lujoso de la habitación más allá de la puerta. - Dorian, no leo prensa del corazón así que búscame todo lo que haya en la red sobre este tio. Escándalos? estaba casado? amantes conocidas? problemas de dinero?.. Todo lo que encuentres... Y revisa los registros del hotel. Averigua si se registró con alguien; supongo que ya habéis descargado las imágenes de las cámara de seguridad del ascensor y del pasillo, verdad? - el agua del jacuzzi permanecía plácida, cuántos albornoces había? Cuantas toallas? Me volví hacia Dorian –  Habéis encontrado ADN?... Los tíos como él no paga una habitación así solo para dormir y tomarse un baño, no crees? ... Yo no lo haría.

Dorian asiente y empieza a descargarse la historia que la prensa del corazón tiene sobre el jugador. Sonríe y te dice:

- La prensa del corazón tiene un registro detallado de la vida de este hombre. Te puedo decir con qué jugadores tiene rivalidad y con cuántas modelos y actrices famosas ha estado.

Luego cambia su expresión, parece que detectó algo, te mira y dice:

- No tengo acceso a las imágenes del hotel. La señal está encriptada, es un código de alto nivel. Necesitaremos pedir acceso, me llevaría bastante tiempo saltarme sus cortafuegos.  

Sobre la pregunta del ADN te responde:

- Los técnicos han obtenido diversas muestras, están siendo llevadas al laboratorio para analizar. Se ha hecho un estudio para detectar presencia de mejorados. Ha dado positivo pero en los residuos energéticos no hay trazas de ningún poder activo en las últimas horas.

Examinas con curiosidad el baño. El jacuzzi está preparado para dos personas, hay más de un albornoz y puedes discernir entre el olor a sangre seca un leve perfume a jazmín.

En algún momento de la noche una mujer estuvo en la habitación. Es posible que fuera su asesina, la brutalidad engloba furia...mucha furia.

Examinas el cadáver visualmente. Le han roto casi todos los huesos del cuerpo, sus golpes son precisos...articulaciones, puntos de presión... el que lo golpeó sabía muy bien como ejercer el máximo de dolor en su objetivo. Era sin duda profesional. Notas como las marcas son extrañas, los moretones poseen una forma rectangular parece que el golpe no fue con el puño o el puño llevaba algo para provocar esa marca.

La cabeza se me inclinaba levemente a un lado mientras observaba. Y me sujeté el costado disimuladamente con uno de los brazos para inclinarme un poco sobre el amasijo en el que se había convertido aquel tipo. La mano libre, la que no me contenía las costillas, me apartaba el flequillo de la frente.

-Dorian....

Mis ojos recorrían las heridas y, cuando Dorian se inclinó a mi lado, fueron los dedos las que las dibujaron en el aire.

-Fíjate en eso... esas marcas... - negaba levemente con la cabeza mientras recorría el cadáver con mirada meticulosa. -Desde luego, quien fuera que hizo esto estaba enfadado. Y sabía zurrar bien.. muy bien y muy fuerte. - Disimulando el esfuerzo me puse de nuevo en pie. -Intenta encontrar alguna coincidencia entre esas marcas y la base de datos de armas, quieres? Casos anteriores, lo que sea. Veamos si nos da alguna pista. Y... hueles eso? Jazmín... - me volví hacia él -sería mucho pedir que intentes conseguir moléculas de ese perfume? El trazo bioquímico o alguna de esas cosas de las que siempre alardeas. Ya sabes... esa magia que sabes hacer....

Una media sonrisa, entre burlona y cómplice, me chispeó en los ojos.

Sonríe ante tus comentarios.

- Lo intentaré. Las marcas no son lo suficiente nítidas todavía, los hematomas saldrán dentro de unas horas y podré analizar con más precisión esas marcas. Ahora mismo mi base de datos no encuentra ninguna coincidencia salvando los puños americanos...

Se acerca al lavabo y empieza a examinar los artículos cosméticos que hay expuestos.

- Ninguno de los productos posee olor a jazmín, seguramente haya sido una transferencia del agresor o agresora... - a continuación olfatea el aire y comienza a analizarlo - ...tengo la fórmula química, se la estoy enviando a Rudy para que la introduzca en la base de datos.

Rudy es bueno así que seguramente cuando llegues a la central tendréis el modelo de perfume y si hay suerte y es exclusivo sólo unas pocas personas lo habrán comprado.

- John acaba de llegar a la Central y ya sabes que le gustará que le informemos. Aquí no creo que tengamos nada más que hacer, ¿Vienes o tienes planes?

Planes?... Touché...

Fulminé a Dorian con la mirada mientras una sonrisa mucho más allá del sarcasmo me arqueaba los labios. Y empecé a andar hacia el ascensor volviendo el color whiskey de los ojos hacia él por un segundo.

Joder....

-Vamos... quién se perdería la diversión de hablar con Jonh??... - joder.. joder... - Pero yo conduzco. Y no quiero escuchar... ni una... sola... palabra....

Os montáis en el coche patrulla y os encamináis a la central. En el trayecto Dorian tiene ganas de hablar pero cada vez que te mira ve que no tienes ganas así que no abre la boca hasta que dejáis el coche en el aparcamiento de la comisaría. Subís en el ascensor y nada más abrir las puertas veis a John Kennex que acaba de salir del despacho de Maldonado.

- Por fin habéis llegado...así me podréis poner al tanto del caso porque la jefa no quiere que me ponga con él... - hace un gesto - ...me ha asignado tareas de evaluación de nuevos agentes para la UDIM...y ya sabéis que odio evaluar a agentes... - gruñe levemente pero luego sonríe - Venga contadme que habéis encontrado...

Se sienta en su mesa de trabajo y echa un vistazo a la oficina de Maldonado que por suerte no está mirando, seguramente atendiendo a otros asuntos.

-Mhh... - Saludé a John con un gesto de cabeza y el sonido apenas articulado en los labios; y cincelé una sonrisa pétrea para disimular como el dolor tensaba mi mandíbula mientras me sentaba al otro lado de su escritorio. Me habría encantado poner los pies encima de su mesa porque sabía lo mucho que le jodía, pero los moratones aún no me dejaban moverme con la suficiente soltura como para que no se notase la paliza que llevaba en el cuerpo y no quería escucharle un sermón así que, por hoy, tendría que conformarme con sentarme y punto. -Vamos, tío... No mientas. Te encanta torturar a los novatos... - y esta vez la sonrisa fue realmente auténtica.

Me giré hacia Dorian encogiéndome de hombros.

-Qué opinas? Supongo que algo le podremos contar al pobre chico, no? Ponerle algo de emoción a su vida y que recuerde lo que es ser un poli de verdad.... jajaajajajaja

No debí reir. Mis costillas aún se quejaban demasiado alto.

-Han destrozado a un tipo. Seguro que le conoces: Brass, el jugador ese famoso. Le han masacrado, joder. En serio, no creo que le quedase un solo hueso sano en el cuerpo.... - volví a mirar a Dorian un segundo para volver los ojos de nuevo a Jonh - Pocas pistas de momento: unas marcas de golpes raras, el rastro de un perfume... Lo más raro es lo de las imágenes de seguridad. Encriptadas en código de alta seguridad. - me encogí de hombros - Supongo que por muy caro que sea, ese hotel no deja de ser un picadero; y a nadie le gusta que le graben entrando con quien no debe en una habitación de un hotel. 

- ¿Brass? ¿Milton Brass? Joder...la prensa se va a echar encima de este caso... - sonríe por un momento y dice - ...ahora mismo veo evaluar a agentes de otro modo... - se sienta en una silla de oficina cercana y se acaricia la pierna robótica. - El hotel no nos facilitará mucho las cosas...sobre todo cuando se filtre que ha muerto Brass. Fijo que en menos de media hora está en todos los noticiarios de internet. 

Se queda pensativo y te dice claramente:

- ¿Comentas que lo han destrozado? Sé que algunos jugadores de los Starks solían ir a las peleas de artes marciales mixtas...pero no a las oficiales...puede que a Brass le gustara apostar y no pagara deudas...creo que no costará mucho saber dónde se celebran combates clandestinos...

Dorian asiente y parece que en su cerebro electrónico está buscando en la web profunda en busca de alguna pelea clandestina. Parece que esa información está bastante escondida porque tarda casi dos minutos en abrir la boca.

- He encontrado información sobre una pelea que se va a celebrar mañana de noche en el distrito industrial de NorthEast. Hay una vieja nave que hace poco se convirtió en una discoteca llamada Blood. Parece que se celebran allí algunos combates, es un buen sitio donde empezar a investigar. ¿Qué opinas Nemain?

-Mmmmhh….

John tenía razón; aquel caso iba a ser una pesadilla; y mientras lo pensaba un cansancio terrible empezó a nublarme el cerebro. Menuda mierda…

- No sé, John… deudas?… Uhmmm, el instinto me dice otra cosa. Algo no encaja. Quizá tienes razón pero... No sé… no se mata a quien te debe dinero. Y el olor a perfume aún en el aire…… Quizá la chica estaba compinchada y fue la que abrió la puerta pero, quedarse a mirar? Uhmmm.. no sé… algo me chirría...

Inconscientemente me había llevado la mano a la nuca mientras negaba con la cabeza. Los dedos se me habían perdido entre el pelo corto buscando el escozor extrañamente reconfortante que me provocaba tocar la herida de mi cuero cabelludo.

-Aún así, discotecas que se llaman Blood y peleas clandestinas? Qué más puede pedir una chica?- solté una carcajada mientras me ponía en pie. - Perfecto, es una pista y no tenemos nada que perder. Pero será mañana. Rudy ha dicho algo del rastro del perfume? Porque si no hay novedad  me voy a casa a dormir un rato, que ya me hace falta. - me aparté el flequillo de la frente – Eso sí, Dorian, tú, antes de dormir, consigue para ya una orden que nos de acceso a las imágenes del hotel. Quiero saber quién estaba con Brass. Y si no, piratea el jodido sistema. Es un asesinato brutal, joder, necesitamos esas imágenes!  - me sorprendí a mi misma por la intensidad, e intenté bajar el tono que había ido subiendo sin que supiera muy bien por qué. Por un segundo respiré hondo, incliné levemente la cabeza y le sonreí lo más angelical que pude… si es que yo podía sonreí angelicalmente. -Eeehh... quiero decir,  por fiiiiiiiii....

Me abroché la chaqueta y palpé el bolsillo para sacar un cigarillo de él. Me lo puse en los labios con un movimiento que volvió a verter el nuevo flequillo sobre los ojos mientras seguía buscando el mechero. Sabía que no podía encenderlo allí pero sería lo primero que haría al cruzar la puerta. Lo dejaré mañana... 

- Nemain, ve a dormir. Si hay alguna novedad Dorian te la enviará al correo pero descansa que mañana tienes que salir de marcha...aunque creo que eso no te costará... - comenta Kennex. - Lo de piratear de momento no, Morrison nos mataría si hacemos esa ilegalidad. Intentaré mover unos hilos para que nos den esas imágenes pero no cuentes con ella mañana. Marcha para casa y descansa...es lo mejor que puedes hacer.

Acto seguido se levanta y va hacia su despacho. Dorian decide ir con él ya que todavía no va a "descansar" a casa de Rudy. Así que te vas a casa y descansas hasta la noche siguiente.

Enfrente de la Discoteca Blood 23:57 PM

Dorian ha pasado a recogerte por casa tras haber recargado sus celdas de energía. Por orden de Kennes habéis llevado un coche policial camuflado, posee conexión con la central y el blindaje estándar pero su apariencia no es la de un coche patrulla. La idea es que podáis acceder sin problemas y dentro hagáis las preguntas adecuadas sin alertar a los sujetos involucrados si están en ese local.

Rudy indicó que el perfume de jazmín no está catalogado en la base de datos de la ciudad, va a intentar a acceder a una base de datos internacional ya que es posible que ese perfume fuera importado y no se tenga registro todavía de el. En su informe preliminar indica que la pureza del jazmín es muy alta, por lo que es un perfume no muy elaborado. Seguramente tradicional o realizado a la vieja usanza con aceites esenciales.

Echáis un vistazo a la discoteca y en ese momento ves que habrá un problema para Dorian. En la puerta hay dos gorilas y un cartel que indica que prohibido androides. Eso no sería problema para Dorian que posee un aspecto totalmente normal, pero tras la puerta atisbas a ver un detector de tecnología de tamaño industrial. Ese modelo te resulta conocido ya que se utiliza en los casinos para evitar androides contadores de cartas, y otras trampas electrónicas. Detecta circuitos complejos y diferencia entre los de un móvil o un ordenador de los sistemas que forman un androide.

Observa la puerta preocupado, no hay forma de entrar por la puerta principal así que tendrá que buscar otra forma de acceder al local.

- Vas a tener que arreglártelas ahí dentro sola hasta que consiga entrar. Y analizando los antecedentes de la mayoría de personas que están accediendo...vas a tener que andarte con cuidado. Lo que he averiguado de la discoteca es que es propiedad de Maximilian Vincenzo. Pertenece a la mafia grecoitaliana que se asentó en la ciudad a principios del siglo XXI. Actualmente no están en guerra con ninguna otra familia, su fama de neutralidad les ha brindado grandes ventajas y suelen actuar como jueves entre distintas partes. - comenta accediendo a su base de datos - ¿Qué tienes pensado hacer?

El color whiskey de los ojos se me opacó de humo cuando encendí el cigarro. Un ahumado en negro intenso camuflaba a duras penas la preocupación que por un segundo me destelló en el gesto. Tenía que entrar sola... estupendo... y pensé, mirando la  puerta de la discoteca, que había elegido bien. Entraba sola, así que los pantalones pitillos negros que me había puesto esa noche aún me parecían mejor opción que cuando me los probé en casa.

Cuando separé el cigarrillo de los labios, exhale una bocanada de humo áspero. Aquello no me gustaba nada.

-Que qué voy a hacer?... Pues lo de siempre, Dorian.... Ser encantadora.

Me mordía el labio y fumaba con ansía, devorando el pitillo. Qué podía hacer? Qué se puede hacer? Qué mierda se puede hacer? La inevitabilidad pende como una espada....  Y pensé en Arlan, y ardí de rabia por tenerle de nuevo entre los ojos; y pensé en que el destino es un libro con el final ya escrito, pero que yo decidía como rellenar el resto de las páginas.

Con el cigarro en los labios me quité la cazadora de cuero dejando al descubierto algunos moratones que la blusa de gasa, negra y de tirantes, no cubrían demasiado bien. Quizá debí habermelos maquillado, pero ya era tarde. Los bolsillos de aquellos pantalones no daban para llevar un neceser.

Tiré el cigarro al suelo y lo pise con la bota, y justo antes de ponerme a andar miré a Dorian por encima del hombro. Qué? Qué se puede hacer cuando nada está en tu mano? Le dediqué una sonrisa que no sonreía justo antes de caminar hacia la puerta.

-Pero por si mi encanto falla... tú no tardes demasiado...

Entras en la discoteca a través de los arcos de seguridad, no tienes problema en pasarlos así que la primera fase ha pasado satisfactoriamente. La discoteca está a rebosar, está dividida en varias plantas, la inferior está ocupada por una inmensa pista de baile donde ahora un DJ caldea el ambiente mientras los rayos láser ciegan a la multitud que baila y grita de manera ensordecedora.

Pero la acción que buscas no está en esa planta, subes por una de las escaleras que llevan a la primera planta y puedes ver una inmensa jaula donde ahora mismo se desarrolla un combate. Una joven asiática está peleando contra dos hombres y les está dando una paliza...

Te apoyas en la barra y pides algo para disimular ya que desde tu posición ves perfectamente la pelea. Apoyada en la barra escuchas una voz que te resulta familiar.

- No sabía que te fueran las peleas de jaula...

Te giras y puedes ver a tu conocido, no es el sitio donde esperarías encontrártelo pero tampoco te sorprende ya que se mueve por los bajos fondos como pez en el agua.

- Si estás aquí me da que es por un caso...si vais a hacer una redada esperad a que me paguen que les he traído unas botellas de bourbon de la zona prohibida...y necesitaba el dinero para pagar el alquiler...

Su semblante como siempre es tranquilo, incluso sonríe ante la perspectiva de una redada. Él es así.