Partida Rol por web

Mientras guardas las sobras del zorro que cazaste hace un par de días algo llama tu atención. A lo lejos, en el aire, un pájaro vuela en círculos. Parece que está bastante lejos, y si le puedes ver significa que es grande. Sin duda es un depredador, lo cual significa que si caza es que hay víctimas.
Miras tu mochila y ves las dos latas de alubias y la carne de zorro que acabas de meter. Estas harto de alubias.
Observas al pájaro, observas tu mochila y vuelves a mirar al ave volar. La decisión está tomada, quieres comer lo mismo que ese pájaro. Aunque solo sea un día.
Además, ibas en esa dirección. No sabes dónde está tu destino, Boxter, así que hagas lo que hagas no sabrás si te estás desviando.

A tu alrededor el panorama sigue siendo poco atractivo. No hay muchos árboles y el suelo está salpicado con algunos arbustos dispersos.
El único sonido que oyes es el de tus pisadas y alguna racha leve de viento que zumba en tus oídos. Ni rastro de fauna por el momento, a excepción del pájaro al que ya has perdido de vista.
Diferencias el día de la noche por la claridad ya que sigues sin poder ver el Sol.
Las noches son frías pero al menos no llueve como hace dos semanas.

A medida que avanzas hacia el Oeste las llanuras desaparecen y dejan paso a un sistema montañoso, escarpado como pocos pero seco como todos.
Parece que se expande hacia el Oeste y apuestas a que detrás de esa montaña hay unas cuantas más.
Por experiencia sabes que sobrevivieron más animales, y personas, en las montañas que en campo abierto. Ya que esta en tu camino puede que merezca mas la pena atravesarlas que bordearlas.

Ya es mediodía cuando empiezas a recorrer un terreno más accidentado. El sendero se estrecha y desemboca en una antigua carretera. Brotes de hierba esconden ahora gran parte del asfalto, aun así no es difícil seguirla. Al fin y al cabo no parece haber otra ruta.

Tras un par de kilómetros el afilado cañón que recorres se estrecha aun más. Parece ser un callejón sin salida pero, tras un cambio de rasante, ves la ladera de la montaña y como la carretera penetra en ella.
A unos 200 metros de tu posición se encuentra la entrada a un oscuro túnel.
De repente ves algo moverse sobre la entrada. Lamentas haber perdido los prismáticos, aunque esta vez no parecen tan necesarios.
Desde tu posición hasta el túnel apenas hay cobertura, las pocas señales de tráfico que aguantan de pie no sirven y las paredes de la montaña tampoco.
Ves lo que parece ser un par de hombres apostados sobre el acceso al túnel. Deduces que están vigilando el túnel, lo que no puedes conocer es sin son enemigos o no.

Wright se agachó para contemplar aquel tunel. Aquel lugar oscuro, protegido por dos guardias armados. ¿Serían amigos o enemigos? le daba igual, Wright sabía que en aquel mundo, no había amigos, sino compañeros por interés y enemigos....sobretodo enemigos.

Wright esperó un rato alli vigilante, hasta asegurarse de que había un cambio de guardia o uno de ellos se alejara un poco para abordarlo de forma cordial o sino..bueno...el ser humano también sirve de comida. Las leyes morales se perdieron hacía tiempo...y esa no era una excepción para él.

Tras unos minutos observando a los dos tipos sobre la entrada del tunel ves como les caen encima pequeñas piedras. No son necesarias para hacerles daño, pero si llaman su atencion. Levantan la cabeza al tiempo que tu tambien buscas la causa de ese diminuto desprendimiento.
Debido a la proximidad con la pared de la montaña tienes que echarte un poco hacia atras para poder ver el final de la roca.
En el punto mas elevado ves una figura, parece que esta tumbada sobre la piedra ya que apenas sobresale su cabeza y un brazo. Tambien ves la prominente forma de un cañon. Descubres que te estan apuntando cuando un haz de luz roja pasa fugazmente por tus ojos.

Aunque instintivamente te pones a cubierto puedes asomarte pegando tu sien a tu cobertura. Ves como los vigilantes siguen con la mirada la direccion del arma hasta quedarse fijos en la piedra que te oculta.

Uno de ellos grita:

- ¡Seas quien seas sal de ahi!

- ¡Y con las manos en alto! - añade el otro.

- Eso, con las manos en alto.

Si retrocedes quedas expuesto al vigia de arriba, si avanzas ademas te pondrias a tiro de los dos hombres.

Wright maldijo jodido. ¡Las cosas se podían torcer de puta madre de un segundo a otro. Dedujo por la forma de hablar de los guardias que no eran muy expertos o estaban nerviosos.

Iba a gritar que se preocuparan del francotirador de verdad, sin embargo, preguntó algo totalemente distinto. Sacó la metralleta y la colgó sobre su pecho con el arnés.

-¿Teneis un francotirador en vuestras filas?

Inquirió aun bajo la cobertura.

Wright sacó el cargador de la metralleta y lo miró. Sabía lo que veria, pero aun asi, quería comprobarlo por si mismo. 6 balas. Solo 6 balas. Al menos, si la cosa de ponía fea, podría liquidar a esos dos, el problema era el francotirador, si era de su bando o no, si, tras delatar su posición tomaría represalias con él o solo le interesaba sus cosas. Wright sacó el cuchillo y trató de usarlo como espejo para saber la posición real del tirador.

Buscas el francotirador en el reflejo del cuchillo. Pero no has podido mantener tan limpio el arma como para que refleje a la perfeccion.
Aun asi su posicion es privilegiada, conseguir un disparo certero seria uno entre un millon (18+).

Tras tu pregunta escuchas a los vigilantes intercambiar impresiones:

- ¿Que ha dicho? ¿Un francotirador?

- Se debe referir a Sally. ¿O le toca hoy a Hugh?

- ¿Que mas da? Acabemos con esto de una vez.

Aunque ya les estabas oyendo gracias a su elevado tono de voz aumentan aun mas el volumen para dirigirse a ti:

- ¡Eh, sal de una vez! El tirador es nuestro, acercate y hablemos.
 

Algo te dice que la diplomacia y la vigilancia no es lo suyo, al menos eso explicaria un autentico vigia en la cumbre.

Wright enfunda el cuchillo y se coloca el arma en la parte de atrás, para que no resultara una amenaza, asomó las manos.

-Tios, no quiero problemas, solo pasaba por aqui y quiero seguir mi viaje.

Él no iba a incorporarse, principalmente porque no era seguro que fuera el tirador de ellos, y no quería que le volaran el culo. Aunque por lo visto si que tenían vigias ahi.

-Me cago en la puta...

Maldijo. El tipo avanzó agachado hacia un lugar donde era visible por los centinelas, más, se aseguró un camino de huida por si acaso. El problema iba a ser el tirador. Aun así, se mantuvo el cuchillo cerca, por si había que meterle alguna cuchillada a uno.

Asomas las manos en señal de no agresion y te pones a la vista de los dos hombres.
En cuanto te ven bajan sus armas y descienden del techo de la entrada. Avanzan unos metros hasta quedarse cada uno a un lado de la carretera. Saben lo que hacen, ambos tienen a su lado una piedra que les puede servir de parapeto.
El tipo que tienes al frente y a la izquierda lleva un revolver, ahora mismo el arma apunta al suelo.
El otro tiene una escopeta recortada apoyada sobre su hombre.

Este ultimo te habla:

- No te vamos a disparar, al menos no si sales y mantienes las manos a la vista. Yo soy Bob y este es Hank. Ahora dinos quien es eres tu y de donde vienes.

Wright se incorporó y mantuvo las manos a la vista, lejos de sus armas.

-Yo soy Wright, y no vengo de ningún sitio. Si te dijera que vengo de alguna parte, supongo que del Este.

Señala en dicha dirección y luego mira a sus interlocutores. El tono de su voz era ronco, debido al tiempo que había pasado en silencio, consigo mismo como único compañero.

Sales de tu cobertura y te presentas.
Los dos tipos no parecen para nada nerviosos, es como si hiceran esto todos los dias.
A bajar la vista te das cuenta de la razon de su tranquilidad, el puntero laser apunta directamente a tu pecho. En cuando lo ves desaparece, sea quien sea el francotirador es inteligente. Se ha movido para mejorar su angulo de disparo.

Bob vuelve a tomar la palabra:

- Muy bien Wright. Antes de dejarte pasar nos tienes que decir hacia donde te diriges.

- Y el por qué. - apunta Hank.

- Si, la razon de tu viaje. La gente no vaga por el mundo a no ser que trame algo malo.

Esta es la primera vez que cuando te acercas a los dominios de alguien te reciben asi. Normalmente primero disparan y despues preguntan. Claro, que a veces ya no tienen a quien preguntar...

Wright sonrió levemente al notar el puntero laser. Estan bien armados. Pensó.

-No tengo rumbo fijo. Sobrevivo, como todos. Creía que por aqui cerca había animales para cazar, y encontré este sitio por azar. De todos modos, soy un tio solo, no represento ningún peligro para gente como vosotros.

Explicó, bajando los brazos despacio.

-¿A donde lleva el tunel? ¿y quienes sois vosotros? si se puede preguntar.

Los dos hombres se miran, el de la escopeta te responde:

- Nosotros somos Hank y Bob, ya te lo hemos dicho. Vigilamos esta entrada. Si has venido hasta aqui en busca de caza llevaras trampas o presas en esa mochila. Abrela, dejala en el suelo y alejate.

Sin esperar tu conformidad Hank se acerca revolver en mano manteniendose a un lado de la carretera. Bob baja el arma de su hombro y apoya el cañon sobre la otra mano.

Cuando esta mas cerca de ti Hank armatilla el revolver.

- Solo queremos ver que no llevas nada raro. Haz lo que te decimos y en cinco minutos estaras dentro.

Hank se queda a cinco metros de ti, esperando a que obedezcas para inspeccionar tu mochila.

-¿Que voy a llevar en una mochila tan peligroso?

Dice levantando una ceja, con media sonrisa.

-Pf..

Deja escapar. Se descuelga la mochila y da unos pasos atrás. Había visto eso muchas veces antes, y se temía lo que iban a hacer a continuación. No confiaba mucho en la gente.

Bob se adelanta para no tener a su compañero en la linea de tiro. Hank te apunta con su arma mientras mete una mano en tu mochila.

- Hace un par de semanas llegó un tipo solitario como tu. Cuando miré su mochila me encontré un brazo humano envuelto en plastico. Lo ultimo que comio ese puto canibal fue plomo.

Saca el trozo de zorro que te queda y lo huele, asiente con la cabeza y lo vuelve a dejar en la mochila.
Dedica unos diez segundos a inspeccionar que mas tienes y despues simplemente asegura el revolver, se lo guarda y regresa a la entrada del tunel.
Bob hace lo mismo. A mitad de camino levanta el pulgar hacia el cielo dando su visto bueno de cara al francotirador.
Cuando estan a cada lado del tunel Hank te invita a pasar con la mano.

- Adelante, puedes pasar. No hagas tonterias o alguien te meterá una bala en la cabeza.

Parece que no se van a mover de ahi hasta que hayas penetrado en el oscuro tunel.

Aquello le desconcertaba. ¿No le iban a robar? era extraño. También que mataran a canibales, al fin y al cabo, cuando alguien se muere también es carne, aqui no hay dios, ya que dios no habría permitido que pasara eso asi que...¿cual era el problema? Por supuesto, no era así hasta que pasó lo de su esposa y la banda, antes eso era impensable para él, pero por el camino había aprendido la realidad del mundo.

Wright se guardó para si mismos sus pensamientos y recogió la mochila del suelo.

-Entiendo.

Le hizo un gesto con la cabeza a los guardias. Pese a todo, miró de reojos a estos por si acaso...Avanzó hacia el tunel y entró despacio, fijándose en lo que le rodeaba.

Pasas entre los dos tipos y te adentras en el tunel. Notas como en cuanto entras Bob y Hank se marchan, seguramente volveran a su posicion original sobre el tunel.

A medida que avanzas todo se oscurece mas y mas. Detectas un olor, al principio no lo identificas pero en unos segundos lo reconoces. Se trata un guiso.
De repente chocas contra algo, es blanco y ocupa todo el pasillo. Lo tocas con la mano para descubrir que se trata de mantas colgadas del techo. Apartas un par y de pronto aparece frente a ti toda una galeria iluminada.
No ves el final del tunel, pero observas como a ambos lados del tunel hay bancos hechos piedras y tablones. Algunas mesas improvisadas y cajas apiladas completan de decorar los laterales del tunel.
Hay gente moviendose de un lado para otro llevando pequeñas cajas, otros simplemente estan sentados charlando.

Cuando das un paso mas tropiezas con algo. De lado a lado del tunel hay un par de railes en paralelo. Miras hacia la pared y ves una pesada lamina de metal acoplada sobre el rail. Debe ser la puerta de emergencia por si alguien sortea a Bob y Hank.

Todo el mobiliario esta a unos 20 metros al frente de ti, antes, a apenas 5 metros el tunel se ensancha para habilitar un hueco en caso de emergencia. Ves puertas a ambos lados y te preguntas a donde llevan. Todo esto atraviesa una montaña, no sabes por donde se podria evacuar este lugar.
Por una esquina aparece un tipo enorme de color. Lleva colgando de su hombro un rifle y viste botas y pantalones militares.
Su voz, grave, va acorde a su corpulencia y penetrante mirada. Te habla automaticamente, como si conociese el discurso de memoria:

- Bienvenido a Termopilas viajero. No te voy a dar una leccion de historia para explicarte el nombre de este lugar. Solo debes saber una cosa: Si quieres pasar de este punto guarda tus armas en la mochila. Los extanjeros no pueden llevar armas a la vista. Ni siquiera cuchillos.

El tipo señala hacia su espalda, hacia el fondo del tunel:

- Esta es una comunidad honrada, no te daremos de comer si no te lo ganas. Si solo estas de paso eres libre de cruzar el tunel. Son tres kilometros hasta la salida Oeste y dos si vas hacia el Sur.

Y cuando parecia que la humanidad habia abandonado te encuentras una comunidad viviendo en un tunel.

Wright observó todo con una expresión leve de asombro. Maldita sea, aquello era una maldita comunidad, además, aquel hombre le estaba dando "leyes" ¿¿leyes?? ¿en un mundo así? si que era extraño. Sentía muchisima curiosidad por todo, aunque también era algo...incomodo, dado que siempre se había criado en grupos poco numerosos.

Asintió a lo que dijo el negro y guardó poco a poco todas las armas en la mochila.

-¿Que tipo de trabajos realizais?

Pregunta sin mirar a su interlocutor, aun con los ojos bien abiertos, observando la zona habitada.

El hombre sigue con la mirada cada gesto que realizas para guardas las armas, mientras tanto te sigue informando:

- Mantenemos la region libre de indeseables. Estas montañas rodean un extenso valle al que practicamente solo se puede acceder por este tunel o por el Norte, pero alli esta la base del ejercito. A veces hacemos batidas para acabar con esclavistas o criminales. Y tambien aseguramos el camino a los comerciantes, a cambio ellos nos da un porcentaje de sus ganancias. Ya sabes, comida y suministros.

Una vez has guardado todas las armas el hombre retrocede un par de pasos, a medio camino de vuelta hacia su rincon te da otro consejo:

- Eres libre de atravesar el tunel. No intentes entrar donde no debes ni donde no te inviten. Y recuerda, no se te ocurra sacar un arma dentro del tunel.

Ya desde su ubicacion inicial, apoyado en la pared, termina la introduccion a la comunidad:

- Si tienes preguntas puedes hablar con John Elliot, es el jefe de todo esto y siempre le gusta intercambiar informacion con los recien llegados. Debe estar en las oficinas, a unos cien metros al frente.

Wright no era un hombre muy de dar las gracias, pero tanta información por lo menos, se merecía un gesto con la cabeza amable. Se colocó bien la mochila a la espalda y avanzó, mirando todo con ojos curiosos.

Si aquella gente era tan civilizada como pensaba, no estaría mal hacer uno o dos trabajillos para ellos, lo suficiente para recolectar algo de carne seca para el viaje. Por supuesto, no creía que podría quedarse mucho tiempo, no sabía si esa gente le vendería a la primera, y más teniendo el culo tan caro como lo tenía.

También dijo algo de una base militar, quizá podría encontrar algo de armas y munición más adelante.

Se diriguió a las oficinas, a hablar con el tal Elliot ¿quién sabe? quizá pudiera conseguir algo de trabajo.

En tu camino hacia las oficinas pasas entre varias mesas. Ves un par de tipos jugando a las cartas, una mujer cosiendo el enesimo agujero en un pantalon y un hombre leyendo un libro.
No deja de chocarte una vida cotidiana tan tranquila cuando tu luchas por su supervivencia cada dia.

La primera puerta que te encuentras parece haber sido el acceso a alguna sala de mantenimiento del tunel. No se trata de una simple salida de emergencia.
Junto a la puerta, sentado en una silla, hay un hombre mayor con un sombrero de excursionista. A primera vista parece que esta tallando pequeñas figuras de madera con una sucia navaja. Pero al fijarte bien descubres que se trata de puntas de flecha. De hecho tiene un cubo a su lado lleno de puntas de madera.

Cuando te paras frente a él detiene su actividad un par de segundos y despues continua con su labor.

El tunel continua y sigues sin ver el final. Mas adelante hay unas cortinas que tapan la vision, aunque no son muy gruesas no puedes ver mas que siluetas.

De repente el hombre habla. No levanta la vista ni deja lo que esta haciendo.

- ¿Vienes a ver a John? ¿Que quieres de él?

Wright se sentía mas fascinado cada minuto que pasaba allí por aquel lugar, por aquella civilización en la nada, en un mundo muerto. Su mente le decía que no era tan perfecto, que debía de haber un pero. Sin embargo, hizo caso omiso, por esta vez.

Se mantuvo mirando al hombre que hacía puntas de flechas, hasta que le habló.

-Me han dicho que debo hablar con él si me interesa algún tipo de trabajo en este lugar.

Dijo, de forma directa, una frase en tono serio. Así era Wright.