Partida Rol por web

Renacer

Capítulo 2: El Mensajero

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01/11/2009, 00:01
Kate Davis

No entendía nada de lo que estaba sucediendo. Aún no había sido capaz de reaccionar ante la posibilidad de perder a Sara, que ya me parecía más una realidad que un cuento, así que mucho menos reaccioné con la información que me estaba dando fuera quien fuera aquel chico.

¿ Y si todo esto no había sido un accidente? Si alguien estaba tratando de prevenir a mi compañera era porque sabía que algo así iba a ocurrir y si así era, cabía la posibilidad de que hubiera sido intencionado.

Tenía que acudir a esa cita, pero aún tenía tiempo de sobra hasta esta tarde, así que ahora sí, me acerqué a uno de los guardias y le pregunté a ver si se conocían ya las víctimas, que era posible que mi compañera de piso se encontrara dentro del edificio.

 

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02/11/2009, 21:13
Director

El guardia te intenta tranquilizar. -Sea paciente, señorita. Ahora mismo los bomberos están haciendo todo lo que pueden. Ya estan removiendo algunos escombros.- Justo entonces se escucha un grito. Tú y el os giráis, mirando hacia los escombros. A lo lejos se escuchan voces, seguramente de los bomberos.

-"¡Supervivientes! ¡Hay supervivientes! ¡Ahí abajo hay alguien! ¡Rápido, traed la grúa! ¡Ayuda...!"- Cuando identificas lo que dicen te da un vuelco al corazón. ¿Y si es ella? ¡Sara puede seguir viva! Sin darte cuenta comienzas a correr hacia los escombros. Y nadie te detiene. Nadie puede hacerlo.

Nada más llegar ves a los bomberos, están hablando a gritos con alguien bajo unas bigas. Se escucha una tenue voz, es una chica. Los bomberos comienzan a retirar escombros con la ayuda de una grúa y varias herramientas. Nadie parece hacerte caso, están enfrascados en su tarea. Finalmente uno se mete bajo los escombros y saca a alguien...

...

...

¡¡Es ella!!

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02/11/2009, 21:18
Director

Al otro lado de la puerta consigues escuchar la conversación perfectamente...

-A... ¿Amelia? ¿Eres tú? ¿Qué haces aquí?- pregunta el hombre.

-Vete de aquí, Jimmy. No te acerques al chico.

-Sea cual sea la razón, y aunque seas tú la que custodia al chico, no puedes detenerme. Ya lo sabes...

-Sí, Jimmy. Sé que en cualquier momento podrías obligarme a hacer lo que quieras, pero también sé cómo contrarrestarte...- Escuchas como la señora Dawson da unos pasos rápidos, en ese instante comienza a sonar una música algo estridente, provinente de algún reproductor. Es música tirolesa.

La conversación comienza a oírse distorsionada. Pero consigues identificar algunas palabras de la señora Dawson.

-.... Música ... Interfiere ... Ondas ...

De pronto la puerta se abre, la señora Dawson se queda frente a ti. -¡Fred! ¡Corre, hijo! ¡Huye!- Te coje del brazo y te arrastra por la librería hacia afuera. Por el camino ves a un hombre tapándose los oídos, arrodillado en el suelo. Seguramente debido a esa música tirolesa que ha puesto la señora Dawson. No tardáis apenas segundos en estar fuera. -Fred, ya sé que es algo muy complicado lo que te pido, pero... Tienes que volar... Tienes que irte. Es la única manera de escapar. Pero no vayas a casa, no vayas a ningún lugar que conozcas. Vuela a la deriva si hace falta, pero no dejes que te encuentren.

La señora Dawson se gira, mirando al interior de la librería. Luego vuelve a mirarte. -¡Rápido! ¡Inténtalo! ¡Tú puedes, Fred! ¡Vuela libre!

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02/11/2009, 21:22
Kate Davis

A parte de por mi velocidad, estaba estresada, estaba totalmente acelerada y no podía dejar que la pasara nada. En cuanto el bombero tyvo a Sara en brazos, me decidí a acelerar su salida del edificio, no fuera a caérsele algo encima ahora mismo, que sólo me faltaba eso. Me acerqué al bombero rápidamente, lo más rápido que pude, agarré a Sara para que no se le soltara y luego agarré al bombero y arrastrándolos los saqué hasta dejarlos al lado de una ambulancia ( corriendo aún ), aunque según lo hice volví a salir corriendo hacia los escombros, quizás hubiera alguna persona más a la que poder sacar de allí, no quería que nadie se sintiera como me había sentido yo cuando pensaba que la había perdido.

- A parte de para hacer más rápido mi trabajo esto puede servir para algo útil. Debo ayudar, aunque con cuidado de no quedarme yo también ahí debajo..

 

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03/11/2009, 20:23
Director

Corres rápidamente, ayudando a los bomberos allá donde puedes. Apartando escombros, llevando a los supervivientes a la ambulancia... Nadie se pregunta el por qué de tu gran velocidad. No les importa, ahora mismo eres de gran ayuda. Dan gracias a Dios por tenerte cerca.

Después de unos minutos los escombros que aún se mantienen en pie ceden unos centímetros. Una pequeña brecha se abre entre un montón de bigas y hormigón. En su interior escuchas gritos de auxilio. No tardar en introducirte en la cavidad. Mientras avanzas vas reduciendo la velocida, temerosa de adelantar el derrumbamiento de lo poco que queda en pie. Después de andar durante unos segundos, finalmente, encuentras a dos jóvenes (un chico y una chica) atrapados. Nada más verte comienzan a pedirte ayuda a gritos. Pero los escombros vuelven a ceder un poco, no parece que el "techo" vaya a aguantar mucho antes de venirse abajo.

La chica lo tiene peor para escapar que el chico, aunque éste te dice que salves a la chica antes que a él. El tiempo se agota y debes tomar una decisión. Si usas tu supervelocidad harás temblar lo poco que queda de escombros y los derrumbarás... Quizá, ni siendo super rápida, se puede salvar siempre a todo el mundo.

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03/11/2009, 20:40
Kate Davis

Traté de ahcer lo que pude en esa situación, pero la cosa se me complicaba y no podía hacer más. Ni siquiera había recibido un entrenamiento para hacer esto y cualquier lugar que pudiera pidar podría servir para hacer que todo lo que teníamos encima de desplomase más rápido.

Las vigas dejaban caer arenilla a mi alrededor, cada vez en una mayor cantidad, dejando claro,que no iban a tardar en ceder del todo y que teníamos que salir de ahí cuanto antes, pero la siguiente escena que vi me conmovió totalmente. Eran dos chicos jóvenes, él diciéndome que la sacara a ella, pero sacarla iba a suponer demasiado esfuerzo y nos abía si iba a tener el tiempo suficiente para hacerlo. Tampoco es que pudiera correr en esta situación, ya que podía conseguir que en vez de que murieran ellos dos muriéramos los tres aplastados y salvar a la gente tenía una linea, aunque no demasiado clara, de cuánto estaría dispuesta a arriesgar para hacerlo.

- Tienes que intentar sacarla de ahí, si no lo haces morirá, pero si no te da tiempo, el techo de este edificio será tu lápida y así con la coña, una preciosa y enorme lápida de piedra.

Supongo que tenía que intentar hacer lo que cualquiera en mi situación: tratar de sacar a la chica de ahí y luego, corriendo un gran riesgo, usar mi velocidad para sacarlos a los dos a la vez, a riesgo de que no me diera tiempo a salir de ahí.

Sin volver a pensármelo para no cambiar de idea un instante después, puse en práctica mi " tan elaborado " plan.

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03/11/2009, 22:41
Frederick Gündell
Sólo para el director

Atemorizado a más no poder, intento recordar como conseguía levitar.... como mi imaginacion volaba y el cuerpo iba tras ella... pero en un primer momento el miedo me bloquea.

Miro a mi alrededor e intento calmarme. Poco a poco noto la sensación de flotabilidad... mis pies poco a poco se eleban unos centimetros del suelo... pero sigue sin ser suficiente. No se como moverme, nunca habia volado conscientemente. Quizas no podía... quizas solo era capaz de levitar levemente...

Pero no puedo rendirme. No cuando la Señora Dawson a confiado en mí.

Poco a poco me elevo más y más... poco a poco mi cuerpo sigue a mi imaginación... los pulmones se me llenan tanto de aire que me siento como un globo.

¡ Estoy volando !

Notas de juego

No se si esta bien, o tengo que hacer alguna tirada o algo, ya me indicarás. Si no edito y ya esta.

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04/11/2009, 20:37
Director

La chica respira agitadamente. Con todas tus fuerzas intentas remover el peso que hay sobre ella. Entre jadeos consigues liberar parte de su cuerpo, pero aún sigue atrapada. Su pie está encallado entre hormigón y barras de hierro. La joven comienza a chillar, histérica. El chico intenta tranquilizarla con su voz. -Cálmate, por favor, no chilles más. Al final me pondrás histérico a mi tambén...

Finalmente la chica se tranquiliza y comienza a llorar en silencio. Tú haces lo que puedes para desatascar su pie. Parece que está encallado entre dos barras de hierro entrecruzadas. Está completamente encajado, y forcejeas durante unos segundos para liberarla. Finalmente lo consigues, pero su pie acaba algo lastimado. Te apresuras a intentar liberar al chico. Él se queja y te dice todo el rato que te lleves a la joven, que vuelvas a por él después. No deja de repetirte. -Salva a mi hermana primero... Sálvala a ella, por favor.

No sabes que hacer, el chico se resiste a ser liberado. En ese momento llega, por poco creíble que parezca, un mensaje en el móvil de Sara. Ya ni te acordabas de que lo llevabas encima. No tardar en mirar el mensaje, es del número del chico que te ha llamado antes. En el mensaje pone claramente. "Llévate a la chica, si esperas para liberar al chico moriréis todos. Lo he visto. Salva a la chica, ella debe ayudarte a llegar a tu destino."

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04/11/2009, 20:50
Director

La sensación de ligereza es increíble. ¡Estás volando de verdad! La señora Dawson sonríe por unos instantes mientras te elevas en el aire. Entonces te grita desde abajo. -¡No vayas a ningún lugar conocido! ¡Déjate llevar! ¡Llegarás a dónde tienes que llegar! ¡Confía en mí!

Después de unos segundos los gritos de la señora Dawson ya casi no se escuchan. Cuando te das cuenta, ves un montón de nubes a tu alrededor. No puedes evitar tambalearte un poco por el nerviosismo que conlleva todo esto. ¡Estás flotando en el cielo! ¡Puedes volar! Miles de pensamientos pasan por tu cabeza. ¿Hacia dónde vas ahora? ¿Qué quería decir la señora Dawson con dejarse llevar?

Sin darte cuenta te ves envuelto en una corriente de aire, que parece impulsarte hacia una dirección. Decides encararte hacia allí. Como si tu curioso "don" te acatara dócilmente, notas como el viento comienza a darte en la cara mientras tu velocidad aumenta. El sol se está poniendo, el cielo se tiñe de escarlata...

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04/11/2009, 21:02
Kate Davis

Era demasiado peso, demasiado difícil. Estaba sudando más que cuando me vi debajo de las ruedas de aquel coche a punto de ser atropellada. La situación era demasiado tensa y no sabía que hacer. No quería tener que elegir entre salvar a uno y salvar a otro, eso no tenía que ser decisión mía.

Saqué el móvil de nuevo. - ¿ Pero cómo coño que lo ves? No me jodas!! - Pensé al leer el mensaje, aunque por alguna extraña razón, estaba convencida de que tenía que hacer lo que me decía, después de todo, había ayudado a Sara.

Mirando al chico y haciendo caso omiso de lo que se quejaba la muchacha dije: - La sacaré primero a ella, pero pienso volver ahora mismo a por tí..

Y sin pensármelo dos veces, porque si me lo llego a replantear seguramente me hubiera quedado parada sin hacer nada, saqué de allí a la muchacha y luego miré al edificio para comproar si podía volver a acceder a él y sacar a su hermano.

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05/11/2009, 20:28
Director

En algún lugar...

El joven había enviado su último mensaje. No tenía más tiempo para guiar a la chica pelirroja. Se guardó su móvil y se preparó para salir. Mientras se duchaba cerró los ojos de nuevo, y vio lo que estaba por venir. Sonrió, satisfecho consigo mismo. La Corporación no se lo habría pensado dos veces. Habrían salvado al chico y habrían dejado a la hermana tirada. La verdad es que sus intereses eran los que los movían para hacerlo todo. Los agentes ya se encargarían de sacar al chico de bajo los escombros antes de que se derrumbasen del todo. Por suerte todo había salido bien.

Respiró hondo antes de salir de casa. Había soñado también lo que iba a pasar ahora. Hasta hace unos años nunca se había mostrado frente a algún agente corporativo. Además, esa noche iba a recibir un balazo en el hombro...

 

Kate, Brooklyn...

Observas, desesperanzada, como lo que queda de escombros se viene abajo, sepultando seguramente al chico. Ahora ya no había nada que hacer, seguramente lo encontrarían muerto... La muchacha está llorando desconsolada. No deja de gritar una y otra vez. "¡Hermano! ¡Hermano, no! ¡No puede ser! ¡Sálvale!" Pero ya es demasiado tarde. Llevas a la chica a una de las ambulancias, que por casualidad es la misma en la que está Sara. Te subes en ella, para hacerle compañía. Y miras por la ventanilla trasera el triste montón de escombros que yace sobre el suelo. Se ha acabado el hacerse el héroe...

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05/11/2009, 20:41
Kate Davis

La verdad es que me había sentido frustrada mirando al edificio. No había podido hacer nada por el pequeño y ver el dolor de la pequeña me encogía el corazón. No podía evitar esa punzada de culpabilidad por no haber podido sacar al joven, aunque sabía a ciencia cierta, que no podía haberlo hecho aunque quisiera.

Ahora es cuando comenzaba a comprender esa frase de " Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad ", lo que no sabía era si mi últimamente mermado estado de ánimo iba a poder soportarlo.

Subí a la ambulancia y solté un sonoro suspiro, tras dejar a la pequeña para que la examinaran ese pie. Me acerqué a Sara y sonreí por verla viva. Me resultaba todo un alivio, sobre todo, cuando estuve un rato creyendo que la había perdido, así que terminé soltando lágrimas de alegría..

- Estás bien? - La pregunté sin querer decirla nada sobre lo del móvil, ya que no quería preocuparla tras haber pasado lo que acababa de pasar..

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05/11/2009, 22:14
Frederick Gündell
Sólo para el director

Quien me iba a decir que podría hacer realidad uno de los mayores sueños del hombre.

Refllexiono sobre las palabras de la señora Dawson. La verdad es que pudiendo volar, mi inquietud viajera se dispara hacia mil lugares...

Me gustaría subir a la punta del Empire State o quizás a la corona de la estatuta de la libertad.

Pero he de hacer caso a la señora Dawson y dejarme llevar, sin marcarme un rumbo, solo distrayendome levemente con la compañía de los pajaros.

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06/11/2009, 21:44
Director

La ambulancia avanza a toda velocidad por la calzada, en dirección al hospital. El conductor activa la sirena, haciendo que todos los coches se vayan apartando a su paso, no hay tiempo que perder. Una paramédica se encarga de la joven a la que has salvado.

Sara yace, débil, sobre una camilla. Sólo abre un poco los ojos, para mirarte. Con un esfuerzo por su parte consigue hablar. -Bueno... Creo que hoy no es mi mejor día...- Cierra los ojos durante unos segundos. -Ay, eso duele...

Te fijas en que lleva vendado todo el torso y la pierna derecha. -Podría estar mejor... ¿Qué tal tú?

En ese momento el conductor da una noticia -¡Ya estamos llegando!- dice en voz alta. Parece que el hospital está cerca...

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06/11/2009, 21:48
Director

Vuelas raudo por el cielo, dejándote llevas por las corrientes de aire. La sensación es indescriptible. Como si de un águila te trataras, surcas el cielo estrellado mientras la luna te ilumina. Cierras los ojos, sintiendo el viento que golpea tu rostro, produciéndote una gradable sensación.

En este momento, la expresión "Estar en el mismísimo cielo" sería aplicable. Sonries mientras avanzas, y planeas, y comienzas a descender, y a descender... y a descender más... Cuando te das cuenta te encuentras cayendo en picado Nueva York misma. Nadie parece fijarse en ti, pero el suelo comienza a acercarse. Después de unos segundos comienzas a divisar tu trayectoria, parece que vas a caer sobre Central Park...

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06/11/2009, 22:43
Kate Davis

A pesar del deplorable estado de Sara me alegraba muchísimo de que siguiera viva, y esperaba con toda la esperanza de la que era capaz, que saliera adelante de esta. No quería demostrar lo preocupada que estaba por su estado y mucho menos decirla lo del extraño que mandaba mensajes. En aquel preciso momento lo único que importaba es que estuviera tranquila y se recuperara.

Mostré una sonrisa al ver como hablaba, al ver que seguía con humor a pesar de lo ocurrido.

- Sí, la verdad es que estás como cuando te levantas de resaca, hecha un asco. Pregúntale al médico que te atienda si ya que te va a pasar la revisión puede arreglarte también esa cara, ya sabes, aprobecha el viaje.

Intenté bromear para hacer que se sintiera mejor y más tranquila, era mi deber como amiga hacerlo.

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07/11/2009, 21:03
Director

Sara sonríe cuando bromeas. -Ahora que lo dices, aprovecharé para hacerme una revisión completa de todo, ya que estamos. Hace mucho que no voy al médico...

Finalmente la ambulancia llega al hospital, las puertas traseras se abren rápidamente. Te ves obligada a bajar y apartarte mientras llegan enfermeros y ponen a Sara y a la otra chica sobre camillas. Cuando se las llevan a su interior tu sigues rápidamente la camilla de Sara. Finalmente pasan por una puerta por la que no te está permitido pasar, así que te sientas en una silla en la sala de espera. El corazón aún te late desbocado, demasiadas emociones fuertes para un sólo día.

El tiempo pasa lentamente, y cada segundo se convierte en una eternidad. Al final acabas mirando al vacío, inmersa en tus pensamientos. Después de un buen rato sale un enfermero, y te dice que han conseguido estabilizar a tu amiga, aunque aún no puedes verla. Por mucho que lo intentas, el enfermero se mantiene firme, y no te deja pasar. -Tu amiga necesita reposo, unas cuantas horas de descanso le vendrán bien.

No puedes evitar pasar todo el tiempo en el hospital, sales un momento a comer, pero luego vuelves para intentar ver a Sara. La cosa sigue igual. Al final te quedas dormida sobre el banco de la sala de espera.

 

-Biiip ... biiip ... biiip ..- Un sonido electrónico te despierta, el móvil de Sara ha recibido otro mensaje, del número del "Mensajero". "No olvides tu cita." dice el mensaje. Miras la hora y son las 19:18. Algo en tu cabeza hace "click", y de pronto recuerdas lo que te dijo el chico hace unas horas. "Pero necesito que esta tarde, a las 19:27, vayas a Central Park, en Nueva York. Ya sé que puedes correr... Es tu destino."

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08/11/2009, 01:22
Kate Davis

Ya no sabía si era por todo lo que estaba sucediendo, por los nervios de ver así a Sara o por haber tenido que correr tan rápido con tanta tensión en aquellos escombros, pero estaba nerviosa y ya no tenía uñas en las manos para moderme sin arrancarme un cacho de dedo..

Estuve atenta a cualquier cambio en el estado de Sara, y sin saber por qué en el de aquella niña, preguntándome aún qué es lo que habría querido decir el tipo con aquel mensaje. Aún me sentía mal por no haber podido ayudar a su hermano y me preguntaba si la muchacha podría perdonarme algún día por haberla sacado a ella y no a él.

El móvil volvió a sonar y lo abrí sin recordarque era aquel hombre el que estaba mandando los mensajes continuamente. Debía averiguar qué es lo que quería. Dejé a Sara en el hospital, poniendo la escusa de que las enfermeras me habían dicho que tenía que descansar y que volvería algo más tarde a verla y luego salí del edificio, para volver a echar correr, intentando llegar a aquella hora tab extraña Central Park.

Mientras corría, por mi mente pasaban desde preguntas lógicas hasta pensamientos extraños.. como " ¿ Quién coño queda en un sitio a y 29 y no a y media? "..

 

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08/11/2009, 12:02
Frederick Gündell
Sólo para el director

Parece ser que el sueño se acaba... Empiezo a perder ligeramente el control y voy directo al verde cesped de Central Park.

Miro a mi alrededor una y otra vez y recuerdo las palabras de la señora Dawson. Espero que nadie me vea aterrizar. Si alguien me ve se armaría un gran revuelo y no me vendría nada bien.

Aunque quizas ese no sea el mayor de mis problemas... voy directo al suelo y con la velocidad que llevo puede que no lo cuente.

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09/11/2009, 21:25
Director

Kate

El cielo ya se ha tornado oscuro. La luna brilla en el cielo, iluminando algo lúgubremente la ciudad.

Corres sin parar. El mundo parece enlentecerse a tu paso. Notas como avanzas a gran velocidad entre el gentío, el tráfico... Por donde pasas vas dejando una estela de viento, que vuela todos los papeles cercanos, y provoca rafagas de aire. Parece un milagro que la fricción no te afecte lo más mínimo. Ni siquiera sientes molestia alguna en tus ojos por el aire que choca contra tu cara. El mundo es tuyo...

Después de escasos minutos llegas a Central Park, no llegas a detenerte del todo. Y, muy sorprendida, ves como alguien cae del cielo. Justo a donde vas a ir a parar.

 

 Frederick

Ya hace un rato que has comenzado a caer. Como por arte de magia, el milagro se ha desvanecido, y ahora eres un peso muerto que se abalanza sobre el suelo. El aire te golpea fuertemente mientras intentas, en vano, retomar el control. Las luces de la ciudad comienzan a difuminarse para tus ojos, y el verde césped es cada vez más cercano. ¿Es este el final? ¿Así se acaba todo?

No te da tiempo a lamentarte pues a lo lejos, ves algo que se desplaza a gran velocidad por el parque. Algo que se acerca al lugar donde vas a caer.