Partida Rol por web

Plata de Ley

Capítulo 6 - Regreso a St. Elmo

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20/12/2016, 22:09
Juanita "Dinamita" Rosales

Miro como sangra ese desgraciado y lo único que siento es aún más asco que antes -Perro-
Todavía ha tenido que decir unas últimas palabras para intentar humillar a James. No hay infierno suficientemente malo al que pueda ir.

Pero James no parece afectado y me alegro. El que si lo parece es Michael. No sé qué historia traía con ese tipo pero ahí hubo algo gordo. "Y yo que me creía que Michael era un cobarde sin sangre. Cobarde puede ser, pero eso de ahí era ira como hace tiempo que no veo"

Intento recordar qué nos ha contado antes sobre unas niñas. Sonaba aturullado y no le he hecho caso. "¿Se las llevaría ese tipo?"
Mientras avanzamos hacia la salida, me pongo a su altura y casi sin mirarle le digo -Si salimos de aquí con vida, te ayudaré a buscar a esas niñas. No sé quienes son, pero si ese desgraciado se las ha llevado hay que intentar encontrarlas- No soy ninguna santa, no voy por ahí haciendo el bien a mis congéneres, pero soy una mujer, una que fue pobre y no tenía quién la defendiese. No dejo niñas a merced de demonios si puedo evitarlo.

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20/12/2016, 22:21
Jack Lonegan

Jack pensaba que aquel hombretón estaría definitivamente muerto tras la descarga de plomo que le había aplicado Maverick, pero se ve que aun tenía unas últimas palabras que dedicarles.Supuso que pretendía incomodar y remover la conciencia de McReady, o buscar una justificación para calmar sus propios remordimientos mientras hablaba de héroes y villanos. Se alegró al escuchar las últimas palabras que le dedicó su viejo compañero de fatigas, de las que no se desprendía ni una leve señal de que lo que le había dicho hubiera calado de ninguna manera en su conciencia.

Una vez se encargaron de rematar a Morris comprobó que, efectivamente, el camino por el que habían vuelto había quedado repentinamente sellado por la explosión de la dinamita. Así que la decisión era mucho más fácil de tomar.
-Tenéis razón, solo tenemos un posible camino que tomar. Así que vamos a buscar esa salida.

Notas de juego

Perdón por la brevedad, pero me daba la impresión de que me estaba repitiendo un poco respecto a mi anterior post.

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20/12/2016, 23:39
Director

Alejándoos de toda una cuadrilla de pistoleros aplastados, y del cadáver a buen seguro muerto de Brett Morris, ya no os quedaba más remedio que seguir los raíles en descenso hacia la profunda oscuridad del túnel; habíais perdido una lámpara con la detonación, que se había roto en varios pedazos a un lado del túnel, pero aún contábais con otra para guiaros en vuestro camino.

Cuanto más descendíais, más sinuoso se hacía el recorrido. A pesar de todo, el túnel continuaba en una sola dirección; podía ensancharse o estrecharse en varios tramos, pero al final el recorrido no se dividía o se detenía, solo continuaba. Finalmente, tras varios minutos llegásteis a una abertura en el túnel que se abría a una oquedad gigantesca en la roca; tan grande que no distinguíais el techo y no llegábais a iluminarla por completo con la linterna.

Las vías de la vagoneta terminaban allí, e incluso el olor a tierra húmeda del aire había desaparecido para ser sustituido por un olor dulzón que no sabíais identificar. No teníais un punto de referencia sobre el que decidir qué dirección seguir, pero entonces distinguísteis el brillo dorado de una pequeña llama en la lejanía, muy débil para saber cual era su fuente.

Notas de juego

Podéis hacer una tirada de Inteligencia +  Cultura con dificultad 22.

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20/12/2016, 23:54
Director

Notas de juego

En tu caso es Inteligencia +  Cultura con dificultad 18.

PD: puedes repetir la tirada con un punto de Drama, ya te diré por qué

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21/12/2016, 09:19
James McReady

James avanzaba forzando la vista para orientarse en la oscuridad, apenas atenuada por el mortecino fulgor de la única lámpara que poseían. El ruído de sus pasos retumbaba en las paredes y de cuando en cuando, sentían el paso de una corriente de aire o el gotear de alguna pequeña filtración de agua contra el suelo rocoso. James intentaba guardar silencio para poder percibir cualquier otro ruído que pudiese ponerles en alerta o al menos, averiguar hacia dónde estaría la salida, pero para el viejo exsoldado, no resultaba fácil orientarse en un lugar como aquel.

Luego de un buen rato de avanzar, vieron una pequeña llama en la lejanía que podría indicar la presencia de alguien en aquella mina. Quizá consiguiesen capturarle y obligarle a llevarles hasta la salida. James se comunicó por gestos con sus compañeros para sugerirles actuar de esta manera.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Uf, ni de coña.

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21/12/2016, 09:42
Pancho Castillo

Pancho vio el gesto de Mc Ready y asintió. De todos modos imaginaba que la luz que portaban con ellos sería tan visible en la distancia como la llama que alcanzaban a distinguir en la lejanía.

Sea lo que fuera el lugar al que habían llegado, Pancho intuyó que aquello no era una mina. Esta oquedad estaba aquí mucho antes de la existencia de la misma, seguro. Miró hacia arriba intentando localizar infructuosamente el techo y aunque no dijo nada, el gesto del mexicano mostraba una honda preocupación.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pues mira. Con un par. Voy a reservar el 8 de la tirada e invocar el aspecto de Cultura "Educado en un monasterio", a ver si me sale algún otro ocho en los dos dados que repita.

Pancho puede ser un zote, pero un monje puede llegar a ser muy culto y leído, y puede que justo ese día Pancho estaba atento el clase cuando el monje contó una anécdota a los alumnos.

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21/12/2016, 09:52
Pancho Castillo
- Tiradas (2)

Notas de juego

¡Toma ya! Las historias del hermano Agustín al fin calaron en Pancho:

Tirada (8+8) + Inteligencia 3 + Cultura 3 = 22

 

La puntuación de Drama pasaría de 2/5 a 1/5

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22/12/2016, 19:31
Juanita "Dinamita" Rosales

Seguimos avanzando dentro de la mina. Matar a ese asqueroso me ha servido, ahora me encuentro mucho más tranquila. Aunque no hablo demasiado mientras avanzamos.

No me molesta la oscuridad, ni que el camino sea enrevesado. Estoy acostumbrada. En cambio, cuando llegamos al enorme hueco me quedo sorprendida. Nunca en la vida había visto algo así. Ni siquiera entiendo cómo ha surgido. Me parece demasiado enorme para que lo hayan hecho.

Asiento, en silencio, a la propuesta de James. Tanto si le cogemos, como si no, seguir la luz de alguien que conoce este sitio, me parece buena idea.

- Tiradas (1)
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22/12/2016, 22:42
Michael Maverick

Michael encabezaba la marcha consumido por el odio, la furia y una extraña sensación de vacío. Avanzaba deprisa y no tardó en adelantarse al resto del grupo, por el que no había esperado. Un rato después, viendo que dejaba atrás la única fuente de luz y empezaba a caminar en la oscuridad y con miedo a tropezar, se vio obligado a detenerse, aunque siguió avanzando delante del grupo, sin ganas de hablar con nadie.

No fue el primero en ver una luz a lo lejos, pues caminaba casi todo el tiempo con la vista en el suelo frente a sus pies, mientras con las manos amartillaba y desamartillaba los revólveres que llevaba desenfundados de forma obsesiva.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Venga daditos, dadme ese 2% que necesito (2 dieces juntos).

Pues no: Base 9. Malus 2. Objetivo 22. Tirada 1,4,10. Total 11.

Incluso gastanto un punto de drama y repitiendo dos dados, mis posibilidades no pasarian del 20% (al menos 1 diez de dos dados).


Jefe ¿no hay forma de quitarme ya el malus? Es que ni con tiradas de 10 (van dos veces) y con puntos de destino a tope voy a ir a ninguna parte.

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22/12/2016, 23:20
Jack Lonegan

Jack seguía los pasos de Maverick y McReady por el único camino que podían continuar. El entorno se hacía cada vez más oscuro y serpenteante. Al menos tenían la tranquilidad de que no había algún tipo de bifurcación que les obligara a arriesgarse y tener que elegir. Simplemente seguían y seguían su camino adelante.

Pero de repente llegaron a una zona tan grande y espaciosa, a tales niveles de profundidad que desconcertó al forajido.
¿Donde estamos? Esto es imposible que haya sido construido artificialmente por la mano del hombre, no a esta profundidad.

Por más vueltas que intentaba darle en la cabeza, Lonegan era incapaz de encontrar alguna explicación lógica al lugar en el que se encontraban. Tras aquellos segundos para tratar de descifrar el entorno en el que se encontraban, observó una luz a lo lejos y McReady hizo una señal de avanzar en aquella dirección. No tenía ninguna objeción ante aquello, ya que tampoco tenían la alternativa de regresar por donde habían venido. Así que asintió con la cabeza y siguió a su compañero.

 

- Tiradas (1)
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22/12/2016, 23:38
Director

El grupo avanzó por la cueva de forma cautelosa, incapaces de ver con claridad la cueva a vuestro alrededor simplemente con la lámpara que os quedaba. Cada paso os acercaba más a la diminuta luz que podíais ver, y pronto comprobasteis que las distancias en la oscuridad eran engañosas, puesto que tardásteis casi un centenar de pasos en poneros a su altura. Apenas habíais llegado a distinguir que se trataba de una solitaria vela, que ni siquiera iluminaba lo suficiente su alrededor, cuando entonces.

- Os esperaba... - la vela cayó al suelo prendiendo al instante una hoguera bajo ella, cuyas llamas se extendieron como guiadas por un reguero de aceite o pólvora hacia las paredes de la caverna. No eran unas llamas normales, expulsaban una gran humareda y ardían bajas e intensas de un color absolutamente rojo que no era natural, y que una vez se extendió por la cueva iluminó todo con absoluta claridad, sin sombras, de un modo insólito y perturbador.

Allí, junto a la hoguera rodeada por un círculo de personas con sacos en la cabeza y atados en sillas, se encontraba El Francés.

 

- ¡Salut, mes amis! - clamó alzando los brazos a los cielos. Sin duda era él; conservaba el mismo rostro y el mismo bigote que hacía tres años, sin embargo sus ropas sí lucían distintas. Llevaba un traje de las más finas costuras, y del bolsillo asomaba la cadena de un brillante reloj, lo único que no cuadraba con su atuendo era su bastón, adornado con un cráneo en la empuñadura de un modo siniestro, y con marcas de sangre o barro por la cara (todo parecía rojo) que recordaban a los indios apaches.

- No les esperaba a vous - continuó con voz cansada pero de aceptación, como si todo aquello no fuera más que un mero trámite - pero peu importa quien sea. Cette nuit ofrezco a Yietso sus últimas víctimas. - extendió los brazos hacia los lados abarcando a las personas atadas y amordazadas; todos parecían desmayados: había dos hombres adultos, una mujer, y dos figuras pequeñas con batas de dormir. - e después despertará. No intenten de résister et no habrá douleur  -

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23/12/2016, 00:27
Director

Aquél olor dulzón... solo habías olido algo así una vez en tu vida. Tenías apenas 13 años, y ocurrió cuando el hermano Agustín te llevó con él fuera de la parroquia por varios días para ayudar a un enfermo del pueblo cercano. Al volver, la parroquia estaba tan silenciosa como un cementerio, y todos los huerfanos y muchos otros monjes yacían enfermos en su lecho.

Agustín interrogó a todos hasta que uno de los huérfanos confesó que se había escapado varias veces para ir a ver a los indios que a veces atravesaban a caballo las praderas a pocas horas de allí. Aquél día, además de eso, les había visto recoger unas hierbas del camino, y cuando se alejaron el huerfano fue a examinarlas; no las conocía pero olían bien y llevó un matojo entero al monasterio, donde nadie puso en duda que se podían añadir al potaje matutino.

Aquella noche todos los monjes y niños tuvieron pesadillas y al siguiente muchos estaban enfermos. Los niños decían haber visto a sus padres muertos ir a verles, y los monjes que ángeles celestiales aparecían por la noche para llevárselos al señor. Unos pocos de ellos murieron.

Agustín se enfadó como nunca antes lo habías visto. Dijo que aquella hierba sin duda la usaban los indios para propósitos diabólicos y arrojó lo que quedaba a la chimenea sin dudar; allí ardió en las mismas llamas rojas que ahora teníais ante vosotros y alrededor del francés, como un auténtico fuego del infierno.

Después de aquello pasaron un par de días hasta que los enfermos se recuperaron por completo, y nadie volvió a hablar del tema ni a traer hierbas desconocidas.

Notas de juego

Perdona que sea tan "abstracto/críptico" pero quiero cuadrar lo que intento decir con algo que de verdad podría conocer Pancho.

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23/12/2016, 07:51
Pancho Castillo

Notas de juego

Para nada disculparse. Es un relato que define muy bien lo que es esa "hierba del diablo" y lo hace enmarcandola perfectamente dentro del pasado del personaje.
Vamos, como si viniera asi escrito en el modulo para el caso concreto de que Pancho sacara la tirada. Simplemente perfecto.

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23/12/2016, 07:50
James McReady

Cuando la vela cayó al suelo, James quedó desconcertado por el espectáculo de luces que se produjo y más aún al ver a su antiguo compañero en medio de aquel lugar, portando un bastón tan extraño de aparente manufactura india y dispuesto a hacer un sacrificio. De Grimaud podría esperar muchas cosas, pero que se hubiera convertido en un loco fanático seguidor de algún espíritu oscuro.

James alzó su rifle y apuntó a su viejo amigo.

-¿Amigos?-contestó James arqueando una ceja con sorpresa-Es un curioso apelativo para referirte a aquellos a los que engañaste y robaste. Y veo que has empleado bien el dinero ¿eh?¿Es a esto a lo que te dedicas ahora?¿A realizar rituales oscuros en honor a falsos dioses?¿Para qué?¿Para obtener poder? Yietso...nos hablaron de él. De lo que estaba sucediendo aquí, pero me resistía a creer que tú estuvieses detrás de todo. Pero al fin y al cabo...siempre has sido tú ¿no?¿Qué pasó aquel día en aquel tren? Todo empezó allí ¿verdad?¿Con aquellos huesos?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Intentaba tirar para ver si reconocía algo del ritual, debido a mi afinidad con la cultura india. Pensaba en gastar un punto de drama para mejorar la tirada si fuese necesario pero con una pifia, va a ser que no. XD

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23/12/2016, 21:46
Juanita "Dinamita" Rosales

Miro este sitio con ojos de minera y no reconozco nada en el. Así que, cuando la figura hace su aparición me pilla un poco desprevenida. Pero es sólo un segundo porque todas las llamas que, de repente, aparecen alrededor me ponen en alerta

-¿Pero qué demonios es eso?- el fuego no es de ese color. Sobre todo me preocupa el humo. El humo, en una mina no es buena cosa. Puede acabar matando a la gente. Pero este humo tampoco parece normal, así que centro toda mi atención en el artífice de todo esto. Pierre Beaumont.

Siempre tan teatral, siempre tan circense. No sé ni porqué, a estas alturas, me sigo asombrando. Y, entonces, empieza a decir esas cosas raras, hablando de Yietso como la india aquella.

James, que siempre ha sido más amable con las creencias de otros, le increpa. Pero yo, que a estas alturas ya no creo casi ni en mi propio dios, el que me enseñaron en la iglesia del pueblo, no tengo tanta paciencia.

-¿Pero te has vuelto demente o qué? Somos delincuentes pero no vamos por ahí matando personas inocentes con las que no ganamos nada-
"Ha enloquecido. Definitivamente. Mira que decir que no intentemos resistirnos ¿De verdad pensará enfrentarse él solo a nosotros cinco?" pienso mientras me muevo hacia el círculo. Por supuesto voy a empezar a desatar a esta gente mientras mis compañeros se hacen cargo de él.

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27/12/2016, 02:21
Jack Lonegan

Tras seguir el consejo de James y caminar en dirección a aquella luz, dieron con un espectáculo esperpéntico. Pierre, como una especie de maestro de ceremonias con un extraño bastón rematado en una calavera les invitaba a algo parecido a un sacrificio ritual. Su cara se encontraba manchada a la manera de alguna de las tribus indias que alguna vez había visto. Y la presencia de varios inocentes, con aspecto aturdido, seguramente inconscientes. Atados y amordazados en sillas en torno a una hoguera. Se suponía que iban a ser sacrificados por el favor de un espíritu que ya les había mencionado aquella india con la que se habían reencontrado.

"Cuidado con el hombre que antes llamabas tu amigo; si volvió de entre los muertos es seguro que uno de los vástagos de Yietso se apoderó de él para ayudar al despertar y liberación de su malvado padre..."

Las palabras de la mujer india volvían a su cabeza. ¿Era acaso posible que solo fuera un espíritu poseyendo el cuerpo de su antiguo compañero de fechorías? Pero les había reconocido al ir a su encuentro. Lonegan se preguntaba hasta qué punto la mente del francés funcionaba y tenía el control, y hasta dónde llegaba el del espíritu. Todo esto siempre que dieran por cierto las palabras de la india. El caso es que la compañía del espíritu del viejo, y las consecuencias que habían tenido alguno de sus intentos de comunicarse con él, hacían más receptiva la mente del forajido a las teorías sobre Yietso y los espíritus indios.
Las últimas palabras, dichas en un tono desafiante y condescendiente, terminaron de espolear a Jack para responder.

-Hola de nuevo, Pierre. No sé si has hecho algún pacto con el diablo, con algún jodido espíritu indio, o simplemente has perdido la cabeza después de haber sido enterrado y volver a la superficie con el resto de los mortales. Pero si piensas que vamos a dejar que montes tu numerito de sacrificios rituales y nos vamos a quedar aquí como espectadores, sin mover un dedo, estás muy equivocado.-Desenfundó rápidamente uno de sus revólveres, apuntando al francés.-Déjalo amigo, creo que tienes pocas posibilidades de salir bien parado de aquí.-Inclinó su cabeza en dirección a la mano que sostenía el arma y después la giró para señalar a sus compañeros, que confiaba en que imitaran su gesto y desenfundaran en cuanto les fuera posible para apuntar a Beaumont y convencerle de que desistiera de sus intenciones.

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27/12/2016, 12:19
Michael Maverick

Michael caminaba el primero del grupo, cabizbajo, apenas por delante de la luz de la única lámpara de grupo. Tardó un momento en darse cuenta de que los demás se habían detenido y no levantó la vista hasta que la cámara ardió y quedó iluminada por completo. Apenas oía más que un zumbido en sus oidos y no escuchó la conversación entre los demás y el francés. Con la mirada perdida y febril recorrió la sala sin apenas ver nada.

Entonces uno de los bultos, uno de los cuerpos con la cabeza cubierta pareció moverse, como si dejara caer la cabeza. Quizás fue sólo una imaginación de Michael, pero éste no pudo ver nada más que las pequeñas piernas y la ropa de cama.

Michael no esperó más, olvidando el dolor de sus heridas1 y poseido por un odio que jamás había sentido, levantó los dos revólveres y empezó a disparar contra el francés apretando alternativamente los gatillos a medida que avanzaba, sin buscar cobertura alguna2, como si quisiera llegar lo antes posible al cuello del francés para estrangularle con sus propias manos y como si no le importara su propia seguridad o no se hubiera dado cuenta de tal detalle.

Notas de juego

1 Gasto de un punto de Drama para anular los malus por heridas durante la interacción con Pierre/Yietso.

2 ¿Bonus en ataque a cambio de sacrificio de bonus de defensa? ¿Factible?

Tirada de ataque pendiente a la espera de la respuesta del máster.
 

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27/12/2016, 20:01
Pancho Castillo

Había algo en la mirada de Pancho que reflejaba por partes iguales horror y reverencia. El empalagoso olor producido por las llamas resucitó un terrible recuerdo infantil; sucesos del pasado asociados a un mal perverso y demoníaco:

-¡La hierba del diablo! ¡La hierba del diablo! ¡Está quemando la hierba del diablo!- Gritaba histérico con la mirada perdida, pareciendo contagiarse, a su manera, de la locura de Maverick.

Sus piernas flaqueaban y su mentón tembloroso no paraba de repetir esas palabras una y otra vez. El hombre empezó a rebuscar entre sus pertenencias como un loco enferborizado. El sudor perlaba su frente, podría aparentar haber sido causado por la repentina oleada de calor de las llamas. Pero no era eso. Un sudor frío recorría el cuerpo del mexicano a medida que el terror a algo antiguo y primigenio inundaba su corazón. No sentía el cálido fuego, si no el helador frío del profundo infierno.

Mientras movía las manos temblorosas dentro de su poncho algo cayó al suelo de roca produciendo un golpe sordo. Pancho se arrodilló al suelo para buscarlo en la rojiza oscuridad, desesperado. Palpando entre las tinieblas como si le fuera el alma en ello.

Súbítamente, lo encontró, y alzó en su mano el crucifijo que el padre le había dado a St Elmo, aferrándolo con fuerza hasta que las manos le sangraron con una sonrisa de desesperada alegría. Su rostro de tez morena se hallaba pálido como la luna y sus ojos tenían la pupilas dilatadas.

Se giró, procurando no mirar al francés a los ojos, y empezó a recitar una plegaria: -Padreneustroqueestasenlocielossantificadoseatunombre...-  La cual sonaba casi de forma pueril entre el sonido de las detonaciones de los disparos de Maverick.

Aquél hombre grande y fuerte como un caballo, parecía un niño asustado. Gemía y sollozaba en su estado encogido mientras las balas volaban. Sólo alzó su vista para mirar a Lonegan: -¡Respiramos el humo de la hierba del diablo! ¡Ya estamos muertos! ¡Más que eso, moriremos de forma horrible y nuestras almas no hallarán al salvacioooón!-

-¡El diablo vendrá a por ellas y serán arrastradas a lugar más profundo del infierno!-

Notas de juego

Pos voy a invocar "Ha visto la muerte de cerca y no le gustó". Y ganar un Punto de Drama (si el director lo encuentra adecuado).

Pancho no será el que salve la situación. Se quedará ahí acojonado y balbuceante, que es lo que toca. 

Es el momento de que los verdaderos héroes muestren su valía (y Pancho es cualquier cosa menos eso) :P


PD: Lo de "respiramos el humo de la hierba del diablo" es una pista.

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28/12/2016, 01:05
Pierre Grimauld "el Francés"

Pierre os observaba con la mirada perdida, impasible a vuestras palabras o al hecho de que os acercáseis con intención de liberar a los prisioneros, e impasible también a los aterrados gritos religiosos del crédulo Pancho. Solo los repetidos disparos de Maverick le hicieron reaccionar.

Aunque algún disparo falló, Pierre recibió el primer disparo en el pecho, y luego otro, y un tercero, y con cada uno que recibía este retrocedía un paso más, bamboleándose como un borracho y dejando tras de si salpicaduras de sangre que teñían el suelo y se perdían en el rojo intenso que iluminaba ahora la cueva... pero por algún motivo el Francés no caía. Pronto los revólveres de Maverick dejaron de escupir balas y el cuerpo del Francés quedó inclinado anormalmente mientras se mantenía aún forzosamente en pie. Con un gruñido de esfuerzo el Francés se enderezó, se palpó las heridas con la mano libre y miró entonces su palma, que debía de estar a esas alturas cubierta de sangre; entonces comenzó a reir como un completo desquiciado, un demente al tiempo que toda su figura comenzaba a desdibujarse a su alrededor como si estuviera hecha del propio humo de las fogatas rojas.

Las carcajadas desquiciadas no cesaban. Ante vosotros solo podíais ver una silueta oscura de una figura que daca vez tenía menos forma humana. Unos cuernos de alce crecían directamente en su cabeza, todo su cuerpo se ensanchaba y crecía, y sus brazos se alargaban y estiraban casi hasta tocar el suelo. Para cuando la silueta terminó de crecer la carcajada se había transformado en un rugido animal. La silueta avanzó entonces un paso hacia vosotros con sus pies terminados en pezuñas revelando una bestia de horrible aspecto que no podía provenir sino de vuestras más horribles pesadillas, con una cabeza de puro cráneo sin carne, más que unos pedazos sangrantes atrapados entre sus afiladas hileras de dientes.

Con un último rugido, la bestia que antes fuera Pierra "el Frances" se abalanzó y cargó hacia vosotros.

Notas de juego

Pancho: Tu lo has querido, te llevas un negativo de -2 a todas las tiradas y a tu defensa por el miedo a cambio del punto de destino (aún puedes gastarlo para anular este penalizador).

La bestia llegará a atacaros en la siguiente actualización.

Nota/recordatorio: Este bicho no es un secuaz cualquiera, contra el no vais a poder evitar el daño gastando puntos de destino.

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28/12/2016, 01:48
Director

Aunque nunca habías visto algo así, ahora que lo tenías delante te era imposible no reconocer las leyendas que habías escuchado de los indios fugitivos y otros chamanes, charlatanes y cuentacuentos con quienes te habías encontrado en el pasado y habías compartido conversaciones en pos de satisfacer tu curiosidad sobre la cultura de aquellos pieles rojas

Un ser medio-humano, desproporcionadamente grande, con cráneo y cornamenta de alce y una insaciable sed de carne y sangre humana. Aquello era un wendigo; un espíritu maligno cuya sola mención provocaba terror en los indios apaches más aguerridos.