Partida Rol por web

Aja, sí, espere un momentito, ¿sí? dijo tecleando con velocidad en el ordenador, tan rápido que parecía que sólo aplastaba las teclas. Su sonrisa no desaparecía y la pantalla del ordenador no dejaba de deslumbrale la fea cara.

Pero algo pasó.

La cara de la recepcionista se convirtió en una mueca. Sus ojos estaban perplejos y empezó a mirar a Esmeralda. La cámara enfocaba su cara y después la de la recepcionista. Iba cambiando rápidamente de una a otro, ampliando el zoom hasta que se perdió en la boca de la recepcionista.

¿Ustedes no conocen la oferta de Vodafone? ¡Acá me dice que son ustedes de Movistar! ¡Ay mi señora, no puede ser! ¡Si ustedes se pasan a Vodafone, tendrán un descuento del 50% en sus facturas. ¡Y podrán llamar a sus paises gratis! ¡Es chévere!

Una risa empezó a surgir en la sala, entonces una cámara hizo un primer plano a Rigoberto Julián Rosario, el jardinero, que reía a mandíbula batiente mientras observaba todo lo que estaba ocurriendo. Si eso era un funeral quería estar en los cumpleaños.

Secándose las lágrimas de la cara, de risa por supuesto, se dirigió a la mesa mientras se servía un copazo a sí mismo- Mamasita, los del servicio tenemos que cuidarnos entre nosotros, así pues tómate un trago cuando quieras, dime que te pongo -la sonrisa era amplísima- tenemos que brindar por la memoria de los señores de los Santos Benditos y que Dios y la Palomita buenaonda los cuiden en su seno.

JB fue junto con Satanasa y su tíito querido, a poner verde a su hermanita un poco guarrita.- ¿Pero vieron ustedes no más? Y yo aquí casi sin maquillar de la desgracia, sorportando el peso de la terrible desgracia.- y se sirvió un copazo para ella junto con Jhonny y Rigoberto.

Francisco agitó su cuero cabelludo húmedo por el ponche que se había derramado por toda su RAMERA. La cámara grabó los movimientos a cámara lenta, mientras que multitud de gotitas se repartían por toda la estansia. El joven se sentía confundido, no comprendía a la señorita resepsionista, pues les había soltado algo que no tenía nada que ver con su duda.

Miró con gesto de resignación a su primita querida y se encogió de hombros. No sabía qué era lo que podían haser ahorita mismo. ¿Qué hasemos primita querida? ¿Nos pasamos a Vodafone, o estás contenta con tu compañía telefónica? Yo estoy cómodo con mi selular, dijo mientras lo sacaba de su bolsillo. Y entonces, una música de tensión resonó por toda la sala. Algo terrible había susedido a nuestro querídisimo y rebueno Francisco Jonathan Javier de los Olmos Blancos. Algo terrible que pronto la audiensia descubriría.

...

...

CHAN

CHAN

¡Oh! ¡Diablos! ¡Mi selular se ha estropeado con la caída! ¡Por la concha de mi madre!

Familiares, amigos... El dolor nos nubla la vista. ¡Todos estamos apenados por esta muerte desgraciada! Se acercó al cristal, desde donde se veía a los dos cuerpos. La cámara hizo un primer plano de su rostros y una lágrima recorrió su mejilla.

_{Ya no habrá nadie quien platique conmigo, ni juege a la pelota, ni que me seque el sudor, ni que....}

¡Todos queridos! Va a ser la hora de despedirse

En una breve pasada rápida de la cámara por los exteriores, se ve que el coche de Kristopher ya no está. Mientras cada familiar buscaba su momento de protagonismo, el abuelo de la familia había decidido acertádamente que la venganza se servía fría. Ya volvería para despedir a su hija cuando todos se hubieran ido...

¡¡¡Jamás podré despedirme de ellos!!! Eran mis padres ¿Qué quieres que me vaya como si no hubiera pasado nada?- y, harta de aguantar las constantes faltas de respeto del cura, le arreó una buena cachetada, seguida de una buena agarrada, al gritó de Pendejo, idiota, mamarracho!!!!!!

De fondo, empezó a sonar una buena música de pelea y en un instante le tiró al suelo y le tiró de los pelos.

Dejó que mamasita le quitara la camisa. Mamasita era mamasita, pero Jhonny no estaba dispuesto a negarse a que una mujer le quitara la camisa... fuera cual fuera la mujer. Asi que lo primero que hizo nada mas quedarse como su madre lo trajo al mundo de cintura para arriba, fue sacar musculo y lucirse, haciendo gala de soberanos musculos torneados y moldeados en el gimnasio durante horas y horas.

El espectaculo de musculos acabo con una pequeña sonrisa, radiante y perfecta con un brillo final, totalmente artifical, posiblemente puesto por algun productor en la postproducción. Jhonny se había alegrado de usar aquella locion bronceadora el día anterior, así los musculos lucian mas... por que lo que era el cerebro...

Se acerco a su prima, tomando la copa, y rodeando con el brazo a JB con su fuerte brazo, mientras terminaba el otro JB mezclado con cocacola del vaso. Yo te ayudaré a superar tal perdida primita querida. Ya veras que no es nada, nos iremos de fiesta despues para olvidar las penas. ¿Le desimos tambien a mamasita y al Jardinero que se vengan?

Cuando JB se separo de él, se quedo quieto sin saber que hacia, cuando le pego al cura, gritandole. ¿Pero por que le pegaste primita? ¡Si todos sabiamos que eso es verdad! Y que lo diga hasta él, que nunca se entera de nada...

Y cuando tiró al cura al suelo, se acerco hasta ella, agarrandola (que no cogiendola, eeeh) del brazo y tirando de ella, para pegarla a sus pectorales ¡Ya basta JB! ¡Nada de esto servira de nada!

Al Padre Ricardín no le da tiempo a defenderse de tan cruel ataque. En el suelo, mientras JB le arañaba, pegaba y escupía, la mente del sacerdote voló al pasado, cuando la joven no era más que una niña tonta que le gustaba jugar a ver lo que escondía bajo la sotana.

Los espectadores pudieron ver un recuerdo algo borroso en el que el Padre Ricardín sentaba a Julia Bernarda sobre sus rodillas y la reñía.

Mire pendeja susurraba para que nadie les escuchara Eres muy joven para ver lo que hay aquí debajo, pero te puedo decir lo que es. ¿Te asustan las serpientes? Pues hay una muy grande acá, dispuesta a morderte si lo sigues intentando.

JB, horrorizada, había salido corriendo. Seguro que el Señor sabrá perdonar a esta chingada

Los telespectadores pudieron ver de nuevo el presente. JB estaba dándo cabezazos, pues uno de sus brazos había sido agarrado por Jhonny.

¡Ya está bien, Julia Bernarda de los Santos Benditos Esteban! gritó, al tiempo que su mano fue rauda y veloz hasta la mejilla de la joven. Un sonoro ¡Plaf! sonó y toda la sala quedó en silencio.

Permitame, señor dijo Paloma mientras se levantaba y agarraba el móvil del joven. Lo observó y lo sopló. Se lo acercó tanto a los ojos que se puso bizca.

Mmm dijo. Agarró el celular con fuerza y empezó a golpearlo contra la mesa.

¿Lo ha visto, pendejo? ¡Su compañía le ha estafado! Con nosotros, este tipo de golpes no ocurren! Si hace su reservasión ahora mismo, le podré conseguir un celular mucho mejor por muy poquita plata

Me pasé una mano por la cara. ¿Pero es que nadie podía sentrarse en el terriiible drama que estaban viviendo?

-Por favor, séntrense, no podemos ir con estas fachas a despedir a mis papás-casi sollosé. Mi mamá y mi papá estarían avergonsadísimos de vernos con atuendos manchados y de buen seguro nos habrían botado de allá de poder haserlo.

Ay la concha, pues claro que no dijo Paloma Cantaora poniéndose en pie y saliendo del mostrador. ¿Cómo os habéis podido manchar así? ¡Chingada vuestra familia! se alejó por un pasillo y se volvió a miraros.

¡A qué esperan, pendejos! ¡Sigánme, sigánme! aceleró el paso y abrió una puerta. En su interior, pudisteis ver una gran cantidad de vestidos de gala para mujer y trajes para hombres.

-¡Santa Bárbara María bendita!- exclamé asombradísima- vamos allá a cambiarnos las prendas, mi amor, cuanto antes nos cambiemos antes podremos regresar con los abuelos y con los demás- tomé a mi amado primo de la mano y tiré de él emosionadísma por poder cambiarnos esas fachas manchadas que lucíamos.

Funeral con espectáculo -pensaba el jardinero mientras observaba todo el caos que se estaba desatando allá. Esbozó una medio sonrisa divertida mientras pensaba en todo lo que estaba ocurriendo y en lo "dramaqueens" que eran las mujeres, pues desde que la anciana se desmayó parecía que se hubiera comenzado una competición.

-Creo que, sea lo que sea, deberíamos de terminar antes de que los amos se levanten y nos peguen unas bofetadas -el jardinero empezaba a cansarse de ese sitio. Tenía mucho que hacer, como saber con quién tendría que hablar para asegurarse de su puesto de trabajo en esa casa como lo había hecho durante los últimos tiempos.

Todos los vestidos para mujer eran muy parecidos. Todos tenían un gran escote y una cola muy larga, que limpiaba el piso aún sin quererlo. Los trajes de hombre eran todos chaqués.

Francisco Jonathan Javier de los Olmos Blancos se asercó por detrás de su fabulosísima prima, y a pesar de sus manchas la rosó su cabello al tiempo que lo olía. Mi querida primita, ¿quiere que la ayude a desvestirse? Estos trajes paresen sumamente incómodos de poner y a mi no me importaría ofreserme a ayudarla. Siempre y cuando lo vea en la nesesidad. Dijo mientras la lanzaba un guiño para insinuarse a la prima. Solo confiaba en que la resepsionista les dejase algo más de intimidad.

Señoritos, yo les esperaré acá dijo señalando una silla que había al lado de la puerta. Se sentó en ella y se quedó mirándoos, sobre todo a Esmeralda María Escarlata, sin dejar de sonreirla.

-Un poco de respeto, mijo, que no es forma de tratar a un padre- dijo cuando Jhonny le habló de esa forma tan coloquial.

Acto seguido parecía que la cosa llegaba a su fin, así que Oscar Bertin echó un último vistazo a los difuntos.

-Juro que averiguaré qué les pasó y clamaré vengansa si descubro que a ustedes los lastimaron de alguna forma.

Lo dijo a modo de soliloquio, aunque intentó que todos escucharan esas palabras... si alguien tenía algo que ocultar, mejor sería ponerlos nerviosos.

Mamasita, cuando volvió de limpiar la camisa del joven tarambana, se encontró con Rigoberto instándole a beber el néxtar del diablo.

-Déjese de huevadas, jardinero, que una no bebe como los borrachusos aquí presentes.

Así que declinó la oferta y volvió a lo suyo.

-Aemás, una tiene que haser muchas cosas aquí aún. Que una ves se vayan ustedes hay que ventilar ésto para que no muera a muelto. Y el Ambipul no se echa solito.

Acto seguido, sacó un ambientador de debajo de su delantal y espolvoreó la zona, sin importar si le daba a alguien con el aerosol, en especial al "hombre de Dios".

-Señol párroco, deje de intental violar a mis señoritas, que me las traumatisa.

En realidad, el cura había susurrado las palabras de modo que nadie más pudiera oírles. Pero una criada negra que llevaba años oyendo secretos entre susurros no era alguien cualquiera.

Prudencia Satanasa, sumida en místico trance de dolor hasta entonces, apenas prestaba atención a las conversaciones que se sucedian a su alrededor. O eso pretendia hacer creer, porque lo cierto es que, a pesar de aquel primer plano de camara mirando hacia el infinito con expresion compungida, Satanasa estaba pendiente de todo lo que pasaba.

Por eso, cuando vio como JB atacaba al padrecito, se giró, horrorizada, llevando las manos al cielo- ¡Sielos Santos! ¡Paren esto por favor! ¡Mi nietesita querida se ha vuelto loca por el dolor! ¡El demonio está actuando en ella! ¡Salvenla, por favor! ¡Padresito, muéstrele su poder!

E increpando al sacerdote para que hiciera algo en nombre de la santa palomita estaba, cuando escucho a mamasita decir pendejadas sobre el buen padre:

-¡Pero que falasias y mentiras son esas, mamasita! El padresito es un hombre bueno de Dios, no un pendejo desalmado como el borracho de su hijo.... -cargó la desconsolada madre contra la criada, sin venir a cuento. Llamar violadol al padrecín habia estado feo.. Muy feo.