Partida Rol por web

OMEGA

EL VIAJE

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24/09/2010, 13:40
Director

Decidis viajar juntos por beneficio mutuo. Thomas, Allan y Eddie se dirigen a Boxter, al noroeste. Por su parte Maiara y Wright viajan a Iglesia, en el Oeste. Vuestros caminos coinciden hasta Corona, donde parece que las montañas terminan y el camino se facilita.
La tiradora que os guió la noche anterior os lleva a traves de los tuneles hasta una salida en el Oeste. Alli encontrais los caballos, un total de seis animales cuyo aspecto dista mucho de ser ejemplar. Sin embargo los medios con los que han sido criados y domados no pueden ofrecer mejor resultado.
Cargais los animales intentando repartir el peso de la forma mas equitativa. Ya traian algo de peso al portar su propia comida, pero contra todo pronostico parece que resistiran vuestra carga.
Por primera vez veis la ciudad de dia. Todo son escombros y cenizas y cualquier cosa de valor, por poco que tenga, ya ha sido recuperada. La mujer os indica el mejor camino para salir de Romeo y no tardais en recorrer poco mas de medio kilometro hasta el exterior.

Romeo

Los grises edificios van dejando paso a escarpadas montañas, en el horizonte veis un afilado pico que sobresale por encima del resto. No deja de estar frente a vosotros en ningun momento, tras cada giro del camino, tras cada risco, vuelve a aparecer la llamativa cima.
Tras unos minutos de viaje os vais adaptando a vuestras monturas. Si bien nunca habeis montado a caballo parece que estos han sido bien entrenados, aunque temeis acelerar el ritmo por si no podeis controlar al animal.
Fugazmente mirais hacia atras, con miedo a ver aparecer a los Omega o a cualquier otro peligro del camino. Pero tras un par de horas sin novedades confiais en que cualquier perseguidor os hubiera alcanzado ya. Al fin y al cabo ellos irian mas rapido.
Dejais atras el elevado pico y haceis el ejercicio mental de recordarlo como referencia para futuros viajes por la zona. Su ubicacion entre el observatorio y Romeo lo convierte en una util señal geografica.

Calculais que es media tarde (17:00-18:00) cuando se produce el primer suceso del viaje. A lo lejos, aproximadamente a un kilometro, veis el observatorio que aparece en el mapa. Al igual que cualquier edificio no alcanzado por los meteoritos mantiene su estructura intacta aunque se ve abandonado y deteriorado por los años sin mantenimiento. Estais lejos para juzgar si realmente esta vacio, pero desde vuestra posicion no veis movimiento.
El observatorio corona una montaña mucho mas alta que la mayoria de su entorno. No obstante toda la zona posee de por si una elevacion considerable. La cupula se recorta en el horizonte mientras que el resto de edificios se disimulan entre la escasa vegetacion.
Con cierto recelo continuais vuestro camino vigilando cualquier signo de vida en el lugar. La carretera continua hacia el Oeste y suponeis que no tardará en aparecer algun tipo de desvio que conduzca hacia el observatorio, hacia el Sur.
Apenas doscientos metros mas adelante veis como surge una hilera de asfalto casi tapada por la vegetacion. Parece que rodea la montaña y llega al complejo por el otro lado para evitar una pendiente muy pronunciada.

Podriais llegar a Corona al anochecer, buscar un lugar segudo donde pasar la noche a medio camino o probar en el observatorio. Pero antes de que podais tomar una decision, o siquiera plantearlo, os veis obligados a detener la marcha ante una posible amenaza frente a vosotros.
Un pequeño conejo cruza la carretera y antes de que llegue al otro lado una flecha sale de la nada y lo atraviesa. En seguida veis al autor del disparo, una muchacha de poco mas de 18 años que porta un arco moderno. Viste un andrajoso uniforme militar cuya edad seguramente supera a la de su portadora. No reconoceis el uniforme como uno de los Omega, seguramente sea anterior al caos.
La muchacha coge su presa y levanta la cabeza. Lentamente se gira para miraros y levanta las manos en señal de rendicion. Su cara se descompone de miedo al ver un grupo montado numeroso y armado.

- ¡No me rapteis, no sirvo como esclava! Os daré mi cena, pero dejad que me vaya. Por favor, no quiero ser una esclava.

Extiende los brazos ofreciendoos el conejo que acaba de caza a modo de pago por su libertad.

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24/09/2010, 13:44
Allan

El camino de salida de la ciudad es desalentador, todos aquellos edificios en ruinas gigantescos que parecía que iban a venirse abajo de un momento a otro, restos de antiguos vehículos calcinados... me pregunto como sería manejar uno de esos, seguro que más cómodo que los caballos.

Todo el viaje transcurre con relativa calma, de vez en cuando cojo los prismáticos a mi cuello para observar los alrededores y la retaguardia, por si acaso los Omega siguieran insistiendo en cazarnos. Por suerte no es así y más bien somos nosotros los que sorprendemos a una pobre muchacha de aspecto lamentable.

La observo y luego miro hacia el Observatorio.

Tranquila chica. No vamos a hacerte daño... ni a quitarte tu comida.

Siempre y cuando nos respondas a algunas preguntas..

¿Qué hay en ese edificio de allí? ¿Está deshabitado? ¿Has visto a más gente por los alrededores?

Ah, por cierto.. me llamo Alan. -comento sonriendo leve para rebajar un poco de tensión a la situación, pero aún mantengo una mano en el rifle por si comete alguna tontería.

 

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24/09/2010, 14:00
Wright

Wright cabalga por aquellas ruinas, no muy elegante, pero funcional debido a que era la primera vez que montaba a caballo. El paisaje del mundo exterior le recibía como siempre, oscuro, apagado, sucio: muerto. En parte, se sentía bien al volver fuera, en las ciudades no se sentía comodo.

Con la compañía el viaje fue más tranquilo, sin embargo, no paraba de mirar a su "paquete" en forma de mujer: Maiara.

A veces, Alan y él se detenían para mirar si había algún rastro de los Omega o de algún otro perseguidor, pero no había nada. No sabía si reir o llorar ¿los habían despistado o realmente los daban por muertos al salir fuera de los muros de la ciudad?.

El viaje no se le hizo largo, tal vez por los caballos, a su montura solía acariciarle el lomo y la crin para calmarla, lástima no poder llevarlo siempre, ahora empezaba a sentirse cómodo con la bestia, no solo por los viajes, sino por su compañía, no había visto muchos animales fuera, y a los que había visto, se los había comido posteriormente.

Por fin, las ruinas de un coloso llamado observatorio se alzaban ante ellos. Pero antes de llegar, vio como una joven cazaba a un conejo con destreza, era una niña temerosa. Esa reacción no le gustaba, le ponía nervioso, su paranoia decía que si no se defendía hasta la muerte era que tenía un as en la manga, aunque, de ser todo real, posiblemente se replantearía llevarla al matriarcado, así sabría que alguien de confianza iría con Maiara cuando él no esté, sea por llevar satisfactoriamente a la chica a su lugar o por haber muerto por el camino.

El mercenario desmontó y cogió la escopeta.

Le hizo un gesto a Maiara para que le imitara.

El mercenario miró de reojo a la niña un segundo y luego miró hacia todas partes, esperando encontrar a sus refuerzos, a la par que se agachaba levemente.

Notas de juego

Excelente banda sonora, por cierto.

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24/09/2010, 15:51
Thomas Lang

Abrazado a mi montura paso el viaje entre el miedo a caerme y el miedo a ser atacado, pese a ello con el transcurso del tiempo me voy relajando hasta que de pronto, llegando al observatorio una cria aparece frente a nosotros.
Instintivamente llebo mi mano a la pistola, no desciendo del caballo pero me preparo para espolearlo en caso de tratarse esto una emboscada.
Os dije que un edificio en pie implicaba gente.

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25/09/2010, 22:55
Maiara

No era muy buena montando a caballo, más bien era la primera vez que lo hacía y se notaba lo torpe que era. Pero estos caballos parecían acostumbrados a llevar gente inexperta encima, porque no les hicieron caer ni una vez. Con el paso del tiempo, fue cogiendo confianza con la montura, ya se la veía más relajada encima del caballo.

Ya estaban llegando a una de las paradas cuando una niña cazando se les cruzó por el camino. La niña se puso bastante nerviosa y vió la reacción de Wright, miró a todos lados, como esperando ver aparecer a alguien más, asi que imitó a su compañero y se bajó del caballo.

- Estás sola??

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26/09/2010, 12:27
Director

La muchacha parece aliviada al escuchar que no sois hostiles. Aun asi no parece relajarse del todo, no dejais de ser tipos armados a caballo.

- Estoy sola, aunque mis amigos y el profesor estan alli, - señala con el arco hacia el observatorio - pero ya no somos tantos como antes. Los esclavistas se han llevado a muchos de nosotros. Por este camino pasa gente todas las semanas, aunque suelen ser comerciantes que van o vienen del castillo. Ultimamente hay muchos negreros, no se atreven a subir al observatorio asi que esperan en el camino a que alguien pase o alguno de nosotros bajemos.

Se cuelga el arco del hombro mientras mantiene alejada su cena que, atravesado por la flecha, se desangra.

- Hace un mes se llevaron a mi mejor amiga, y hace dos semanas a otras dos chicas. El profesor no nos quiere contar que hacen con ellas, pero todos lo sabemos. Él nos prohibe cazar por esta cara de la montaña, pero aqui es donde estan las presas mas faciles.

Tras escuchar la presentacion de Allan la chica parece terminar de calmarse.

- Mi nombre es Lauren, aunque aqui todos me llaman Lala.

Permanece expectante, esperando a que realiceis mas preguntas, sigais vuestro camino o le arrebateis la cena.

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26/09/2010, 12:51
Thomas Lang

Bueno, deveriamos hablar con el profesor y mandar a las mujeres con el Matriarcado, aunque sera dificil convencerle.
Odio tener que hacerme responsable de todo lo que nos vamos encontrando por hay, cada vez que avanzamos algo tenemos que hacernos responsables de la gente que lo habita y eso empieza a hincharme las pelotas, de no ser por los puñeteros Omega o de estas chicas habriamos llegado hace dias...
Regreso torpemente hacia el caballo.

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26/09/2010, 13:58
Allan

Frunzo el ceño al escuchar de la presencia de negreros por la zona. No creo que tuvieran cojones de acercarse a nuestro grupo tal y como vamos de armados hasta los dientes pero aún así suponía un peligro y la historia de aquella chica me llenaba de lástima y furia. Miro al cielo, esta atardeciendo y llegaríamos a Corona a la noche.

Sí, podrías llevarnos con ese.. "profesor". Necesitamos un sitio donde pasar la noche, mejor no caminar a oscuras por estos caminos. A cambio podemos daros algo de comida o algún arma con la que defenderos.

Luego miro a Thomas.

Sobre mandarlas con el matriarcado .. bueno. Ya veremos a la vuelta de nuestra misión.  

Meto la mano en una de las alforjas y le paso una lata de comida como señal de buena voluntad.

¿Qué dices Lala? ¿Podemos pasar la noche?

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28/09/2010, 16:49
Maiara

No pudo evitar sentirse apenada por lo que la chica les contaba, sobre la suerte que habían corrido sus compañeras y que ella prefería no pensar. Eso mismo podía pasarle a ella si consiguieran apresarla, pero por otro lado se sentía afortunada, hasta ahora, de que sus compañeros de viaje eran de fiar.

- Tranquila, no vamos a hacerte nada, estamos de paso.

Dijo intentando calmarla, esperando que respondiera las preguntas de los otros.

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28/09/2010, 18:50
Wright

Wright no contestó a la chica, tan siquiera si la hacía caso. Avanzó semiagachado por el aniquilado paisaje y trató de vislumbrar lo que había algo más alejado de ellos, intentando saber si eran presa de alguna emboscada. No se fiaba para nada de aquella situación, aunque eso la lo había dejado claro.

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28/09/2010, 20:31
Director

La chica se encoje de hombros y hace un gesto con la mano para que le sigais.

- Vamos a ver al profesor, es él quien decide.

Volveis a vuestros caballos y seguis a Lauren. La maltrecha carretera va rodeando ascendentemente la montaña hasta que finalmente llega a la cumbre, donde termina en una barrera que parece estar siempre levantada.
A priori no veis nada, tan solo el edificio principal coronado con una enorme cupula que actualmente esta cerrada. A unos veinte metros de alli podeis ver otro edificio, tiene una sola planta y esta casi oculto entre la vegetacion. Parece que la maleza ha tomado el lugar pese a que la vegetacion de la zona es mas bien pobre.
Una vez dentro de las instalaciones del observatorio comenzais a ver detalles que indican que se trata de un lugar habitado. Sendas que van de un edificio a otro, ropa tendida o una pequeña jaula con un par de gallinas.
En cuanto comenzais a bordear el observatorio va apareciendo gente. Un par de muchachos estan afilando unas ramas mientras a pocos metros una mujer joven esta tejiendo una red.
Junto a la puerta del edificio veis un par de laminas de metal que sirven de cobertura. Tras ellas hay un par de hombres con escopetas de caza que no disimulan su incomodidad ante vuestra presencia, o mas bien ante la presencia de vuestras armas.
Cuando estais a punto de llegar a la puerta esta se abre y sale un hombre mayor caminando rapidamente, tras casi chocar con Lauren levanta la mirada y os ve. Al contrario que los vigilantes os muestra una calida sonrisa y os da la bienvenida.

- Oh, visitantes. Y vienen en son de paz, porque todavia no han disparado a nadie. ¿No han disparado a nadie, verdad?

Lauren niega con la cabeza.

- Ah, entonces fantastico. No llevan los caballos demasiado cargados, ni veo carro alguno. Asi que no son mercaderes. Esta claro que tampoco vienen del castillo y por supuesto no tienen aspecto de ser ciudadanos de Romeo. Asi que espero me conteis de donde venis, hacia donde vais y lo mas importante, que quereis de nosotros.

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30/09/2010, 12:44
Maiara

Siguió a la chica hasta que les llevó al lugar donde estaba el profesor, que así era como le llamaban. Por el camino observaba a su alrededor, veía que las gente les temía al verles cargados con armas, era una sensación extraña.. siempre se había encontrado al otro lado, temiendo, aunque la mirada de ellos era más bien de desconfianza. Menos aquel hombre, el profesor. Comenzó a hablar preguntándole que era lo que querían.

- Solo buscabamos un lugar para pasar la noche, estamos de paso. Vamos hacia Corona.

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01/10/2010, 20:03
Julius

El profesor, que no pierde la sonrisa, hace un gesto a un pequeño grupo de chicos para que se acerquen.

- Oh, huespedes. Muy bien, dejen que les enseñe este lugar. Pero antes deben desmontar, ataremos los caballos en esa valla, no tenemos un lugar mejor.

Los chicos, de entre 15 y 20 años, se aproximan y esperan a que desmonteis para llevar los caballos a la valla que ha indicado el profesor. En realidad se trata de un trozo de barandilla oxidada a unos pocos metros de donde estais.

- Mi nombre es Julius, pero todo el mundo me llama profesor. ¿Por que? Bueno, he dado clases a la mayoria de estas personas. Ademas, debido a mi edad, pude estudiar antes de que el universo nos apedrease. Fui a la universidad, un concepto impensable en estos tiempos donde prima el instinto al razonamiento.

Se da la vuelta y abre las puertas de par en par. Esperabais ver el observatorio por dentro, pero una pared circular oculta el telescopio. La nave es mas grande de lo que pensabais, parece que alberga habitaciones alrededor de una sala central.
El profesor os invita a entrar, parece que os espera una visita guiada al observatorio.

Mientras tanto los chicos esperan a que desmonteis, si es que lo haceis, y dejeis/cojais el material que querais. No parecen hostiles, al menos a primera vista.

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01/10/2010, 20:16
Thomas Lang

Espoleo el caballo levemente con el pie mientras agarro al de Allan para alejarme unos metros de los chicos que nos rodean haciendo parecer que es obra de un animal nervioso
Allan, no me fio un pelo de esta gente, todo pinta demasiado bien, no pienso pasar aqui la noche.
Escudriño con la mirada a todos los que nos rodean, nos an acogido con demasiada facilidad pero nuestras armas y objetos son demasiado tentadores como para fiarme de esta gente.

Notas de juego

Se lo digo en un susurro intentando que solo el me oiga aunque considero factible que me oiga el resto del grupo si esta cerca, si el profesor me oye o no lo dejo a tu merced.

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02/10/2010, 21:38
Wright

Wright observó a los tiradores mientras seguía a Maiara, como siempre. Desmontó y cogió la escopeta a dos manos, como estando alerta, despacio, se acercó al profesor.

-Hay muchos niños ¿Los recoges o algo así?

Intentó fijarse bien en los detalles de todo, ya que su paranoia solía salvarle la vida.

-Son muchos, ¿puedo preguntar como les das de comer?

Inquirió.

-Quiero evitar a los caníbales.

Dijo con una sonrisa muy leve, mirando al profesor con desconfianza, como si explicara con esa frase el porqué de tantas preguntas.

Notas de juego

¿Hay algún modo de indentificar caníbales? sin tener que registrar el tupper :P

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04/10/2010, 23:38
Maiara

Se baja del caballo y sonrie a uno de los niños entregándole las bridas de este para que se lo lleven.

- Cuidalo bien..

Le comenta siendo amable con él. Le daba bastante pena que los niños tuvieran que vivir en una situación así, ella conocía como era el mundo antes de lo que sucedió, pero de esos niños seguro que ni se acordaban, debían de ser unos bebes cuando todo pasó y seguro que la historia de cada uno de ellos, es peor.

Siguió a Wrigth mirando antes a Allan y a Thomas, esperando que los siguieran tambien. Ella se llevaba su mochila colgada junto con el arma. Observaba durante el camino el lugar, fijandose en todos los detalles.

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04/10/2010, 23:45
Director

Thomas y Allan se separan un poco y ois, pero no entendeis, lo que dice Thomas. Tampoco escuchais con claridad la respuesta de Allan pero no parece alterado en absoluto.

- Tranquilo, hemos dormido en sitios peores y seguimos vivos.

Ajeno a la conversacion el profesor responde a las inquietudes de Wright.

- Oh, canibales. No, no, para nada. Si me comiese a la gente no seriamos tantos.

Se rie con la idea mientras camina hacia el pequeño edificio del fondo. Le seguis manteniendo a mano vuestras armas, todavia no os fiais.
Abre la puerta del todo para mostraros el interior, aunque algo oliais desde hace unos metros. Dentro del edificio parece haber toda una granja en miniatura. Desde vuestra posicion apenas podeis ver dos o tres cerdos siendo alimentados por una mujer, pero intuis que dentro debe haber mas animales. Escuchais el ruido de lo que parece ser una vaca, aunque practicamente no habeis visto ninguna en vuestra vida.

- No podemos tener grandes cultivos, ya sabeis... - señala al cielo y se encoge de hombros - pero si logramos mantener vivos a algunos animales e incluso hacerlos reproducirse. Apenas tenemos para nosotros, pero no necesitamos mas. Aqui somos 19 personas, y tenemos la suerte de poder comer todos los dias. Y aun asi tambien nos dedicamos a la caza, aunque no siempre donde deberiamos.

El ultimo comentario es acompañado por una mirada complice a Lauren y su recien capturada pieza.
El profesor vuelve a la puerta del observatorio e insiste en invitaros a entrar.

- Ahora que habeis visto que no somos canibales y que no os vamos a atacar ni a comer, os pido que aceptais nuestra hospitalidad. Dejad los caballos y acompañadme, tomaremos café y hablaremos de lo que habeis visto de camino a aqui.

Julius espera con una sonrisa sincera, o perfectamente entrenada, que respondais a su invitacion.

Notas de juego

La forma mas precisa de identificar a los canibales es verlos comer carne humana. O que te lo confirmen ellos mismos, pero es es mas dificil. :P

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06/10/2010, 18:37
Wright

La alegría del profesor le ponía algo incomodo, aunque no era raro, todo le parecía incomodo cuando se trataba de fiarse de alguien. La sonrisa no era algo que se viera en esta tierra muerta, al menos, no divertida, sino para intimidar (como él solía hacerlo) y poco más. Se pegó a Maiara como a una lapa, mientras seguía con la mirada al profesor.

Lo que había dentro le dejó patidifuso ¡Animales de granja! cuando era pequeño le hablaron de ellos, y también en los cuentos de relieve que aun quedaban en el refugio, como los tres cerditos, la vaca y el perro y esas historias, aunque ciertamente, nunca había visto uno que recordara.

-Es una buena forma de sobrevivir. Es un buen hogar.

"Alabó" el mercenario, por supuesto, se dio el lujo de, por unos segundos, imaginarse en un sitio así, sin llevar la vida que llevaba, pero rápidamente, los pensamientos más oscuros le invadieron y no pudo evitar decir, con las canas que daba su anterior experiencia:

-No me extraña que los saqueadores quieran este lugar.

Luego se acercó un poco más al profesor.

-¿Y qué pides a cambio de vuestra hospitalidad? Nada es gratis en este mundo.

Miró con sus ojos glaucos al profesor y luego a la niña. Aun no se le quitaba de la cabeza aquella idea.

 

Notas de juego

Si, lo suponía, pero por preguntar...igual pasa como en el libro de Eli jajaja

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06/10/2010, 18:54
Thomas Lang

Os esperare junto a los caballos.
Compartir techo con tanta gente, me hace sentir incomodo, estoy seguro de que siguiendo la probabilidad hoy dia es mas seguro un yermo vacio que un refugio de gente por muy civilizada que parezca.
Si os quedais avisadme.

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06/10/2010, 19:26
Maiara

Su cara lo decía todo al ver aquella maravilla, le costaba creer que aún existieran animales de esos, los creía totalmente desaparecidos, pero estaba visto que aún quedaban unos cuantos.

- Es impresionante.. es una suerte que podais manteneros asi.

Comentó observando el lugar, miró a Wrigth y le sonrió, aquello le gustaba, algo así buscaba para poder mantenerse en un lugar fijo y dejar de huir de una vez por todas. Pero las palabras de su compañero la sacaron de tal ensoñación, tenía razón.

Asintió a las palabras de Thomas y se mantuvo esperando la respuesta de Julius.