El lugar no tiene perdida, y para decepción de Claus no parece tener una taberna razonable, seguramente estos sectarios tambien son ascetas y no beben más que agua pantanosa. A vuestro frente se encuentra la gran hoguera que se encuentra rodeada de esa extraña gente que aulla y toca los timbales a ritmo frenetico, incluso con esa algarabía podeis escuchar como algo gigante se acerca a ella, quizás pudiera ser el mítico calamar volador gigante. Ahhh tambien está Blancaflor enfrente de un tipejo encapuchado con un casco con cuernos, aunque su tamaño desmerece su atuendo pues no mide más de un metro y pico, lo que más resalta es una vara con un cristal en su punta que brilla con fuerza.
—Eh Verne— digo a la muchacha al ver al oír lo que puede ser un calamar gigante volador— ¿Así suena lo que se supone que produce un licor de primera?
Sí, estoy casi segura, que estos sectarios van a ofrecer a Blancaflor como sacrificio a la sepia.... si han estado ofreciendoles sacrificios... tiene que tener las glándulas bien cargadas - Con esto Verne ni siquiera se dió cuenta que daba pistas acerca del ingrediente principal a partir del cual se destilaba tan exquisito licor.
Pero... ese... - Verne señalaba al tipo con la capucha - ese bastón es el que mantiene hipnotizada a toda la aldea... estoy segura al 5%.
Si subes a la tarima de Blancaflor seguramente la sepia venga a ti... pero... será mejor esperarla sin atar...- Verne saca a Asimov y las dos ranas - Bien equipo, el plan es el siguiente, los batracios, cabalgando sobre Asimov y tu hámster aprovechando su velocidad atraviesan la maraña de sectarios y saltan arrebatándole el bastón
Con el tipejo desarmado, entras en linea recta hasta llegar a la tarima.... ¿que tal? - Verne hablaba en cuclillas, estaba trasteando con hollín y un líquido amarillento que olía a orín bovino...
Motivo: alquimia
Tirada: 3d6
Resultado: 8
—Alto alto alto... ¿Me estás diciendo que si sacrifican a Blancaflor sus glándulas estarán más cargadas, y que con ello saldrá un mejor licor? —pregunto a Verne. De ser así... ¿Para qué salvar a la chica?
¡¡ Sí claro !! Las sepias son carnívoras, devoran bardos y otras alimañas para digerirlas y con ellas reciben nutrientes que van directos a las glándulas de donde tendré que sacar el licor, será.... más cantidad. Está chupado ya verás.
Verne se agacha para estar a la altura de los cuatro animales y de su hermano conejo - ¿Listos? - en sus manos una pócima cuyo vial empezaba a empañarse de oscuro, seguramente la suciedad del hollín, ya pugnaba por ser usado.
—Ah, pues entonces, dejemos que se la coma la sepia, y luego nos la cargamos. Así habrá más pimple, que es lo que importa —contesto a Verne mientras me bajo de mi hámster, para esperar a que la sepia la debore.
Verne se da cuenta entonces de su error.... - No no no, esto sale mal, maldito borracho....- Tenía que engañarlo, pero Verne no sabía mentir... más bien no podía, su extrema sinceridad le costaba gravísimas situaciones, pero para eso estaba su cerebro de coneja mutada, ella había conseguido escribir el número Pi, ella había conseguido encontrar el algoritmo neperiano que según la peripatética anotretica aristotélica explicaba toda la hermeneutica telúrica de MundoDisco... aunque los dejara en viejos infolios olvidados... ella ... tenía una solución.
El bastón Claus, tienes que conseguir el bastón, darle una paliza al tipo de los cuernos y ponerte su disfraz. Así serás amigo de la sepia, y podrás convencerla que devore a todo el proletariado sectario. Si los devora a todos, estoy segura que nadaremos en alcohol, y qué mejor si al final de todo esto es Blancaflor quien te sirve... tiene buen escote
—Uhm... —mascullo por un momento, mientras pienso en lo que la mujer-conejo me ha dicho—. Puede que tenga razón, hay más sectarios que princesas en apuros. Y alguien tendrá que servir el licor, y si tiene unos pechos más grandes que yo, mejor que mejor.
—Está bien. Conseguiré ese bastón —diciendo esto, me subo a lomos de mi hamster, para gritar— ¡A la cargaaaaaaa!
Mirando hacia todas partes voy guiándome por mi instinto, "Me gusta este lugar, es tan acogedor." Pienso mientras aparto las telarañas entre la vegetación y trato de no hundirme en el barro.
Veo una red en la que hay atrapados varios calamares voladores, o algo así... -¿Habrán pasado Claus y Verne por aquí?
Sonido de tambores llegan a mis membranosos oídos "Seguro que es por allí donde están las chicas". Sigo el sonido deslizándome entre la vegetación hasta llegar al lugar de dónde provienen.
Al llegar a la aldea, la chica se encontró con que había más gente como aquella que la llevaba en andas. Todos vacíos de expresión, parecían cáscaras sin alma ni razón. Pero a ella eso no le importaba, ella tenía que hablar con el líder.
Cuando la bajaron, con muy poco cuidado por cierto, algo digno de poner una denuncia en la sociedad protectora de animales doncellas en apuros, pudo ver que allí se encontraba la versión de Mundo Disco del mago de Oz... un tipo bajito y con voz aflautada que intentaba parecer imponente.
Ya iba a comenzar a negociar los términos de su captura, cuando la voz de sus compañeros la distrajo. Miró por sobre el hombro y divisó que por allí venían Verne y Claus. A bonita hora se les ocurre llegar! Bueh, más vale tarde que nunca. Resuelta a conseguir su rescate, decidió que lo mejor, era hacer tiempo.
-Buenos días no? es que su madre no le enseñó modales?- dijo al tiempo que ponía sus brazos en jarra y comenzaba a dar golpecitos con el pie. -No se de qué me está hablando. Si se refiere a esa terrible película, creo que se equivoca amigo... ¿acaso no ve que soy demasiado linda como para hacer de extra? Porque no salen personajes femeninos de relevancia. Bueh, por eso también el resultado del film... Pero me estoy desviando... aun no me saluda como es debido!
Te diriges hacia el ruido de los tambores, avanzando por los lodazales de los que se compone estas tierras. Pronto puedes ver las luces del pueblo de donde proviene tanto jolgorio.
Las casas del pueblo pantanero que empiezan a rodearte parecen sacados de uno de esos cuentos de terror que te contaban de pequeño, no puedes dejar de fijarte que la mayoría de ellos estan hechos de mal material y peor mano de obra, seguro que ha habido un patrono metiendo demasiada caña donde no debería. Quizás finalmente necesite alguien de tu sabiduria laboral. Todos los tipos que te encuentras por la calle parecen hipnotizados y solo murmuran incoherencias, incluso uno de ellos parece haberse quedado encallado intentantando traspasar andando una pared de una casa con bastante poco exito.
Blancaflor encara al tipejo de la sotana que le mira ceñudo desde abajo, mientrás que le apunta con el baculo y dice:- Vaya con que encima respondona, no sabes con quien te la ves niña.- Apunta con su baculo a Blancaflor y un rayo sale de la esfera haciendo que la mujer quede paralizada como si fuera un palo. Al parecer el pequeño jefe sectario (y por lo que se ve tambien hechicero) no se anda con melindres.
Claus avanza a la carga con su hamster solo, porque el conejo parece por como frunce la naricita, que piensa que vaya la muchacha con los batracios a cuesta si quiere, aunque ellos mismos deciden ir detrás del hamster, pero para vuestra sorpresa empiezan a gritar:- ¡Señor! ¡Intrusos!- El tipejo mira hacía pequeño hamster y parece que va a lanzar un hechizo, cuando escuchais el crujido de la madera al romperse una de las casas del pueblo, de entre los escombros aparece una enorme sepia del tamaño de una casa que os mira con ojos hambrientos, el jefe sectario se da la vuelta conmocionado al parecer no esperaba que todo se pusiera tan peliagudo...
Motivo: hechizo
Tirada: 3d6
Resultado: 10
Vaya panda XD...
Extraño pueblo, fijo que esta gente esta murmurando cosas de su trabajo, en el que irremediablemente no les dan ni vacaciones...voy a ver que puedo sacar en claro. Pienso mientras me acerco a uno de los tipos que murmura incoherencias.
-Buenas, ¿Está usted bien? ¿Le pasa algo? - digo al primero que encuentro mientras muevo la mano izquierda enérgicamente frente a sus ojos.
Se me cae el dedo meñique con el gesto.
-Oh, esto...disculpe. - Me agacho y lo cojo y comienzo a coserlo ahí mismo.
Terminado, vuelvo a mirar al tipo, intentando averiguar lo que le pasa.
Motivo: Psicología
Tirada: 3d6
Resultado: 12
He tirado psicología a ver si sé qué puede pasarle, si está estresado o deprimido o algo así.
Ignorando a las ranas (ya veré que hago luego con ellas), doy una orden a mi hámster, para que se lance contra el tipo del bastón.
Mientras éste le distrae sacándole los ojos y demás cosas amorosas que hace mi roedor gigante del espacio, ahora en miniatura; yo uso mi depurada técnica de Tsimo cósmica, para hacerle un nudo y arrebatarle el bastón. La sepia gigante debe de estar famélica.
Motivo: Lucha de Tsimo
Tirada: 3d6
Resultado: 5, 1, 2
¡GUAYÁ!
Verne empieza a mover la poción de hollín que hace unos minutos preparaba, saca el tapón y la prepara como si fuera una granada hacia el tumulto de gente.... porque claramente debía destaparse.... ¿O debía hacerse explotar con el tarro entero? ¿Tal vez tragar y escupir? Verne lanza lejos la poción, entre todos los sectarios, buscando disuadir a la multitud
El frasquito cae desde gran altura, pero el muy condenado aguanta sin reventar cayendo a los pies de uno de los sectarios que aún puede girarse y ver el tarrito de humo negro e inofensivo que hay a sus pies, distrayéndole del espectáculo que se va a formar en la gran tarima
Motivo: lanzar
Tirada: 3d6
Resultado: 9
No necesitas tener muchos conocimientos sobre la personalidad de las personas para darte cuenta de que el hombre con quien hablas no tiene ninguna, dirías que esta hipnotizado, aunque parece darse cuenta de tu presencia, el brillo de sus ojos te hace pensar que esta desvanecida sus reacciones(que serian la de gritar, huir o coger su guadaña, como has comprobado en viajes a pueblos similares). Tratar de averiguar algo de él seria como preguntar a una piedra, aunque la piedra quizás te hiciera más caso.
A lo lejos escuchas los gritos de tus compañeros, parece que están en la plaza del centro del pueblo donde está la hoguera gigante.
El pequeño jefe sectario dice solo una palabra mágica que hace que una pletina azulada se ponga alrededor suya como si fuera un huevo protector, haciendo que el ataque de Tsimo de Claus(y el aún más peligroso ataque de su hamster) reboten como si fueran unas pelotas cayendo dos metros atrás.
En tanto la poción de Verne explota haciendo que una bruma oscura se extienda cubriendo la vista de los ojos bovinos de los sectarios. El hombre mira irritado a los dos sapos y les grita:- Deberíais haber engañado a la mujer alquimista para que os besara y se convirtiera en un sapo como vosotros- La sepia gigante no parece hacer demasiado caso a la bruma espesa y avanza hacía la hoguera a la espera de conseguir su "sacrificio" (o más bien su tentempie convenido).
Motivo: escudo magico
Tirada: 3d6
Resultado: 7
Motivo: 2 escudo magico
Tirada: 3d6
Resultado: 5
El escudo de fuerza me ha pillado por sorpresa. Pero este tipejo no sabe que se ha interpuesto entre el gnomo alcohólico equivocado y la promesa de más alcohol del que puede beber en su vida.
Así, me acerco lentamente a él, y le digo— Vaya, bonito escudo de energía. Pero es muy poco práctico... Oye, ¿qué te parece si dejas la vara y el escudo a un lado, y nos vamos tu y yo a hacer cosas... "Interesantes"? Seguro que podemos sacar algo que valga para la secta —digo en tono melosón. Desde luego, no me va mucho el rollo, pero con que se quite el escudo, me vale.
Motivo: Seducir
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 2, 6
Saco la tirada. Ahora sólo queda saber si el tipo es julandrón o no xD
Bien! Parece que por fin voy a tener mi rescate en toda regla!
Blancaflor estaba más que satisfecha con el desarrollo de los acontecimientos. Se había desatado una batalla campal (bah, en realidad apenas era una pequeña escaramuza pero la chica no podia dejar de ver la situación con buenos ojos) entre sus aliados y el lider de los sectarios, mientras una sepia gigante se acercaba para complicar las cosas y unos sapos ¿feos? intentaban seducir a Verne.
Como ella no debía participar de su rescate, y no tenía palomitas a mano, optó por hacer algo que se le daba muy bien: gritar.
-SOCORRO!!! QUE ALGUIEN ME AYUDE!!! HÉROES!!! NECESITO HÉROES QUE ME RESCATEN!!!- sin fijarse a quién aturdía, la chica sacó todo el aire de sus pulmones. Si quería hacerse escuchar entre el fragor de la batalla, tenía que hacerlo bien.
Motivo: Gritar como una marrana
Tirada: 3d6
Resultado: 6, 4, 2
A ver si mis gritos ayudan un poco XD
Parece que no sacaré nada en claro...bueno, continuaré a buscar a mis compañeros.
Voy en dirección a los gritos rápidamente