Galería Umbriana

Subida por Carxofa

Tengo que reconocer, ante todo, que muchas veces tengo cierta envida del altísimo nivel que hay en Comunidad Umbría por lo que a juegos de rol acaece. Leo comentarios y muchas veces no se ni de que se está hablando. 
Pero con esta prueba me ha pasado lo contrario. 
Killer!!! 
Creo que soy una de las personas que más tiempo ha estado jugando a un juego de rol en vivo de forma continuada, y fué, precisamente, en una versión de este juego que llamamos "La lista negra"
La partida duró un mes. Fué la primavera del año 93, durante la cual estaba estudiando ingeniería en Barcelona. Un amigo me contó que se estaba organizando una partida de Killer intrauniversitaria y que se iba a apuntar, y que estaba buscando a alguien con ganas de asumir el rol de Blacklister. 
No tardé ni cinco segundos en decir que si. Luego nos fuimos hasta la universidad donde se organizaba y nos inscribimos. 

Cada inscripción costaba 1000 pesetas de las cuales una parte eran para organización y el resto para premios. 
Te podías inscribir como Blacklister, lo que venia a ser un capo mafioso, o como Killer, que eran sus secuaces.
El tema era que los Killers podían decidir cuando querían jugar y cuando no. Pero el capo del equipo, estaba obligado a jugar full time. 
Desde que salia de casa hasta que volvía por la noche, tenia que llevar en el pecho una identificación que tenia la particularidad de reaccionar con el agua. Así, en caso que alguien me disparara con una pistola de agua, la mancha delataría mi muerte y yo y mi equipo quedábamos fuera de la partida. 
Evidentemente que yo también podia ir armado y reaccionar a cualquier ataque que sufriera. Así que, podéis imaginarme, caracterizado de capo mafioso, con mi pistola de agua escondida en el tobillo y mi target en el pecho recorriendo las calles de Barcelona. 
Fue una partida memorable. Todavía recuerdo la sensación de salir de casa, de la facultad, del trabajo y antes de poner un pie en la calle, asegurar el perímetro y observar que nadie estuviera escondido o con un comportamiento anormal. 
Nos lo pasamos tan bien que, posteriormente, nosotros organizamos un par de partidas como directores de juego en las que vimos autenticas batallas campales y, sobretodo, dónde nos tuvimos que enfrentar a las mentes enfermizas de nuestros jugadores. 

El caso es que, habiendo disfrutado como lo hice con este juego, jamás tuvimos el manual. En esa época, lo normal, eran las fotocopias, y por no tener, no tenia ni el manual completo. 
Así que cuando vi el enunciado de la prueba me dije... Carxofa, esta es tu ocasión! Y me regalé este juego con el que tan buenos recuerdos tuve en mi juventud.