Partida Rol por web

- Recibido Saint, ...í Raf desde el ...macén DSM -respondió- Los sistemas de ...cción de oxí...no aguantan, por el ...mento. Si no hay contraorden, ... dirigimos a compro... el estado del Columbus.

Sarah cambia unos cables, toca algunos conectores y después se acerca al ordenador.

- No te preocupes, esto va a salir bien - dice tratando de reconfortarte al verte preocupado -. Para eso estamos aquí. Ahora atento, y verás por qué soy una genio en comunicaciones.

Empieza a escribir comandos en la consola para redirigir las comunicaciones por otro canal, cambia la intensidad de emisión y...

- Probando... Probando... Comprobando si esto funciona bien - la radio suena ahora más baja que antes, pero el ruido y las interferencias han desaparecido -. ¡Sí! - grita Sarah orgullosa a través de la radio. Los que estáis cerca del Nodo 1 la escucháis sin la necesidad de los altavoces - ¡Soy genial, chicos, y lo sabéis! Ya tenemos algo arreglado, ahora a centrarnos en otras cosas.

Wurst sonríe satisfecho cuando ve el módulo recogido por completo. Por fin habéis acabado las ñapas que os exigía Padalka, y con suerte podréis ocuparos de vuestra pasión, la ciencia, si no os empeña en otras tediosas labores.

- Esperemos que el golpe no haya supuesto muchas pérdidas para el laboratorio - dice el científico mientras se impulsa hacia la salida -. Al fin y al cabo, el objetivo de la ISS es la investigación, no dar paseos por el espacio.

La radio suena clara y limpia, transmitiendo el mensaje de Sarah. Wurst se muestra contento, al contrario e unos minutos atrás. También tu malestar anterior parece disipar se ligeramente. Parece que empezáis a encauzar todo, al fin.

- Bueno, pues otro problema menos, Raf. Ahora ya solo queda ver como traer un poco de buena comida, champagne, y hacemos una fiesta para celebrarlo.

Desde la puerta, sin esperar la respuesta de Padalka a los mensajes, El alemán se pone en marcha hacia el laboratorio Columbus. Tú también tienes interés por volver a tus datos, y dejar que los ingenieros se ocupen de las reparaciones.

Tras escuchar el mensaje de Saint, Padalka no contesta. Se ha metido en su traje presurizado y ha salido al exterior a comprobar los daños. Ha podido observar en primera persona el destrozo del sector P. Repararlo costará meses y muchos millones de dólares. Por lo menos Sarah ha conseguido arreglar las comunicaciones. Ahora podréis contactar con la base Tierra para transmitir vuestro estado, si es que no han recibido información de los sensores.

- Gracias por arreglar la radio, Sarah. Sí, lo he visto, Saint. Esto es dantesco. Hemos perdido el sector P entero, y el S tiene daños superficiales. Tenemos la energía bajo mínimos, aunque por lo menos es suficiente para mantener los sistemas vitales, y seguimos generando oxígeno. gracias por vuestras comprobaciones también, Raf. Id si queréis al Destiny para comprobar el estado estructural del laboratorio y de vuestro material. Ahora me dirijo hacia el Zvezda, desde aquí se ve horrible. Transmito de nuevo cuando compruebe como está. Corto.

Las palabras de Padalka surtieron un efecto balsámico en el ánimo de Raf. Dentro de lo que eran las pésimas noticias sobre el estado del ala P, el tono de voz de su comandante no denotaba ningún tinte de estado de emergencia inmediata. Esto, unido a la actitud decidida de su compañero alemán quien parecia exclusivamente preocupado por lo que le puediesen haber ocurrido a sus experimenos, hizo que el astrofísico recuperase su talante habitual y olvidase el mal presagio de los últimos momentos.

- Te sigo, Wurst. -le dijo, impulsándose con fuerza para alcanzar a su compañero, que había salido sin entretenerse a escuchar el comunicado del jefe. Por delante suyo el Zarya, Nodo 1, comprobarían el estado del laboratorio Destiny y continuarían su trayecto a través del Nodo 2 para llegar hasta su laboratorio, el Columbus. Quizás por el camino se encontrasen con alguno de los otros tripulantes de la estación.

Asintiendo a las palabras de Sarah, Paolo responde:

Parece que sabes muy bien lo que haces, muy buen trabajo. Creo ahora podemos ir al Destiny como indica Padalka, y así haber si yo puedo demostrar porque estoy aquí.

Acaba sonriendo para liberar un poco la tensión y iniciando el camino hacia el nuevo módulo.

-Vaya con cuidado en esa zona, Señor. No sabemos lo que puede haber flotando por ahi.- dijo Georgi con un tono realmente preocupado.

- Recibido - respondió, casi por costumbre que a sabiendas de que pudiera escucharle. Todo aquello amenazaba con superarle, pero tenía que seguir adelante.

Ya que Padalka iba a ver en qué estado se encontraba el Zvezda, decidió seguir adelante y continuar hacia el ala S. Allí se encontraban el módulo de acoplamiento UDM y los laboratorios rusos de investigación, y probablemente habían sufrido daños debido al accidente. ¿Accidente? Su lado más paranoico empezaba a pensar que no había sido un accidente, aunque no sabía bien qué pensar.

- Vamos a ver cómo se encuentran el UDM y los laboratorios, ahora que Padalka va al Zvezda. ¿Qué tal tu codo? - dijo al japonés.

Ford activa la radio - Ok si he entendido bien el todo el ala P está sellada e inutilizable, nosotros volvemos de la Zvezda que también está inutilizada, - continuó - he sellado una grieta por donde se escapaba aire y ahora la UDM está accesible pero me temo que la Soyuz de la Zvezda esté comprometida, - dijo con tono condescendiente - Padalka debería comprobar el estado exterior de la zona de la Zvezda, la hemos sellado pero habría que comprobar si la Soyuz aun está ahí. - tomó un respiro.

- Si la DSM ha sido ya comprobada nos dirigimos al Destiny también - dijo Ford mientras miraba a su compañero Ruso.

- Parece que hemos perdido el ala P, malas noticias. - continuó - Que tal si compruebas tú el laboratorio Destiny y compruebo yo al Nodo 3 ?

-No problema.- dice Georgi -Y ya que vas allí, échale un ojo a la Cupola, que es bastante frágil. Yo mirare Destiny y después CAM.-

-Ford va a revisar Nodo 3 y Cupola. Yo me dirijo a ver Destiny y después CAM.- dice Georgi escuetamente por la radio, y se dirige hacia su destino.

Me dirijo a solas al Nodo3 a comprobar el estado del módulo y sus adyacentes.

Sarah y yo tras restaurar las comunicaciones también nos dirigimos hasta la Destiny, como nos indicó Padalka. Nos veremos allí. - responde Paolo a las palabras de Grechko

Accedes al Nodo 3. Hace unos minutos estaba rebosante de actividad, cuando todos os reunisteis aquí. Ahora está vacío. Escuchas al resto de la gente por la estación, sus voces mientras hablan entre sí. Uno de los ordenadores está en modo ahorro de energía, esperando a que alguien acceda a él. La luz roja más cercana a Cupola parpadea de vez en cuando.

Salvo esa luz, el resto de la integridad del Nodo es sorprendente. La sección rusa ha sido la más afectada, y toda la estructura americana, salvo algunos cables y cosas que se han soltado de sus ataduras, está perfectamente. Desde Cupola compruebas que la estructura exterior de los alrededores del Nodo 3 no tiene graves daños. Hay algunas rozaduras, probablemente debidas a los trozos de piezas de Zvezda o el sector P, pero por lo demás, están en perfecto estado de funcionamiento.

Empiezas a comprender por qué la MIR se caía a trozos...

No han pasado ni un par de minutos desde el último mensaje de Padalka cuando vuelve a activar su comunicador. Antes de escucharse su voz, se oyen un par de respiraciones, como si le costase hablar.

- Dios santo... - su voz parece otra. Hasta este momento había sido el comandante, el líder, el que os había mantenido seguros en el momento de mayor tensión de vuestra vida. Ahora parece más afectado que vosotros -. La Soyuz está aquí, aunque ahora mismo no sirve ni de adorno. En cuanto al Zvezda, he podido acceder al interior desde aquí. La brecha es enorme. Aquí dentro... Tenéis que ver esto. Sarah, Wasabi: venid a echadme una mano. Meteos en vuestros trajes presurizados y entrad desde la puerta principal. Cuidaos de cerrar antes el resto de esclusas, o despresurizaríais toda la estación - parece volver a recuperar poco a poco su liderazgo, aunque seguís notando un tono preocupado en su voz -. Tenéis que ayudarme con esto. Después me reuniré con el resto en el laboratorio Columbus. Corto.

Y después se hace el silencio. Alguna luz roja parpadea, haciéndoos sentir que la energía está ya al límite. El tono preocupado de Padalka solo ha servido para que vuestra incertidumbre vuelva a crecer.

Sarah ya estaba en el laboratorio americano con algunos de vosotros, mientras Raf iba hacia el módulo europeo para comprobar su material junto a Wurst. Cuando Padalka le requiere, se acerca a Wasabi y le pone la mano en el hombro. Puesto que todos estáis en la sección americana, no necesitáis que hable por el intercomunicador para escucharla.

- Vamos, Wasabi. No hagamos esperar al comandante - trata de permanecer firme y sin miedo, pero su voz tiembla ligeramente -. Veamos con qué tenemos que ayudarle. A ver si somos capaces de hacer algo con el Zvezda.

Os mira al resto que estáis en la sala y sonríe, tratando de infundir de nuevo en vosotros algo de la seguridad que os ha abandonado tras el mensaje de Padalka.

- Vosotros, no holgazaneéis demasiado mientras los chicos de la Expedición 33 arreglamos esto.

Entonces activa el comunicador para avisar a su comandante.

- Recibido, Gennady. Nos vemos ahora en el Zvezda.

Yamazaki, por su parte, se debate entre la curiosidad y el temor. Está interesado en ver cómo está el Zvezda, pero el tono de Padalka le mantiene en vilo. ¿Tan horrible ha sido el golpe? ¿Quizá esté ahí el objeto que os ha golpeado? Pero si la brecha es tan grande como para que Padalka haya podido acceder desde el exterior, lo más seguro es que os haya atravesado de lado a lado, y haya seguido con su trayectoria. Al fin y al cabo... ¿Qué velocidad llevaría para que los sistemas de la estación no hayan tenido tiempo de reaccionar?

- Sí, Sarah. Será mejor que no le hagamos esperar. Saint, sigue tú solo. Te has hecho muy rápido a la estación, no tendrás problemas. Ahora nos vemos.

Detrás de Sarah, Ukio sale hacia la sección rusa, cogiendo su traje presurizado por el camino. Una vez salen de la zona americana, la poca iluminación de la estación os impide verles cerrar la escotilla de Zarya para entrar en Zvezda, aunque el sonido de la compuerta descendiendo y sellándose os llega claramente.