Partida Rol por web

THE WALKING DEAD EUROPA

Capítulo III: Sobreviviendo

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29/08/2014, 07:09

  **  Noche **            

                 Viajaron con el jeep hasta que la gasolina menguó. Salieron corriendo los últimos metros. A María la llevaba Hernesto en brazos, porque la niña no podía correr lo suficiente. Tras ellos, muertos, saliendo de casas, oliendo la carne fresca. Pero estaban a dos cuadras de Antonio, y fue él, quién, por lo mismo, los guió, encabezando la escapada.

                Era ya entrada la noche cuando consiguieron dar con la casa.

                Antonio vive en una casa de dos, una casa vieja pero no descuidada. Desde que ha iniciado la infección ha tenido la inteligencia para convertir a su morada en una pequeña clase de fortaleza. Las ventanas han sido surcadas por barrotes de hierro, se ha tapiado la entrada por el patio frontal y el trasero y alumnos le han provisto de elementos para su defensa.

            Era ella, era su morada, y dentro lo esperaba su nieto. Así que apuró al resto. Charlie se había quedado en la retaguardia con Eva, ambos se fijaban que los muertos quedaran atrás. Alberto corría por la mitad, aunque a veces retrocedía para ayudar a ese par y otras se adelantaba para auxiliar a Antonio si es que lo precisaba. Respecto a Marcos, él estaba delante, corriendo con el hombre de bigote y mirada inteligente.

            Llegaron, Antonio abrió la puerta que daba al patio interior y todos pasaron. La cerraron justo a tiempo para evitar que unas cuantas manos y brazos se colaran. Los caminantes se ponían peor a la noche. Pero ahora estaban a salvo, y dentro, el pequeño nieto Raúl, tenía que estar esperando a su abuelito.

Notas de juego

Nueva escena, chicos. 

=)

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01/09/2014, 13:51
Marcos Amancio Álvarez Lobo

Una vez dentro de la casa me apoyo contra la puerta cerrada para recuperar el aliento, inspirando profundamente, antes de continuar con la marcha.

- Eso ha ido por los pelos. Demasiado para mi gusto. - Digo con la voz entrecortada.

Cuando me recupere, voy a examinar tanto la situación del patio como del resto de la casa de cara a ver como está de protegida y si tenemos más de una vía de salida en caso de apuro. Quiero comprobar la altura del muro y si hay alguna forma de echar una ojeada por encima del mismo para observar la calle.

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05/09/2014, 02:53
Raúl

                De pronto se acercan al frente de la vivienda. Antonio golpea y dice “Raúl, soy yo… el abuelo”. Pasan unos minutos pero al hombre le parecen horas. Todos, por unos instantes, piensan en qué opción tendrían de salir escapando si las cosas salieron realmente mal; más, en el corazón del pobre hombre, lo único que perdura es una angustia infinita. Si algo le ha pasado a Raúl…

                La puerta se abre, un niño pequeño, de unos diez años, sale corriendo y se echa a brazos de Antonio, sin siquiera prestar atención a los demás. Sus ojos están llenos de lágrimas.

                -Abuelo!!! Abueloo!! Yo sabía, yo sabía que ibas a venir. Yo sabía abuelo, yo sabía…

                Quizás conmovida demasiado por el hecho, Eva se lleva una mano a la cara, secando unas lágrimas que comienzan a descender por sus mejillas. María le da un abrazo. Eva devuelve otro. Evidente es que la antigua ladrona y la niña son muy unidas.

                -Vamos adentro –dice Antonio cuando recupera la compostura. Afuera es peligroso aunque están protegidos por una cerca, lo mejor es entrar en la casa. Lo hacen sin dilación. Cierran la puerta tras de sí, es hora de relajarse.

                -¿Son tus amigos, abuelo? Yo soy Raúl. Hola

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05/09/2014, 23:03
Marcos Amancio Álvarez Lobo

Cuando la puerta se abre dejo de examinar la zona y me acerco para entrar, haciéndolo el último y asegurándome de que la puerta queda bien cerrada a nuestra espalda.

Una vez dentro me voy a un lado, manteniéndome en un segundo plano, esta es una situación emotiva para Antonio, por ello creo que lo mejor es darle un poco de espacio.

Intento memorizar el entorno de cara a examinar nuestras opciones para poder movernos, tanto por la casa como por los alrededores. Si la situación se alarga más de la cuenta, comenzaré a moverme para examinar la casa a mi aire.

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13/09/2014, 22:53
Alberto

Subo hacia la casa de Antonio no sin antes manipular el vehículo quitándole los cables de encendido y quitando los tornillos de los bornes de la batería. No es algo que lleve mucho tiempo de arreglar, pero si el suficiente como para que nadie piense en arreglarlo habiendo cosas de esas merodeando.

Entro por la puerta mientras el pequeño y su abuelo se dicen lo que se tengan que decir y luego respondo después de que se presente. Hola Raúl, yo me llamo Alberto.

Inspecciono el lugar mientras espero que Antonio tome la iniciativa y nos ponga un poco al corriente, quiero asegurarme de si merece la pena perder el tiempo aquí o es mejor que me vaya buscando una alternativa como almacén y refugio de reserva.

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15/09/2014, 15:21
Carlos (Charlie)

Había entrado entre medias del resto y jadeaba, no estaba acostumbrado y el traje no era el mejor atuendo para correr. Uno de estos días debería conseguir ropa mas cómoda. 

 

Tras ver al chico, me alegré, parecía que Antonio era tal y como parecía, un buen hombre que tenía alguien al cuidado, algo digno de admirar. Pero eso me hizo recordar a Laura, la cual estaba lejos de nosotros ahora, haciéndome preguntar si estaría bien. Solo fue una decima de segundo lo que duró la cara de preocupación en mi rostro para no alertar al chico.

 

-Hola Raul, yo me callo Carlos. ¡Vaya, eres todo un valiente, defendiendo el fuerte!

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16/09/2014, 03:34

            Los compañeros de Antonio ven un poco mejor la situación de la casa: las ventanas han sido surcadas por barrotes de hierro, se ha tapiado la entrada por el patio frontal y el trasero. Dentro de la misma hay armas de defensa, proveídas por uno de los alumnos de Antonio. Lo que había dejado fueron: dos dagas imitación del siglo XV, una espada de dos manos y dos escudos de madera. 

                Antonio, antes que nada, recordó lo de la comida. Sacó sus provisiones y le pasó dos paquetes de galletas a Raúl. –¡¡Abuelo, gracias!! –dijo él con los ojos como platos. 

                -Gracias a vosotros por haberme traido mi abuelo de nuevo. No soy un valiente, sólo, sólo que no quiero irme a ese otro lado todavía. Donde están mamá y papá.

                Antonio les aseguró a los hombres que esta era una fortificación sólida y así parecía. Hasta Eva asintió gustosa del lugar. Pero era cierto el problema de los que quedaron atrás, como Laura o los otros vecinos de la ex ladrona.

                -No podemos quedarnos mucho. Tenemos que llegar al hospital, así que yo partiré mañana temprano. Quien quiera que me acompañe.-Mientras Eva hablaba, Alberto se disponía a revisar el lugar. Antonio lo autorizó a ello: había dos dormitorios, un baño abajo y otro en la primera planta, una sala de estar, una cocina comedor bien amplia, un cuarto de trastos y hasta un patio trasero con jardin y un asador. Todas las ventanas estaban aseguradas de verdad, era una pequeña fortaleza. El viejo no había mentido.

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16/09/2014, 13:03
Marcos Amancio Álvarez Lobo

- Dado que el lugar parece seguro, tal vez lo mejor sería aprovechar para dormir y descansar antes del viaje de mañana. - Digo mirando a Eva y a los demás. - Mi única duda es si hacemos guardias, el ruido ha podido atraer a algunos de los caminantes hasta la zona.

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19/09/2014, 01:54

                -Os puedo asegurar que ningún caminante podría entrar aquí –explica Antonio –pero sí podrían hacerlo o intentarlo personas, así que no veo mal lo de la guardia.

                Eva asiente a la opinión, ella siempre ha sido desconfiada de los hombres, sobre todo cuando era una ladrona de cosas de valor (nunca le robó a alguien pobre, lo suyo eran los grandes tesoros y eso). Hernesto se sienta en uno de los sofá y dice que también está de acuerdo.

                -Son ocho horas para cuidar, y somos seis adultos. Podemos hacer dos horas cada uno sin inconveniente –dice. Raúl mientras le sirve también algo de tomar a María. Los niños se sienten felices de conocer a otro de su edad, es un alivio.

                -Vale –comenta Eva –estoy de acuerdo. Y mañana iré al hospital y luego volveremos por los otros si es que hay algo bueno allí para ayudarnos. “Si es que aun están vivos”, pensó pero no lo dijo por cariño a la pequeña.

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19/09/2014, 12:30
Marcos Amancio Álvarez Lobo

- Yo estoy de acuerdo, como es lógico. ¿Alguna preferencia en el orden?

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20/09/2014, 08:02
Alberto

Parece que la historia del viejo era verdadera, y ya era tener valor para contársela a desconocidos. No sólo el hecho de tener un refugio preparado contra los caminantes al cual cualquier malnacido podría y querría para sí mismo, sino además el hecho de tener allí un niño pequeño al que su misión principal es proteger. No tengo claro si es que estaba desesperado, o simplemente está tan loco como cualquiera que llevamos vivos hasta la fecha.

Una vez recorrida la casa, me siento al lado de Hernesto, en el sofá contiguo; no disimulo el hecho de que aquel hombre callado, atento y dispuesto de mi lado me caía bien. Es el tipo de hombre que querría junto a mi en estos momentos.

Tenemos muchas cosas que hacer y poco tiempo, pero es verdad que necesitamos descansar. Empiezo diciendo en voz alta para quien quiera escucharme. Tenemos que organizarnos, y dividirnos, no podemos ir todos al hospital y aún menos con los niños; hago énfasis a esta última palabra mientras miro a María sin pestañear. Entiendo como se siente pero es demasiado peligroso, hago acopio de la promesa que me hizo antes de abandonar el otro lugar mientras hago un inciso con ella mientras sonrío antes de continuar. ¿No podemos permitirnos perderte y que tu padre se enfade no?

Tenemos que aligerar nuestras mochilas para poder seguir cogiendo cosas en nuestro camino, siendo esta casa tan segura como parece, aquí no es mal lugar para dejarlas.
También tenemos que dejar a alguien aquí protegiendo a los niños y la casa, no podemos permitirnos dejar a más de una persona, y más vale que esa persona sea confiable... digo esta última frase con cierto tono amenazante... si me la juega, tengo claro que les doy de comer a esos bastardos sesos de traidor.
Gasoil, necesitamos reabastecer el vehículo para poder volver a buscar al resto que se quedó en el otro lugar, y si es posible, recoger toda las provisiones que quedan en ese almacén
Tenemos que asegurar las cercanías de la casa y explorarlas, seguro que en estos bloques de pisos hay cosas que podemos necesitar, también con las tiendas y demás locales
Y por último y no menos importante, necesitamos llegar hasta las cercanías del hospital para ver como está la cosa; y a ser posible buscar al padre de María y recoger cuanto podamos necesitar.

Como véis, sólo somos 6 personas para llevar a cabo todo esto, por lo que creo que tal vez tengamos que priorizar necesidades, ir al hospital más de 4 personas creo que sería un suicidio, hay que conseguir ser una unidad móvil pequeña y eficiente para pasar desapercibidos. Tal vez incluso podríamos ir al hospital y a recoger gasoil un mismo grupo y separarnos en algún punto, o simplemente ir de forma que estemos separados pero a la vez juntos por si es necesario apoyo.

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22/09/2014, 01:47
Carlos (Charlie)

Había estado callado todo el tiempo. Parecía que el plan estaba mas que listo y Alberto había expuesto uno muy elaborado. Desde luego que tenía ganas de ser el que se quedara al cargo de los niños, pero no iba a ser yo el que lo dijera ni lo propusiera. Ademas... También tenía ganas de ir al hospital y buscar algo que ayudara a Laura... ¿Como estaría en ese momento? El recuerdo me puso melancólico y preocupado, pero intenté disiparlo con la cabeza y cambié mi expresión lo mas real posible.

 

-Bueno bueno, cualquier opción es válida para mi, pero todos nos conocemos desde hace poco. ¿Como sabemos quien es de fiar?... Eso es un problema... 

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23/09/2014, 01:41
Hernesto

                Hernesto toma la palabra. –Sobre fiar creo que ya nos hubiéramos matado al entrar aquí y ver una fortaleza custodiada por un niño –mira a todos con seriedad –conozco  a las personas y en estos tiempos es fácil ver a los hijode –se interrumpe por Raúl y María, pero todos entienden el mensaje –creo que todos somos confiables. Ahora sobre los cuatro del hospital; me siento capaz y conozco al padre de la niña. Eva, tú eres una mujer. Deberías quedarte con los niños.

                -Una mierda con que te hayas sentido ahora machista, Hernesto. Te recuerdo que me dedicaba a robar Bancos, museos, yo sé abrir cualquier cosa- dice Eva con cara de pocos amigos.

                -Es un hospital, no habrá cajas fuertes.

                Hernesto continúa –voto por ir al hospital yo, Charlie, el calvo aquí y Antonio. A menos que el señor quiera quedarse con su nieto.

                -Yo quiero ver a mi padre…-empieza a decir María entre sollozos.

                -Lo traeremos aquí, te lo juro –le contesta el hombre. -¿Ahora, os parece bien así? El gasoil lo podríamos recoger de camino, digo yo…

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23/09/2014, 23:02
Marcos Amancio Álvarez Lobo

Miro a Hernesto mientras habla y me sonrío cuando intenta que Eva se quede atrás. Espero a que terminen antes de decir:

- Como ya dije antes, tengo intención de ir al hospital, tanto para buscar al padre de María como por otros motivos y, la verdad, creo que Eva sería mucho más útil que usted en esta situación, ya que ella saber ser sigilosa.

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25/09/2014, 19:53
Alberto

Abro los ojos sorprendido cuando oigo por primera vez la voz de Hernesto, que sea para algo más que presentarse, pues hasta ahora se había quedado a la espera de nuestras decisiones. Su mirada seria junto con su rostro duro y marcado le dan un aire carismático embelesador, confiable y seguro; aunque eso no quiere decir que su juicio sea correcto diga lo que diga.

Estoy atento a los cambios de palabras entre él y Eva, al igual que la intervención de Marcos, los silencios del resto y las tristes palabras de María. Mientras ellos discuten yo me levanto del sofá y me dirijo hacia la niña, y una vez a su lado pongo mi mano en su cabello, acariciándolo mientras la miro orgulloso por su decisión, seguro que en el futuro será una gran mujer, y yo me aseguraré de que tenga ese futuro.

He de decir ante todo que no conozco las habilidades de los aquí presentes, tal vez exceptuando las de Eva dichas por ella misma. Pauso antes de proseguir mientras miro a Hernesto. Debo entender, viendo que tienes un rifle y que no parece temblarte el pulso a la hora de manejarlo que sabes lo que te haces con él, bien. Pauso nuevamente mirando a la niña, sonriente, para volver la mirada al grupo, sin que sea nadie particularmente.

Mi opinión sobre como repartirnos difiere un poco de la de Hernesto. A mi juicio, esta pequeña gran mujer que tengo a mi lado, es la persona indicada para mantener este refugio intacto, limpio y ordenado, junto al valeroso Raúl; os necesitamos a ambos aquí para tener todas las cosas ordenadas por si necesitamos huir de aquí en cualquier momento, pauso mirándolos a ambos, interpretando un poco para que ellos vean, o al menos crean ver, el papel crucial que desempeñarán en mi plan, aunque en el fondo sea una burda excusa para que se sientan importantes y accedan sin patalear al pedido. Es una tarea vital para la estabilidad de todo el grupo, es una gran responsabilidad que os doy porque confío en vosotros, les añado guiñándoles el ojo.

Hernesto por su parte, y sin dudar ni por un momento que tus capacidades son tan o más aptas que el resto de nosotros para infiltrarte en el hospital, creo que serías el más indicado para vigilar la periferia del refugio y para mantener a los pequeños a salvo. Antonio no es excesivamente ágil, digo con un tono neutro, sin intención alguna de menospreciarle, pero es listo, tiene experiencia y conoce las cercanías de su casa, creo que es el indicado para explorar, junto con Hernesto si es menester las cercanías y asegurar el refugio y ampliándolo de suministros tanto como sea posible. Hago un nuevo parón mirando uno por uno a todos los presentes. Por lo que el grupo que va a ir al hospital parece que queda en Eva, Marcos, Carlos y yo. En caso de que necesitemos separarnos para recoger gasoil, creo que Eva y Marcos podrían encargarse del hospital mientras Carlos y yo nos dedicamos a la recolecta, aunque creo que no tendremos opción de separarnos una vez llegados al hospital.

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26/09/2014, 22:55
María

                María escucha a Alberto y sus ojos cambian de la expresión de pena a una de alegría, y hasta orgullo.

                -Yo, yo me me encargo de mantener todo en orden. –Dice con una expresión imperturbable que hace que hasta Eva sonría. Raúl, por su parte, se contenta con que su abuelo se quede, ya no quiere separarse de él. Este día le pareció eterno, aunque está preparado para todo, pero su abuelo es lo único que le queda.

                El planteo del calvo es simple pero puede que efectivo: Charlie, Marcos, Eva y él mismo irían al hospital. Mientras tanto el viejo se quedaría junto con Hernesto junto a los dos niños. El hombre de ojos azules no parece tener problema con el plan y da un asentimiento de cabeza. Ahora hay que ver si Charlie y Marcos están de acuerdo y descansar, puesto que mañana empieza el apocalipsis.

 

… Una vez más…

Notas de juego

Si no hay objeción el martes separamos los grupos. Marcos, Charlie, Alberto y Eva al hospital.

Se quedan en casa: María, Raúl, Antonio y Hernesto.

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27/09/2014, 13:18
Marcos Amancio Álvarez Lobo

Asiento ante los comentarios de Alberto, antes de decir.

- Totalmente de acuerdo. 

Después busco un sitio tranquilo donde poder recostarme y descansar algo antes del viaje.

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30/09/2014, 03:58
Carlos (Charlie)

Me senté en el pollete de un sillón mirando al suelo. ¿Estaba preparado para esto? Posiblemente nadie lo estaba, pero parecía que todos estaban decididos y dispuestos. No había manera de plantearse el panorama que no fuera el de que había que ir, y ya puestos sacar los mejores pensamientos posibles.

 

Vamos vamos Charlie... Fijo que vuelves

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30/09/2014, 18:03
Eva

                  Hicieron guardias como se lo habían propuesto aunque sea por las dudas. No tanto debido a los caminantes, ya se sabía que no podían ingresar, que la casa de Antonio era una fortaleza, sino por los vivos. La gente podía estar más loca que los muertos y ninguna fortaleza era inmune a un grupo de locos, por ejemplo.

                 La mañana llegó con un sol amarillento asomando por entre las ventanas de barrotes. Se despertaron y desayunaron. Maria estaba entusiasmada hablando con Raúl. Eva se encontraba concentrada en lo que iba a hacer. Antonio se hallaba algo callado. Marcos estaba decidido a ir y Charlie, Charlie pensaba en Laura. El desayuno terminó y algunos levantaron los platos y otros se fumaron un cigarrillo. Aunque sin que lo vean los pequeños.

               -Es hora de movernos -dijo la ladrona. -Tenemos que parar en el camino por combustible, no queda suficiente en el tanque para todo el trayecto. Podemos sacar de otros vehículos o de alguna estación de servicio que seguro habrá de camino. Así que, gente, si tenéis otra duda es hora de decirlo porque debemos ir. Si llegamos a salvo y confío en ello, tal vez... bueno. No, no quiero hacerme ilusiones pero creo en el padre de María. Si nada era posible hubiera vuelto ya a casa.

              "A menos que todos estén muertos", pensó pero no dijo nada.
 

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30/09/2014, 23:05
Marcos Amancio Álvarez Lobo

Una vez más descansados por la mañana nos preparamos para el viaje. Asiento ante los comentarios de Eva, pero miro con disimulo a la niña ante su último comentario. 

- Antes de salir habría que comprobar si la zona es segura o si está muy llena de caminantes, el ruido los ha podido guiar hasta aquí. - Me giro hacia Antonio antes de decir: - ¿Hay alguna forma de mirar por encima del muro sin que se nos vea del otro lado o usamos un espejo? Además, dado que tú vives en la zona, ¿alguna gasolinera, un almacén o algún sitio al que podamos ir a por gasolina?

Prefiero cambiar de conversación rápidamente, antes de que María se percate de lo implica lo dicho por Eva